Los papás deben vivir juntos

Los papás deben vivir juntos

Nakajima Atsushi, un joven chico de género omega, quien a sus jóvenes 18 había caído en lo que llamaban "amor por celo"; el desenfreno, adrenalina y muy loco, y prohibido amor con un mafioso de alto rango llamado Akutagawa Ryunosuke, lo llevó a tener a sus amados hijos; Atsuke y Ryunushi. Aún así... con los niños teniendo 1 año de haber nacido, ambos jóvenes decidieron que no se soportaban más y fue así como hicieron un acuerdo ante su separación.
Y cinco años después...

Los pasos resonaban en el piso de madera, los niños habían llegado a la cocina — ¿puedo decir una mala palabra?

— No

— ¿puedo decir una mala palabra?

Atsushi suspiró — bien

El niño de cabellos negros y ojos morados grito — ¡HIJO DE PERRA! — grito a aquel Niño de cabello blanco y ojos grises

— Oigan — se quejó Atsushi mirando a ambos

— papi, Atsuke solo me habla con groserías

— papi, fue Ryunushi quien tomó mis crayolas

— ¿y la mochila de ambos están listas?

Ambos niños se miraron y salieron corriendo a arreglar sus mochilas, era viernes por la mañana y su último día con ellos.

Después del desayuno, ambos niños iban uniformados, pantalón negro y camisa blanca. Bufanda y suéteres. El invierno estaba por llegar.

Atsushi los llevaba a la primaria, eran sus primeras vacaciones después del primer año. Allí besó a ambos en sus mejillas y los dejó entrar a su espalda.

Se fue sin decir más, los niños sabían las reglas de aquel hogar.


Más tarde, más allá del medio día, el mafioso Akutagawa había ido por sus pequeños demonios, los niños lo vieron llegar y corrieron a él, Atsuke llegó primero subiendo a sus hombros de inmediato — ¡Papá!

— ¡papa! — grito Ryunushi abrazando su pierna

— Vamos a comer niños

— ¡SIII!

Akutagawa había llevado a los infantes a un restaurante familiar, los niños se habían sentado correctamente, dieron gracias y comenzaron por el arroz, claramente. El mafioso les miró sonriente — ¿Que pasa papá? 

— Nada, solo pensaba lo mucho que se parecen a Atsushi

— Papá, deberías ir a casa

— Si, ya nos dijeron nuestros compañeros que sus papás viven juntos, y que es raro que ustedes no si tanto se quieren

— Niños, ya les he dicho que tengo mucho trabajo

— Pero podrían juntarse el fin de semana que estamos juntos — se quejó Atsuke

— Hablamos de eso luego, coman.

Ambos niños hicieron muecas y comenzaron a comer, Akutagawa solo suspiró

Más tarde, los menores y el mafioso fueron a casa de este último. Los niños entraban jugando y brindando, Akutagawa siempre era feliz de tenerlos — niños — les llamó aquella mujer

— ¡TIA GIN! — gritaron abrazándola y ella a ellos

— los extrañé tanto esta semana

— nosotros a ti — decían sin soltarla

Ryunushi y Atsuke jugaron con Gin en resto de la tarde, al caer la noche, Ryunosuke los mando a hacer su tarea mientras cocinaba con Gin — ¿lo viste?

— No, tiene dos años sin aparecerse

— ¿porque no lo buscas?

— no, — suspiro — yo cause todo esto...

— Yo se que Atsushi te aguanto muchos maltratos pero fuiste a terapia, podrías demostrarle tu cambio hermano

— Intentaré reunirme con el. Les dire a los niños que me lo pasen

— Ok

Así fue como continuaron con la cena, y un rato después, los niños terminaron su tarea y fueron al comedor — papá, tia Gin; terminamos

— Que bueno, iré a lavarme, ¿porque no le llaman a su papi? — cuestionó Gin para dar entrada

— si, hablemos papi — dijeron los niños quienes corrieron por el celular, tenían uno para los dos.

Akutagawa fue al cuarto con ellos — Niños, ¿creen que pueda hablar con su papi primero hoy?

— claro papá, pero ustedes suelen hablar cuando terminamos nosotros

— si, será por hoy

— ¡si!

Los niños hacían videollamada, y usualmente no, Akutagawa no hablaba con Atsushi. Solo se enviaban mensajes.

Así que la videollamada entró y el albino respondió para sorprenderse de ver al mafioso en medio de los niños. Aún así, sonrió — niños, hoy hablaron temprano

— papá quería hablar contigo

— hace mucho que no estamos los cuatro juntos

— si papi, es lindo los cuatro

— Súper lindo — les sonrió Atsushi

Y fue cuando escucharon de fondo — ¡Atsushi! ¿Hablas con los niños?

— ah — dudo y miró a los niños, — niños, hablemos mas tarde

— ¿estas con tío Haru? — preguntó Atsuke — ¡TÍO HARU! — grito

Atsushi quería cortar la llamada pero no tenía excusa, un chico de cabellos oscuros apareció— hey, hola niños — les sonrió — es un placer, Akutagawa

Atsushi estaba nervioso y le miró — Haru, Akutagawa, Akutagawa... El es Haru

— eso veo — respondió Akutagawa — niños, creo que escuche a Gin pedir ayuda, ¿puede ir a revisar?

— si, — ambos niños se levantaron

— si, yo.. iré a hacer la cena — dijo Haru retirándose

Y allí estaban, tenia 2 años sin verlo, solo lograba escuchar su voz cuando hablaba con los niños. — Jinko

— Mira, no planeaba que supieras de Haru, tú nunca entras a las llamadas y

— Me alegra que estes feliz — dijo el mafioso sorprendiendo al albino

Este se sonrojó — oh... gra-gracias — su tono de voz se volvió calmado— ¿pasó algo importante para que llamaras?

— Quería anunciarte... Me dieron de alta en el centro médico por mi terapia

— felicidades

— También... No es excusa, solo decirte que los niños hoy me presionaron por que nos veamos, y que sus amigos les dijeron que sus padres viven juntos

— ¿en serio? — chasqueó la lengua — llevaban toda la semana pregúntame

— Pudiste decirme, me tomaron desprevenido

— Lo se, lo se, lo siento

— Tu llevas más tiempo pensando en ello ¿Que hacemos?

Atsushi suspiró — pues... quizá deberíamos vernos — mencionó algo temeroso — ¿el parque?

— ¿Quieres ir al parque?

Los niños entraron y gritaron — ¿iremos al parque con papi y papá?

Los adultos se miraron — eso parece

— ¡Si! — gritaron con fuerza ambos

— te mandaré mensaje

— no, no, ahora — decía Atsuke

— es que... Tío Haru y yo vamos a cenar niños

— nosotros también, cenemos juntos — dijo Ryunushi

— Si, trae a tío Haru

— aam niños... eso no sería adecuado, su papá hizo comida para ustedes y tía Gin

— Hay suficiente — dijo Ryunosuke — ¿Que dices? ¿Los esperamos?

— ¡Si! ¡Si! — gritaban los niños

Atsushi trago saliva, se veía moverse de donde estaba — Haru — le llamo y pudieron escuchar la voz del susodicho

— ¿Que sucede? ¿Sigues al teléfono?

— si, aam... Quieren que vayamos a cenar y al parque

— ¿no es muy tarde para que los niños salgan?

— oh créeme, no hay que temer

— Si soy invitado, iré gustoso, guardaré aquí

— Oki — Atsushi subió de nuevo el celular — dijo que si

— ¡así! — gritaron los niños

— los esperamos — dijo Akutagawa

— si, llegamos como en...

— 20 minutos — dijo Haru

— 30 entonces — mencionó divertido Atsushi — nos vemos

— nos vemos

Atsushi colgó, Akutagawa sentía su corazón ir al mil por hora, sus hijos gritaban alegres.

Después de dos años, podría volver a verlo...


Mientras tanto. En el departamento de Atsushi...

— Aaay por Dios

— Eso me sorprendió a mi también — dijo Haru — dijiste que estabas separado

— Si, Akutagawa es... o sea, es su papá pero es que esto fue raro

— ¿cuanto tiempo llevas sin verlo?

— dos años

— ¿Tanto?

— Pues, nos separamos cuando los niños tenían 1 año, luego todo eso de ten, ten tu, tu turno, aquí, allá, medicamentos, pañales, etcétera, etcétera. Cuando cumplieron cuatro años se volvieron más fuertes y no necesitaba ayuda de él, así que comenzamos a vernos menos. El entró en una terapia y ya. Solo no quiero verlo

— Entonces ¿porque vamos?

— Tienen seis, quieren a sus padres juntos... — suspiró — pronto veré cómo decirles. Ellos entienden bien las cosas

— Sabes que lo que sea, estoy a tu lado

— Gracias... Haru, no se que sería de mi si no te hubiera conocido

— No digas eso, mejor, ponte tu mejor ropa, vamos a ver a tu ex

Atsushi comenzó a reír — bien, bien.



30 minutos después, el timbre sonó el casa de Akutagawa, el azabache se puso nerviosa y vio a su hermana. Esta le sonrió y tomó su mano.

Los niños corrieron a abrir, y si, era su joven padre — papi — dijeron ambos abrazándolo y luego a Haru — ¡tío Haru!

— Hola niños. — Haru hizo una reverencia — gracias por invitarme

Gin se acercó — Atsushi, cuánto tiempo — dijo abrazando al albino

— si, bastante. Hola Gin

Atsushi y Akutagawa se vieron a los ojos, el menor se puso nervioso — Hola, Akutagawa

— Estoy aquí — dijo Gin

Atsushi trago saliva — Ryunosuke

Akutagawa apenas y reaccionó y señaló la mesa — pasen, cenemos

A la velada le quedaba mucho que decir y contar


...

Bueno esta historia incluye muchas cosas, quise sacar la esencia de Rashomon, el libro por supuesto

Aunque es un omegaverse no lo menciono mucho, son 5 capítulos que a mi me hizo ir en montaña rusa
Espero lo disfruten, por que yo ame escribirlo

¡Gracias por leer!

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top