Ambos compartiamos el mismo pensamiento ,los dos nos sentiamos confundidos ,el saber que los dos teniamos presente ese pensamiento ,me hizo sentir fatal porque Sean no tenía conocimiento de esto .De alguna forma me sentia atada a él ,le debia mucho .Eso es lo malo de recibir favores después te quedas con deudas que saldrar .El agradecimiento que le tenia a Sean fue lo que me mantuvo todo el largo viaje a su lado en la cabina del tren .
Aún asi no le dare vueltas al asunto ,seguire actuando como si nada hubiera pasado .

—El tren hará una parada , pasaremos la noche en un hotel —dijo Sean mirando un libro .

—¿ Falta mucho para llegar ? —pregunte angustiada .

Sinceramente el viaje me estaba matando ,tantas horas sentada ,sentia calambres por todas partes .

—Tranquila la espera valdra la pena — dijo sonriente al ver mi desesperó.

La campanita de la cabina nos alerto que debiamos bajar ,era la estación donde pasariamos la noche . El hotel era pequeño, diseñado para los viajeros a largas distancias ,en la sala de recepción pude observar diversas pinturas ,estuve mirandolas entretenidas mientras nos registrabamos .Este hotel estaba solo reservado para la realeza , todo era cómodo y lujoso , hermosos bucaros con flores decoraban las esquinas .Una escalera nos llevo a la planta alta .Nos dieron las llaves para la habitaciones correspondientes para cada uno .

Mi habitación era calida , tenía una gran ventana ,hasta una lámpara en forma de cisne en cada lado de la cama .

Estaba agotada por eso sin más me tumbé en la cama ,solo el ruido de las aves que se posaban en la angosta ventana me despertó  ,olvide cerrarlas .Dos gorriones posados en marco me dieron los buenos días

—Estos buenos días no son agradables ,me han despertado con su cantar ,haré caldo con ustedes —maldije .

Lo mejor de este viaje era que no hacia falta utilizar atuendos formales y eso me venía de maravilla ya que no los soportaba .A las cuatro otro tren nos llevaria a nuestro destino ,bueno pudiera explorar los alrededores ,creo que será interesante .

Me vestí con unas sandalias de cuero ,unos pantalones anchos blancos ,una blusa larga de color azul ,y encima un sencillo chaleco carmesi .

Bajaba la escaleras cuando vi a Sean y Nathan conversando .

Menudo dúo me vine a encontrar nada más despertar ,me sentia incomoda con Nathan por lo de ayer y con Sean porque me hacia sentir culpable , evitarlos sera lo mejor ,iba a volver a mi habitación cuando sus ojos azules cautelosos me miraron detenidamente . Sería raro que entrara a el cuarto ,creera que lo estoy evitando ,aunque es la verdad .

Por esa razón continue bajando las escaleras,  los salude incluso comparti mi idea de visitar los alrededores después del desayuno .
Sean se brindo con gusto a acompañarme pero luego recordo que tenia asuntos más importantes que atender ,como siempre , y Nathan solo guardo silencio ,de todas formas ir sola era lo que deseaba .

El desayuno fue agradable ,al terminarlo ,pedi un mapa en la recepción,que ofrecían de cortesía a los turistas .
En la entrada vi a Merida con un llamativo sombrero de plumas y unos guantes de encaje con un conjunto color naranja .Creo que el concepto de  informal ,no lo entendia .

—¿ Por qué no viene ?— murmuraba enojada .

La ignore mientras abria el mapa intentando ubicarme .

— ¿ Has visto a el segundo principe Nathan ?—le pregunto a un mozo .

— El segundo principe salió hace unos minutos — dijo

—¡ Qué me ha dejado plantada!— ladraba —¿ Por qué me dijo que iriamos juntos ?—

Me miro .

Sus ojos me encontraron como la culpable .

—¿ No me digas , tú vas a pueblo ?— diciendo esto se reia .

Era como si en su cabeza entendiera todo lo que estuviera pasando .Yo no entendia nada ,¿que tengo yo que ver que el segundo principe le haya dejado plantada ?

—¡ Vamos juntas ¡ ,yo tambien voy al pueblo — tomo mi mapa ,lo arrojo a el cesto de la basura .

—¡ Ey ! ,no lo botes no te dicho que quiera ir contigo —

Se volteo a verme ,su expresión de prepotencia se apagó  ,su risa era fingida ,estaba triste y sus ojos  se tornaron cristalinos .

Al verla tan triste no quería ser descortez y insistir que no quería su compañía ,de todas formas puede ser una buena guia .

Las calles estaban repletas de banderitas que empezaban de una casa a la otra ,los balcones tenían macetas con flores .Los comercios mostraban su variedad de alimentos ,era todo tan vivo y colorido .

Ojala los pueblos del sur algún día se vuelvan tan prosperos como este .
Los pueblos grises del sur ,que solo cuentan con una sola tienda de alimentos que siempre esta abarrotada de personas desesperadas por alcanzar solo unos cuantos gramos de arroz que si no llegas a tiempo aunque obtengas el dinero tendras que domir con el estómago vacio ya que los almacenes solo los abastences con cierta carga de cereales luego que se acaben ,que siempre suele ocurrir ,deben esperar al otro envio .Una logica cruel para administar y ahorrar las porciones que consume la población .Los frutos y dulces son lujos que solo pueden darselo los ricos .Las casas estan demacradas ,no por la falta de higiene sino por escases de medios para sustentar y repararlas .No seria mentira decir que los surdeños viven bajo la cuenta de un reloj ,las condiciones parecen empeorar cada vez más y las personas no tienen ánimo de nada .Me enoja saber que el rey del norte tiene el poder de arreglarlo ,ni siquiera a vuelto a sacar el tema del acuerdo de la paz .

—Catalyn —me sacó de mis pensamientos .

Merida aparentaba estar alegre , no se si sera fingido o no .
El camino se pegó a mi brazo como acostumbraba hacerlo con Nathan .

—¡ Vamos a entrar a esta tienda ! —dijo señalando a la otra esquina.

—Si...esta bien —dije asombrada por su comportamiento amigable.

La tienda era una juguetería ,una enorme vitrina enseñaba curiosos juguetes desde artesanales hasta muñecos con un sofisticado mecanismo de movimiento .No pude ocultar mi asombro ,tales cosas nunca las había visto

—Veo que te gustaron ,entremos —

Solo basto con decir eso y yo ya estaba dentro como una de las primera .
Una cantidad inumerable de muñecos nos daban la bienvenida .

Al ser una niña húerfana nunca goze de buenos juguetes ,solo tenia los que me fabricaba Selma con madera y paja.

Un oso grande movía sus manos constantemente ,un payasito giraba su cabeza pero de todos lo que me llamo la atención fue una caja marrón con grabados de rosas a diferencia de los demás juguetes este parecía usado
.Al abrirla una diminuta bailarina con un poco de color daba vueltas ,entonces una melodía comenzó a sonar .
Eran solo cuatro notas ,las que sonaban ,solo cuatro notas que me llegan al alma y se sentía familiares como si alguna vez en mi infancia la hubiera escuchado.