(Estudio pornográfico de Valentino)

Valentino se encontraba mirando de forma placentera como su mayor estrella siendo follada por décimo novena vez consecutiva sin descanso, aunque contando los descansos, ya habían grabado más de 25 películas en muy poco tiempo, y no podía estar más contento por eso, al fin y al cabo, él intentó jugar con las normas del contrato yéndose a vivir a ese hotel con la protección de la princesa, y ahora él abusará del contrato haciéndolo trabajar sin parar, si nunca abandona el estudio, nunca podrá desobedecer sus órdenes.

"¡Valentino! ¡Deja de grabar tus estúpidas películas porno y ven aquí!" Gritó una voz que Valentino reconoció al instante, y aunque en la mayoría de veces esa voz era alegría por pertenecer a su socio, en este momento era todo lo contrario puesto que ya se imaginaba la razón de su inesperada visita, y sus sospechas se confirmaron cuando se volteó y observó que la princesa estaba también en el estudio.

La gran satisfacción que estaba sintiendo el demonio polilla fue sustituido por un ceño fruncido y un rostro serio, pero acabó accediendo e hizo un gesto para detener la grabación de la película.

"Estoy en mitad de algo importante, ¿Qué queréis?" Preguntó Valentino con seriedad, sin esforzarse en ocultar su enojo delante de Charlie, Vox contestó con molestia.

"Deja a tu máquina de hacer dinero un momento y céntrate en otras cosas, él debe de volver al hotel" Habló Vox con frustración en su voz, pero haciendo que Valentino comience a enojarse considerablemente, y esa ira solo aumentó cuando Charlie también habló.

"Estoy preocupada porque no ha vuelto al hotel... ¡Angel!" Comenzó a hablar Charlie pero dejó su oración cuando observó al pecador tumbado en la cama del estudio, totalmente agotado de tantas películas grabadas, parecía un trapo usado ahora mismo, incapaz de moverse.

"Ch-Charlie, déjame tranquilo, e-estoy bien" Dijo Angel Dust, intentando que su amiga no se meta en problemas con el proxeneta, cualquiera que se ha metido con Valentino desde que es parte de los vees no ha salido bien parado, pero Charlie solo se horrorizó al observar el estado en el que encontraba.

"Déjame ayudarte Angel, ¡¿Qué le has hecho?!" Charlie se volteó y miró con ira a Valentino, el cual entendió que no tenía sentido seguir fingiendo.

"Simplemente lo he obligado a hacer su trabajo, la razón por la que todavía sigue vivo en el infierno, ¿Acaso no te parece bien princesa?" Habló el demonio polilla, haciendo que Charlie se enoje al punto de que sus cuernos comenzaron a mostrarse ante todos los presentes, asustando a algunos actores y trabajadores del estudio que todavía se encontraba allí, pero Vox alzó la voz para evitar más molestias.

"¡Princesa pendeja! ¡Déjame esto a mí!" Gritó Vox de tal manera que toda la electricidad se fue en todo el estudio.

Fue en ese momento que Vox y Valentino se miraron fijamente, pero no como lo hacían siempre, ahora sus miradas eran de molestia y frustración por las acciones del otro, cada vez se llevaban peor.

Charlie se tranquilizó un poco cuando observó que Vox estaba confrontando a Valentino en una especie de pelea de miradas extraña, ya que ninguno de los dos desviaba la mirada, o al menos los ojos que mostraba la pantalla de Vox.

"Charlie, deja de incordiar y vete de aquí con tu puta esperanza para la redención, yo hablaré con Valentino" Habló Vox con autoridad mientras sus ojos formaban espirales y círculos hipnóticos, la princesa sonrió en agradecimiento por la ayuda (forzada por el contrato) del demonio televisor.

Valentino iba a protestar, pero Vox agarró fuertemente uno de los seis brazos del proxeneta, haciendo que calle forzosamente mientras le dirigía una mirada que reflejaba decepción.

Todos los trabajadores del estudio también comenzaron a irse por órdenes de Valentino al mismo tiempo que Charlie llevaba a un exhausto Angel Dust en sus brazos, ya que no era capaz de caminar por sí mismo después de todas las rondas seguidas que ha hecho en el estudio.

En unos pocos minutos, el estudio quedó en total silencio, con solo Vox y Valentino presentes, fue entonces que podían hablar con toda la libertad.

"Antes de que empieces a quejarte como las perras que esclavizas, déjame decirte que merecerá la pena, podré ser gobernante del infierno en cuanto cobre mi parte del contrato, y entonces los vees seremos superiores a cualquier otro ser del infierno, lo hago por los tres" Trató de explicarse Vox con una voz algo cansada de tener que explicar cosas tan simples a su socio, el cual miró al demonio televisor con el ceño fruncido y sus dientes puntiagudos siendo enseñados.

"No me interesa lo que tengas que decirme, porque... ¿De verdad quieres que te crea? Lo único que te estoy viendo hacer es frustrarme constantemente desde que te juntas con esa puta princesa marimacho" Habló Valentino con ácido en sus palabras, desconfiando cada vez más de que su socio vaya a compartir su poder supremo con él y Velvette.

"¡¿Cómo te atreves de siquiera dudar?! ¡Todo lo que he hecho desde que nos convertimos en Overlords ha sido por el bien de los tres! ¡Mientras que tú solo estás preocupado por poseer a tu perra preferida las 24 horas! ¡Deberías de pensar en los Vees en vez del dinero por una vez en tu puta vida!" Le gritó Vox con un enojo considerable, haciendo que Valentino se quite sus gafas de corazón para mirar fijamente la pantalla que tiene Vox por cabeza.

"¿Recuerdas lo que me pasó poco antes de conocernos? Si es así, también recordarás que te dije directamente a la cara que cooperaríamos para hacernos con el poder en todos los medios y así hacernos ricos y poderosos, esto es el infiernos, solamente somos socios y ya está, ¿Acaso pensabas que en todo este tiempo he pensado en alguien más que en mí mismo? ¡Por supuesto que no! ¡No confío en ti y si vuelves a arrebatarme a mi estrella una vez más te llevarás una bala en el pecho!" Amenazó Valentino mientras sacaba una pistola de su abrigo (que realmente son sus alas) y apuntaba a Vox.

El demonio televisor quedó paralizado durante unos pocos segundos, procesando que realmente Valentino nunca confió en él y que está dispuesto a matarlo si continúa robando a su estrella de cine porno, pero, sobre todo, la amenaza del disparo en el pecho, justo la forma en la que murió, eso hizo que algo despierte dentro de él e, inesperadamente, electrificó sus brazos y le dio un puñetazo electrificado a Valentino, el cual salió volando y se acabó estrellando contra la pared, haciendo un gran agujero en el proceso.

El demonio polilla comenzó a escupir sangre de su boca por el impacto mientras su pistola caía al suelo. Vox miró sus manos después de observar a Valentino.

"¡No me vuelvas a amenazar o la próxima vez terminaré el trabajo!" Gritó Vox con una voz dolida, por alguna extraña razón le dolía decirle eso a Valentino, no significaba nada amoroso, sino por pensar que realmente tenía gente de confianza en el infierno, aunque fueran socios y no amigos.

Vox se acabó marchando antes de que Valentino contestara siquiera. Mientras tanto, en el exterior, un demonio con una gran sonrisa en su rostro observaba todo, analizando y obteniendo información para cuando tenga que actuar.

(Hogar de Zestial)

Sir Penius se encontraba en una situación surrealista junto a sus minions, está en la sala principal de la casa del overlord más poderoso tomando un té.

El demonio serpiente analizó la casa de Zestial, era realmente un hogar bastante simple, no era una mansión pero tampoco era una choza, era un hogar demasiado normal dentro del infierno, hacía mucho tiempo que no estaba dentro de una casa debido a que él duerme en su dirigible.

"Entonces... ¿Quién eras en tu vida pasada? Me da curiosidad por el aspecto de serpiente que tienes" Preguntó Zestial para iniciar una conversación, haciendo que a Sir Pentius todavía le tiemble el cuerpo.

"Recuerdo haber peleado en una gran guerra, ¡Y que me llamaban *la serpiente* debido a lo escurridizo que era a la hora de esquivar disparos! Debió ser por eso que obtuve este aspecto" Explicó Sir Pentius con orgullo, cuando realmente le llamaban así porque siempre se estaba arrastrando por el suelo del miedo a ser disparado, pero eso él no lo recuerda.

Zestial pareció sonreír mientras continuaba dando un sorbo a su taza de té. "Interesante, de hecho, me agradas, eres el primero en mucho tiempo que no sale corriendo y se auto-incendia al verme, se puede decir que eres especial" Dijo el overlord, totalmente complacido de tener a Sir Pentius en su casa, el demonio serpiente dio una sonrisa nerviosa en respuesta mientras enseñaba un poco su lengua debido a sus propiedades de serpiente.

Los huevos mientras tanto se encontraban observando todo con curiosidad mientras algunos de ellos lograban apoyar el maletín en un mueble para evitar seguir haciendo esfuerzo por levantarlo.

"Aunque hayas obtenido ese aspecto por un supuesto mote de cuando estabas en la guerra, te confirmo que eres el primer pecador en cientos de siglos que adquiere ese aspecto, el aspecto original del pecado" Comenzó a hablar Zestial de forma interesada, captando la atención de Sir Pentius, el cual se miraba el cuerpo como si fuera una momia en descubrimiento.

"¿Eso significa que me considera alguien genial?" Preguntó Sir Pentius, algo más tranquilo, con brillo en sus ojos por recibir tantos elogios del overlord más poderoso de todos, el cual asintió con la cabeza tranquilamente mientras dejaba la taza de té en su pequeño plato.

"Sí, es por eso que me dolerá matarte ahora mismo" Dijo Zestial tranquilamente, haciendo que Sir Pentius se confunda al principio, pero fue sorprendido cuando el overlord alzó sus brazo y agarró la parte superior del cuello, siendo tan rápido que el demonio serpiente apenas pudo reaccionar.

"Es curioso, no estoy haciendo fuerza, si decidiera apretar mi agarre, aunque sea un poco, te hubiera matado" Habló Zestial con una sonrisa mientras Sir Pentius trataba de zafarse, pero no lograba quitarse los brazos del overlord de encima, los minions ni siquiera podían hacerle mover un milímetro, aunque estaban intentando empujarlo y quitarlo de en medio.

"Seguramente te preguntas la razón de este comportamiento tan repentino, muy simple, ¿Te ha envíado Vox, verdad?" Habló Zestial, pero Sir Pentius no era capaz de contestar por la presión que se estaba ejerciendo contra su cuerpo.

"Eres demasiado obvio, desgraciadamente no puedo dejar que Vox ni ninguno de los Vees se meta en la guerra contra los ángeles, son necesarios para el futuro del infierno, ¿O me equivoco?" Continuó hablando Zestial, notando que Sir Pentius estaba cada vez peor, haciendo que el overlord ría un poco, pareciéndole divertida la situación.

Inesperadamente, soltó el agarre del cuerpo de Sir Pentius, haciendo que el demonio serpiente caiga al suelo mientras comenzaba a respirar forzosamente, tosiendo en el proceso.

"Como eres diferente al resto de sucios pecadores de bajo rango que encontrado te daré una oportunidad de vivir, simplemente responde correctamente la pregunta que formularé y no te mataré" Explicó Zestial, totalmente emocionado por lo que estaba haciendo, divirtiéndose con su presa como una araña juega con una mosca atrapada en su tela.

Sir Pentius estuvo unos pocos minutos más recuperándose del agarre brutal que recibió y procesando que realmente Zestial ni siquiera estaba haciendo fuerza, para luego prestar atención a la propuesta del overlord. "Está bien, ¿Cuál es la pregunta?" Habló Sir Pentius con una voz un poco ronca después de lo ocurrido anteriormente, de todos modos, si se niega de allí no saldría vivo.

"La pregunta es muy simple, adivina quién era yo antes de morir y caer al infierno" Dijo Zestial, todavía con una sonrisa, haciendo que Sir Pentius palidezca y caiga al suelo, estaba perdido.

"Tienes un máximo de cinco minutos para responder, ni siquiera intentes escapar" Habló Zestial mientras se volvía a sentar y agarraba una tetera para llenar su taza de té.

Sir Pentius comenzó a llorar mientras sus minions huevos intentaban consolarlo, estaba completamente perdido, de los miles de millones de seres humanos caídos en el infierno es totalmente imposible adivinar a la perfección quién era Zestial.

Las únicas pistas que tiene son que Zestial es un overlord extremadamente antiguo, es decir, que era un humano hace muchos años, esa información es clave, pero igualmente podría ser literalmente cualquiera.

"Tres minutos" Recordó Zestial mientras enseñaba un reloj de bolsillo con la hora marcada, poniendo más nervioso a Sir Pentius.

"Piensa, piensa" Comenzó a decir Sir Pentius, debía de decir algo rápido, debía de acertar, primero pensó en Vlad el empalador, pero no era tan antiguo como para ser él, fue entonces que se fijó en algo extraño en la pared de la casa del overlord, era una estatua de una manzana en mitad de la pared, Sir pentius tuvo una idea arriesgada, pero finalmente la dijo.

"¡Eras Caín, hijo de Adam y hermano de Abel!" Acabó gritando Sir Pentius, haciendo que Zestial pare de sorber té.

Sir Pentius comenzó a temblar como una gelatina y a ponerse pálido como un fantasma, cuando comenzó a escuchar la risa de Zestial.

"¡De verdad eres increible! ¡Me encanta!" Comenzó a gritar Zesital mientras reía, haciendo que Sir Pentius comience a relajarse mientras seguía procesando la información, Zestial era Caín.

"Bien hecho, en compensación, no solo te dejaré libre sin matarte, sino que te diré la razón por la que no quiero que Vox se involucre con los ángeles, y lo haré contando la historia de los Vees" Habló Zestial, haciendo que Sir Pentius vuelva a prestar atención al overlord mientras procesaba lo que le acababa de decir.

"¿Decirme la historia de los Vees?" Repitió Sir Pentius mientras comenzaba a escuchar a Zestial comenzar a relatar la historia.

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Bueno, hasta aquí el capítulo. 

Repito que toda esta información, tanto lo de que Zestial es Caín a la historia de los Vees que vais a leer en el siguiente capítulo son totalmente inventadas por mí, espero que les agrade la idea. 

Espero que os haya gustado, pueden dejar su opinión del capítulo si lo desean, lo agradecería mucho, ahora sin nada más que decir, adiós.