As I close my eyes with your hands that I'm holding feeling alright on the clouds we are walking.

☁️

JiMin se sintió intimidado por la cercanía de GoEun hacía YoonGi, porque ella podía acercarse tanto como quisiera a pesar de estar en la oficina, tomar el brazo de YoonGi y caminar con él por el pasillo hasta que cada uno entrara a su propia oficina. Ella podía acomodar el traje de YoonGi cuando él se lo permitía, arreglar los cabellos rebeldes que escapaban de su perfecto peinado y sonreírle despidiéndose con un fuerte abrazo.

Jamás había sentido aquello y tal vez era porque no se sentía enamorado en aquel entonces, porque no se sentía –y seguía sin sentirlo– con el derecho de pedirle a YoonGi que le expliqué por qué tanta cercanía con la chica. JiMin sabía que ella era cercana a él desde hace años y por esa misma razón no quiso armar ningún escándalo con el mayor, porque no debía, ni siquiera tenía por qué hacerlo a su parecer.

Por eso fingió no haber visto nada cuando ella se fue y al pasar a su lado lo saludo con un corto «Buenos días JiMin, ¿Cómo estás?» responder con la misma amabilidad que ella lo hacía y es que ella era tan amable con todos que no podía ni siquiera sentir alguna emoción negativa hacia ella que jamás había atentado contra él.

Entrar a la oficina de YoonGi con esa incomodidad en su pecho fue difícil, pero ante todo debía ser profesional y separar los sentimientos en su trabajo si quería seguir siendo un empleado más ahí, porque nadie quería rumones de infidelidades o enamoramientos no correspondidos con su jefe.

—Buenos días, señor Min. Traje las carpetas con los últimos ingresos del mes para que los revise, el señor Song pidió que estuvieran listos para este fin de semana.

A YoonGi le pareció extraño que JiMin tuviera tanta formalidad con él a pesar de estar solos, usualmente no era de aquella forma y menos cuando él le había pedido que dejará de llamarlo con tanta formalidad.

—¿Ocurre algo? Te noto un poco extraño.

—No es nada —negó dejando todo sobre la mesa vecina al escritorio del mayor, organizando por importancia cada carpeta para que todo estuviera listo a la hora de recogerlo.

—Uh, ¿quieres que vayamos a cenar al terminar la jornada? GoEun dijo que conoce un...

—Puedes ir solo con ella, no quiero interrumpir con mi presencia junto a ustedes —abrió sus ojos con sopresa y en su pecho sintió la incomodidad de haberse dejado llevar por sus sentimientos cuando había hecho todo por no abrir la boca solo para decir alguna estupidez desde que entró.

YoonGi por su parte suspiró sabiendo que algo así pudo pasar y sobre todo que tuvo la oportunidad de evitarlo. Había hablado con GoEun pidiéndole que sean lo que siempre habían sido: buenos amigos. Ella pareció entender cuando le confesó sentir atracción por JiMin y aunque los sentimientos de ella hacia él no desaparecerían de la noche a la mañana ella aceptó tomar distancia desde esa mañana que YoonGi aclaró las cosas en una pacífica conversación que no buscaba herir ni lastimar a nadie.

—¿Estás... estás molesto? —Titubeó indeciso de tocar la mano de JiMin que estaba sobre el escritorio sin moverse ni verlo. Suspiró con fuerza sentándose en la orilla de la mesa y cubrir su rostro con frustración respirando con toda la profundidad que podía hacerlo.

—Solo me sentí un poco intimidado con ella.

Por el espacio entre sus dedos alcanzó a ver que YoonGi se paraba frente a él y segundos después sus manos se ponían firmes sobre sus hombros haciendo que por voluntad propia removiera las manos de su rostro para ver al mayor que al verlo descubierto se acercó con cautela para dejar un beso suave en la mejilla rojiza.

—Lo siento, debí haber puesto un límite con ella desde antes —JiMin se dejó abrazar por el mayor que le hizo sentir seguro entre el calor de su cuerpo con las manos en su cintura y la nariz que se paseaba con delicadeza en su cuello.

JiMin estaba cohibido, solo atinó a devolverle el abrazo y cerrar sus ojos sobre el pecho del mayor que le daba refugio. Sonrió un poco cuando la mano ajena se coló en su camisa tocando la piel de su espalda con apenas la punta de sus dedos sintiendo el roce de sus uñas cortas y los besos castos que le daba en el cuello.

—¿Puedo verte hoy más tarde? —JiMin asintió pensando que debería avisarle entonces a TaeHyung que no llegaría a casa esa noche—, te llevaré a un lugar especial, será solo un momento para nosotros dos.

—¿Hablas de una cita? —preguntó risueño con sus pómulos elevándose para cerrar sus ojos en dos medias lunas, la sonrisa dulce de sus labios siendo provocada por el mismo hombre que ahora le besaba las mejillas y acariciaba con sus manos el cuello semi descubierto de JiMin.

—Por supuesto, podemos llamarlo así —él sonrió hechizado en cuanto vió los ojos de JiMin cerrarse y acercar su boca entreabierta a sus labios para buscar con deseo la unión de sus belfos sin la intención de subir el calor de la situación y menos siendo tan temprano.

—Le avisaré a TaeHyung que no llegaré hoy entonces —YoonGi seguía sin soltarlo por rozar sus labios en cada rincón de su rostro y sus manos tibias buscando calentarse con las zonas más abrigadas de su cuerpo.

—Pasaré por ti a tu oficina una hora antes de salir, podemos tomarnos un descanso por hoy.

Se rió bajito y aunque no lo quería separó los cuerpos de ambos para darle un rápido beso en los labios a YoonGi cuando escucharon a HoSeok llamar en la puerta diciendo que traía la agenda del mayor.

—Te veo más tarde, bonito —susurró dejando pasar al escandaloso chico que sonrió burlón en cuanto vió el enrojecimiento que ambos tenían en sus labios.

💌

Bewitched —PIXY.

Los amo bebés. 💜