Charlie abrió los ojos lentamente, observando el techo del hotel, trató de girar su cuerpo para acomodarlo mejor y continuar durmiendo, pero al intentar hacerlo se dió cuenta de que Vaggie estaba a su lado, también dormida, fue entonces que recordó lo que pasó el día anterior.

Había jugado incansablemente con Vox, el cual fue literalmente obligado por el contrato mientras Vaggie y Velvette reían ante las divertidas reacciones del demonio televisor, hasta que Vaggie tuvo la magnífica idea de hacer una pijamada en la recepción, haciendo que Vox quiera morirse nuevamente en vez de participar, y aunque Velvette tuvo que irse, tanto ella como su novia como Vox sí la hicieron, y pues se quedaron dormidos ante el cansancio que comenzaron a sentir los tres, seguramente había sido un día largo para todos.

La princesa trató de levantarse sin despertar a Vaggie (debido a que ambas se encontraban durmiendo en el sillón), pero fue en vano y ella abrió los ojos rápidamente, recibiendo una sonrisa de su novia como saludo.

"Buenos días" Saludó la chica de piel grisácea mientras dejaba pasar a su novia, la cual se encontró con Vox todavía durmiendo.

Charlie rió en voz baja al recordar los muchos juegos que obligó a Vox a jugar, pero su sonrisa se convirtió en confusión cuando observó que la pantalla de televisión que tiene por cabeza estaba mostrando algo en vez de estar desactivada.

"¿Pero Vox no estaba durmiendo?" Preguntó Vaggie también con confusión aparente al notar la inusual proyección de la pantalla.

Charlie prestó más atención a lo que mostraba, era un hombre de aspecto humano, vestido con un traje bastante parecido al de Vox, éste está en el centro de un grupo de otros hombres de aspecto humano, todos ellos armados y mirando con mala cara al central.

"¿Es un nuevo programa de la compañía de Vox?" Preguntó Charlie, tratando de deducir de qué podría tratarse, quizá la pantalla de Vox transmita capítulos de esta serie como publicidad.

"Con actores humanos, lo dudo mucho" Contestó Vaggie de forma directa, Charlie tragó saliva mientras prestaba atención a la pantalla.

"¡Nos has decepcionado mucho, Víctor! ¡Debiste de actuar con más fluidez y sigilo! ¿¡Acaso no te importa tu familia?! ¡Porque si sigues así no te pagaremos nada!" Gritó con autoridad un humano de mediana edad, seguramente el líder de aquel grupo.

"¡No volverá a pasar! Por favor deme otra oportunidad, necesito dinero para mantener a mi esposa y a mis hijos, ¡Haré lo que sea!" Contestó el hombre que estaba en mitad del círculo y vestía un esmoquín parecido al de Vox, mientras se arrodillaba al punto de hacerse daño en la frente por estampar su cabeza contra el duro suelo en el que se encontraban.

Charlie se fijó brevemente que el cuerpo de Vox estaba teniendo breves espasmos en sus brazos y piernas al mismo tiempo, haciendo que la princesa comience a pensar mientras continuaba viendo la pantalla.

"Si tan dispuesto estás a hacer lo que sea, te mandaremos a hacer un trabajo arriesgado que hemos estado planeando durante años, pero ten en cuenta que si vuelves a fallar, nadie te apoyará" Habló el líder haciendo que el hombre de traje levante la cabeza y asienta.

"No le defraudaré, se lo prometo" Fue lo que contestó, haciendo que el líder suspire y luego proceda a emitir una leve risa.

"Ya entiendo la razón de que la empresa de televisión te despidiera de tu propio programa, eres un peón inútil que no sabe hacer nada por sí mismo, aunque es por eso que me sirves, te iba a matar al final de esta reunión para evitar que seas un soplón, pero te mantendré con vida por el momento, solo no falles, eres una ficha muy fácil de reemplazar" Habló el líder mientras se levanta de su asiento y procede a posar su pie encima de la cabeza del hombre.

"¡Menuda persona de mierda que eres! ¡No eres capaz ni de rechistar cuando te pateo la cabeza! ¡Es por eso que eres tan inútil y un fracasado en la vida!" Continuó riéndose el líder, y eso fue lo último que se vió en la pantalla, puesto que la proyección fue reemplazada por las expresiones de su cara, la cual mostraba conmoción y enojo.

"¡Mierda!" Gritó Vox mientras Charlie y Vaggie retrocedían por el susto que tuvieron ante el despertar repentino de Vox, el cual todavía se estaba recuperando de la pesadilla.

"¿Dónde carajos estoy?" Preguntó Vox mientras su cerebro se iba despertando poco a poco, Charlie contestó algo incómoda.

"Te quedaste dormido en el hotel ya que hicimos una pijamada" Fue lo que contestó, haciendo que el demonio televisor comience a recobrar los sentidos y los recuerdos.

"Vosotros... ¡Malditas perras! ¿¡Qué estáis haciendo?! ¡Alejaos de mí!" Contestó Vox con inesperada hostilidad, haciendo que Vaggie agarre su lanza previamente dejada en el suelo mientras apuntaba al demonio.

"Lo lamento Vox, pero vimos algo extraño en la pantalla mientras dormías" Habló Charlie, haciendo que Vox la mire con odio para reaccionar golpeando una pared con rabia, haciendo un agujero de considerable tamaño.

"¡Mataré a tu perra si decides contar algo de lo que viste!" Amenazó Vox con furia, haciendo que Vaggie frunza el ceño, pero Charlie no pareció tomarlo en serio, sabiendo que Vox todavía estaba conmocionado.

"Tranquilo, no se lo contaremos a nadie, promesa" Dijo Charlie mientras hacía un gesto con su dedo más pequeño en señal de una promesa de meñique, a lo que Vox continuó reaccionando con hostilidad.

"Malditas perras entrometidas, ¡Iros a la mierda y déjenme tranquilo aunque sean cinco minutos!" Gritó Vox mientras se iba entre las corrientes eléctricas.

"Que demonio tan-" Vaggie iba a insultar a Vox ahora que se había ido, pero Charlie le hizo un gesto a su novia para que se detenga.

"Esa proyección en su cabeza parece haber sido lo que estaba soñando, quizá todavía está traumado por su vida pasada" Habló Charlie, con esperanza de ayudar al demonio televisor, provocando que Vaggie dé un suspiro, su novia nunca cambiaría, aunque sí admitiría que esa conversación le había llamado la atención.

"Lograré ayudarlo, estoy segura" Dijo la princesa, pero rápidamente volvió a centrarse en otro tema.

"Cambiando de tema, debemos de conseguir más personal, Vox no nos ayudó en eso, y ahora no me apetece molestarlo" Dijo Charlie, haciendo que Vaggie conteste con pesimismo.

"Los pocos huéspedes que tenemos ni siquiera están interesados en lo que hacemos y han venido solo por influencia de Vox, ¿De verdad piensas que alguien vendría a trabajar desinteresadamente al hotel?" Dijo la chica de piel grisácea y, como si estuviera todo planeado o hecho a propósito, alguien tocó la puerta principal.

"Quizá Angel Dust ya haya vuelto del trabajo" Pensó Charlie, pero cuando abrió la puerta se encontró con alguien totalmente distinto, era una especie de demonio con un aspecto curioso, aparentemente parece un gato pero también posee dos alas en su espalda, además, parecía estar extremadamente molesto, como si hubiera sido obligado a venir.

"Hola, ¡Bienvenido al hotel encargado de redimir a los pecadores! ¿Quieres una habitación?" Habló Charlie con alegría y esperanza de tener a un nuevo huésped, y que este participe en sus juegos de redención.

"La verdad, yo he venido preguntando si puedo trabajar aquí, necesito dinero" Se explicó el demonio, siendo directo y conciso mientras señala sus bolsillos vacíos.

Aunque no fuera alguien interesado en cambiar gracias a su hotel, les hacía falta personal para trabajar, por lo que la sonrisa de Charlie no desapareció, mientras que Vaggie miró al demonio con sospecha.

"¡Llegas en el mejor momento! Justo estamos buscando a gente para trabajar aquí, sígueme, te enseñaré la recepción" Dijo la princesa del infierno amigablemente, buscando ser del agrado del interesado y posible futuro trabajador del hotel, pero Vaggie no parecía tan feliz, para ella su presencia era demasiado conveniente, y no era un empleado de Vox, era obvio cuando alguien trabaja para el demonio televisor, y este no era el caso, de hecho, ella juraría haber visto a ese demonio en algún sitio, quizá era alguien famoso o de renombre.

El demonio con aspecto de gato observó toda la planta baja con desinterés, sin escuchar demasiado las explicaciones de Charlie, realmente no quiere estar ni trabajar en el hotel, pero no le quedó otra opción, él le obligó puesto que ese demonio es dueño de su alma, cuanto le gustaría volver al pasado y evitar que su yo de ese entonces apostase su alma por pura ludopatía.

"Y esto sería todo, ¿Alguna duda?" Terminó de hablar Charlie, haciendo algunos gestos en el acto que hicieron que el demonio volviera a la realidad y asienta con la cabeza.

"¡Perfecto! Trabajarás en la recepción, atendiendo a los futuros inquilinos durante el día, ¡¿Qué te parece?!" Dijo Charlie con pura inocencia e ilusión mientras el demonio se encogía de hombros en respuesta.

"Necesito dinero para mis apuestas y comprar alcohol, me vale cualquier cosa" Contestó con inexpresividad mientras Charlie se emocionaba aún más de haber contratado por sí misma a alguien para trabajar en el hotel.

"¡Perfecto! Soy Charlie, ¡Vas a amar trabajar aquí!" Se presentó la princesa mientras el demonio quedaba cegado ante la inocencia de Charlie, parecía tener estrellas en vez de pupilas en sus ojos en este momento, pero la amargura actual del pecador con forma de gato era mayor.

"Soy Husk, y no te molestes en decir eso, yo dejé de amar hace años" Contestó con resignación mientras observaba a Charlie mostrar un rostro algo confundido, pero todavía feliz.

"Qué pretendes Husk" Susurró Vaggie mientras no apartaba su vista del demonio, algo no andaba bien y ella lo va a averiguar, no podía arriesgarse a que sea parte de un complot para hacer daño a su novia, no se lo perdonaría si algo le llegase a pasar, y aunque Vox no puede debido al contrato, hay muchos más demonios poderosos en el infierno, como su némesis, Alastor.

(Sala de reuniones de los Vees)

Vox trató de estar de buen humor para comunicarles a sus socios sobre su información descubierta relacionada con las debilidades de los exorcistas, pero su mal humor todavía prevalecía, tanto la princesa como su acompañante lo habían visto dormir, diablos, ni siquiera el propio Vox sabía que sus sueños eran proyectados en su pantalla, él siempre se aseguraba de desconectar la pantalla de su cabeza, ¿Cómo es que igualmente sus sueños eran transmitidos? Vox realmente odia su cuerpo demoníaco, si pudiera elegir, se desharía de su cabeza cuadrada.

"Me sorprendes Vox, nada mal para ser tú" Dijo Velvette con burla en su voz, haciendo que el demonio televisor se muestre claramente ofendido, pero este no era el momento de discutir por estupideces.

"Sin embargo, no tenemos apoyo de ningún Overlord, todo lo contrario, ahora Carmilla y Zestial te odian a muerte, ¿Alguna idea de cómo conseguir las armas de metal angelical?" Preguntó Valentino, el cual se encontraba tomando alcohol al mismo tiempo que preparaba algún tipo de droga para esnifar, como hace siempre, pero a Vox le sentó especialmente mal que lo hiciera en reuniones tan importantes, aún así, el proxeneta tiene un punto en su argumento.

"Debemos de mandar a alguien que tenga aspecto de perdedor, lo suficientemente estúpido y miserable para que no se le relacione con nosotros" Habló Velvette con una sonrisa mientras miraba fijamente a Vox, el cual estaba meditando.

"Y no solo eso, sino que también decida trabajar para nosotros y, por ende, arriesgar su vida al mentir a un Overlord, debe ser alguien excepcionalmente imbécil y desesperado" Añadió Vox mientras proseguía con sus pensamientos.

"Ya me he encargado de convertir a todos los perdedores del infierno en mis putas, ¿Quién más queda?" Habló Valentino con estrés y frustración, haciendo que Velvette abra los ojos mientras golpeaba la mesa repentinamente, ya lo tenía.

"Creo que tengo al indicado" Habló Velvette con una sonrisa maliciosa, haciendo que la pantalla de Vox muestre una ceja levantada con sorpresa e incredulidad.

"¿De verdad?" Preguntó Vox para asegurarse, y al recibir una sonrisa de Velvette como respuesta, Vox le devolvió aquel gesto.

"Perfecto, ¿Y quién es el afortunado imbécil y perdedor?" Preguntó Valentino con curiosidad, Velvette respondió enseñando a través de una de las pantallas de la sala una grabación de las cámaras de seguridad del hotel exteriores de lo que ocurrió ayer, mostrando el dirigible de Sir Pentius.

"Él es el indicado" Fue lo que dijo la miembro femenina de los Vees, haciendo que Vox comience a sonreír malévolamente y al mismo tiempo recordaba el momento de su vida pasada que soñó, siempre estuvo por debajo y siendo utilizado por todos, ahora él era diferente y haría lo mismo con ese demonio serpiente.

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Bueno, hasta aquí el capítulo, espero que os haya gustado, podéis comentar vuestra opinión si lo deseáis. 

Una vez más, agradezco todo el apoyo que está recibiendo esta historia, no esperaba nada con esta obra y parece que os está gustando, muchas gracias queridos lectores porque gracias a vosotros obtengo inspiración y ganas de escribir. 

Ahora sin nada más que decir, adiós.