Cuando dijo lo que ha hecho sonreí, no quería ser tan obvio pero era feliz por aquello.

— No permitiré que ella ni nadie te lastime, no dejaré que nadie se burle de ti como ella lo hizo y sobre todo, me encargaré de que seas el conejito más feliz.

Me acerque más y alce su mirada, haciendo que le vea, que me mire con esos lindos ojos, me valía si él esta vez no me corresponda o sé de cuenta que esta mal lo que hacemos.
Ahora sólo quería hacerle caso a mi corazón, mi cuerpo, mis labios querían más de el.

— Quiero más..

Pasé mi lengua sobre sus labios un par de veces, tomé sus manos y las puse en mi cintura tomando su rostro.

— Te quiero a ti.

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Mi rostro se alzó sostenido por su mano y entonces supe que tenia poderes mentales o al menos con él funcionaba.

《Quiero más》

Yo también quiero más Lay.

Su lengua hizo un recorrido por mis labios rojos luego de un par de chupones, lamidas y mordidas, jadee sorprendido y me dejé ser.

Sus manos guiaron las mias a su cintura y sonreí con el corazón en la palma de mi mano.

— Creo que yo también —. Respondí y fui yo quien lo besó luego de un par de lamidas más —. ¿Tienes Suhofilia? —. Pregunté jalandolo hacia mi mientras respiraba profundamente.

Sentí el borde del sofá y lo jalé haciéndolo caer conmigo, mi cabello estaba tan despeinado mientras la gravedad lo apartó de mis ojos haciéndome ver la sonrisa victoriosa de Lay y su rostro bajo aquellos mechones castaños.

— ¿Qué quieres hacer? —. Pregunté estirando mi cuerpo con el suyo sobre sostenido por sus manos

30062018