- ¡¿Por qué!? -grito Hoseok muy desesperado-. Yo en verdad quiero conocerla, Yoon... ¡Dile a Hyesoo que deje que yo haga la entrevista!

El pelinegro llevaba escuchando eso desde hace media hora. Hoseok quería hacer el trabajo de Min Yoongi. ¿Por qué? Simple, quería ir para ver a uno de sus amores platónicos, pues Min Yoongi iba a entrevistar a Jennie Kim, una modelo y cantante muy conocida, Hoseok hablaba mucho de ella, la estuvo siguiendo siempre cuando estuvo en la girl band BLACKPINK, pero como las chicas se habían dado un receso para hacer sus carreras como solistas, Hoseok siguió más a su bias, y esa es Jennie Kim.

- Por favor Yoongi, ¡juro que será lo único que te pida!

- Hoseok, por milésima vez no, ya olvídalo, si quieres trato de conseguirte una autógrafo de ella.

- ¡Pero lo que quiero es conocerla! ¡Quiero verla, platicar con ella, estar con ella! ¡Yooonggiii! -Hoseok parecía un niño que no le compraban el juguete que quiere.

El pelinegro suspiro y volvió a negar con la cabeza. Por dentro Yoongi se moría de risa, pues el berrinche de Hoseok era muy divertido.

- Ya Hoseok, tengo que irme -dijo Yoongi poniéndose una pluma detrás de la oreja-. Regresó al rato.

- Prométeme que me traerás una autógrafo de está Jennie.

- Sí, sí, sabes que sí te la traigo, ¿cuándo te he fallado?

- Touche.

Yoongi le dio una sonrisa como respuesta y salio de su oficina.

Tenía que darse prisa, después de todo Hoseok lo había atrasado un poco, ya que su berrinche si que fue duradero.

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- ¿Jennie Kim? -pregunto el pelinegro.

Había llegado corriendo al programa en donde Jennie Kim había participado.

- Está en los camerinos -comento una chica.

- Gracias -Yoongi camino hacia los camerinos.

Se disponía a tocar la puerta para ver si ella estaba ya desocupada, pero antes de que el pudiera hacerlo, vio la puerta que se abría, una pelinegra lo observo de pies a cabeza.

- ¿Eres Min Yoongi? -pregunto ella.

- Sí.

- Un gusto soy Jennie Kim, pasa, y espero que sea rápida la entrevista, no tengo tiempo -dijo ella sin mirarlo dejando la puerta abierta para que entrará.

- Está bien -Yoongi sabía que el tono de voz de aquella chica no era muy amable.

Era la primera vez que una de las personas que entrevistaba se comportaba de esa manera y no lograba entenderlo.

- Bien -dijo Jennie-. ¿Ya podrías comenzar?

- Primero ¿por qué me estás hablando así?

La chica suspiro rodando los ojos.

- Sí sólo quieres hablar de eso, entonces me estás haciendo perder el tiempo, escucha deberías de hacerme esa estúpida entrevista y listo.

Min Yoongi no pudo evitar fruncir el ceño. Sin más comenzó con la entrevista, lo que Jennie Kim no sabía era que Min Yoongi había grabado lo anterior que ella había dicho, así que planeaba que Hoseok escuchará esa grabación, para que viera a que tipo de idol admiraba.

El pelinegro la pasaba mal siguiendo preguntando, la chica no lo miraba pero hablaba muy amablemente, como si quisiera que con esas palabras vacías, pudiera seguir teniendo a sus fanáticos, además de agregar más.

- Eso es todo, gracias por tus respuestas -dijo Yoongi guardando sus cosas.

- Gracias al cielo que ya terminaste, ahora si me puedo ir.

Yoongi no respondió, se iba a dirigir a la puerta, pero fue detenido, porque Jennie Kim se interpuso en su camino, la chica tenía los brazos cruzados frente a ella y miraba a Min Yoongi con una mueca de disgusto.

- ¿Podrías quitarte? Tengo prisa -dijo Yoongi.

- A mí no me trates de esa manera, deberías de tener más respeto.

- ¿Por qué no te hablas a ti misma del respeto? Ni siquiera me tuviste respeto, no te estoy hablando mal, y me tratas como basura.

- Es porque eso es lo que eres Min Yoongi.

- ¿Qué?

Yoongi estaba sorprendido por lo que ella había dicho, la pelinegra sonrío al ver la cara de disgusto y de sorpresa que tenía Min Yoongi.

- Lo que escuchaste querido, pero claro alguien como tú ya lo sabe.

- Déjame pasar.

- ¿Acaso estás huyendo Min Yoongi? ¿Miedo?

- ¿Miedo? ¿De ti? Já, cuéntame otro chiste.

- Escúchame bien Min Yoongi, quiero que te alejes de Park Jimin, no te quiero ver con él, o habrá consecuencias.

- Por qué no se lo dices a él? Jimin es quien se acerca a mí.

La chica se quito de su camino mientras soltaba una risita.

- Ya te lo advertí, aléjate de él.

- ¿Por qué?

La chica lo miro se acercó a él y le quito aquella pluma que tenía puesta detrás de su oreja y señalo al pelinegro.

- ¿No es obvio? Mira Yoongi, te propongo algo, ¿qué te parece si me dejas el camino libre?

Min Yoongi trago grueso, ¿dejarle el camino libre? Enserio no podía creer lo que había escuchado, no podía creer que esa chica pudiera decirle eso.

- Min, acéptalo, ¿Park Jimin y tú? Por favor, eso no es posible.

- No sabes nada -dijo Yoongi apretando los puños.

- Sólo Jiminie está interesado en ti porque eres algo nuevo en su vida, sólo es cuestión de tiempo para que sólo seas un olvido.

El pelinegro apretó su mandíbula, no quería que esa chica siguiera hablando. No le estaban gustando aquellas palabras, además sí aceptaba tal propuesta, sabía que dejaba a Park Jimin en malas manos y eso es lo que más le molestaba de todo.

- Te equivocas -dijo Yoongi, su voz salio ronca.

- Vaya, vaya. Parece que los encantos de mi Jiminie funcionaron, ¿estás enamorado de él?

¿Su Jiminie? ¿Por qué demonios decía que era suyo? Park Jimin no pertenece a nadie, ni siquiera a él. A pesar de que el pelinegro sentía que ya Park Jimin podía ser suyo, sabía que no lo era en la realidad, Yoongi lo había rechazado dos veces, y la anterior vez... en el último beso que se habían dado, todo fue tan distinto, Min Yoongi se había sentido tan bien, pero no sabía que decirle a Jimin.

Yoongi no había experimentado el amor de una manera muy buena, sólo en su vida había un montón de decepciones amorosas, no le gustaban esas decepciones, recordarlas era doloroso, engaños, peleas, inclusive rechazos, de aquellas personas que creía amar. Era horrible recordar todo. ¿Enamorado de Park Jimin? Ni siquiera lo sabía. No sabía ese sentimiento, no podía enamorarse de nuevo, sí lo hacía seguramente saldrías lastimado de nuevo.

- No -su voz salió firme.

No hubo más palabras, el pelinegro le arrebato a la chica la pluma y se fue de allí.

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- Al fin termine -suspiro Yoongi viendo su articulo terminado y enviado a la editora en jefe Hyesoo.

Yoongi paso sus manos por su cara, estaba estresado, no podía dejar de pensar en aquella conversación que había tenido con Jennie Kim, era ridículo, ¿cómo esa chica se atrevía a hablarle de esa manera? Y sobre todo, ¿cómo se atrevía a decir que le dejará el camino libre? No sabía que Jennie Kim estaba interesada en el rubio.

No le preocupaba, pues sabía que seguramente el pequeño rubio no estaba interesado en aquella chica, aunque... no estaba muy seguro de aquello.

Suspiro, quería dormirse, tenía que despejar su mente de todo aquello, y sabía que su cama sería la solución más optima para su relajación.

Pero antes de que pudiera disponerse a descansar, su celular comenzó a sonar, Yoongi miro de quien se trataba, era Park Jimin. Por un momento pensó que tal vez Jennie había actuado y le había hablado a Jimin, trago grueso y contesto.

- ¿Hola? ¿Jimin?

- Yoonie... -la voz del rubio se escuchaba cansada.

- Jimin, estás ¿cansado?

- Sí... fue muy aburrida esa entrevista, no me gusta hablar mucho de mí, pero bueno... es el precio de ser famoso.

- Es comprensible, deberías descansar en vez de llamarme, ¿no crees?

Una pequeña risa se escucho del otro lado de la línea.

- Yoonie, tú voz es hermosa, es relajante, me gusta escucharte, por eso te llamé para escucharte y relajarme.

Una sonrisa se formo en los labios del pelinegro, por alguna razón la voz de Park Jimin también lo había relajado, se había olvidado por completo de todo lo que había dicho aquella chica.

- ¿Yoonie?

- Perdón, me quedé pensando.

- Espero que esos pensamientos hayan sido por lo que te dije, Yoonie... ¿puedo ir contigo?

- ¿Por qué? Lo que deberías de hacer es descansar Park. Deberías estar durmiendo.

- Lo mismo digo -suspiro-. Yoonie, estoy afuera de tú departamento en estos momentos, sino me crees revisa.

El pelinegro se sorprendió al escuchar eso, sintió como una corriente eléctrica lo recorrió por su columna vertebral, a paso lento se acerco a la puerta de su departamento y miro por el picaporte. Sin evitarlo sus ojos se abrieron con sorpresa al ver que efectivamente, Park Jimin se encontraba allí.

Con lentitud abrió la puerta, sólo asomo un poco su cara, Jimin le sonrío. Aún ambos mantenían sus celulares sobre sus orejas como si aún estuvieran lejos para comunicarse.

- Hola -dijo Jimin aún con el celular en sus manos.

Yoongi bajo el celular y cortó la llamada.

- Park, ¿qué haces aquí? -Yoongi abrió la puerta completamente.

- Pues vine a verte, y te traje ésto -Jimin saco de detrás de él un pequeño ramo de liliums blancos.

El pelinegro no pudo evitar sonrojarse ante el pequeño regalo del rubio.

- Gracias -dijo Yoongi tomando las flores.

Jimin no estaba consciente, pero esas eran las flores favoritas de Min Yoongi. Pues le recordaban a cuando su padre le llevaba esas flores a su madre para darle un pequeño regalo.

- Me agrada esa sonrisa -dijo Jimin entrando al departamento, Yoongi cerró la puerta-. ¿Acaso es por las flores?

- Pues son mis flores favoritas, me traen buenos recuerdos, gracias Park.

- Me alegra escuchar eso Yoonie -dijo Jimin sonriendo-. ¿Puedo dormir aquí hoy? Por favor -pidió Jimin.

- No lo sé, no creas que compraste mi confianza con flores Park.

El rubio comenzó a reírse por aquellas palabras.

- No es un soborno, quiero estar contigo, quiero abrazarte como la última vez Yoonie.

- No gracias, esa vez estabas a punto de besarme de nuevo cuando me desperté.

- Sí, y me dijiste que me fuera de inmediato o no me volverías a hablar.

No pudieron evitar que las carcajadas salieran, pues esa había sido una de las mañanas más divertidas que habían tenido, fue una de las mejores, de verdad amanecer de esa manera era perfecta.

Yoongi termino aceptando que Park Jimin lo abrazará para que puedan dormir, Jimin paso su brazo izquierdo por la cintura de Min Yoongi y lo acerco a él.

- Quiero que me abraces así algún día Yoonie -dijo Jimin algo adormilado.

- Sigue soñando Park.

- Vale la pena, porque los sueños pueden hacerse realidad. ¿Sabes? Sólo tienes que desearlo tanto hasta que el universo te lo otorgue.

Yoongi sonrío ante esas palabras -Descansa Jimin.

- Duerme bien cariño -dijo Jimin y beso la coronilla de Min Yoongi.