004
- ¡Demonios Yoongi! ¿En verdad aceptaste? -Hoseok había preguntado por cuarta vez.
- ¿Cuántas veces te tengo que repetir lo mismo?... si acepte.
Hoseok de nueva cuenta abría sus ojos con sorpresa.
- Es que... no entiendo porque aceptaste, es decir, te he pedido que me acompañes a varios lados y tu simplemente me dices que no puedes porque tienes que cuidar a tú gato, ¡cuando ni siquiera tienes uno!
- Me amenazó con arruinar mi carrera de periodista.
- ¿Osea que tenía que hacer lo mismo para que aceptarás pasear conmigo? ¡Por Dios! Yoongi ¿acaso estás demente?
- ¡No lo estoy!
A pesar de que él decía que no estaba demente, la verdad era que en su cabeza sólo estaba la palabra loco, pues si creía que estaba loco por haber aceptado sin decir ni una sola palabra para quejarse al respecto.
Hoseok y Yoongi estaban almorzando fuera de las oficinas de la revista, pues querían pasear un rato mientras hablaban sobre el asuntó de las citas que iba a tener Jimin con Yoongi.
- Hermano, no lo creo, es que en verdad no lo creo, creí que estabas loco, pero nunca creí que podías estarlo tanto, ¿estás seguro que no quieres que te interne en un manicomio?
- Hoseok, deja de exagerar, no es para tanto.
Está vez el pelinegro si se asustó, se atraganto con su soda y agarró a Yoongi por los hombros para después sacudirlo.
- ¿¡Quién eres tú!? y ¿¡Qué hiciste con el verdadero Min Yoongi!?
Min Yoongi estaba enojado, empujo a Hoseok para que dejará de sacudirlo de esa manera mientras le preguntaba incoherencias.
- Deja de actuar de esa manera, sigo siendo Yoongi pedazo de idiota.
- Bien te creo, pero aún así siento que aquí el pedazo de idiota eres tú por aceptar esas propuestas, no, más bien eres el idiota completo.
- Púdrete Hoseok.
- No soy verdura para pudrirme.
Bueno al menos Hoseok le alegraba un poco la existencia con sus tontos comentarios.
Ahora tendría que soportar a un pelinaranja muy molesto que sólo piensa en salir con él de una manera romántica y esperaba que no se sobrepasará, y si lo hacía sería Yoongi quien lo demandará por acoso sexual.
Sí definitivamente lo haría.
.
.
.
.
.
.
- Min, tienes una llamada de Park Jimin, en la línea quince -dijo Hoseok entrando a la oficina de Yoongi.
- Gracias Hoseok, pero que te parece si le dices que no estoy disponible.
- No creo que eso le gusté, se escucha molesto.
Y así Hoseok salió dejando a Yoongi, el peliverde de mala gana levanto la bocina del teléfono.
- ¿Qué es lo que quieres Park?
- Qué genio te cargas Yoonie, ya cásate.
- Vete al infierno, ¿qué es lo que quieres? Y habla rápido o sino cortaré la llamada.
Se escucho un suspiro de parte de Park Jimin.
- Estoy conduciendo hacia las oficinas en donde trabajas, espérame allí, iré a verte.
Yoongi no estaba seguro, pero por alguna razón creyó que la voz de Jimin sonaba algo ¿coqueta? Esta bien, era una locura pensar en eso.
- Preferiría que no vinieras.
- No seas así nene, espérame allí, quiero ir a comer contigo.
- De un de repente se me ha quitado el hambre.
- No importa, de todas maneras quiero salir un rato, estoy algo agotado de dar entrevistas a programas de variedades e ir a firmar algunos albums, me gustaría pasar tiempo con mi nene.
- Primero; deja de decirme nene, segundo; porque no te vas a descansar en tú departamento y me dejas en paz, así y tercero; no quiero salir contigo.
- Lamento decirte que es parte del trato nene -dijo Jimin enfatizando la última palabra.
- Te odio -dijo Yoongi entredientes.
- También te quiero nene, te veo en unos cinco minutos, ya casi llegó, adiós.
De nueva cuenta Yoongi se quedó con las ganas de gritarle maldiciones a ese imbécil de Park Jimin.
.
.
Se escuchaba un gran alboroto afuera de las oficinas de la revista HOT World's y es que ese alboroto era a causa de varios paparatzis y entrevistadores que estaban afuera esperando la llegada de cierto idol. Y es que Park Jimin era tan famoso, casi superando a Justin Bieber y Bruno Mars juntos.
Un BMW se estaciono afuera de las oficinas y de él salio el tan esperado Park Jimin. Se escucharon los gritos emocionados de algunas (y algunos) de sus fanáticos, se escucho el sonido de las cámaras que tomaban fotografías del chico y se escucharon las preguntas todas revueltas que hacían los entrevistadores.
Jimin iba caminando abriéndose camino para que lo dejarán entrar a las oficinas de la revista.
Jimin no quería decepcionar a sus seguidores, así que permitió que un hombre le hiciera una de las tantas preguntas que le lazaban.
- Jimin, ¿es cierto que estás a punto de demandar a un empleado de está revista?
- He quitado la demanda, ya no será hecha ni se pasará a juicio.
- Puede decirnos el porque -pregunto una mujer.
- Me he dado cuenta de que todo fue un malentendido.
De nuevo comenzaron a lanzarle preguntas, pero el apunto a otro de los periodistas.
- Jimin, se han escuchado rumores de que estás interesado en el joven al que le hiciste la demanda ¿cómo responde a eso?
- Sólo diré que lo rumores son ciertos -dijo y sin más entro a las oficinas.
Gracias a Dios que los paparatzis y periodistas no podían entrar, pues no tenían permiso para seguir su camino entrevistando a Park Jimin y eso lo ponía más que contento, entro en el elevador, sabía perfectamente en el piso que trabajaba Yoongi, era el cuarto piso, y por estar tan cerca de seguro había escuchado todo el alboroto anterior.
Salió del elevador en el cuarto piso, y vio como varias y varios se sorprendían de que él estuviera allí, pues es muy raro que los idols se presentasen así como si nada.
Camino hasta los puestos de trabajo, en donde vio como algunas de las chicas se sorprendían mucho al verlo, y otras incluso se desmayaban porque eran sus fanáticas, sonrío por ver que era bien recibido, siguió su camino y dio con la oficina de Min Yoongi.
Sin tocar entro y su sorpresa fue tal al ver que estaba con otro chico, uno de cabello pelinegro y ese mismo chico estaba poniendo un brazo sobre los hombros de su Min Yoongi.
- ¿Interrumpo algo? -pregunto apretando los dientes simulando una sonrisa.
- No -dijo el pelinegro-. Bien me retiro, no se te olvide Yoongi, tenemos que ir a ese lugar algún día.
- No prometo nada Hoseok -dijo Yoongi en respuesta.
Hoseok se retiro.
Yoongi camino de nuevo hacia su escritorio y de nueva cuenta se sentó en la silla que estaba detrás de su escritorio.
- Bien, ¿qué planeas?
- No te sientes, vayámonos, tenemos que irnos a pasear, me gustaría ir contigo al cine o a un restaurante, o que te parece a mi departamento.
- ¿Qué te parece si mejor yo me quedó aquí, y tú te vas? Esa me parece una gran idea.
- Yoonie, no me rechaces, sólo vamonos.
- No me digas Yoonie.
Park Jimin rodo los ojos, se acerco al escritorio de Yoongi, fue hacía Yoongi y jalo de su brazo para después jalarlo hacia afuera de su oficina, con la mirada atenta de todos los allí presentes, y después se lo llevo al elevador, oprimiendo el botón de PB (Planta Baja) y sin soltar a Yoongi, salio de las oficinas mientras el otro se quejaba y le exigía a Jimin que lo soltará.
Ya no había más personas en la salida/entrada, lo que favorecía en que así Jimin podía jalar a Yoongi de manera libre y cuando ya estaban afuera abrió la puerta del copiloto y metió a Yoongi, luego rápidamente se subió del lado del piloto y puso los seguros para que Yoongi no intentará escapar.
- Ésto es secuestro ¿sabes?
- Pues deberías demandarme ¿no crees?
Y así un triunfante Jimin encendió el motor, y Yoongi sólo pudo ponerse el cinturón de seguridad y rezarle a lo que fuera que estuviera presenciando eso, de que Jimin no le hiciera nada.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top