Destination (10/11)

X

Después de haber salido de la tienda de Onew regresó a su casa, debía cambiarse de atuendo y comer algo, iría al club, por ser lunes muy pocas personas iban así que sólo serían un par de horas, unas propinas extras no le caerían nada mal.

Prendió el fogón y calentó el estofado, mecánicamente sirvió un plato y se sentó en la barra. Todo estaba extremadamente silencioso, sin el fantasma rondando el departamento todo era aburrido; ya lo extrañaba.

Se apresuró, quiso llegar antes de la hora acordada al club, tal vez si iniciaba sus labores de una vez se distraería un poco.

Su plan fracasó, sus manos se movían de manera coordinada y precisa; no rompió ningún vaso o botella, pero su mente estaba en otra parte; fue entonces que comenzó a cuestionarse, ¿y si no lo volvía a ver? Jonghyun había dicho que no quería despertar, eso era preocupante.

—Minho, ¿estás bien? ¿qué sucede? Pedí tres margaritas y una piña colada para la mesa cinco— exclamó Nichkhun, uno de sus compañeros del club, el moreno rara vez cometía errores.

—Lo siento— se disculpó, —en un momento estarán listas— había preparado las cosas al revés, una margarita y tres piñas coladas.

La jornada terminó y arrastrando los pies regresó al departamento, sólo por curiosidad revisó la cocina y las habitaciones, no había rastro de Taemin; supuso que era lo lógico, había encontrado a los suyos.

Tomó una ducha y se metió a la cama, eran probablemente las doce de la noche, pero esa vez no quiso ver su reloj.

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El pelirrojo se hizo presente en el cuarto de Minho, estaba oscuro y la luz de la luna se colaba por la ventana.

—¡Minho, ayúdame!

Taemin estaba algo desesperado, la noticia que acababa de escuchar era preocupante; intentó despertarlo, pero no pudo tocarlo; trató de relajarse, sólo así fue capaz de tocar las cosas, tomó las sábanas y las mandó lejos.

—Minho, despierta— exclamó.

El alto abrió los ojos de golpe al sentir frío, había sido despojado salvajemente de sus cómodos edredones.

—¿Taemin?— en vez de enojarse por ser despertado de esa manera, se sorprendió y luego se sintió aliviado al verlo a su lado; sin embargo este último sentimiento no duró mucho.

—¡Ayúdame!— suplicó el pelirrojo, —Key estaba hablando con mi hermano por teléfono, mencionaron algo sobre desconectarme.

No supo cómo ni en cuanto tiempo llegó al hospital, eran las cuatro de la madrugada, pero no le importó; pidió poder entrar a la habitación de Taemin.

—Lo siento, no creo que sea posible; ya le dije que la hora de visita ha terminado, inician de nuevo hasta las ocho de la mañana— dijo la recepcionista, como se trataba de otro turno, Minho era un total desconocido para ella.

—Pero es que usted no entiende, debo...

—Joven Choi— el doctor Park llegó; —pensé que no vendría hasta más tarde, ¿cuál es la urgencia?

—Debo estar a su lado— dijo firme; el mayor lo miró de arriba a abajo; su actitud y su prisa por verlo no concordaba con lo tranquilo que estuvo horas antes.

—No permitiré que lo desconecten— explicó, a lo que el doctor Park se sorprendió, ése era un tema que apenas le había mencionada Kibum por teléfono algunas horas antes, al parecer el hermano estaba considerando esa posibilidad.

Exhaló, —joven, yo tampoco lo permitiría, él era un gran colega; pero en esta ocasión su destino es decisión de la familia, y el único es Lee Taesung. Lo que sí puedo hacer es permitirle estar junto a él; sígame por favor.— Aún sin ser horario para las visitas lo dejó pasar.

El sonido y ritmo característico del "beep" de los aparatos era lo único en el ambiente; Minho acercó una silla y se sentó junto a él; tomó su mano y con su pulgar la acarició.

Taemin podía sentirlo, su toque era cálido y le daba fuerza y esperanzas.

—Dije que estaría a tu lado, lo prometí— musitó al alto; —y lo voy a cumplir.

Las horas pasaron y a las nueve de la mañana la puerta de la habitación color durazno se abrió; era Kibum y Jonghyun, ninguno esperaba encontrar al moreno dormido en una posición que parecía muy incómoda, ya que estaba sentado en la silla de plástico, y posando su mejilla en la cama mientras sostenía la zurda de Taemin.

El chico rubio se aclaró la garganta y Minho comenzó a despertar.

—Veo que eres persistente— exclamó el de mirada felina; —dijiste que Taemin pensó que lo suyo no tenía futuro.

—Kibum yo...

—¿Puedes dejarme a solas con él?— pidió, el alto asintió, se levantó de la silla e hizo lo mandado junto con Jonghyun.

—Taemin, perdóname— sus ojos se aguaron, —¿Sabes? El día que ocurrió esta desgracia, tuve un pensamiento del que me arrepiento, —hizo una pausa, luego citó, —un día de estos tu trabajo te va a matar—, las lágrimas rodaron por su mejilla, —no te imaginas cuánto lo lamento— tomó su mano.

El pelirrojo sólo escuchaba, triste; en la esquina de habitación, podía ver como Key se aferraba a una de sus extremidades, pero no podía confirmarlo por medio del sentido del tacto, simplemente pareciera que sólo sentía a Minho.

El alto se dirigió a los sanitarios y lavó su rostro; nunca antes había sentido la necesidad de proteger algo o a alguien como en este momento; lo pensó y concluyó que ya no le importaba que lo tacharan de loco.

Tomó una toalla de papel y se secó.

—Lee Taesung llega en un par de horas— informó Jonghyun al entrar, Minho lo miró a través del espejo, el más bajo continuo, —parece que decidirán sobre el destino de Taemin.

—¿Qué?— abrió los ojos en demasía.

—Sé que te preocupa, también a mí; pero no es algo sobre lo cual podamos opinar.

—¿Por qué no?— frunció el ceño y giró para encararlo.

—Porque somos nadie— dijo como si fuera lo más obvio; —¿por cuánto tiempo estuviste saliendo con Taemin? ¿Un mes? Eres un completo desconocido y yo sólo soy el novio de su mejor amigo.

—¡Pero aún así, ellos no...!

—Calma— dio un paso hacia el alto y apoyó la zurda sobre su hombro, —aún van a discutir sobre ello; estoy seguro que Key no permitirá que lo desconecten, pero al final pasará lo que tenga que pasar—, le echó una mirada y se fue.

Salió de la habitación de su amigo y se limpió el rostro de manera descuidada, probablemente ésa sería la última vez que hablara con él, al menos físicamente.

La noche anterior Taesung le había hablado por teléfono planteándole la idea de desconectar al menor, ya que no había noticias o algún indicio de mejora; Kibum insistió en que debían esperar un poco más y al final convenció al mayor de que debían platicarlo en persona, era por eso llegaría a la ciudad pronto.

—Vamos por un café— Jonghyun apareció a su lado, el rubio asintió y lo siguió.

.

—No te dejaré— Minho fue directo al decir las cosas, había entrado a la habitación de Taemin, el fantasma aún se encontraba allí, —debe haber algo que pueda hacer—, para ese entonces el cuerpo ya había sido puesto en un camastro con ruedas, pronto lo trasladarían a otro lugar, a una habitación más pequeña.

—Sólo qué me digas cómo regresar a mi cuerpo— la voz estaba a punto de quebrársele, —Minho, no quiero morir—; el nombrado cerró el puño con fuerza, haría lo que fuera por cumplir el deseo de aquél muchacho que había robado su corazón, porque sí, ya se había dado cuenta y hacía pocos minutos lo había aceptado, estaba enamorado de Taemin.

Haría lo que fuera... , pensó.

—Dime cómo saco tu cuerpo de aquí— dijo atropelladamente el moreno y comenzó a acomodar algunas de las mangueras junto a él, en el camastro.

—¿Qué?

—No te pueden desconectar si no estás; debemos sacarte de aquí— explicó, —llamaré a Onew, él debe saber cómo regresarte a tu cuerpo, que nos encuentre en el sótano o en algún lugar oculto.

Taemin lo pensó unos segundos, era la única forma, pero para eso debían ganar tiempo. De inmediato le indicó cómo desconectar algunos aparatos, sólo dejaron el osciloscopio portátil sujeto a un costado del camastro y la mascarilla de oxígeno junto con lo necesario.

El pelirrojo señaló una percha, —ponte esa bata—, Minho le obedeció.

Cuando estuvieron seguros de que no había mucha gente en el pasillo, el alto se ajustó la bata y empujó la camilla dirigiéndose a los elevadores; estaba a medio camino cuando Taemin le previno, —hay que tomar otra ruta, o escondernos, ahí viene el doctor Park.

Minho cambió de dirección y se escondió en una habitación vacía, desde donde le hizo a la llamada Onew.

—¡Taemin!— chilló Key al entrar a la habitación y encontrarla vacía; —se supone que hasta que Taesung llegara lo trasladarían.

Caminó por los pasillos seguido de cerca por Jonghyun, divisó al doctor Park y le explicó lo ocurrido.

—No— dijo el hombre, —no indiqué ningún traslado aún— luego su expresión cambió a una de desconcierto, caminó rápido hasta uno de los intercomunicadores y llamó a recepción, debían alertar a seguridad.

Onew no fue tan difícil de convencer, al final de la llamada incluso parecía emocionado por participar en algo como eso.

Minho salió nuevamente y acechó, el pasillo estaba libre; empujó el camastro y se apresuró, la puerta del elevador estaba a unos metros.

—¡Alto!— gritó un hombre más corpulento que el moreno, su uniforme era azul, —deténgase allí.

—¡Un guardia!— dijo Taemin, —¡apresúrate!

Trotó, no podía ir más rápido debido a los tubos y aparatos conectados; pero Key bloqueó su camino; —Choi Minho. ¡Detente!— gritó, —¿Qué crees que haces?—, el nombrado frenó de golpe, de lo contrario lo hubiera atropellado.

—¡Suéltenme!— ladró Minho, fue entonces cuando Taemin vio que dos guardias lo sujetaban.

Forcejearon, y en un movimiento, el alto empujó a uno de los hombres y este retrocedió golpeando la camilla, nadie supo cómo, pero entonces la mascarilla de oxígeno fue arrancada del rostro de Taemin.

El desconcierto de Minho fue aprovechado por el sujeto, que se tambaleó para aprisionarlo.

Y algo insólito sucedió, ante sus ojos, el fantasma comenzó a desvanecerse lentamente; justo entonces, el "beep" del pequeño osciloscopio sujeto al camastro se convirtió en un pitido constante.

—¿Minho?— le llamó, —¿este es el fin?

—¡No!— gritó el alto, —¡Taemin! —, se liberó enérgicamente, corrió hasta el cuerpo y tomó su rostro para luego sellar su boca con la de él.

El pelirrojo, antes de desaparecer por completo, se llevó la diestra a los labios, lo había sentido, ¿era un beso?

Un guardia sujetó a Minho nuevamente y lo apartó, para ese entonces Key estaba hecho un mar de lágrimas; algunos enfermeros e incluso el doctor Park llegaron a la escena, pero sólo para ser testigos de que el "beep" volvió a su ritmo inicial.

Tanto el rubio como el doctor se aproximaron al cuerpo y lo miraron atónitos; se sorprendieron aún más cuando Taemin comenzó a toser, como si le hubieran aplicado RCP*, estaba despertando.

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*RCP: Reanimación cardiopulmonar; es unprocedimiento de emergencia para salvar vidas que se utiliza cuando la personaha dejado de respirar y el corazón ha cesado de palpitar. Esto puede sucederdespués de una descarga eléctrica, un ataque cardíaco o ahogamiento (Fuente:Wikipedia)