Una mañana muy tranquila, más para Park Jimin quien estaba en su empleo en la cafetería que se encontraba cerca del periódico en donde su querido Min Yoongi trabaja, ¿qué era lo mejor? Escuchar los gritos de fanáticas y fanáticos suyos que al verlo casi se desmayan.

Era obvio que muy pronto se iba a volver viral la noticia de que se encuentra trabajando en una cafetería, y fue así, ahora había una enorme fila afuera de la cafetería, todos esperaban entrar para ser atendidos por el mismísimo Park Jimin en persona, ¿qué podía ser mejor que eso? Pues mejoraba cuando se enteraban de que por una temporada estaría trabajando en ese lugar.

- Gracias por tu compra, vuelve pronto -dijo Jimin mientras entregaba un caramel macchiato a una chica que tenía las mejillas sonrojadas y se veía muy emocionada, ¿y quién no iba a estarlo? El idol del momento atendiendo en un café, cualquiera se emocionaría en grande.

La chica se fue muy emocionada diciéndole que regresaría pronto. Jimin estaba feliz de ver a tantos clientes felices saliendo con su compra, ya fuera una rebanada de pastel, algún desayuno o simplemente alguna bebida caliente. Pero claro era agotador tener que atender a tantos.

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Mientras que afuera de la cafetería Min Yoongi se encontraba caminando en dirección a esta misma, pues tenía antojos de un expreso para que logrará despertarlo aunque sea un poco, a su lado se encontraba Kihyun quien decidió acompañarlo para así el también ir por un té verde.

- ¿Por qué esa cara Yoongi? Anda sonríe un poco -dijo Kihyun mirándolo.

- No me siento con tanto humor para sonreír en estos momentos.

- ¿Cansado?

- Más bien demasiado agotado, podría dormir en todo el día si quisiera, pero el deber llama.

Y era verdad Yoongi se sentía que no podía más, y ¿cuál era la causa? Park Jimin, se la había pasado molestando a Yoongi a media noche porque tuvo una pesadilla, por más de quince minutos le estuvo rogando que lo dejara dormir con él, y hasta que Yoongi perdió la paciencia fue cuando lo dejo acostarse en su cama.

Claro que fue una mala idea, pues Park Jimin termino pateándolo afuera de su propia cama, Yoongi algo enojado dispuesto a gritarle se había parado y cuando estuvo a punto de gritarle no pudo hacerlo, y es que la imagen de Park Jimin sonriendo mientras restregaba su nariz en las sabanas se le hacia la imagen más tierna que había visto.

Sin más lo dejo dormir mientras que Min Yoongi se fue a dormir en el cómodo sillón de la estancia.

- Deberías pedir unos días libres, te hacen falta.

- No quiero hacerlo, no los necesito.

- Oh vamos, todos necesitamos de unos días de descanso, el cuerpo es de aguante pero no tanto.

- ¿Me estás diciendo que me ves tan acabado como para que tome días de descanso?

- No es que te vea de ese modo -respondió Kihyun-. Es solo una sugerencia.

Kihyun miro hacia el frente y sus ojos se abrieron de la sorpresa.

- Pero, ¿qué? -pregunto asombrado parpadeando un par de veces.

Min Yoongi curioso levanto la vista y también abrió sus ojos sorprendido, había una enorme fila para entrar a la cafetería.

- No puede ser... pensé que estaba bromeando.

- ¿De qué hablas Yoongi? -Kihyun quería saber la razón de porque todo estaba de ese modo.

- Park, él me dijo que conseguiría un trabajo, pero no creí que iba a ser este trabajo -señalo la cafetería-. Seguramente está de cajero y dando los pedidos.

- Pues vaya que ese Park atrae gente, mira eso -señalo la enorme fila de clientes-. Es impresionante.

- Creo se me fue el sueño de la impresión.

De un de repente un grito los espanto a ambos, pero más a Min Yoongi, pues no era divertido escuchar que una chica de la fila gritará "¡Miren, miren! ¡Es Min Yoongi, el novio de Park Jimin!"

¿Novio? ¿¡Novio!? Ni siquiera eran eso y ya estaban diciendo que era su novio, increíble, era realmente increíble, varias de las chicas allí presentes lo quedaron mirando, algunas lo saludaban y otras le lanzaban miradas de odio.

- ¿Son novios? -Kihyun pregunto apretando los dientes.

- ¡No! -exclamo Yoongi algo enojado, estaba que sentía que le palpitaban las venas de la enorme cólera que tenía.

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Mientras tanto dentro de la cafetería Park Jimin estaba empezando a sentirse incomodo.

¿Razón? Pues Chanmi la hija del jefe de Min Yoongi estaba enfrente al mostrador, ni siquiera estaba ordenando nada solamente lo miraba con esos ojos marrón oscuro y Jimin estaba impaciente.

- Jiminie -al gin había hablado, ¿cuánto había pasado? ¿Diez minutos? Ni siquiera Jimin lo sabía-. ¿A qué hora termina tu turno?

- Pues en la tarde, ¿por qué?

- Me preguntaba si querías ir a comer algo conmigo, y sirve que te mostraría la ciudad, Buk-Gu tienes sus encantos si los sabes apreciar.

A Park Jimin no le parecía para nada buena idea salir con aquella chica, pero no quería ser grosero con ella, pero en verdad quería que esa chica dejará de mirarlo y que se fuera sino iba a pedir nada de la cafetería.

- Estoy ocupado, además planeo pasar por Yoonie a su trabajo, no puedo ir contigo, lo siento.

Chanmi no era de las que se rinden tan fácilmente, y fuera como fuera, haría que Park Jimin saliera con ella, no importaba si le pedía a su padre que despidiera a ese tal Min Yoongi.

- Jiminie, por favor -la chica agudizo un poco más su voz-. Sal conmigo, ¿o quieres que tu noviecito ese pague las consecuencias?

Eso para nada a Jimin le gusto.

- ¿Consecuencias?

- Sí -la chica se recargo en el mostrador y observo a Jimin-. ¿No quieres que mi papi despida a ese noviecito tuyo, verdad? Sí sales conmigo no pasará nada. Ese Yoongi seguirá bien en su empleo.

- Es una amenaza -la voz de Jimin salio más ronca y su mirada se clavo en los ojos de Chanmi, la chica sintió un pequeño escalofrió recorrer su espalda, en verdad que Park Jimin podía ser intimidante cuando se lo proponía-. Puedo hablar con tu padre sobre esto, no permitiré que arruines a mi Yoongi, es más ni deberías decir su nombre.

La chica trago grueso y dejo de recargarse en el mostrador.

- Ahora, sino vas a pedir nada, será mejor que salgas de la fila.

Y está vez Chanmi hizo lo que le pidió Park Jimin.

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- Al fin es mi turno -dijo Yoongi algo agotado de esperar.

- Yoonie, bienvenido gatito -esa voz hizo que Yoongi suspirara frustrado.

La verdad era que Yoongi creía que el destino iba a quitar a Park Jimin de la caja para mandarlo de mesero por toda la cafetería, pero para su suerte no fue de esa manera.

- No me digas gatito, suena raro -dijo Yoongi mirando a Jimin-. Ahora quiero un expreso y rápido Park.

- Yoonie -Jimin hizo un puchero-. Me das un beso.

Y esto hizo que en toda la cafetería reinara el silencio, algunas de las fanáticas sacaron sus celulares, querían ese momento en foto o vídeo de inmediato si era que Min Yoongi le daba el beso a Park Jimin.

- No -respondió Yoongi recibiendo algunas voces decepcionadas.

- No decepciones a las fanáticas, besame -pidió Jimin sonriendole y acercando su rostro.

- Ni creas que lo haré Park -dijo Yoongi empujando a Jimin levemente hacia atrás.

- Bien entonces tendré que robártelo -y antes de que pudiera responder, los labios de Yoongi fueron impactados con los de Jimin.

Aunque Yoongi no reacciono bien, empujo de nuevo a Jimin y le dio una bofetada.

- ¡No lo vuelvas a hacer! -el rostro de Yoongi estaba demasiado rojo, casi podía hacerle competencia a un tomate.

Jimin a pesar de que le dolía la mejilla izquierda, no le importaba, sonreía satisfecho al ver al pelinegro sonrojado. Punto para Park Jimin.