[Kateline Rivas]

La chica avanzó hasta una mesa metálica, aproveché para fijarme un poco más en ellas, su cabello castaño llegaba hasta sus hombros, al girarse formó una sonrisa fingida con sus pequeños labios pintados de rojo, sus ojos eran marrones y sus pálidas mejillas estaban adornadas por algunas pecas.

¿Realmente estos eran hermanos?

Lo único que tenían en común era el apellido.

Bilal tiene el cabello negro con betas blancas, los ojos negros y pequeños, sus labios abultados y su piel demasiado pálida, viste con trajes y desprende seriedad y liderazgo.

Nate tiene el cabello rubio, ojos pequeños y rasgados con heterocromía, el ojo izquierdo era negro, mientras el derecho poseía un hermoso, atrapante y escalofriante color violeta que te hacía preguntarte si aquello era real, su piel era perfecta y pálida, sus labios finos, de baja estatura y viste de negro dándole aires de friki deprimido.

Y Mónica... bueno ya saben.

—He, сука ¿Qué tanto nos miras? —la castaña agitó el revolver frente a mi rostro sacándome de mis pensamientos.

—No le voy mucho al ruso, pero estoy consciente que сука significa perra, o puta —comentó Tracy riéndose de mí.

Volví mi vista a la rusa y sonreí mientras pestañeaba de forma seguida fingiendo inocencia.

—Solo me preguntaba a cuál de los tres debería tener en mi cama primero.

—Él no está disponible —gruñó Nate mientras se colocaba frente a Bilal con los brazos abiertos, el contrario solo sonrió de lado al ver aquel acto.

Por mi parte alcé mis cejas, sorprendida.

—¿Protegiendo lo de tu cuñada?

—Protegiendo lo mío —aclaró con tono amenazador, Bilal relamió sus labios y pasó su mano por su cabello para luego abrazar la cintura del rubio haciendo que este se relajara.

—La fiesta ya debe comenzar, esta preciosura que sostienen mis manos es el revolver Smith & Wesson Modelo 500, tiene capacidad para 5 balas, pero solo pondré una.

Depósito una bala dentro de dicho revolver y giró el tambor de este para luego de una palmada ajustarlo en su lugar, listo para los disparos.

—Yo iré disparando hasta ver donde está la bala, y en el momento que esta llegue, ¡Pum! Una de ustedes muere, sencillo —estalló en risas— ¿Algo que se quieran decir? Cosas así como últimas palabras y esas chorradas.

—En navidad me vestí como una especie de Santa Claus sensual mostrando la cola y me quisieron acusar por corromper la inocencia de los menores ¡¿Por qué Santa Claus debe ser un viejo panzón, pedófilo escalofriante y no una hermosa mafiosa rubia?!

—Tú realmente estás mal de la cabeza. ¡En navidad yo voy a regalarle comida y juguetes a los niños necesitados! ¿Cómo se te ocurre salir a mostrar tu culo? —reclamó la princesita.

El revolver quedó frente a mi rostro y Mónica apretó el gatillo haciendo que mía ojos se abrieran en demasía, por suerte, ninguna bala salió de este, devolviéndome el aire.

—Hace muchos años en serio quería comprarme el último videojuego que habían lanzado, pero ni Dashi ni papá querían darme dinero, así que robé unas joyas de Evelyn para poder comprármelo —confesó la menor arrepentida.

—Evelyn lo supo y se desquitó haciendo que tu hermano no volviera a casa por 3 días por andar follando con ella, recuerdo que te enojaste mucho con él.

—¡Maldita sea! Me mintió diciendo que estaba fuera por trabajo cuando en verdad estaba entre las piernas del diablo.

Otra vez la rusa disparó contra mí haciéndome pestañear y mirarla mal.

—¡Así no se juega puta rusa! Que solo quieres matarme a propósito.

—Yo tenía una Sceloporus torquatus o como algunos le conocen, lagartija de collar, pero un día sin más desapareció y nunca pude superarlo así que aún le tengo un mini altar en mi cuarto.

Las confesiones de Tracy son malditamente infantiles, me recuerda constantemente que es una cría y solo tiene 19 años.

—En verdad murió, Nick y Dashi estaban pasados de copa y la aplastaron, botaron las pruebas para no poder ser incriminados.

—¡Muertos los voy a dejar yo a ellos!

—Si logran salir de esta —la maldita rusa sonrió volviendo a disparar contra mí, definitivamente quiere matarme.

—¡Soy bisexual! —confesé.

—Todos lo sabemos —rodó los ojos.

—¡Pero nunca lo había confesado yo misma!

—¿Quieres follar conmigo? —comencé a toser ahogándome con mi propia saliva por la sorpresa que me generó aquello.

—Pero si eres una cría.

—¿Qué más da? Podríamos morir, si salimos de aquí tú y yo vamos a follar y punto.

Otro disparo contra mí.

Este fue el cuarto.

Y la pistola solo tenía capacidad para cinco.

Eso quiere decir...

—El próximo si o sí te mata сука.

—¡Tengo un cuerpo descuartizado en casa tengo que ir a desechar su cadáver!

—Lo desecharemos junto al tuyo tranquila.

Pegó el revolver a mi frente, le mantuve la mirada, mis ojos negros fundiéndose con sus ojos marrones. Sabía que dispararía dándole fin a mi vida, pero moriría con mi cabeza en alto viendo a la puta rusa que acabaría conmigo.

Una alarma saltó comenzando a sonar ruidosamente haciendo que todos miráramos a nuestro alrededor.

—Vayan a ver —pidió la castaña mientras hacía un movimiento con su cabeza indicando que fueran a comprobar si alguien había entrado al lugar.

Los chicos tomaron sus armas y fueron al lugar, volviendo minutos después.

—No había nada —avisó el rubio y comenzó a toser doblando su cuerpo apoyando sus manos en sus rodillas.

El sitio había sido invadido por el humo, miré a todos lados queriendo saber que se estaba incendiando.

—¿Pero qué mierda? —Nate se reincorporó con ayuda de Bilal—. Yo veré hacia allá tú ve hacia la izquierda y Mónica que cuide a las niñatas, y ten cuidado por favor

Agarró sus mejillas y besó sus labios para irse apresurado dejándome en un estado de shock.

O sea...

¿No que eran hermanos?

¡Necesito el chisme!

Un disparo se hizo presente haciendo que bajara mi cabeza tratando de no quedar herida.

—¡Gata voy a por ti!

¡¿Nick?!

Oh mierda.

Maldito Nick.

Rubio de mi vida.

Estoy tan feliz de escuchar su fastidioso apodo.

Reí de lado mirando a la rusa.

—Mis hermanos han venido a por mí, tú mueres, yo vivo, lo siento rusita —alzó el revolver con la bala sobrante en mi dirección, pero antes de poder disparar recibió ella un disparo en el hombro.

Vi pasar a mi lado a Aleck continuando sus disparos mientras la rusa huía de él, Evelyn se unió a Aleck con los disparos mientras Dashi apareció frente a nosotros y se agachó frente a su hermana menor.

—Ya estoy aquí, todo estará bien.

Nick desató a la menor mientras Crys me desataba a mí, nos reunimos todos mirándonos aliviados.

—Los malditos escaparon —avisó Aleck guardando su arma—. Ya nos encargaremos luego de ellos.

Notaba la mirada pesada de Dashi sobre él ¿Celoso? Aprende a valorar mejor a tus guardias o a darles a un macho tan sexy como Nickolas Lannon.

—Fue lindo dejar de pelear entre nosotros al menos por un día y volvernos aliados —el tatuado sonrió inocente.

—Claro, teniendo en cuenta que mi hermana menor fue secuestrada por vuestra culpa.

—¡¡¿Nuestra culpa?!! ¿Qué droga te fumaste?

—Si Kateline no hubiera matado a Mazikeen esto no habría pasado.

—¿Y qué proponías? Ella se metió primero con nosotros —Nick lucía realmente enojado—.  Y esto no habría sucedido si en primer lugar no hubieras hecho tus estúpidos tratos con los Smirnov. Deja de culpar a otros de tus errores.

—¡Basta! —el grito de Evelyn nos estremeció a todos—. Necesito irme a casa.

Comenzó a caminar fuera de aquel sitio siendo seguida por todos nosotros.

Tracy golpeó a su hermano y a Nick ganándose la mala mirada de ambos.

—¡Ya me enteré de que ustedes mataron mi Sceloporus torquatus!

—¿Tú qué? —Nick frunció su ceño.

—La lagartija —Dashi volcó los ojos y ambos me miraron amenazantes.

—¡Yo no fui! —eché a correr hasta llegar al lado de Evelyn y sujetar su brazo buscando protección.

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Habrá otro libro conectado con este en el que estarán los hermanos Smirnov, se explicarán sucesos no explicados a detalle en Hollan: Losing Game etc.

Si el cap llega a 50 comentarios publico ya el otro libro.

Por otra parte, capítulo especial por las 4.09 K. En serio muchas gracias por el apoyo que le han brindado a este libro ❤

Fotos de los Smirnov 👇

Mónica

Bilal

Nate

¿Pueden adivinar quién es este?