Capítulo 8: Taka.
Sasuke seguía apuntando aquella espada frente a mí mientras me miraba con su Sharingan activado.
—¿Será una admiradora? —preguntó aquel chico que tenía el mismo tipo de dientes que Kisame. Supongo que él será Suigetsu. —Tienes admiradoras por todos lados, Sasuke.
—Su chakra es bastante fuerte. —dijo la chica pelirroja.
—Al parecer el destino nos quiere juntos, Sasuke. —digo con burla. —Es la tercera vez que nos encontramos.
—Hmp.
Él alejó su espada y desactivó su Sharingan.
—¿Entonces que haremos, Sasuke? —preguntó el chico de cabellos anaranjados.
—Vendrá con nosotros. —dijo a lo que me sorprendí. —Entre más mejor. Debemos de encontrar a Uchiha Itachi.
—Tienes un bello rostro. —dijo Suigetsu con una gran sonrisa para luego verme de bajo hacia arriba. —Bueno tu cuerpo...
—Di una palabra más y te corto la lengua. —digo con una mirada perturbadora mientras presionaba sus labios con mis manos. —Bien. ¿Dónde iremos? —pregunté soltando a Suigetsu.
—Nos separaremos para buscar información. —nos informó. —El lugar de encuentro será aquí mismo.
—Espero logremos encontrarlo. —dijo Suigetsu.
Los chicos se fueron dejándonos solos a Sasuke, a mí y a la chica pelirroja.
—¡Sasuke! —exclamó su nombre con amor para luego aferrarse a su brazo. —Yo iré contigo.
—Tu también vete, Karin. —le dijo seriamente.
La chica bufó para luego irse.
—La amabilidad si que no es lo tuyo. —digo viéndolo fijamente. —¿Dónde debería ir yo?
—Vendrás conmigo. —decía comenzando a caminar. —Lo más seguro es que vayas por ahí a comer tus dulces.
—Tch. Al parecer me has pillado.
—Fracasada.
—No me digas fracasada. —digo cruzándome de brazos. —Intento de vengador.
—¿Cómo me has dicho? —preguntó molesto. —Repítelo.
—Intento de vengador. —repetí sin alguna expresión para luego lanzar unos shuriken hacia atrás y escuché un chillido. —No creí que nos estuvieran siguiendo.
La persona que se encontraba tras nosotros era nada más que Tobi.
—Ese atuendo...eres...—decía Sasuke.
—Así que, tu eres Sasuke... ¡Realmente eres parecido a Itachi-san! —dijo aplaudiendo para luego verme. —Bueno ella no sé a quién se parece.
Vi unas sombras desde arriba, entonces vi a Deidara en su ave y nos lanzó arcilla explosiva.
—¡Katsu!
La arcilla explotó y produjo que mucho polvo comenzara a salir, pero ninguno de los dos sufrió algún daño, ya que Sasuke se protegió y me protegió con una gran serpiente.
—Ese sujeto parece ser demasiado fuerte. —dijo Tobi.
—Imaginar que Orochimaru fue asesinado por un mocoso como él. —decía resentido Deidara para luego verme. Él me veía fijamente y creí que me reconocería enseguida. —¿Qué tanto me ves, mocosa?
Deidara es un idiota.
—Podría divertirme con ellos, pero te los dejaré a ti. Sasuke. —digo comenzando a alejarme. —Te esperaré sentada por allá.
Iba a irme, pero Sasuke me detuvo tomándome del brazo.
—¿En dónde está Uchiha Itachi? —preguntó Sasuke. —Dímelo, y los dejaré ir.
—Sharingan, ¿eh? —dijo Deidara. —Realmente es el hermano menor de Itachi. Tú solo pudiste matar a Orochimaru gracias a tu sangre Uchiha. ¡No eres más que un tonto bendecido por buenos genes!
Sasuke me soltó y con rapidez corrió hasta donde mis antiguos compañeros; Deidara logró esquivarlo, pero atravesó a Tobi y este cayó al suelo.
—Uno menos. —decía Sasuke mirando a Deidara fijamente. —Así que te lo volveré a preguntar...
Inesperadamente Tobi se levantó del suelo dejando a Sasuke sorprendido.
—¡¿Qué estás haciendo, Tobi?! —preguntó alterado Deidara. —¡No bajes la guardia! ¡Ahora ve y ocúpate de la mocosa!
—¡No puedo golpear a una mujer, Deidara-senpai!
—¡Solo ve o serás tú el que termine muerto!
—¡Sí! —exclamó asustado Tobi comenzando a dirigirse a donde me encontraba. —Lo siento. Tobi no quiere lastimarla, pero tampoco quiere morir.
Tobi sacó una rama y comenzó a golpearme en la cabeza.
—¡¿Qué crees que haces, Tobi?! —preguntó molesto Deidara. —¡Te dije que te ocuparas de ella!
—¡Eso hago, senpai! —le gritó Tobi. —Solo que ella es resistente.
—Sabes qué, olvídalo. —decía Deidara comenzando a sacar algunas figuras de arcilla. —¡Aléjate, Tobi!
Las figuras de arcilla de Deidara fueron obstruidas por un ataque de Sasuke.
—¡Detrás suyo, Senpai!
Sasuke había aparecido detrás de Deidara e iba atacarlo, pero entonces Deidara lanzó una figura de arcilla y la hizo explotar.
—¡Senpai! —chilló Tobi. —Era muy estricto, pero era un buen compañero... ¡Nunca te olvidaré, Deidara-senpai!
—¿Quieres callarte? —dijo molesto Deidara apareciendo frente a él.
—Oh. Está vivo.
Sasuke apareció frente a mí sin quitarle la vista a los demás.
—Deberías de alejarte. —me dijo. —Yo me ocuparé de ellos.
—¿Estás seguro?
—Sí.
—Bien.
Me alejé subiéndome así a una rama del árbol donde podría ver detalladamente la pelea.
❇❇❇
Yo me había alejado bastante debido a que Deidara había utilizado su C4 Karura y produjo una fuerte explosión en el lugar; miraba el lugar esperando a ver si Sasuke logró salvarse.
No me arruines los planes, Deidara.
Inesperadamente alguien cayó a mi lado y se trataba de Deidara, quien se encontraba bastante cansado y malherido.
—Gané. ¡Soy el ganador! —exclamó con felicidad. —¡Mi arte triunfó!
—Sabes, siempre me gustó más el arte de Sasori-senpai. —digo llamando su atención a lo que le dediqué una sonrisa. —Usted nunca aprende, Senpai.
—¿___? —dijo sorprendido. —¿Qué hacías con Sasuke?
—Lo siento mucho, Deidara-senpai. —digo viéndolo fijamente. —Pero estás interfiriendo.
—Tus ojos...—decía sorprendido. —Todo este tiempo tú...
—Me divertí mucho con ustedes, pero debo cumplir con mi deber. —digo formando una sonrisa para luego sacar un Kunai. —Adiós, Senpai.
Corté el cuello de Deidara y mucha sangre comenzó a esparcirse en el suelo, su cuerpo cayó y lo miré fijamente sin alguna expresión.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top