Linaje 10

—¿Ya tardó mucho no?

—Quizás y hasta se fue a dormir ¿no crees?

Otabek estaba inquieto de que Ivan estuviese sólo con Yuri durmiendo, pero también aquel sujeto no se veía nada bien, empezó a tomar bastante y hubo un momento en donde ya no hablaba bien, lo cuál era raro, las veces que hubieron tomado antes, Alek con la misma cantidad que ahora apenas y estaría mareado.

Su entrecejo se frunció notablemente y sin esperarlo, Dmitry le dio una palmada en el hombro.

—Todo esta bien, sería muy idiota de su parte hacerle algo si estamos aquí, Yuri gritaría y alguien se daría cuenta ¿Bueno?

El otro kazajo asintió pero su preocupación no se iba del todo.

Las nauseas lo despertaron y corrió al baño a vomitar lo poco que comió cuando salió con Otabek.
No pensó que se la pasaría tan mal cuando estuviese esperando un cachorro, ya no podía comer lo que le gustaba porque duraba muy poco en su estómago.

Cuándo salió del baño notó que todo estaba a oscuras, en la habitación no había nadie.
Prendió la luz y vio en su lado de la cama una notita en el buro.
Otabek había bajado a cenar con los otros dos. Exhalo pesado y se sentó en la cama mientras empezó a acariciar su pequeño vientre que ahora se notaba mas abultado.
Entre sus pocas cosas buscó su celular y se paró frente al espejo del baño. Era una ridiculez y se llamaba a sí mismo "idiota" por tomarse una foto donde su vientre podía verse. Sonrió leve, haría eso a partir de esa noche para ver el cambio que lo llevaría a conocer a su pequeño.

—Hey... Pronto estaremos a salvo, tu y yo, te haré feliz y... —no, ya no quería seguir porque se sintió avergonzado de hablarle a alguien que seguro todavía no escuchaba. Se tallo el rostro y exhalo pesado y tras un par de largos segundos, prosiguió— me esforzare para ser una buena madre para ti...

Se cubrió de nuevo y salió del baño para ir a meterse a la cama, quería recuperar esas horas de sueño perdido por tener que escapar y ajustar de nuevo su horario habitual para dormir, pero la cama pareció tan lejana, y cada vez mas lejos, que entonces no pudo descifrar la razón a todo eso.

Otabek seguía nervioso y ni siquiera cenó bien, su pierna estaba tamborileando y sentía que debía de levantarse, estaba muy ansioso y todo eso lo vio Dmitry quién por un buen rato trató de hacerse el desentendido sobre lo que estaba pasando pero no pudo más, terminó de cenar, se limpio la comisura de sus labios y con tranquilidad levantó la mirada buscando la ajena. 

  — Anda, ve. 

No tuvo que decirlo dos veces, el moreno salió casi corriendo y dejando la silla tambalearse. Dmitry tuvo que detenerla y exhaló de nuevo, de verdad el haber encontrado a su destinado de esa manera no había sido lo mejor para Otabek, era sobreprotector y un ansioso, pero en cierta manera era gracioso, lo estaba viendo en una faceta que desconocía, le agradaba verlo tan atento, tan delicado cuando en el boxeo no podía ser así o terminaría en la lona. 

Pronto, el castaño se puso en marcha para la habitación y ver que todo estuviera bien que seguramente si lo estaba, sólo era un impulso de Otabek como alpha. 

En cuanto abrió la puerta el kazajo, se encontró con una imagen que no quería ver nunca más. Ivan sostenía a Yuri en ambos brazos y no sabía que estaba pasando, pero no pudo contenerse. Su amigo apenas tuvo oportunidad de dejar al menor en la cama antes de recibir un golpe en el rostro de parte del moreno.

— ¿Que carajos estás haciendo? ¡Déjame explicarte!  

— No quiero escucharte... — el moreno arremetió de nuevo contra su compatriota tratando de que sus golpes fueran certeros y que pudieran servir de lección para que no volviera a tocar a su omega. 

Entre ambos los golpes no pararon, incluso no pareciese que estuvieran bebiendo, la adrenalina había sustituido todo el alcohol que estuviese en su sistema para poder pelear defendiendo algo que realmente sólo se pertenecía a si mismo. Yuri se despertó luego de un momento y la impresión de ver a los alphas sangrando y golpeandose, ver la carne viva era... aterrador.
No supo que hacer de primer momento, se quedó en la cama lo más pegado a la cabecera posible, temía por su bebé así que lo único que podía hacer era gritar, pero sería inútil, eran alpha, ellos no escuchaban cuando ya estaban entrados en calor. 

— ¡Basta! ¡Deténganse! —los gritos de Yuri alertaron a Otabek desviando su atención la cual aprovechó Ivan para darle un golpe más que derribó al moreno. Se levantó rápido y trato de pegarse a la pared para tomar apoyo de esta en lo que recobraba algo de aire y dejaba pasar el ardor de sus heridas. 

— Si me hubieras escuchado... créeme que esto no hubiese ocurrido. — el moreno no respondió, sólo se levantó a medias quedándose aún en el piso. 

— ¿Que pasó aquí? — Dmitry entró  en la habitación y la sorpresa se reflejó en su rostro seguida de una ira que, no importaba quien haya empezado, los dos iban a tener un castigo sobre lo que habían hecho. —Salgan de aquí... Cuidado en irte Ivan, por que te buscaré y voy a golpearte mas fuerte de lo que Otabek lo pudo haber hecho. 

Ambos alphas salieron de la habitación, no podían ponerse en contra del kazajo mas grande, era su mentor y tutor, casi como un padre y más para Ivan, así que sin decir nada se quedaron ambos en el pasillo como niños regañados en la escuela. Otabek estaba lo más lejos que podía del que pudo llamar casi 'hermano' pero su confianza se había ido al carajo cuando lo vio con Yuri en brazos, no sabía que pensar al ver eso. 

  — Otabek... 

No hubo respuesta, ni siquiera un quejido, nada. 

— Otabek, lo que pasó no es lo que crees... te lo juro —  y bueno, quizás si daba una mala idea pues desde el principio, Ivan había llegado con Yuri con otro tipo de intenciones — Lo vi en el suelo cuando entré, te lo juro, trataba de llevarlo a la cama, iba a avisarte ¿Que querías que hiciera? ¿Que te llamara y lo dejara tirado mientras llegaba? 

— Hubiese sido lo mejor. 

— Eres un imbécil... sabes que no le haría nada, está preñado y sobre todo... se trata de ti, es tu destinado y tu eres como mi hermano. 

El moreno no dijo nada, necesitaría tiempo para procesar aquello y querer creer en ello. 

— Vengan los dos. — Dmitry salió de la habitación cerrando tras de sí la puerta, se acercó lo suficiente a ambos y a cada uno le dio un golpe en la cabeza — ¿Que mierdas estaban pensando? ¿Saben que por un alboroto así nos pueden sacar del hotel? ¿Pensaron en Yuri? Carajo... ¿Quien coños se creen? No son salvajes, no me desgasté en ustedes para que pelearan entre sí... — exhaló pesado, ninguno decía nada, parece que aceptaban la culpa después de todo — Yuri me contó lo que pasó... Ivan, dame el dinero que le quitaste, iré abajo y pediré otra habitación, me quedaré con él y ustedes dormirán juntos, van a limpiar todo el alboroto que hicieron ahí adentro. 

Claro que aquello fue sorpresivo para ambos, pero sería lo mejor, Yuri estaría mas tranquilo y quizás así pudieran arreglar sus mal entendidos los dos kazajos. 

Dmitry y Yuri ya estaban en su habitación y el primero le llevó un postre, algo que pudiera compensar su falta de alimento y azúcar, a primera hora de la mañana el mismo lo llevaría al medico de nuevo para revisar que no hubiese nada malo con él o el bebé, un desmayo así podría ser bastante malo. 

  — De verdad lamento que hayas visto eso, mas de Otabek, él siempre es tranquilo y amable pero...  por tu gestación es probable que no te hayas dado cuenta quizás sí, pero lo has estado ignorando, tu y él son destinados... no le tengas miedo ¿sí? Sufrirá mucho tu perdida así como tu la suya, él se hará carga de tu bebé, ya lo verás, lo conozco. 

— No quiero... a otro alpha conmigo... 

— Bueno... después de lo que viviste es algo normal y más ahora con todas esas hormonas que te cargas. — Yuri evitó verlo y se escondió debajo de las sabanas. — Me alegra que te hayas comido el pay...   — se acercó  y retiró el plato —Mi novia me decía que, si no comía algo de lo que tenía muchas ganas, nuestra bebé iba a ser caprichosa, así que espero que cuando nazca sea linda igual a ella, sin importar que. —hablar de su futura hija le llenaba de una energía especial, estaba ansioso por saber como era y que podría enseñarle en un futuro. 

Inesperadamente llamaron a su puerta, habían roto con esa aura melosa y llena de nervios que se traía el castaño. Exhaló pesado, tenía una sospecha de que sabía para que irían a su cuarto, los consideraba unos idiotas inútiles cuando necesitaban algo e iban con la cola entre las patas a pedirle ayuda  — No voy a curar tus heridas, Ivan... Arreglatelas 

Yuri escuchó un golpe fuerte y luego silencio. Se descubrió de su escondite para poder ir al baño pero, apenas salió de la cama vio a otro hombre ahí y a Dmitry tirado con sangre saliendo de su cabeza. 

  — Dmitry...   

  ₪  

Viktor tenía que hacerse cargo de cuestiones familiares y de sus hermanos quienes a pesar de la situación estaban preocupados por Yuri y su bienestar en lo que Yakov regresaba, ya había sido una semana desde que regresó solo a San Petersburgo. Mila era la que mas estaba sufriendo, también era una omega y era frustrante que su hermano, un pequeño estuviera huyendo en un estado de gestación y que de ser atrapado... Matarían a su bebé.
La pelirroja le suplicó a su hermano por que lo encontrara e hiciera lo posible por que su pequeño Yuri estuviese a salvo, pero el platinado sólo evadía las miradas de Mila, sus gritos y resistía los golpes que le soltaba la omega.
Era una situación muy lamentable.

El miércoles por la tarde Viktor atendió la llamada de su padre y si no fue porque estaba sentado en el estudio del alpha, habría caído de golpe al piso, su celular fue el único afectado.

"Tenemos a Yuri, ven a Moscú"

Les dije que soy una patata en vacaciones y mas porque ahora tengo trabajo.
¡Yey!
Bueno, en parte es bueno, la parte mala es que me deja menos tiempo para actualizar pero ya voy avanzando con todo ;;

¿Quieren clorito?
💔
Los quiero, aunque no lo crean, gravias por leer y votar bellas personitas.

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