O c h e n t a i s i e t e
[ NARRADO ]
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Hace media hora que su turno había acabado, pero ella seguía ahí intentando averiguar que carajo era lo que le ocurría a la señora Macalister, o mas bien, ya lo sabía, pero no era capaz de decírselo.
La anciana había llegado por cuarta vez en la semana, alegando que le dolía la cabeza cada vez que usaba un hechizo.
—Señora Macalister, le aseguro que se encuentra igual de sana que ayer. —Repitió la pelirroja, en el mismo tono que las últimas dos veces.
—Pero linda, yo estoy segura de que hay algo mal con mi nucleo mágico... —Insistió la mujer con ojos suplicantes. Molly suspiró y movió su varita, la vuela pluma a su lado comenzó a transcribir la receta.
—Le daré una poción para dolores de cabeza... Le hemos hecho estudios, y no debe preocuparse por su magia, esta todo en orden. —
La hipocondríaca mujer gruñó, apretó con fuerza sus manos alrededor de su bolso y tomó la receta.
—Esta bien, gracias, Medimaga Weasley. — Y tras una última mirada de "Mirame, soy hipocondríaca, dame mis medicinas" salió del hospital.
Molly soltó un suspiro y guardo rápidamente sus cosas en el maletín negro de cuero.
Salió de su oficina y pasó por la recepción, donde el medimago, Colton Beer, estaba llenando unos papeles. Ella se acercó a donde estaba y le dio un pequeño empujón, el hombre se río y volteó a verla.
—Molly... Que alegría verte... —Beer miró su reloj con el ceño fruncido. —¿Adicta al trabajo o la señora Macalister otra vez?
Molly sonrió de oreja a oreja, una enfermera le pasó unos papeles que ella rápidamente comenzó a firmar para poder irse.
—La señora Macalister. —Respondió con una risita cantarina. Terminó de firmar y volteó verlo. —¿Quieres ir a cenar al Rits? Escuché que tienen un buen filete.
—Lo siento, Molls, tengo algo que hacer... Pero ¿Desayuno mañana en Denny's — La pelirroja sonrió. Y asintió
—De acuerdo, nos veremos mañana.
Cuando salió del hospital su celular comenzó a sonar, lo tomó y vió que el nombre Teddy estaba en la pantalla.
—Osito Teddy, ¿Qué me cuentas?
—Molly... Tenemos que hablar, es urgente. —El tono en el que lo dijo le corto la respiración por un momento.
—¿Qué ocurrió? ¿Es Victoire? Dime que no estas muriendo en alguna parte Edward ... —Lo escuchó suspirar detras de la linea.
—No soy yo... Es... Alguién más. Por favor, ven a casa. —Entonces colgó.
Molly soltó un suspiro cansado, volteó a su alrededor asegurándose de fuera seguro, y desapareció.
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La casa lucía normal, no había reporteros por ningun lado y ningun auto, excepto la camioneta de Teddy, estaba en la acera.
Tocó el timbre primero y enseguida la puerta se abrió. Teddy vestía su uniforme de auror y parecia preocupado.
—¿Qué te paso? — inquirió su mejor amiga entrando a la casa y quitándose el abrigo para dejarlo en el perchero.
—Necesito hablarte Molly, sientate. —Ella obedeció y lo miró espetante.
Teddy daba vueltas por el lugar, de un lado a otro mientras jugaba con sus dedos.
—Teddy, basta. — espetó ella. El peliazul se detuvo, su cabello cambio a gris, dándole a entender que estaba mas que nervioso por lo que diría. —Ya, dímelo. ¿Qué ocurrió?
—¿Recuerdas a Savannah?
—¿Carrinton? ...por supuesto, fue la novia de Jasson en quinto grado. —hizo enfasis en "quinto grado"
Teddy asintio varias veces.
—Volvió hace un mes...—Molly ni se inmutó, lo cual puso mas nervioso al auror. —Bien... Ha estado saliendo de nuevo con Jasson...
—Pará. —interrumpió. Teddy se calló. —No quiero hablar de esto, sea lo que sea, no quiero. —rapidamente se puso de pie tomando su bolso y caminó hasta la puerta. Teddy la siguió.
—Molly...
—No, ya basta, no quiero escuchar más de Jasson Wood por lo que me quede de vida. —Su mano tomó el picaporte, y estuvo a punto de dar la vuelta cuando el por fin lo dijo.
—Se van a casar. —
Sus palabras flotaron en el aire, dejándola congelada en la puerta. apretó los parpados y la boca, conteniendo la respiración.
Fue ahí cuando Teddy supo que habia funcionado.
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El estruendo de la ciudad, y las personas gritando lo ponían de los nervios.
Llegaba media hora tarde a su entrenamiento por culpa del trafico de Londres y esa estúpida politica de no aparecerse cuando vives en un barrio muggle.
Jasson estaba hace mas de 15 minutos atrapado en el trafico, su escoba estaba en la parte trasera del auto junto con todo el equipo y tenía el tiempo en cima.
Victoire lo había estado llamando toda la semana con una urgencia que mataba, y el castaño no tenia humor de tratar con Bridezilla en ese momento.
Pero cuando su celular sonó por centésima vez en todo el día, fué cuando se doblegó por completo.
—Más vale que sea algo importante y no una idiotez de Bridezilla. —fue lo que dijo al responder.
Casi pudo ver como la rubia rodaba los ojos.
—Por Merlín, Jasson, pude haberte necesitado de verdad, llevo llamándote toda la semana...
—Créeme, ya lo sé. —Hizo una pausa. —¿Qué es lo que quieres?
La rubia soltó un suspiro contra la bocina, provocando la ansiedad en el jugador de Quidditch. En ese momento, los autos comenzaron a avanzar lentamente.
—Tenemos que hablar de algo importante, no, JJ, no es sobre la boda... Es algo más...
—¿A caso Teddy esta bien?
—Sí, tranquilo, él esta bien... Pero, hay algo más. Por favor, debemos vernos, hoy. — Jasson se quedó un momento mirando sus propios ojos en el espejo del retrovisor.
—De acuerdo...
—¿Puede ser ahora? — Jasson frunció el ceño ante la insistencia de la joven.
Se fijó en el reloj, ya estaba una hora retrasado, de reojo vio su escoba y uniforme.
Soltó un suspiro cansado.
—Claro, mi entrenamiento se canceló. Llegare ahí en un par de minutos. —Y sin mas, colgó.
Se salió de la autopista para regresar a Londres y condujo hasta el departamento de su mejor amiga.
Cuando estuvo frente a la puerta del apartamento 128 tocó fuertemente con los nudillos y casi al instante la mayor de los Weasley-Delacour abrió la puerta.
—Eso fue rapido... —Rió nerviosamente la Ravanclaw.
Jasson no respondió, simplemente entró y se dejó caer en el sofá que tenía en la sala, frente al televisor.
—Hubiera sido mas rapido pero... Ya sabes, la ley de desaparición y aparición en barrios muggles no es nada flexible. —Victoire comenzó a reir de nuevo, extrañamente nerviosa. Jasson al notar esto se incorporó un poco y la miro preocupado.
—¿Qué ocurrió Vic?
—JJ... Es algo importante, que, bueno, tenía que decírtelo.
—¿Teddy esta bien? Porque si le pasó algo y nadie me lo dijo, yo...
—¡No! —interrumpió la rubia alzando las manos. —Él esta bien... — La ojiazul tomó una bocanada de aire y se sentó a su lado tomándole la mano. —Es sobre Molly. —La cara de Jasson se descompuso.
Y Victoire no supo si estaba molesto o preocupado... Tal vez ambas.
—¿Está bien? — su voz tembló al preguntar.
—Sí, lo esta
—Entonces no me importa, sea lo que sea.
—Pero...
—No, Vic... A menos que ella este mal, no tengo porque saber nada más. —Se iba a poner de pie pero la chica rapidamente lo jaló del brazo para que volviera a sentarse.
—Jasson Wood, estoy muy segura que querrás saber esto. —le regañó ella. Jasson a regañadientes se quedo sentado.
—Esta bien, vamos, dímelo, terminemos con esto...
Victoire se pasó la lengua por los labios, registrando cada moviendo del chico.
—Se va a casar con Colton Beer.
Su reacción no fue como esperaba, no del todo. Primero frunció la boca, cerró fuertemente los ojos y respiró. Luego cuando volvio a verla, alzó una ceja.
Victoire creería que no había funcionado... De no ser porque cinco segundos después escuchó el coche de Jasson arrancar.
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—Sí, esta aquí conmigo. ¿La necesitas para algo? —escuchó como Jasson bufaba.
—Estaré ahí en cinco minutos. Que no se vaya.
Teddy intentó ahogar una risita sin mucho éxito.
—Como ordenes.
—¡¡Victoireeeee!! —gritó el peliazul mientras subía las escaleras.
Entró a su habitación y vió como Molly estaba sentada en la cama sin decir o hacer nada.
—¿Aún esta en Shock? —su novia asintió. El peliazul pasó una mano por la cara de su mejor amiga, pero no reacciono.
—Haz que reaccioné y ponla bonita. — murmuró Teddy saliendo del cuarto. Victoire lo siguió con el ceño fruncido.
—¿Para qué?
—Jasson esta por llegar... Tienes... —miró su reloj. —Al rededor de 3 minutos, tal vez menos.
La rubia se quedó con la boca abierta, iba a decir algo, pero en lugar de eso dió media vuelta y se apresuró a hacer lo que Teddy le dijo.
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Escuchó un fuerte portazo, que fue suficiente para sacarla del shock. No supo porque, o como. Pero se levantó y rapidamente bajó las escaleras, como si supiera que Jasson estaría ahi.
Tenía razón.
—Hola... —murmuró él.
—Hey. —Molly apretó más los barrotes de la escalera y trago en seco. Bajó uno a uno los escalones, aún con la mirada fija en el muchacho. Se quedó parada en el último.
—Molly/Jasson. —dijeron los dos al mismo tiempo, lo que los hizo sonreír.
—Primero tú... Supongo. —dijo ella.
Jasson se rascó la nuca, frunciendo el ceño.
—Yo... Estaba seguro de lo que diría... Hasta hace un momento...—balbuceó.
Luego la miró otra vez, acercándose a la escalera, Molly tuvo que apretar aun mas el barandal para no caer.
—Tampoco sé que decír... Yo... —
Las ganas de llorar fueron subiendo cada vez más. Tenia mucho miedo.
—Lo siento. —dijeron los dos. Molly se rió de nuevo, pero esta vez con lagrimas en los ojos. Jasson frunció la cara, y sonrió al igual que ella.
_¿Por qué te disculpas? — preguntó él.
—No lo sé, ¿Y tú? — se encogió de hombros.
—Por todo esto... Molly, lo siento... Todo. —La carcajada amarga de ella le dio un escalofrío.
—¿No es algo tarde para esto? — Jasson asintió, con la mirada en sus ojos.
—Lo es... Te perdí, y lo lamento... —Molly frunció el ceño.
—¿Qué?... No, yo te perdí a tí. —Jasson rodó los ojos.
—¿Y quién es la que se va a casar? —Molly se quedó quieta, con los labios fruncidos.
—No... Tú eres el que se casa, porque...
—Espera... Creí que te habías comprometido con Beer.
—No... Tú te comprometiste con Savannah Carrinton. —ambos parecían mas que confundidos.
Hasta que se dieron cuenta en la casa de quien estaban.
—¡Edward! —bramó Molly.
—¡Apoline! — le imitó Jasson.
La pareja asomó la cabeza por la puerta de la cocina, sonriendo tímidamente.
—¡No tuve elección! —gritó Victoire como niña pequeña.
—¡Sí, lo que ella dijo! —gritó de vuelta Teddy.
Molly estaba tan roja que en cualquier momento podría bien hacerse pasar por un tomate. Mientras que Jason respiraba cuan toro enfurecido.
—¡Pero como se les ocurre inventar semejante cosa!
—¡¿Tienen idea de lo que me hicieron sentir?! —gritó Molly. Pero cuando se dió cuenta de lo que dijo, se tapó la boca.
Jasson sonrió de lado.
—¿Qué te hicieron sentir? —
La pelirroja estuvo a punto de decir algo, pero luego tuvo una idea.
—En realidad... Me debo preguntar ¿Qué haces aquí?
Sus palabras quedaron en el aire, ninguno supo que decir. Sabían la respuesta, pero no sabian si era lo correcto decirlo.
Molly alzó un pie, apunt de bajar el escalón, pero se quedo ahí. Al igual que Jasson. Suspiraron.
—No quiero perderte otra vez. —Molly sintió que su corazón daba un vuelco. Jasson caminó hacia ella. —¿Me oíste? No quiero. No puedo, Molls, no quiero perderte.
—Ya no más. —sollozó ella. Sus lágrimas cayeron.
Entonces, hizo lo que había querido hacer desde que lo vió entrar, y se lanzó a sus brazos, para luego besarlo.
El castaño la tomo de la cintura, elevándola un poco en el aire y respondiendo con gusto a aquel beso.
Teddy y Victoire que habían salido de la cocina, ahora los observaban con una sonrisa. Chocaron los cinco.
—¿Ahora si pueden escribir ese discurso? —Preguntó Teddy, pero la pareja se seguía besando.
—¿Chicos? —los llamo Vic. —Oigan... Nos casamos en unos meses... Deben escribir el discurso...
Ningúno de los dos respondió, seguían en su mundo. La ojiazul soltó un suspiro.
—Bien, supongo que tú y yo daremos una vuelta... —Teddy arrugó la naríz.
—Pero quería ver el partido... —Delacour le lanzó una mirada asesina, a la cual él solo sonrió nerviosamente.
—Sabes qué, mejor demos esa vuelta...
————
No podía dejar a mis bebés separados. Hahaha tenía que hacer algo!
Ennnnn fin... ¿Qué tal su navidad? Yo ya estoy de vuelta por Mexico y creanme que lo extrañé. En Madrid esta helando.
Btw... Extrañó a mi amiga reina del drma Brook_Page porque me dejó clavadicima con su historia 😭😭😭 VUELVEEE!!!
Y sin mas que agregar, me retiro.
¡Os amo!
—Love, Liv ♞
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