Vᴇɴᴛᴇsɪᴍᴏ Aᴛᴛᴏ: 𝕾𝖔𝖑𝖔 𝖎𝖑 𝖘𝖎𝖑𝖊𝖓𝖟𝖎𝖔 𝖒𝖎 𝖈𝖔𝖓𝖘𝖔𝖑𝖆
Vɪɢᴇ́sɪᴍᴏ ᴀᴄᴛᴏ ;;
ˢᵒˡᵒ ᵉˡ ˢⁱˡᵉⁿᶜⁱᵒ ᵐᵉ ᶜᵒⁿˢᵘᵉˡᵃ
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𝓅𝓊𝒷𝓁𝒾𝒸𝒶𝒹ℴ: 25/06/2021
"𝑵𝒐 𝒕𝒆𝒏𝒊𝒂 𝒏𝒊 𝒖𝒏 𝒄𝒆𝒏𝒕𝒂𝒗𝒐, 𝒑𝒆𝒓𝒐 𝒔𝒊𝒆𝒎𝒑𝒓𝒆 𝒕𝒖𝒗𝒆 𝒖𝒏𝒂 𝒗𝒊𝒔𝒊𝒐́𝒏
𝑺𝒊𝒆𝒎𝒑𝒓𝒆 𝒕𝒖𝒗𝒆 𝒈𝒓𝒂𝒏𝒅𝒆𝒔 𝒆𝒔𝒑𝒆𝒓𝒂𝒏𝒛𝒂𝒔"
-Sandra, ¿has terminado? -preguntó Shawn al reunirse con la chica.
-Si, he apagado todos los incendios que Erin y el otro especial causaron -asintió la chica.
-Aún no puedo creer que Blaze esté de vuelta... Y además en el otro bando...
Sandra miró preocupada al peliplata. No le gustaba ni un pelo la situación en la que estaban, sabía perfectamente que Shawn no era el único afectado por esa nostalgia, y ahora no era el momento de recordar viejos tiempos. Era el momento de proteger el circo, el hogar de todos, y por supuesto a todos sus compañeros.
-Shawn, sé que es duro para vosotros, pero ahora no podemos perder el tiempo con preguntas que claramente no tienen respuesta, no ahora por lo menos -el chico se sorprendió por lo directa y seria que había sonado su amiga.
Sandra siempre era dulce y amable, siempre trataba de buscar el lado positivo a todo y era de las que más tacto tenía de todo el grupo. Entonces se golpeó mentalmente. Ella tenía razón, y si era tan brutalmente directa era por su bien, porque ese no era el momento ni el lugar.
-Tienes razón. Ahora que ya hemos terminado con los incendios deberíamos ir a ayudar a los demás -propuso mirando en dirección a donde se veían las columnas de fuego por los especiales que usaban dicho elemento-. Sería más eficiente que echáramos una mano a los grupos que se enfrentan a Erin y Surtr. Podríamos ayudar más así y...
No le dio tiempo a terminar de explicarle su punto a Sandra, cuando una flecha salió de algún sitio rozando su mejilla y clavándose en el suelo. Ambos se alejaron velozmente y Shawn se llevó la mano a su mejilla notando que le escurría algo de sangre por esta. Definitivamente esa flecha era un aviso, pues si hubiera querido darle, lo hubiera hecho.
Los dos miraron en todas direcciones preparados para atacar en cualquier momento a la primera persona que vieran. Más flechas salieron de diferentes sitios del bosque, los dos trataban de esquivarlas pero Shawn tuvo que crear un enorme muro de hielo para protegerse y proteger a Sandra, había notado algo raro en esas flechas. Estas cambiaban de dirección en el aire, eso era imposible de conseguir para cualquier persona, por lo que la única explicación posible es que los estuvieran atacando un especial.
Shawn no recordaba que ninguno de los especiales del grupo de Emperor tuviera una mutación así, por lo que solo podía significar que era uno de los especiales de la URSS. Eso o... no, si su pensamiento era correcto estaban en serios problemas.
Una risa aguda se escuchó en el bosque, pero por el eco no pudieron averiguar de donde procedía. Era como si estuviera en todos sitios y a la vez en ninguno. Una nueva lluvia de flechas llegó desde arriba para esquivar el muro de hielo. Esta vez fue Sandra quien al disparar varios proyectiles de agua de gran tamaño pudo frenar el ataque, mas no notaron que un nuevo número de flechas llegaba desde atrás.
Trataron de esquivarlo y aunque algunas flechas quedaron clavadas en el frío muro, otras muchas comenzaron a seguirlos. Shawn lanzaba trozos de hielo para golpear las flechas y Sandra se trataba de proteger con los árboles de la zona. Al final una de las flechas le dio a la chica en la pierna. Por el dolor Sandra perdió el ritmo y al menos unas tres más se le clavaron en el cuerpo; abdomen, espalda alta y brazo derecho.
-¡Sandra! -gritó Shawn cuando vio caer a su amiga al suelo.
Sandra trató de levantarse a pesar del dolor y el sangrado sin mucho éxito, mientras el chico trataba de acercarse a ella.
-Shawn... -dijo con un hilo de voz estirando su mano para alcanzar a su amigo que apenas estaba a un par de metros de ella.
Una vez que consiguiera llegar hasta Fischer tenían que salir de allí. La llevaría junto a sus compañeros que estaban en el camión blindado para que Silvia la cuidara. Luego iría a ayudar a sus compañeros con los especiales de fuego.
Eso al menos hubiera hecho de no ser porque de la nada algo se interpuso en su camino. Era una masa de fuego ardiente que le cortó en paso, y cuando vio las llamas demasiado cerca se vio obligado a retroceder alejándose así de la mano que su amiga le tendía desesperada.
Una nueva flecha salió de la nada dándole en el brazo izquierdo. Soltó un grito de dolor teniendo que moverse a un lado y por lo tanto alejarse más.
Aquella masa de fuego fue apagándose y cobrando una forma humana hasta dejar ver a un chico de ojos dorados y pelo rojo como las llamas que acababa de ver. También una chica de ojos rojos y pelo corto hizo aparición con una enorme sonrisa a juego con la de su compañero.
-¡Hola guapo! ¿Nos harías el favor de acompañarnos? -pidió alegre la chica.
-Alejaos de ella -dijo con voz dirigente.
Estaba enfadado, demasiado diría él. Acababan de herir a Sandra, a su amiga, y esos dos le estaban impidiendo que la ayudara. Si ellos no se quitaban los apartaría él a la fuerza.
Sus manos volvieron a crear hielo mostrando que estaba dispuesto a atacar. Los dos contrarios ampliaron sus sonrisas y se pusieron en una posición defensiva.
-Yo que tú no haría eso -dijo el pelirrojo.
Shawn vio como el cuerpo de este volvía a rodearse de llamas nuevamente y de la piel de la chica comenzaban a crearse flechas que le apuntaban a él. Ya sabía que ella era la responsable de esos ataques, la cosa no se veía bien, pero no podía abandonar a Sandra.
Un fuerte sonido se escuchó en el bosque. Los arboles se agitaron bruscamente y la tierra se movía como si se tratara de un temblor, pero se distinguía perfectamente el sonido de los pasos de algo. Al momento siguiente un gigantesco mamut apareció en aquella parte del bosque embistiendo a los dos especiales alemanes.
Antes de esquivar la chica enemiga agarró a Sandra llevándosela con ella. Shawn quiso ir a rescatarla pero aquel animal lo agarró con su trompa y lo arrastró lejos de allí. Solo pudo ver como el chico se acercaba a chica de cabello azulado y a su compañera en ese momento inconsciente.
Trató de liberarse, pero el animal no lo soltó hasta que concluyó que ya estaban lo suficientemente lejos. Cuando lo hizo Shawn quiso regresar, pero la forma del animal cambió y su hermano Aiden corrió hacia él abalanzándose de manera que lo tiró al suelo de un placaje.
-¡¿Qué haces?! -gritó el mayor de los Frost- ¡Has dejado a Sandra sola allí!
-¡Te iban a capturar! -gritó de vuelta sin intención de soltarlo por mucho que forcejeara.
-¡Debiste llevarla también!
-Esa chica la arrastró con ella y debíamos salir de allí rápido ¡No iba a permitir que te hicieran daño!
Shawn dejó de moverse, de tratar de escapar de su hermano. Su mente funcionaba al mil en ese momento. Solo podía pensar en qué haría ahora, cómo podía ayudar a su amiga.
Tendría que volver a encontrarse con esos dos especiales, pero si iba solo, y además herido como estaba, no lograría nada. Tenía que buscar ayuda, sus compañeros en su mayoría estaban ocupados, pero si iba hasta el camión blindado tal vez alguien como Sora o Acker podría ayudarlo. Sí, eso debía hacer.
Logró al fin que Aiden lo soltara al darle un fuerte empujón, que al ser inesperado para el menor no pudo mantenerlo agarrado por más tiempo. Shawn se levantó del suelo y caminó en la dirección contraria a la que habían venido.
-¿A dónde vas? -preguntó Aiden levantándose también.
-Al camión, ya que tú no quieres ayudarme pediré ayuda a los demás para alejar a Sandra de esos dos.
-¡No puedes hacer eso!
Aiden alzó las mano y se colocó delante de su hermano que lo miraba con sorpresa.
-No vamos a hacer nada peligroso, aun así deben ser ellos quienes decidan si quieren ayudar -frunció el ceño ya enfadado por la actitud de Aiden.
Trató de esquivarlo pero Aiden no le permitía dar más de tres pasos seguidos antes de que tuviera que quitarlo de en medio de nuevo. Esa insistencia y terquedad comenzaron a colmar su paciencia.
-¡Aiden apartate! -jamás le había levantado la voz a su hermano pero ya estaba harto de esa situación.
Cuando miró a su hermano a los ojos para volver a decirle que le dejara pasar notó la mirada nerviosa de él. Ahí supo que pasaba algo y los nervios por ira se volvieron nervios por miedo.
-Aiden, ¿qué ha pasado?
El de hebras naranjas no quería contestar, pero tampoco encontraba una forma mejor de retener a su hermano por más tiempo. Al final suspiró y lo miró a los ojos decidido.
-Los especiales rusos llegaron hasta el camión -dijo asustando a Shawn-. Y se los han llevado.
•••
Adriano tiraba de aquellas cuerdas tratando de soltarse sin éxito. Los habían atrapado muy fácilmente y estaba enfadado consigo mismo por ello. No fueron rivales para Mastermind y Fire Deep una vez se deshicieron de sus dos principales peleadores, Acker y Sora, y dejaron inconsciente a Celia para que no les atacara con el somnífero.
El castaño cargaba a su compañera de gafas en el hombro mientras que el resto de ellos estaban atados con una gruesa y resistente cuerda por las muñecas, y además dicha cuerda los unía los unos a los otros para que no pudieran escaparse. Acker comenzaba aquella fila siguiendo sin rechistar a la chica de pelo azul , y Sora la cerraba sin decir nada al respecto tampoco.
Adriano podía notar por la mirada pérdida de sus dos amigos que algo raro pasaba. Dejaron de luchar demasiado rápido y obedecían todo lo que la chica les ordenaba. Era imposible huir estando unidos a ellos porque no correrían a no ser que la propia fémina lo ordenara.
¿Era alguna clase de lavado de cerebro? ¿O qué demonios estaba pasando?
-Deja de resistirte chico -habló entonces la chica que respondía al nombre en clave de Mastermind.
Podría haber dicho algo como "suéltanos" o "maechaos de aquí" pero hubiera sido inútil. Él no tenía ese poder de controlar la mente y no hubiera servido para nada.
-Parece que los demás han hecho bien su trabajo, no hay mutantes a la vista, todos están ocupados -dijo entonces Fire Deep.
-Avisaré a Surtr de que ya los hemos atrapado para que él avise a Emperor y comencemos con la retirada.
-¿No sería mejor aprovechar nuestra buena racha y capturar a alguno más? -preguntó el castaño a su compañera con claro aire de superioridad.
-Ni se te ocurra -sentenció-. Las ordenes son atraparlos a ellos y eso es lo que haremos. Que se te vaya de la cabeza cualquier otra posibilidad.
El castaño bufó y rodó los ojos. Para él aquella chica era demasiado seria, no le vendría mal ser de mente más abierta y no tan cuadriculada.
Caminaron en silencio mientras que los chicos y chicas del circo seguían tratando de liberarse sin éxito. Adriano supo que la única solución era lograr despertar de esa especie de trance a Acker o Sora, pero no sabían como. Miró a sus compañeros y vio que justo delante de Sora caminaba Dragan y su bombilla se encendió.
"Combatiremos el control mental con otro control mental"
Adriano hizo algunos gestos sutiles tratando de llamar la atención de su compañero de gorra sin que los especiales rusos lo vieran. Dragan notó los movimientos de su compañero y lo miró intrigado.
Ahora tenía su atención, pero ¿cómo haría para decirle lo que quería? Después de varios intentos en los que Serifovic no entendió nada Adriano se señaló sus propias manos. Entonces el contrario pareció captar lo que él quería.
Con cuidado Dragan se desprendió de sus guantes. Tenía las manos atadas al frente y Sora estaba tras él así que para tocarlo tendría que girarse y, por tanto, llamar la atención de sus secuestradores. Iba a tener que ser rápido o el plan no funcionaría.
Aprovechó que Mastermind y Fire Deep estaban ocupados discutiendo sobre lo que debía hacer para llevar a cabo el plan de Adriano. Dragan se giró rápido hacia atrás, tirando un poco de Aurelia que se sorprendió por la acción, y tocó el brazo de Sora.
-¡Ey tú ¿qué haces?! -el castaño al ver el movimiento del chico fue rápidamente a la parte de atrás de la fila para separarlo del de ojos rojos.
Adriano miró lo que pasaba con interés y vio como el chico envolvió las manos de Dragan en una bola de tela que ató con la cuerda dejándolo sin poder usar su mutación. Miró a Sora esperando que el plan funcionará, pero este seguía sin hacer nada, ¿el plan había fracasado? Esto no pintaba bien.
El especial ruso regresó junto a su compañera y obligó a que todos continuaran andando. Adriano trataba de pensar en otra cosa, algo habría que pudieran hacer. No podían simplemente esperar a que sus compañeros se dieran cuenta de que ellos ya no estaban en el camión.
Miró a Travis y Zhao que caminaban con tranquilidad y gesto imperturbable. ¿Cómo podían estar tan tranquilos dadas las circunstancias? No estaba entendiendo nada y eso le volvía loco.
Notó entonces que le llamaban dándole toquecitos en su espalda y se giró viendo a Marcel que le indicaba que mirara atrás. De nuevo cruzó la mirada con Dragan y para su sorpresa Sora, que caminaba tranquilo tras este, le levantó el pulgar como forma de decirle que ya estaba bien. ¡Lo había conseguido! Sora ya estaba de nuevo en sus cinco sentidos, quizás ahora si que tuvieran una posibilidad.
-Aquí es -dijo la chica de coletas-. Se supone que Lady dijo que esperáramos aquí.
-Que perdida de tiempo -se quejó el otro apoyándose en el tronco de un árbol.
Ahora si que debían darse prisa en hacer algo, ya habían llegado al lugar acordado por los especiales del gobierno y sus compañeros no tardarían en llegar. Si llegaban muchos ellos lo tendrían más difícil para irse.
Una explosión.
Sucedió tan cerca que cayeron al suelo y quedaron aturdidos. Adriano vio a los dos del gobierno de la URSS también confundidos y sin saber qué sucedía. Los de la explosión no eran aliados de ellos, de eso estaba seguro.
Sucedió otra al otro lado del grupo y después de esta un montón de cristales salieron disparados hacia esos dos. La chica se colocó detrás de un árbol para protegerse y el chico tocó una roca convirtiendo su piel en ese mismo material para que los cristales se rompieran nada más tocarlo.
Sora vio su oportunidad en ese momento y creó cuchillas con su sangre rompiendo las cuerdas para que todos escaparan. Dragan fue a ayudar a Acker quien se había despertado del trance tras la primera explosión y Aurelia y Silvia llevaron a la aún inconsciente Celia entre las dos.
-¡Rápido, por aquí! -vieron a Billy llamarlos mientras que Tammy seguía lanzando afilados trozos de cristal y Xavier tocaba diferentes partes del lugar creando más explosiones.
Esos ataques sin cesar por parte de sus dos compañeros harían de nube de humo perfecta para que ellos escaparan sin que los dos especiales pudieran impedirlo. Corrieron hacia Billy lo más rápido que pudieron alejándose de todo el combate anterior.
-Haced un circulo, os transportaré lejos de aquí -pidió Miller.
-¿Qué ha pasado? -preguntó Acker confundido pero obedeciendo lo pedido por su amigo.
-Larga historia, ya te contaremos -dijo Dragan agarrándole para que fuera más rápido a formar el circulo.
Un disparo se escuchó a lo lejos e impactó justo ente Billy y Aurelia impidiendo que se dieran la mano. La castaña asustada soltó la mano de Silvia y cayó al suelo al tropezar. Silvia a su vez soltó la mano de Marcel para ir a ayudar a su amiga y en eso otro disparo obligó a Zhao a soltar a Adriano.
-¡Sácalos de aquí! -le gritó Acker a Billy quien se quedó en un lado solo con los dos adultos.
Billy no cuestionó al mayor y se llevó a los dos adultos de allí. Ellos eran la prioridad, aunque Zhao dijera que ellos debían salvar sus vidas, priorizarlas sobre las de ellos dos, eran incapaces de hacerlo. Travis y Jinyun eran como padres para ellos, los acogieron y cuidaron como niños normales cuando todo el mundo les dio la espalda. Además sin ellos estarían demasiado perdidos, sin saber qué hacer ni cómo escapar de los gobiernos que los perseguían.
Acker se fijó en el suelo, concretamente en el sitio donde impactó la bala y notó que esa zona se había escarchado. Era como si hubieran disparado una bala de hielo.
Una tercera bala impactó en el suelo muy cerca de ellos, sobre todo de Aurelia y Silvia que se levantaron rápidamente y se reunieron con los demás. Acabaron todos juntos sin saber de donde llegaban los disparos.
-Así que queriendo escapar... -un chico albino apareció de entre las sombra cargando un rifle blanco.
No, ahora que se fijaban mejor no es que fuese blanco, era más bien semitransparente, era de hielo. Acker entonces entendió lo de las balas, esa debía de ser su mutación. De hecho el chico albino parecía tener parte de la piel escarchada, exactamente igual que el suelo donde dio la bala.
Junto al chico llegaron también otras cosas que asustaron al grupo. Parecían muñecos, pero eran realmente escalofriantes y grandes, y se movían hacia ellos rodeándolos e impidiéndoles irse.
-Son hilos -señaló Marcel algo muy fino y blanco que brillaba a la luz de la luna y las explosiones de fondo producidas por Xavier.
-Menos mal que hemos llegado justo a tiempo -otra chica más llegó desde el bosque.
Su pelo castaño era largo y ondulado llegando hasta su cintura. Además a diferencia del resto de especiales no vestía con los uniformes militares como era costumbre, ella solo llevaba una camiseta negra y una falda que llegaba hasta sus tobillos celeste y rosa. Sus manos las mantenía alzadas al frente y todos vieron que esos hilos de los muñecos se unía a las yemas de sus dedos.
-Mastermind, Fire Deep, ¿se puede saber qué hacéis para que casi se os escaparan? -preguntó la chica visiblemente enfadada a su compañeros.
Los del circo notaron que algo iba mal, ni había más explosiones ni cristales siendo lanzados. Giraron la cabeza y vieron como Tammy y Xavier estaban en ese mismo trance en el que Sora y Acker estuvieron. Definitivamente la mutación de Mastermind era molesta.
-Estos dos nos atacaron y no pudimos reaccionar antes, lo siento -dijo la chica de coletas.
-Ya, pues andad con más cuidado, casi echáis la misión a perder par de idiotas -dijo al albino mirándolos fulminante-. Para una vez que el grupo de Emperor lo hace bien no estaría bien que la cagarais vosotros, a la comandante Girikanan no le gustaría oír eso.
-Lo importante es que no ha pasado nada y ellos no se han escapado -se apresuró a decir el castaño.
-Ellos no, pero Jinyun y Travis sí.
-Cálmate Gazelle, al menos hemos atrapado a un buen número de mutantes, entre ellos la sanadora que Emperor necesitaba -calmó la castaña el ambiente.
-¿Emperor? -dijo para sí misma Silvia sin que nadie más la escuchara.
Del bosque surgieron enormes montañas de hielo que apenas y pudieron esquivar separando así a Gazelle y Lady del resto. El hielo cortó los hilos que conectaban con los muñecos y Dragan pudo correr hacia Xavier para despertarlo. El contacto fue muy rápido pues Fire Deep lo golpeó lo suficientemente fuerte como para dejarlo en el suelo sin poder moverse.
-Pero qué... -dijo Xavier al ver el panorama.
-¡Dejad a mis amigos en paz! -Shawn llegó junto a Aiden desde el bosque y comenzó a atacar sin descanso a Gazelle y Lady.
Gazelle le trataba de disparar pero como Shawn era capaz de controlar el hielo no le fue muy difícil evitar y deshacer los ataques. Aiden por su parte tomó la forma de un guepardo avalanzándose hacia los otros dos especiales rusos.
-Nos tenemos que retirar -dijo Gazelle al ver que no podrían aguantar por mucho más los ataque de Frost.
Lady fue capaz de crear de nuevo la conexión con aquellos muñecos de más de dos metros a pesar del hielo. Estos trataron de capturar a los miembros del circo.
-¡Mastermind! -gritó el castaño para que su compañera ayudara con la captura.
-Ah no, ¡vosotros quietos! -gritó Xavier tocando el enorme muro de hielo que segundos antes creó Shawn.
Lo hizo estallar.
El ruido de esa enorme explosión los ensordeció. El hielo voló por todas partes y el humo que provocó no les dejó ver qué pasaba. Shawn trató de enfocar la mirada para ver que había sucedido mientras el pitido en sus oídos persistía. No lograba ver a nadie y los dos especiales contra los que luchaba ya se había marchado por lo que comenzó a entrar en pánico.
Se acercó más al sitio donde sus compañeros debía de estar, por suerte el humo iba desapareciendo y cada vez veía mejor. Vio a Xavier salir de aquel caos cargando a Celia, vio sus labios moverse, le estaba diciendo algo pero solo escuchó un murmullo incomprensible. Siguió su camino, toda la zona estaba destrozada, pero veía algunas figuras humanas entre el humo.
Con los primeros que se encontró fue con Adriano y Marcel, siendo que el de pelo morado ayudaba al más bajo a ponerse en pie. Marcel se notaba aún bastante aturdido como si no entendiera qué había pasado. Continuó encontrándose con Sora que recién se estaba levantando del suelo, y un poco más adelante encontró a Valentín tratando de procesarlo todo mientras mantenía las manos en sus oídos tratando que ese pitido molesto se fuera.
El resto... bueno, no había un resto. No había nadie más allí. Ni compañeros ni enemigos, todos desparecieron.
Shawn desesperado siguió buscando por toda la zona e incluso alrededores, por si por la explosión habían salido despedidos o algo así, pero nada, no encontró a nadie más. Y eso no era lo peor, Aiden tampoco estaba, esos cabrones se habían llevado también a su hermano.
En ese momento recordó lo que pasó cuando hablaba a solas con él después de que lo salvara de la pelea contra esos dos especiales alemanes. Recordó como le gritó lleno de rabia cuando le dijo que se habían llevado a sus compañeros y le recriminó que no hiciera nada aún sabiéndolo.
-"¡Quería protegerte!" -le había dicho.
Pero él no quiso escucharlo y salió corriendo para buscar a sus amigos. Aiden arrepentido lo siguió también aunque él no se lo pidió. El arrepentimiento le llenó en seguida. Tal vez si le hubiera hecho caso Aiden ahora estaría allí, el gobierno ruso, o el alemán o a saber cual, no se lo habría llevado.
Solo pudo caer de rodillas al suelo y gritar por la impotencia. Se habían llevado a su hermano y a muchos de sus amigos. La peor de las situaciones se habían dado. Ellos estaban en peligro y él no podía hacer nada, iban a llevárselos, a experimentar con ellos e incluso a adoctrinarlos para que estuvieran del lado del gobierno.
Entonces recordó el extraño comportamiento de Axel. Nada más de imaginarse que su propio hermano pudiera actuar así le dieron ganas de vomitar.
-S... n... Sha... ¡Shawn! -escuchó al fin que lo llamaban con claridad.
Sora le hizo levantar la cabeza. El menor lo había escuchado gritar y se acercó a él asustado. El molesto pitido desapareció, pero lo que a Shawn le dolía ahora no eran precisamente los oídos. Las lágrimas salieron sin control y el chico rompió en llanto.
Sora se sorprendió. Jamás había visto a los miembros del circo, sus compañeros, llorar de aquella forma. Aquella forma en la que parecía que su alma estaba rota y le dolía. No sabía qué hacer, él no era bueno en esas cosas, pero vio las suficientes veces a aquellos chicos y chicas convivir como para que se le ocurriera algo al poco tiempo.
Simplemente lo abrazó y dejó que el peliplata se desahogara.
•••
-¿Cómo ha ido todo? -preguntó Blaze una vez se reunió en el punto acordado con el resto de mutantes y soldados.
-No hemos atrapado a todos lo que estaban previstos, pero a cambio nos hemos llevado a algunos otros -le dijo Basile.
Axel se acercó al camión donde llevaban a los chicos y chicas que habían atrapado. Miró por la ventana que quedaba en la parte posterior y observó como estaban inmovilizados en los asientos e incluso algunos de ellos parecían estar inconscientes. Mejor así, menos problemas darían durante el viaje.
-¿Qué haremos ahora con ellos? -preguntó el castaño a Axel.
-Los llevaremos a la base alemana aquí en Italia y allí se harán cargo de todo.
-Espera, ¿ninguno de ellos será para nosotros? ¡Hemos ayudado en esta redada también!
Por mucha admiración que Basile le tuviera al mayor seguía viendo injusto que el gobierno de la URSS no tocara ni a un solo mutante para sus filas. Además tal y como estaban las cosas nuevos miembros serían muy útiles. Sabía que habían atrapado a buenos mutantes tanto de ataque como de apoyo.
-Sí, obviamente la comandante Irina ya habló con Astram Schiller y llegaron al acuerdo que la mitad de ellos iría para Alemania y la otra mitad para la URSS, con la condición de que Alemania pudiera elegir dos de ellos sin que Rusia se quejara.
-¿Qué pretenderán?
-Seguramente se lleven a la sanadora con ellos. Un mutante con habilidades de curación es extremadamente útil para un ejercito -explicó Axel-. Además de que la necesitan para ayudar a Heath con su enfermedad. Él también tiene una mutación muy buena y si pudiera rendir al cien por ciento la división de mutantes alemana ganaría mucha fuerza.
-Ahora que lo dices es cierto que cuando Moore aumentó mis habilidades noté un gran cambio. Me sentía mucho más fuerte, mejor combatiente -Basile miró sus manos y las cerró con fuerza como si tratara de notar aún aquella extraña energía que lo invadió-. Heather también mejoró mucho su mutación gracias a eso.
-Es una pena que él tuviera que quedarse en la base y no ir a la misión -los dos fueron interrumpidos por Bryce quien llegaba de hablar con sus dos compañeros de división; Claude y Leyna.
-Es vuestro compañero después de todo, vosotros sabréis más -apuntó Axel pero Bryce solo bufó.
-No somos compañeros, los de la primera división no solemos hacer equipo con ellos, este fue un caso excepcional.
Basile frunció el ceño, no le gustaba nada aquel tono condescendiente del albino. No era como si solo se sintiera superior al grupo de Heath, sino también como si se sintiera superior a los mutantes de la URSS, y eso le enfadaba.
-Grayling y Bellerosese quedaron a cuidar de él por esos dolores tan fuertes que le comenzaron a dar, pero no fue un gran problema, de todas formas lo que pretendíamos era capturarlos, no matarlos. Y digamos que la mutación del mayor sirve más para eso segundo -se encogió de hombres Withingale-. En fin, a lo que yo venía era a avisaros que ya hemos informado a nuestro comandante de que la misión fue un éxito y le hemos dicho a quienes hemos atrapado. Vendrá a la base para verlos él mismo cuanto antes.
Y con eso dicho se fue.
Basile miró a Axel como buscando en él una explicación para el excéntrico comportamiento de Bryce. Axel solo negó con la cabeza quitándole importancia y se marchó de allí para buscar algo de tranquilidad. Él también debía de llamar a Irina para contarle sobre la misión, y lo que era más importante, contactar con Byron. Parece que por fin iban a poder poner el plan en marcha.
•••
Toda la zona estaba patas arriba. Sonny apenas podía distinguir lo que fue aquel claro del bosque antes de que llegaran los soldados. Había arboles arrancados, socavones en casi todos los lado y algo de fuego aún que se apagaba por si solo poco a poco. Los vehículos que pusieron como muralla también estaban en su mayoría movidos de sitio y algunos quemados por el fuego que hubo rato antes.
Las perdidas materiales eran cuantiosas, pero al menos sus compañeros parecían estar todos bien. Al llegas al lado de unas caravanas encontró a Xing y Hao hablando asó que decidió acercarse a ellos para ver si necesitaban ayuda.
-Menudo desastre -suspiró Xing mirando todos los desperfectos.
-¡Ey chicos! -llamó la atención Sonny- ¿Estáis bien?
-Sí, no te preocupes -asintió Xing mostrándole una sonrisa.
-Blue Moon no fue una amenaza para nosotros -dijo con orgullo Hao llevándose una mano al pecho.
Sonny no pufo evitar reír por la acción del más bajo. Se alegraba que estuvieran bien, sobre todo Xing pues hubiera sido demasiado malo que acabara herido después de casi haber muerto la última vez.
Parecía que por esa vez el especial que usaba aquella niebla tóxica no había ido. Eran buenas noticias pues no encontrarían a nadie envenenado de nuevo. pero a la vez que no llevaran a uno de los más fuertes y aun así causaran tantos estragos le dio mala espina.
-¡Chicos! -grito alguien acercándose a ellos.
Vieron como Abigail corría hacia ellos y parecía algo alterada. Sonny tragó saliva esperando que no trajera malas noticias.
-Me encontré con Billy hace poco, iba con Zhao y Travis, los dos están bien -eso alivió a los tres chicos-. Zhao me dijo que revisara si quedaba alguien por la zona y os dijera que os reunáis en donde estaba el camión blindado. Ya sabéis donde estaban protegidos los compañeros que no podían pelear.
-Bien, pues vayamos -sentenció Xing.
Los cuatro caminamos entre todos esos vehículos hasta llegar a ese aparente centro donde ya parecían estar todos, o casi todos, pues en seguida noté que faltaban algunos que aún estarían por llegar. Lo que notamos en seguida es que todos estaban al rededor de Sora, Adriano y algunos de los chicos que permanecieron dentro del camión. Noté también que la puerta de dicho vehículo estaba completamente arrancada.
Ahí pensé en lo peor.
Cuando ya estuvimos al lado de todos los demás pudimos ver que Shawn estaba sentado en el suelo con la cabeza agachada. Como si no fuera capaz de mirarnos a la ojos.
-Shawn, creo que ya estamos todos -dijo Travis dando pie a que el peliplata hablara.
"¿Todos? ¿Cómo que todos?"
-Los especiales fueron más fuertes de lo que esperábamos. Tratamos de luchar hasta el final pero no fuimos lo suficientemente fuerte.
-Lo siento, fue mi culpa -intervino Xavier-. Si no hubiera creado esa explosión tal vez...
-No -lo cortó Shawn-. Fue una buena decisión. Bloqueó el oído y la vista del enemigo y seguro que los confundió también. Fue por ellos que ahora no domos aún menos.
-¿De qué estáis hablando? -habló esta vez Bunny- No estoy entendiendo nada, y además -miró par todos lado-, ¿dónde está Sandra?
Al escuchar el nombre Shawn apretó sus manos hasta que sus nudillos se volvieron blancos.
-Shawn -lo llamó esta vez Nathan-. ¿Qué ha pasado?
-Sandra Fischer, Acker Reese, Tammy Di Clay, Dragan Serifovic, Silvia Woods, Aurelia Dingle y mi hermano Aiden Frost han sido atrapados, los especiales se los han llevado con ellos.
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Después de tanta tranquilidad llega el dolor y el miedo :^) espero que lo sufráis, ok no XD
Toca quedar en tensión por saber qué pasará ahora que han atrapado a algunos miembros del circo ¿lo dejarán así? ¿Harán algo al respecto? ¡Lo veremos próximamente porque no me apetece contestar esas preguntas ahora!
~Nova/Dreamer ♥
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