Angel sintió su corazón partirse en miles de pedazos mientras las manos de tyco apretaban las suyas con delicadeza y su expresión preocupada hacía que se sintiera como un idiota

— pero... Pero ¿por qué?... Creí que estábamos bien - preguntó intranquilo empezando a sentir que las lágrimas brotaran por sus mejillas

— angel, eres maravilloso y muy bueno... Pero no soy feliz desde hace tiempo... Necesito un hijo

— yo... Podemos tener uno

— tú no me lo puedes dar...

— deje todo para estar contigo

— ¿todo? Angie, ese horrible trabajo no te llevaría a ningún lado ¿cómo ibas a estar conmigo bailando en los tubos?

— ¡amaba mí trabajo! ¡Lo dejé todo por ti!

— entiende mí posición, soy un hombre con un futuro legado, necesito aspirar a más, algún día seré nombrado overlord

— ¿y qué hay de mí?...

— estarás bien... Seguro algún mesero o tabernero se ocupará de ti... No llores... Algún día superarás esto y podremos ser buenos amigos... Ten... Quédate con algo de dinero... Espero algún día me perdones y estemos bien - beso sus manos mientras se levantaba para retirarse del café, dejando muy mal al pobre albino en su asiento

Tyco se acomodó el traje mientras subía a su auto recién comprado, no estaba preocupado por angel, sabía muy bien que estaría ahí cuando volviera, solo necesitaba tener un niño con la hija del empresario que conoció hace poco y tomar la mitad de su dinero después de un año, para regresar y criar a su hijo con él, a pesar de todo, siempre lo amo, pero por ahora necesitaba aspirar a un mejor título en su vida, para después recrearla con el arácnido.

El tiempo pasó para el ciclope, anunciando su vida un mes después de que rompió con angel en todos los periódicos de la ciudad, llegando a las manos del pobre albino que sostuvo con fuerza su almohadón después de arrojar el papel hecho un bolillo a la basura.

Tyco recibió por completo todo lo quería, sin embargo, el título de overlord, estaba muy lejos para él aún, su esposa se había embarazado con éxito pero su empresa no pasaba más allá de una simple competencia de aficionado, día a día se esforzó por hacer que su nombre se escuchara y sus tratos con demonios no iban más allá que simples propuestas de trabajo y negocio, ganándose algunos aliados que extendieron su plataforma a una mínima parte de un lugar pequeño.

La vida del éxito era muy sencilla pero el poder y el control seguían fuera de su jurisdicción, no podía quedarse más tiempo quieto en un lugar, necesitaba esparcir su nombre
Apenas su hijo cumplió su tercer año, le pidió el divorcio a la mujer que no había tocado por más de un año y pidió la mitad de los bienes para regresar a la otra punta del pentagrama, fue una situación muy complicada, porque que ella intentó hasta lo imposible por rogarle que se quede, algo que lo ayudó con la custodia de su hijo, ya que con su desesperación pudo probar que no estaba en condiciones mentales para cuidarlo.

Después de meses duros de un divorcio muy difícil, tyco se estableció de regreso al norte de la estrella, colocado algunos pequeños negocios antes de impartir la habilidad de sus contratos para ganar lacayos que controlar y beber almas para su poder

Esa tarde que decidió tomarse un día para el y su pequeño, hablaba por teléfono con su asistente personal terminando de hacer lo que debía cuando regresó

— si, así es... Su nombre artístico es angel... Averigua dónde quedó... Y prepara lo que te ordene - comentó emocionado mientras apagaba el teléfono

— ¿papi?... ¿Porque no vino mami?

— por qué no cariño, ella no vendrá más... Ya no es tu mami

— ¿por qué no? - comentó triste, queriendo llorar

— porque no la necesitamos... Te daré una mami mejor, no llores... Seremos más felices ahora - le limpio la boca ante se seguir dándole de comer

Esa noche regresó a su pent-house recostando a su niño en cuanto se durmió, recibiendo una notificación de su asistente, haciendo sonreír al de cabello blanco cuando vio la información, volviendo a sacar su teléfono, para marcar a alguien más

— señorita, si soy yo, venga inmediatamente a mí residencia, tiene 15 minutos, estará al cargo de mí hijo está noche

La noche pasaba vagamente en la ciudad central, el joven ángel salía tranquilamente con una sonrisa del hospital, llevando una bolsita con antibióticos en su interior mientras se despedía de la enfermera

— Gracias Connie... Nos vemos mañana - salió complacido acercándose a las calles del centro para regresar a su hogar

La noche se volvió cada vez más fría en lo que se adentraba a las profundidades de las afueras, sujetando la bolsita con fuerza, en ese momento un ligero escalofrío recorrió su espalda, volteandose velozmente para ver qué no había nadie detrás de él.

Trago en seco sintiéndose pequeño e inútil por estar solo ahora, hasta que un ruido en frente le hizo reaccionar del susto dejando caer su bolsita, notando a unos metros una figura alta con traje y un sombrero que lo miro preocupado

— oh... Lo lamento, no fue mí intención asustarte... - fingió inocencia ante el albino, para acercarse a él y recoger su bolsa, estando muy al tanto de su semblante sorprendido

— ... ¿Ty-tyco... ? - murmuró muy desconcertado

— ¿hm? ¡Oh! ¡¿Angel?!... ¡No esperaba encontrarte aquí! ¿Qué tal?... ¿Cómo has estado?

— yo... Nunca me fui... Yo…

— vaya, no has cambiado nada... A excepción... De que subiste de peso... Estás más gordo que antes... - comento lo último con severidad, logrando que el albino reaccionara de su sorpresa y con pena se cubriera el estómago

— si... Yo... Yo he engordado

— ¿Qué ha pasado contigo? ¿Por qué te has descuidado así? ¿Que has estado haciendo todo este tiempo?

— e-eh yo... Debo irme...

— ¿A esta hora? ¿Tú solo?

— estaré bien...

— te acompañaré - dictó serio sin darle oportunidad

Angel bajó la cabeza sin decir nada, se sentía muy incómodo y había mucha tensión entre ambos

— ahm... Ehm.. e-es lindo volver a verte... ¿P-por qué regresaste aquí? Creí que tenías un buen negocio al otro lado de la estrella

— no me fue tan bien como esperaba, el divorcio me trajo muchos problemas y ahora estoy con las manos muy ocupadas con mí hijo...

— oh... Tuviste un hijo... Eso es muy lindo - comentó sin mirarlo a la cara

— de hecho es mucha responsabilidad, me cuesta tenerlo solo... Busco niñeras, pero no es lo mismo, él necesita una figura materna

— ya veo... Lamento lo de tu divorcio..

— no estábamos hechos el uno para el otro... No era aquella relación que me hacía sentir en los cielos... Ya sabes... Como cuando estuvimos juntos... Quiero que mí hijo crezca en un ambiente amoroso, ella no le hacía caso y siempre lo dejaba por trabajo... Quisiera que un día conozca a la persona que esté dispuesta a quedarse ahí para cuidar de él y pasar tiempo juntos

— Es una pena, él es pequeño ¿no es así?

— apenas cumplió 3... Estoy muy preocupado por él... Siento que no es suficiente

El albino movió los ojos, sintiéndose reprimido, soportando el dolor en su interior, comenzando a sentirse identificado por su problema de ahora, a lo que tyco noto de inmediato

— ¿Qué hay de ti ángel? Dijiste que querías tener hijos... ¿Has podido adoptar uno? - le sonrió de lado, esperando una respuesta positiva

— ehm... No... No pude... Cuando quería hacerlo, yo era soltero y las madres que los tenían pedían miles por ellos, algo cruel pero no podía pagarlo y además... No me era justo comprar niños...

— el infierno es una crueldad... Seguramente tendrás un niño en tus brazos muy pronto - comentó sin darse cuenta el semblante nervioso de estel, cual se sonrojo de inmediato

— d-de... De hecho yo...

— ¿Estás saliendo con alguien?... Si no pudiste adoptar, quizá debiste casarte

— tampoco me parece justo casarme para adoptar... Es muy cruel eso... Pero... De todas formas... Hace unas semanas... Salí de una relación muy mala

— oh lo siento... ¿Te engaño?

— n-no.. no... El no es así.. pero creyó que yo si... Me acusó de infiel y eso no es verdad

— lo lamento mucho... - lo miro preocupado notando su expresión dolida — no te sientas mal..  las cosas siempre son por algo... Quizá sea el destino... Es mejor así.. que bueno que nos volvimos a encontrar - comento sonriente colocando una mano en su hombro haciendo que el más bajo se pusiera incómodo y sorprendido

— e-eh... B-b-bueno... Aquí vivo... Gracias tyco fue un gusto volverte a ver... - se aparto de el, acercándose a la pequeña mansión de blanco ante la atenta mirada del cíclope

— ¿Aquí vives? - miro el lugar sorprendido

— s-si... Gracias otra vez

— angel... También fue lindo verte otra vez... ¿Podemos hacerlo de nuevo?... ¿Qué tal si mañana vamos por una copa?

— esto... Tyco yo--

— se que te gusta beber... Quiero invitarte, anda di que sí

— si, me gusta pero no puedo…

— ¿Que te detiene?

— su embarazo...

En ese instante el empresario se volteó velozmente encontrándose con la presencia del demonio radio, uno de los seres más temibles de todo el anillo del orgullo, con una sensación pesada y sorprendida, inmediatamente se alzó a la defensiva colocándose delante del albino, mientras soltaba un jadeo, sin saber qué hacer

— tu...

— ¿que haces aquí alastor ? - preguntó el arácnido, ante la impresión del grisáceo quién lo miro de reojo

— angel...

— lamento interrumpir su patética cita y su reunión absurda, pero vine a dejar unas cosas en claro

— ¿q-que?... ¿De que hablas?... ¿Qué podemos tener que necesites?

— tyco cálmate... Solo vino a dejar algo, ya se irá

— de hecho vengo a hablar contigo ángel ¿puedes decirle al pene de turno que nos deje solos un momento?

— ¡¿QUE?!

— ¿por este ridículo espécimen de media cabeza arruinaste toda una relación?... Si que caíste bajo Anthony - rodó los ojos, haciendo que el albino chistara la lengua

— al menos me termina de satisfacer en la cama... - se molestó el de cuatro brazos, logrando que símbolos al alrededor comenzarán a distorsionar el ambiente, ante el miedo del más alto — y no le digas pene de turno, es el único para mí, me llena por completo y me hace feliz ¡¡es mucho mejor que el tuyo!! - le hablo fuerte en medio de la calle, importandole poco los diales que brillaban en la cara del moreno

— angel... Recuerda que tengo un hijo.... - suplico en susurros el grisáceo

— Anthony querido... Tengo el tiempo contado, hazme el favor de hacer esto bien...

— Ash..  siempre arruinado los mejores momentos... Justo cuando le dije que podía entrar en la casa para hacerlo está noche... - se burló sin mirarlo mientras el de un ojo se ponía pálido y veía toda su vida pasar por delante, al notar el aura oscura y las llamas verdes detrás del demonio radio — ¡bien! Como sea... Lo lamento mí amorcito... Otra noche será... Sabes que no puedo beber alcohol por mí embarazo pero podemos ir un café mañana - se acercó dulcemente acariciando su mejilla antes de plantarle un beso en esta, sintiendo la mirada penetrante del pelirrojo cerca — ¡entra ya alastor! ... Adiós mí amorcito…

Cuando finalmente ambos demonios entraron a la casa, tyco cayó de espaldas por la fuerte mirada del pelirrojo, quién lo amenazó con sus ojos antes de cerrar por la puerta

— ¿Cuántos entraron aquí angel?

— Si viniste a tirarme cosas en cara, ¡mejor vete!

— no me interesa lo que vayas a hacer fuera de aquí y con cuántos te metiste, pero está sigue siendo mí casa y no le faltaras el respeto a mí hijo

— ¿Que es lo que quieres?

— vine a hablar del reparto de bienes

— no quiero nada de ti

— tendrás una parte igual... Hablemos de la custodia

— no hace falta... Puedes verlo, llamarlo y pasar tiempo con él cuanto quieras...

— anthony - entrecerró los ojos seriamente — no me malentiendas, no vine para dejarte la custodia

— ¡pudrete alastor! ¡No te lo daré!

— ¡no te lo estoy preguntando!

— ¡Pues ya te respondí! Lárgate ahora

— ¡No me desafíes! No tienes nada que dar

— ¡eres un infeliz! No puedes venir aquí a tirarme las cosas en cara cuando te fuiste directo a vivir con otra

— no finjas ser una víctima, a diferencia de ti, la señorita mimzy es una dama, jamás se ha sobrepasado, y yo si tengo clase, nunca me atrevería a lanzarme con la primera que pasa por algo de despecho y calentura, ella tiene una habitación separada de mí

— eres un cerdo, deja de jugar al hombre recto, se que eres poco hombre cobarde y mentiroso... Y ella es una--

— ¡Cuida tu lengua! ¡Ella estuvo ahí para mí cuando te descubrí siendo un traidor!

Angel apretó los dientes mirándolo con remordimiento mientras las lágrimas salían de su lugar dándole la espalda

— lárgate ya... No te daré nada... No quiero verte hoy

— quiero saber si ese hombre fue con el que te acostaste

— no, no fue el... Nunca lo sabrás

— dime quién es

— no te diré nada imbécil, porque el hombre con el que me acosté ¡¡NO EXISTE!!... Y me alegra que así sea.. porque todo esto me hizo ver lo cobarde e inseguro que eres... Nunca confiaste en mí... No desperdiciare mí vida contigo y cuando veas el error que cometiste ya será muy tarde

— el único error fue enamorarme de ti angel - hablo seco sin importarle el gemido lastimero del contrario — ahora soy un idiota por dejarte entrar en mí vida, aún sabiendo como eres

— Lo mismo digo... Desearía que nunca hubieras estado ahí para empezar

— eres un malagradecido, te entregué todo lo que querías y necesitabas para tener una buena vida... No te atrevas a llorar, ¡no seas hipócrita! Tu no deberías derramar ninguna lágrima, no tienes derecho

— cuando se trata de ti... Siempre estoy llorando...

Alastor entrecerró los ojos, estaba harto de esta situación, ni siquiera entendía porque había ido a verlo para empezar, sabiendo cómo terminarían las cosas otra vez, pero apenas vio al hombre no pudo evitar volver a pensar en la noche que pelearon

— angel, dime de una vez quién es el hombre con quién te acostaste

— Si quieres encontrarlo, espera sentado... Por qué no aparecerá nunca...

— ¿Por qué tienes que hacerlo todo tan difícil?

— eso te pregunto yo... ¿Por qué estás aquí?... Pudiste esperar hasta mañana para traer un abogado

— vine a hablar bien, porque sé que te pondrías histérico con los abogados... Quiero que aceptes los términos como es debido y--

— ¡¡no te daré a mí hijo!! ¡Vas a tener que matarme!

— no hagas las cosas difíciles... Será peor en tu estado

— Entonces lárgate... No quiero que estés cuando mí niño vaya creciendo dentro, solo me das estrés

— es mí hijo angel... ¿Ahora me quieres alejar de él?

— ¡¡no!! ¡¡Quiero que estés ahí!! ¡No soy como tú! ¡Quiero que estés aquí conmigo cuando esté pasando por momentos difíciles! Cuando sienta dolor y me sienta triste ¡¡como ahora!! Tu eres quien me quiere alejar de él... - llevo sus manos a la cara dejando salir todo ese dolor en su interior

— yo no quiero eso Tony... - comentó en lo bajo acercándose para pasar sus manos en sus hombros y calmarlo — yo quiero que estés ahí con él... Porque eres su padre... Y el te necesita... Pero también necesita una buena vida en este infierno... Algo que yo le daré

— yo también puedo dársela - colocó sus manos en el pecho de él — quiero que se quede conmigo - recostó su cabeza en su cuello sintiéndose vulnerable por su tacto

— Está bien .. no te lo quitaré... - acaricio su cabeza mientras posaba una mano en su espalda

Tyco llegó de un tirón a su hogar cerrando la puerta de golpe detrás de él con la cara perdida y los pensamientos como un remolino en su cabeza mientras respiraba agitado y nervioso

¡Angel está embarazado! ¡Puede tener bebés! ¡Desperdicie tres años de mí vida! El está solo con el demonio radio
La relación de ángel término

Con algo de ingenuidad empezó a sonreír de forma descarada y divertida, ya no desperdiciaria más su tiempo, su angelito si puede tener bebés y el norte de la estrella es suficiente para hacerlo crecer como Lord, el destino si los unió por una razón, sabiendo que el despecho de angel haría que caiga a sus brazos más rápido, volver fue una buena idea y en el mejor momento
El demonio radio era poderoso pero lo lastimó y no podría darle una oportunidad ni siquiera con aquella lujosa mansión, donde una dama lo esperaba intranquila

Mimzy había tenido el atrevimiento de aparecerse en la habitación personal de alastor esa misma noche, arrojándose a sus sábanas con esmero, sabiendo que pronto tendría una oportunidad ahora que angel se había ido, pero las horas pasaron y él no llegaba, ella lo esperaría en la habitación de junto que le dio, pero quería conocer y adaptarse mejor a su futura y legítima habitación, abrazando con fuerza sus almohadas y aspirando su olor.

Sin pensarlo mucho, tomó el teléfono y le envío un mensaje algo inquieta por su presencia

>>Es algo tarde.... Deberías volver a casa... No es bueno que andes por ahí solo en tu despecho... Puede ser malo

>> Gracias mimzy, eres buena amiga, ve a dormir, no me esperes, tienes razón, eh hecho una tontería, me quedaré fuera hoy... Que descanses

>> Está bien... Te espero mañana, descansa, donde sea que estés

Alastor apagó el teléfono y lo hizo aún lado suspirando con amargura, sientiendose muy idiota mientras apagaba las luces con cuidado para no despertar a angel que dormía plácidamente en su pecho desnudo, mientras acariciaba su espalda descubierta, antes de cubrirlo mejor con las mantas

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Ahhhh solo puedo decir una cosa... Alastor eres un tonto un venado muy pero muy tonto...
Bueno una nueva historia que de seguro les encantará a cargo de chocolatito bello.

Sigan en sintonía