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{Actualidad}

El rubio entró al lugar vestido completamente de negro, pantalón, pulóver, zapatillas y un overcoat. Su cabello rubio peinado hacia atrás, sus ojos azules resaltando y sus labios carnosos formando una sonrisa coqueta.

Iba del brazo con la morena la cual vestía un conjunto azul de mini falda ajustada a su cuerpo y una blusa corta que dejaba sus hombros y clavículas al descubierto, con unos tacones blancos que le daban un toque elegante.

Al entrar se dirigieron a la pista de baile siguiendo el ritmo lento de esta, Nick abrazó su cintura mientras Crys pasaba sus brazos alrededor del cuello del rubio, ambos mirándose a los ojos.

La morena no pudo evitar que su corazón latiera con fuerza, tantos años enamorada de su mejor amigo sin atreverse a dar el paso de confesarse.

Por otra parte Evelyn y Kate entraron juntas por la puerta trasera del local ganándose varias miradas, ambas caminaban a la par con una elegancia digna de película y sus movimientos haciéndolas lucir tan sexis como modelos en pasarela.

Evelyn vestía un jogger color beiger con zapatillas de igual color, un tope marrón oscuro que resaltaba sus pechos, varios colgantes adornando la suave piel de su cuello y el cabello rosa corto muy bien peinado.

Mientras que Kateline usaba zapatillas blancas, jeans anchos y un jersey beige. Su cabello recogido y enrollado en un moño.

Ambas entraron al salón donde estaban los jefes jugando al póker y se sentaron frente a los Alden.

—Hoy amanecí con la suerte de mi lado ¿Te arriesgas? —sonrió de lado viendo el disgusto en la cara del mayor.

—Prepárate para perder, Evelyn —amenazó entre dientes.

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Nick recibió un mensaje así que sacó su teléfono y lo revisó.

Gata:

Ahora.

Miró la hora viendo que eran las 11:52, le hizo una señal a la morena y juntos se perdieron en dirección a las escaleras que iban hacia los baños, pero al subir no giraron hacia los baños, doblaron hacia la izquierda adentrándose en el pasillo oscuro.

A lo lejos se veía al único guardia que debía estar vigilando la especie de cuarto de mantenimiento que había en ese lugar.

Un disparo sería ruidoso y alertaría a todos en el local.

Golpearlo o dejarlo inconsciente sería aburrido.

Y Nick era sinónimo de creativo.

Al estar bastante cerca, puso a la morena contra la pared y comenzó a besarla metiéndole la lengua y apretándole el trasero con ganas haciendo a la chica gemir contra su boca.

El guardia, de cabello negro, se volteó ladeando su cabeza ante tal escena. Nick subió la falda de la morena dejando su trasero expuesto, unas bragas de encaje negro adornaban su gran trasero, sus curvas tenían al pelinegro relamiendo sus labios.

Nick metió su mano dentro de la ropa interior de la chica y comenzó a acariciar su clítoris sacándole grandes gemidos, las piernas de la morena temblaban mientras el rubio la tocaba y besaba su cuello.

El rubio miró al guardia notando su erección y sonrió de lado. Le extendió la mano y haló al pelinegro hacia ellos.

Crystal quedó en el medio, frente a ella, el pelinegro rozaba su erección contra la intimidad de la morena mientras el rubio rozaba la suya contra el trasero de la chica.

El pelinegro dejó los senos de la chica expuestos mientras los tocaba con ganas incluso varias veces los chupo y lamió mientras el rubio le dejaba mordiditas en el cuello.

La morena gimió sin control al sentir las dos erecciones rozándose contra ella sin parar, las cuatro manos grandes tocando todo su cuerpo, los chupetones en sus senos y las mordiditas en su cuello.

Sin poder contenerse más se corrió empapando sus bragas y soltando un enorme gemido.

Nick le dio la vuelta haciendo que ahora ella volviera contra la pared. La puso de rodillas y se desabrochó el pantalón sacando su erección que ya tenía algunas gotas de pre-semen en su glande.

—Abre la boca —la morena le miraba con las mejillas encendidas, abrió su boca obediente y el rubio le metió su miembro a la boca.

Nick gimió echando su cabeza hacia atrás recostándola en el hombro del pelinegro que le tenía agarrado de la cintura.

Las manos del pelinegro se metieron por dentro del pulóver del rubio acariciando su abdomen, besando su hombro subiendo por su cuello lamiendo y chupando mientras su dura erección aún dentro del pantalón estaba contra el trasero del rubio.

Nick tomó en su mano el cabello de la morena y comenzó a guiarla moviendo su cabeza de atrás hacia adelante de modo que la chica chupara todo su pene haciéndolo gemir.

El pelinegro bajó su propio pantalón y tomó su pene alineándolo en el trasero del rubio comenzando a entrar. Nick gritó de dolor y sus piernas temblaron un poco.

—Pasará... tranquilo —susurró ronco contra su oído mientras la morena seguía chupando su pene.

Comenzó a dar suaves embestidas para que el rubio se acostumbrara. Sus manos subieron por el torso del rubio comenzando a tocar sus pezones haciéndolo gemir.

Con cada embestida del pelinegro, el miembro del rubio entraba a la boca de la morena.

Aumentaron la velocidad y el lugar se llenó de los gemidos de los tres. Para Nick el dolor había desaparecido por completo siendo reemplazado por un inmenso placer.

Nick levantó a la morena y esta se fue por el largo pasillo con la excusa de ir a arreglarse.

El pelinegro cambió la posición cargando al rubio haciendo que enrollara las piernas en su cintura y los brazos en su cuello para de una fuerte embestida volver a entrar en él.

Nick dejó los ojos en blanco al sentirlo tan profundo y gimió enterrando sus uñas en los hombros del guardia.

El pelinegro lo besó con ganas jugando con sus lenguas, tocándole y apretándole el trasero mientras lo embestía con fuerza una y otra vez dando repetidas veces en su punto haciéndolo gemir desesperado mientras sus piernas temblaban.

El sudor caía por sus frentes entre tantas embestidas. El rubio sufrió espasmos por el placer y apretó su interior soltando grandes gemidos.

Al pelinegro se le escaparon unos cuantos gemidos roncos al sentir como el interior del rubio le apretaba.

Solo bastaron un par de embestidas más para que ambos se corrieran, el rubio manchando su abdomen y el pelinegro adentro del otro chico.

Cuando la electricidad se cortó de momento, el guardia salió del interior del rubio mientras se limpiaban y acomodaban las ropas, cuando la electricidad se restauró unos minutos después ya no había ni rastro del rubio por todo el lugar.

Nick y Crys se encontraron saliendo del pasillo.

—Ni una palabra de lo que pasó hoy.

—Entendido —aceptó la morena.

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La rubia sonrió al ver que habían ganado de nuevo.

—Se los dije, hoy amanecimos con suerte —las chicas chocaron los cinco y miraron el reloj en la pared.

¿Qué mierda hacían esos dos?

Al cabo de un rato al fin la electricidad se cortó. Las chicas sacaron sus armas y dispararon a los guardias que se veían en el lugar. Evelyn tenía a tiro a uno de los guardias que atacaba a Kate, pero un fuerte golpe en el rostro la hizo caer al suelo, Tracy se sentó encima de ella y comenzó a golpearla una y otra vez en el rostro.

Evelyn le devolvió el golpe en el rostro y luego en el estómago para quitársela de encima. Se arrastró hasta donde estaba su pistola, pero le patearon el rostro haciéndola jadear de dolor y escupir sangre.

Miró sonriendo a Dashi, parado frente a ella mirándola con odio. La chica le pateó fuerte la pierna haciéndolo caer arrodillado y le dio otra patada en el estómago. Se levantó y se lanzó encima de él golpeándolo fuertemente en el rostro. Él la tiró al suelo tomó su cabello en un puño y estampó su cabeza contra el suelo para seguido de eso apretar sus manos alrededor de su cuello asfixiándola.

Un disparo se escuchó a sus espaldas, Dashi volteó su cabeza para ver el momento justo en que Tracy caía al suelo sangrando.

Ante esa imagen soltó a Evelyn y corrió hacia su hermana abrazando su cuerpo que no paraba de sangrar y haciendo presión en la herida de bala que tenía en el abdomen.

Kate corrió hacia Evelyn ayudándola a ponerse de pie, vio como Dashi cargaba el cuerpo de su hermana menor y se alejaba corriendo, Kate le apuntó con su arma, pero Evelyn la bajó y negó dejando que salieran del lugar a salvo.

—Dime que tienes las llaves —pidió Nick en cuanto entraron.

—Las tengo —Evelyn les mostró las llaves— ¿Pero qué mierda hacían ustedes que tardaron tanto? —Crystal se sonrojó y bajó la mirada.

Nick se alejó con Kate tomando algunas armas que había en el suelo. Mientras que Evelyn se acercó a Crys sonriendo.

—Así que Nick y tú...

—No sé de qué me hablas.

Evelyn se agachó frente a la pelinegra, cogió un pañuelo que tenía en su traje uno de los muertos y limpió los restos de fluidos que caían por el muslo de la morena.

—Sí que sabes de qué te hablo nena —rio de lado viendo el sonrojo de su mejor amiga—. Kate y Crys ya saben qué hacer. Nick, guía a nuestros hombres y despejen el camino hasta el cuarto piso, yo guiare a otros hombres para que tengan listos los vehículos por la puerta trasera.

La alarma se había activado siendo el lugar alumbrado en intervalos de rojo.

La pelirosa caminaba al lado del rubio con una sonrisa de lado.

—¿Y tú por qué caminas extraño? —el rubio gruñó y se alejó de ella con los hombres que estaban a su cargo.

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Gata es el apodo que le dio Nick a Kateline.

Fue ingenioso pues usó el diminutivo de su nombre "Kat" que se pronuncia igual que "Cat" que significa gato/a.

¿Qué les está pareciendo la historia y los personajes?