Me volteé.

—Es suficiente, debo hablar con ella.-Jimin volvió a hablar sin esperar un segundo más antes de adentrarse.

Refunfuñé comenzando a caminar hacia el baño, Kai hizo lo mismo en dirección a la puerta principal luego pronunciar un "Nos vemos luego."

—Hey.-Park me tomó de la muñeca antes de siquiera permitirme esconderme en el baño.- ¿A dónde crees que vas?

—¿Hoy es el día de molestar a ___, o qué?

Rodó los ojos arrastrándome en dirección al ventanal; ya estaba oscureciendo y no podía permitirme el lujo de pagar por iluminación que no sea la de la luz del día.

—Estuve pensando ___.-Mordió el interior de su mejilla observándome.- Sobre todo un poco; el comportamiento de Jeon, tu futuro hijo, este lugar en el que vives, tu pésima alimentación, tus extensas horas de trabajo a pesar de estar embarazada...

Trabajo.

Oh, demonios.

—Debo irme, Jimin.-Resoplé agarrando un abrigo del colchón a un metro de distancia. Me lo puse rápidamente.

—¿Qué? ¿A estas horas?- Frunció su entrecejo observándome mientras me colocaba un gorro de lana.- No voy a dejar que vayas, espero que lo sepas.-Caminó tranquilamente a dónde yo estaba.

—Debo trabajar, no es una opción, sino una obligación.-Reproché enderezándome.- Ni siquiera sé si voy a llegar a final de mes...-Me negué a mirarlo a los ojos, avergonzada.- Debo trabajar, tendré un hijo, no tiene padre... debo hacer algo.-Sorbí mi nariz reuniendo fuerzas.- Casi no tengo dinero, la mayoría es para el alquiler de esta pocilga...-Me encogí de hombros.- Y si no quiero matar a mi bebé de hambre, hay sacrificios que se deben hacer.

Me digné a mirarlo a los ojos, los tenía aguados al igual que los míos.

—No tienes que ir...-Siguió llevándome la contra haciéndose el duro, ocultando sus sentimientos.

—Pareces no entender lo que estoy intentando decirte.- Suspiré mirándolo a los ojos.

Negó suavemente.- Ya te dije que vivieras conmigo, ___.-Refunfuñó mirando a un punto detrás de mí.- ¿Por qué no? Podemos vivir los dos juntos, yo me mudo fuera de BTS...

—No.-Espeté sin ser capaz de escuchar aquellas barbaridades.- No te apartarás de tus amigos por un bebé que ni siquiera es tuyo.- Lo cogí de la muñeca fuertemente intentando hacerle entrar en razón.- No arruinarás tu vida por mí.

—¿Quién dice que dejaría BTS?- Miró a mis ojos con una pequeña sonrisa.- Simplemente me mudaría... de todas formas no quiero ver el patético rostro de Jungkook, sino el tuyo todas las mañanas.

Sonreí incapaz de contenerme, que chico más dulce.

—Eres tan empalagoso, Park.-Carcajeé por primera vez en mucho tiempo.- ¿Me llevas al Café? Sino iré yo caminando...-Cambié drásticamente de tema intentando alivianar la tensión.

Sonrió blancamente, arqueando una ceja. —No escuchaste nada de lo que dije, ¿Cierto?- Negó sin dejar de sonreír.

Le sonreí, su sonrisa tenía eso, era muy contagiosa.

—¿Me llevarás o...

De un momento a otro me atrajo a su cuerpo, estampando su labios con los míos transmitiéndome el calor que necesitaba con ese infernal frío.

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