010

- ¿Qué tal el concierto?

- ¡Fue increíble! Hoseok, fue el mejor día de mi vida, no te lo imaginas, en serio -dijo Yoongi emocionado-. Aah como me encantaría ir a otro.

Hoseok sonrío, le encantaba ver como su amigo Yoongi hablaba tan emocionado sobre el concierto del anterior día, se veía que en verdad había disfrutado de cada momento.

- Se ve que estuvo muy divertido.

- Fue de ensueño -dijo Yoongi.

- Me lo imagino, ¿ya entregaste lo que te pidió Han?

- Sí, créeme que lo primero que hice cuando llegue a mi departamento, fue escribir, estaba tan inspirado que hasta creo me emocione demasiado escribiendo, sólo espero no crea que mi articulo es exagerado.

- Al contrario -comento Hoseok-. Estoy seguro que quedó encantada, sabes que a ella le encanta tú forma de escribir.

Yoongi le sonrío mostrando un poco sus encías.

- Y la entrevista -Yoongi dio un suspiro-. Hoseok me hubiera encantado que tú presenciarás eso.

Hoseok miro a Yoongi.

- ¿De qué me perdí?

- Te perdiste de Zico, ¡Por Dios! Hoseok, me dijo que lo nombrara Jiho, beso mi mano y después dijo que quería volver a verme, fue... ni siquiera se como decirlo.

- Bueno yo también me pondría así si mi bias hiciera tal cosa.

Ambos sonrieron.

Ya era hora de casi irse, Yoongi no había recibido ni una señal de Park Jimin, usualmente le hablaba para molestarlo, pero está vez nada, Min Yoongi no había recibido para nada una señal que le dijera que Jimin seguía tras de él.

Yoongi se despidió de Hoseok, para después tomar el ascensor, y bajar a la planta baja. Se sentía cansado, no había dormido mucho debido a su salida de anoche, además de que había escrito y enviado sus respectivos artículos en la madrugada.

Bostezo cubriéndose la boca con su mano izquierda, cuando término las puertas del ascensor se abrieron dejando a la vista la planta baja, salio a paso lento y se dirigió a la salida del edificio. Cuando salio su sorpresa fue tal al ver a Park Jimin afuera recargado cerca del capo de su BMW negro. Se acerco a él.

- ¿Qué haces aquí? -pregunto Yoongi sin ánimos.

- Te llevaré a tú departamento -la voz del pelinaranja había salido desganada.

- ¿Ocurre algo?

- Sólo sube -sin más Jimin se dirigió a la puerta del piloto, Yoongi sin rechistar abrió la puerta del copiloto para adentrarse al vehículo.

Jimin suspiro cuando término de abrocharse el cinturón de seguridad. Yoongi cerró la puerta y de igual forma se coloco el cinturón.

- Dime que no lo hizo -dijo Jimin de repente.

- ¿De qué hablas?

El pelinaranja miro a Yoongi, y allí el pálido noto la mirada de Jimin, sus ojos estaban algo rojos y cristalinos, era como si hubiera estado llorando unos momentos antes.

- Sabés de que hablo, ahora sólo responde -sus palabras eran como témpanos de hielo.

- No sé a que demonios te refieres -respondió el pálido-. Si me dijeras de que quieres que te de una explicación, esto sería más fácil.

El pelinaranja apretó el volante con sus manos, sus nudillos se pusieron blancos debido a la fuerza que ejercía al volante.

- Zico... -dijo en voz baja.

- ¿Qué?

- Zico -dijo más fuerte-. Dime que es mentira lo que él hizo -Yoongi frunció su ceño-. No te hagas Yoongi. Sé que ese tarado te beso.

Yoongi no pudo evitar abrir sus ojos con sorpresa, Zico no lo había besado.

- Habla, no te quedes en silencio.

- No lo hizo.

- ¿No? Entonces como explicas que el me confirma que estás saliendo con él. Es increíble.

- ¿Salir con él? Park te estás confundiendo.

- ¿Me estoy confundiendo? Min, está en las noticias, está en todas partes, Min Yoongi confirma relación con Woo Jiho. ¿¡Cómo demonios piensas que me sentí con eso!?

- No me grites Park -dijo Yoongi.

Y silencio, sólo silencio.

Jimin comenzó a conducir, apretaba la mandíbula en verdad estaba muy enojado.

- Detén el auto -dijo Yoongi.

- ¿Por qué?

- ¡Sólo detén el auto!

Jimin no le obedeció en cambio acelero un poco más. Yoongi chasqueo la lengua.

- En el próximo alto me bajaré -Yoongi estaba enojado.

- Haz lo que quieras.

Y enseguida el semáforo no estuvo a favor de que el vehículo de Jimin avanzará. Park detuvo su automóvil, y Min Yoongi quito el seguro de la puerta, Jimin espantado agarro el brazo de Yoongi antes de que este saliera por completo.

- ¿A dónde vas?

- ¿No es obvio? Caminaré, ahora suéltame.

- Dije que te llevaría a tú departamento.

- Sólo suéltame -jalo su brazo-. Park, estoy muy cansado para golpearte. Así que mejor suéltame.

- No lo are, quédate.

Yoongi suspiro y jalo su brazo en cuanto sintió que Jimin había aflojado el agarre, cerró la puerta de un portazo y fue hacia la acera para disponerse a caminar, Jimin vio que el semáforo ya estaba a su favor y comenzó a avanzar lento hacia Yoongi, agradecía que al menos no había mucho transito.

Bajo el cristal de la puerta del copiloto para poder hablar con Yoongi que iba caminando algo rápido.

- Yoongi, deja tus berrinches y entra al auto.

Yoongi se detuvo y Park detuvo el auto.

- ¿Berrinches? Escuchaste lo que dijiste, ¡berrinches! -Yoongi negó-. Tú eres el de los berrinches, eres un... ni siquiera se que decirte, vienes acusándome de una maldita mentira, Park, si en verdad crees lo que Zico te dijo, me importa una mierda. Pero te diré que yo no sería capaz de besarlo, es más no dejaría ni que él me besará. Pero si estás seguro de que lo hice, no me interesa. Ahora deja de seguirme.

Y Yoongi siguió su camino, Jimin lo miraba alejarse, no creía que vería a Min Yoongi tan enojado. Y lo hizo pensar, ¿en verdad había pensado en creerle a Zico? Es verdad que se había dejado llevar por su enojo, y es que Zico lo había llamado diciéndole "la gran noticia" y es que Jimin no se había puesto a investigar más a fondo sobre eso.

- Soy un idiota -se dijo a él mismo-. Un gran y completo idiota.

Suspirando condujo directo a su departamento en verdad estaba muy enojado consigo mismo, era estúpido por no haber hecho una investigación desde antes, ahora se sentía un completo tonto.

Salio del vehículo y se dirigió a su departamento, en cuanto llegó cerro la puerta, estaba demasiado desanimado, en lo único que podía pensar en esos momentos era en dormirse, eso era lo más estúpido que había cometido.

Sin más se recostó en su cama y se durmió.

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El sonido de su celular fue lo que despertó a un pelinaranja.

Perezosamente y de manera torpe se levanto de su cama para buscar su celular que se encontraba en la mesita de noche que se encontraba un poco alejada de su cama, agarro el móvil y atendió la llamada sin darse cuenta de quien se trataba.

- Bueno -dijo con voz ronca.

- Jimin, ¿eres tú?

- Sí -dijo pasando una mano por sus cabellos-. ¿Con quién hablo?

- Soy Kyung.

Y Jimin como por arte de magia dejo de sentirse cansado.

- ¿Kyung? ¿Qué es lo quieres?

- Bueno, estaba hablándote para decirte que no le creas nada a este Jiho.

- ¿Qué?

- Bueno ya sabes, de su supuesta relación con este Min.

Jimin hizo un sonido que le indico a Kyung que debía continuar con su relato.

- Verás Jimin... Jiho no hizo nada de lo que te dijo, bueno lo del beso sólo fue en su mano, y nada más. Pero ya sabes que a Jiho le encanta hablar de más solo para molestarte...

A pesar de que Kyung seguía hablando, Park Jimin no escucho ni una palabra, sabía que Kyung no le mentiría pues era uno de sus amigos de confianza, pues le avisaba sobre alguna de las bromas pesadas que preparaba Zico para hacerlo enojar. Y en ese momento en verdad que se sintió muy enojado consigo mismo.

- Soy un imbécil...

- ¿Dijiste algo Jimin?

Y Jimin regreso a la realidad.

- Olvídalo, tengo que colgar.

- Así, nos vemos luego amigo.

- Sí nos vemos.

Corto la llamada, rápidamente se cambio de ropa, y sin peinarse salio corriendo de su departamento, tenía que hablar con Yoongi, tenía que disculparse con Yoongi inmediatamente.

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Frenó muy brusco derrapando las llantas de su vehículo negro, sorprendiendo a muchos de los peatones que caminaban por la acera, Jimin salio de su auto y entro al edificio de la revista HOT World's.

Corrió cuando el elevador se detuvo en el cuarto piso, y ante la mirada atenta de todos los presentes, se dirigió hacia la oficina de Min Yoongi.

Ni siquiera escucho a Hoseok que le hablaba, abrió la puerta de manera brusca, estaba a punto de hablar pero su sorpresa fue a¿grande al encontrar, que en la oficina no se encontraba nadie.

- ¿Dónde esta Yoonie? -pregunto Jimin en voz alta.

- Está descansando -dijo una voz a sus espaldas, al voltearse se encontró con Hoseok.

- ¿Descansando?

- Sí, al parecer le dijo a la editora en jefe que era hora de tomar sus dos días libres que le debía, y es lo que hizo, regresará el jueves.

Jimin suspiro.

- Hoseok, ¿Yoongi es un mentiroso?

- ¿Mentiroso? -Hoseok sonreía como si le hubieran dicho la mejor broma de su vida-. Yoongi no miente, odia las mentiras, su padre le mentía mucho, es por eso que las odia.

- Mierda... en verdad que soy un idiota.

- Eso no es nuevo, me alegra que te des cuenta de eso.

Y sin decir más Jimin salió corriendo de nuevo. Ahora tenía que irse al departamento de Yoongi y tenía que apresurarse.

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El sonido del timbre era molesto, pero no tanto como ese día para Min Yoongi.

El peliverde se encontraba recostado en su cama plácidamente, quería disfrutar de esos hermosos días libres, pues no quería que nadie lo molestara, estaba disfrutando de su hermoso descanso, cuando el sonido del timbre, de ese maldito fastidioso timbre, lo molesto de sus sueños.

Se levanto perezosamente.

- ¿Quién demonios podrá ser?

Se encamino hacia la puerta sin preocuparle el vestirse.

En verdad que era muy molesta la persona que estaba detrás de esa puerta, pues no dejaba de tocar insistentemente ese timbre.

- ¡Ya voy! ¡Ya voy! Que desesperado.

Abrió la puerta sin fijarse por el picaporte de quien se trataba.

- Ahora sí ¿quién... -y no pudo hablar pues recibió un abrazo.

Yoongi no sabía si debía empujar al sujeto que lo abrazaba o gritarle, pero estaba muy cansado como para hacer tal cosa. Yoongi vio la cabellera naranja, y supo de quien se trataba.

- ¿Jimin? ¿Qué haces aquí?

Jimin se separó de él por unos momentos, pero no soltó a Min.

- Lo siento...

- ¿Por qué?

- Jimin, no sé porque te disculpas...

- Debí creerte a ti, no a ese estúpido de Jiho.

Yoongi comprendió a que se refería, pero la verdad era que ni siquiera estaba enojado.

- Yoonie... perdóname, se que fui un idiota.

- Oh sí que lo fuiste, pero no estoy enojado, no es como si me importará.

- Pero a mí si me importa Yoonie. No quiero que pienses que soy un estúpido por creer en mentiras de un chico que odio.

Yoongi le sonrío, era la primera vez que Jimin veía esa sonrisa, y no podía evitar que le encantará, quería ver esa sonrisa siempre.

- Jiminie -era la primera vez que le decía un apodo-. Escucha, no pensé nada de eso, es cierto que me enoje, pero eso se pasa, no me gusta pensar en algo dos veces. Así que deberías estar tranquilo porque...

Y ya no pudo hablar, ¿por qué? Pues... Park Jimin estaba besando a Min Yoongi, era un beso en los labios, un beso muy inocente sólo cinco segundos, y se separaron, Yoongi estaba sorprendido, y Jimin algo sonrojado.

- ¿Por qu... -Yoongi tartamudeo, pero no término la pregunta.

- Te amo -dijo Jimin para después darle un beso en la mejilla.

Y Yoongi no supo que decir.

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