Mi ceño fruncido era lo único que mostraba, siempre lo hacía.
Recuerdo que el siempre fue descuidado, aún de niños aunque el sea el mayor siempre terminaba curando sus heridas.

— ¿Porque eres tan descuidado? —. Estaba limpiando la sangre seca y desinfectando el área.

Su caricia en mi cabello me relajaba lo mire después de curar la herida.

— Sabes que no me gusta que te descuides —. Rodee su cintura con mis manos, para luego esconder mi rostro en su cuello —. Vamos a bañarnos, ¿quieres?.

■■■🐰■■■

Me parecía gracioso que se enojara, que siempre él estuviese más preocupado que yo, quien tenía la herida.

Su ceño fruncido era lindo de vez en cuando, justo en esos momentos en que sé que está así porque piensa en mi, siempre ha pensado en mi.

— No se me da ser elegante —. Dije divertido sin más que hacer o decir. Frunció más el ceño y luego acercó el tacto con mi mano —. Lindo unicornio —. Susurré. Terminó con mi herida y sonreí. No dolia en absoluto —. Perdón,  no soy muy ágil, por eso aquí el doctor eres tu y yo soy abogado. Soy responsable en mi trabajo —. Me excusé.

Sus brazos me rodearon y feliz del contacto me arrinconé en su pecho. Escondió su rostro en el hueco de mi cuello y reí suavemente.

— ¿Juntos? —. Pregunté curioso y algo sorprendido me sonrojé. Él asintió y esta vez fui yo quien busco refugio en su cuello —. Solo si me ayudas a quitarme este tonto Armani tan estorboso —. Dije con timidez. Me alejé un poco de él y quité el primer botón luego del cuello mientras lo veía —. ¿Si? —. Pregunté alzando las manos a su cuello mientras el mesón hacia una gran ayuda en el proceso, estiré la camisa blanca con inquietud y me colgué de él.

♡♡♡

Miaw miawww miaw♡