Año 1309.

Dos jóvenes de unos 20 años corrían por el bosque de Inglaterra, uno de ellos era alto de pelo marrón y unos ojos azules que muestran el terror en su mirada y su piel blanca, el o otro es de una altura media un poco alta el pelo es tricolor (negro, rubio, y rojo) y su piel es morena. Ellos son perseguidos por dos lobos machos y una loba, llegaron a una muralla frenando los, siendo alcanzando por los lobos y acorralados contra el muro.

- No se acerquen, lárguense!- dijo el más alto poniendo al otro atrás de el.
- No lo creo, tenemos planes para los dos- dijo uno de los lobos mientras se transformaba en un hombre.
- Si le quieren hacer algo a mi primo tendrán que pasar sobre mi cadáver- amenazo poniéndose en frente tapándolo para que no interviniera.
- Para tu desgracia los necesitamos a los dos con vida- con una velocidad sobre humana un lobo separo a los primos mientras cada uno agarraba a uno separando para que estén más "indefensos".
- Yo les explico- hablo la loba sorprendiéndolos- nosotros somos los últimos tres hombres lobos y queremos que nuestra raza no se extinga, por lo que estuvimos buscando la manera de transformar a los humanos en lobos- hizo una pausa- por desgracia todos los que le hicimos esta prueba acabaron muertos o con enfermedades no muy graves pero peligrosas y sin el cuidado adecuado terminaron, la mayoría, muertos, así que queremos ver si a ustedes les pasa lo mismo o no- dijo.

Empezó a preparar las cosas para la transformación, consiste en dos formas uno era recibiendo una mordida de uno de ellos transmitiendo su sangre, virus y otras cosas o dándoles una bebida hecha por ellos mientras recitan un hechizo. Decidieron que el más alto tomaría la bebida mientras el más bajo recibiría el mordisco.

- ¿Listos?- ninguno les contestó- empecemos.

Amarraron al más bajo en un árbol para que viera como su primo era obligado a beber ese liquido hasta la ultima gota, mientras ellos recitaban un embrujamiento en un idioma que ellos no reconocieron, de un momento a otro el empezó a retorcerse del dolor transformándose en un semi hombre lobo, él al verse así pensó en vengarse de ellos, así que los atacó mientras veían en que habían fallado, al ver que no le prestaban más atención saltó encima de los dos lobos matándolos casi al instante, pero no llegó con la loba ya que lo vio por el rabillo del ojo esquivando y atacando rápidamente, haciéndole una herida mortal.

- ... Aten... hagas lo que hagas véngate de mi...- después de decir eso terminó muriendo.
- NO SETO! no te mueras... por favor... te necesito...- dijo mientras lo veía ahí tirado desangrándose, desvió la mirada a la loba viendo que ella estaba intacta- tu aliada del demonio, que quieres de mi, recuerda que ahora estas sola así que si no funciona nuca tu plan su clan termina aquí ya que no van a seguir con la descendencia.
- JAJAJAJA, en eso te equivocas humano ya que los hombre lobo tenemos la facultad de vivir para siempre- dijo mientras Aten la veía con enojo- bueno- se acercó a él- quedas tu- antes de que Aten pudiera quejarse ella le muerde.

En ese preciso momento Aten siente mucho dolor en su cuerpo y siente una transformación tan dolorosa que no entiende como sigue despierto, al terminar levantó la vista viendo que la loba estaba riendo, por deducción el ya es un lobo, gracias a la bronca rompió las sogas y atacó a la loba lastimando con gravedad.

- JAJAJA, ahora eres uno de nosotros.
- Nunca seré de su clan viviré con los humanos y nunca nadie sabrá que soy un hombre lobo, y al ser el único no corro peligro.
- Puede ser, pero como vas a vivir para siempre tarde o temprano te enamoraras y ese día ¿Qué aras?- después de decir aquello cae muerta.
- No, renunciare a mi amado, para no condenarlo también a el- mira a su primo- ya te vengue, Seto ahora voy a vivir por mi y por ti, siento lastima por tu novio pero no le puedo avisar- empieza a caminar- me iré a otros pueblos, voy a vivir en cualquier lugar hasta que me establezca.

Lo ultimo que podía pensar, con dolor, es de su amado novio. Lo iba a extrañar, pero, no iba a poder soportar el verlo envejecer e irse y no poder hacer nada. Se dio media vuelta y avanzo con paso firme por el bosque, a un futuro incierto y alejado de sus seres queridos.