Hace mucho tiempo, en un pequeño pueblo en Italia, un sacerdote estaba paseando por ahí cerca mientras le devolvía los saludos a los pueblerinos quienes hacia su respectivos trabajos, el sacerdote era amado por todos le pedía consejos, pero una noche escucho unos llantos de un bebé, provenía de un cementerio, no dudo mucho en ir allá para encontrar el origen del ruido; hasta que encontró a una mujer con un vestido blanco, que se notaba unas manchas rojas en ella, cargaba a un bebé quien provenía esos llantos.

- Dios mío.. - dijo el sacerdote al verla que no dudo mucho en acercarse con cuidado mientras que la mujer de ojos azules y cabellos dorados vio aquel hombre -

- Por favor... Cuida a mi hijo... - dijo agonizando mientras le entregaba al bebé de forma débil - Quiero que el viva como un... niño feliz...

- Tranquila... - dijo el sacerdote mientras recibía al pequeño bebé - será mejor atender tus heridas..

- No me importa...ese será mi... Castigo por engendrar a esa criatura... Por favor cuídalo...- dicho eso cerró sus ojos lentamente -

- ¿¡Que quieres decir con eso!? - ya no hay respuesta ya que la misteriosa mujer ha desaparecido - Por dios... - miro a su alrededor que hay plumas blancas esparcidas - ¿Será un ángel? Pero porque la castigo... Será porque?... - miro el cielo nublado, luego miro el bebé entre sus brazos - mmm creo que ahora voy a tener que cuidarte... Te voy a llamar... Leonardo... Leonardo Astorelli... - dicho eso, el bebé mostró una pequeña sonrisa en sus labios -.

~11 años más tarde~

Leo como le decía de cariño se había convertido en un niño estudioso, de buena conducta gracias a su padre adoptivo quien era el sacerdote, decidió adoptarlo. Suele caminar a su lado a ya que es su pasatiempo favorito, pero en una de esas caminatas pudo escuchar un agradable sonido que provenía en una esquina mientras que su padre platicaba con unos aldeanos fue a ver qué se trataba de un violinista quien tocaba una melodía agradable; el menor se sintió maravillado al escucharlo por primera vez, en eso su padre vio a Leo admirando al violinista y pensó que encontró algo para motivar con sus estudios, así que se acercó para seguir escuchando hasta que terminaba la canción.

- ¡Bravo! ¡Bravo! - dijo Leo emocionado mientras le aplaudía al violinista -

- Jeje... Disculpa a mi hijo, el se emociona mucho... - el reverendo se disculpo y luego vio a su hijo - veo que te gusta ese instrumento...

- Ajam - afirma de forma muy animada - ¡Quiero aprender a tocar el violín! Ese sería mi regalo de cumpleaños... - al decir esas palabras, el padre Astorelli sonrió ya que mañana va ser su día.

Ya que terminaron de pasear, padre e hijo fueron a la casa pero en eso vio en la entrada hay otro sacerdote de cabello negro azabache y ojos verdes grisáceo quien estaba leyendo un libro mientras los estaba esperando. el menor no dudo mucho en saludarlo...

- Hola Padre Mancini! - dijo el menor haciendo interrumpir su lectura.

- Ahh Buona sera padre Astorelli, hola Leo...- dijo aquel sacerdote levantándose del suelo - Mírate como has crecido!

- Gracias padre Mancini... Es más, mañana es mi cumpleaños... cumpliré 12 años- dijo el menor muy emocionado-.

- Me alegro mucho Leo~ - le acariciaba el cabello castaño del niño, luego miro a su compañero - tienes un niño maravilloso, Alessandro.

- Gracias Leandro... - dijo un poco serio, luego ve a Leonardo - Hijo... Ve a tu alcoba a terminar tu tarea para mañana.

- Está bien papá; nos vemos luego Padre Mancini!! - se va dejando solos a ambos sacerdotes.-

El niño fue a su escritorio a terminar la tarea para tenerlo listo mañana. Ya en la noche se fue a dormir abrazando a su peluche favorito que se trataba de un caballo llamado "Sr Dorian"; ya que fue un regalo muy especial por parte de Alessandro, su padre.

Durante la noche, Leo estaba soñando con un lugar diferente, parecido a las montañas, al verlo sintió su interior como tranquilidad; mientras exploraba el lugar vio a lo lejos a una cabra acercándose, el menor sintió la necesidad de acariciarlo pero en eso, la cabra comenzaba a alejarse tratando de llamar la atención para que lo siguiera; así lo hizo, el niño comenzó a perseguir a la cabra hasta que llegaron a una zona desierta donde hay una gran puerta de color carmesí, se puede escuchar unos gritos desgarradores del otro lado de la puerta. Como todo niño sintió curiosidad por saber que hay del otro lado hasta que la puerta se abrió de golpe apareciendo a un especie de demonio apunto de atacarlo; eso lo despertó de sus pesadilla soltando un grito llamando la atención de Alessandro quien entro a la habitación preocupado por su hijo...

-- ¡Leo! ¿Que te sucede hijo mio? - se sentó en la cama dejando la vela en la mesita de lado -

-- ¡Padre! !Tuve una pesadilla¡ - dijo el menor entre lagrimas mientras lo abraza- un demonio... un demonio me ataco!

-- figlio calmo/Tranquilo hijo... fue una pesadilla... - dijo mientras lo abraza para calmarlo y le reza un padre nuestro como si esa oración fuera un hechizo de protección para Leo hasta que por fin se había calmado y lo volvió a acostarlo en la cama. - Descansa hijo... ya paso.

-- Grazie Padre... - dijo ya arropado con las sabana mientras abraza su muñeco- buona notte padre...

Luego Alessandro cerro la puerta con una sonrisa de confianza, en cambio el menor trata de dormir olvidando aquella pesadilla que lo asustó.

Al día siguiente, Leo se prepara para ir a la escuela religiosa, se sentía muy emocionado ya que hoy es su cumpleaños y comenzaba a ponerse una camisa blanca con chaleco azul, pantalones cortos hasta las rodillas y sus botas. Bajo para encontrarse con su padre para avisarle que ya está listo para irse, pero no está solo ya que se encontraba con Leandro quien lo recibe con un abrazo felicitándole por su cumpleaños.

- Gracias Padre Mancini~ - dijo mientras corresponde ese abrazo - me imagino que vas a hablar con papá...

- Así es piccolo angelo, pero al rato vamos a... - no termino la frase, ya que vio algo en Leo - ¿Que te paso en el ojo?

- ¿Pero que dices? - se agachó para estar a la altura de su hijo luego examinó los ojos notando que en uno de ellos se había tornado un color negro con pupila carmesí -

- ¿Que sucede padre? - pregunto el menor con un tono de preocupación-

- No lo sé, lo mejor es llevarte a un médico para examinarte... - lo tomo de la mano y miro al Leandro - Volveremos enseguida mientras me hace el favor.

- Claro Alessandro...

Padre e hijo fueron al médico lo más rápido, mientras que Leo trata de no mirar a nadie hasta que llegaron, el médico lo examinó tratando de encontrar una respuesta sobre esa condición en su ojo, pensaba que debió ser por la luz de sol o algo que lo infectó, así que decide tapar el ojo con un parche.

Más tarde, su padre llevo a Leo a
la escuela que fue decisión del menor; no le dió importancia si llegaba tarde, ya tiene buena escusa porque el retraso.

Ya que Leo se despidió de su padre entro al salón interrumpiendo la clase ya que los demás voltearon a ver a Leo con el parche.

-¡ Joven Astorelli! ¿¡Ya debe saber a qué hora se inicia las clases!? - dijo la profesora regañando al menor-

- Mi dispiace insegnante/lo lamento mucho profesora... - dijo Leo mientras fue a dirigirse a su asiento, tratando de no mira a nadie - tuve un contratiempo...

- Más te vale que no se vuelva a ocurrir... - dicho eso vuelve a dictar la clases, luego los demás alumnos comenzaron a murmurar entre si sobre el parche de Leo; cosa que el afectado solo se limita a ignorarlo.

Ya da inicio para el receso, la mayoria de los niños deciden jugar en el campo,en cambio Leo solo se limita a leer un libro bajo las ramas de un árbol; desde que entró a la escuela en el primer día nadie se quería juntar con el. Mientras se concentraba con su lectura unos de sus compañeros lanzaba una pelota sin querer le pegó a Leo de la cabeza.

- ¡Lo siento mucho! - dijo aquel niño mientras se acercaba para tomar su pelota, pero en eso noto que se había ponchado - ¿¡Pero que pasó!? - miro a su compañero sangrando, se sintió nervioso al verlo -

Todos los niños se acercaban al ver que pasaba, en cambio Leo comenzó a quejarse del dolor, en eso llega la maestra para ayudarlo, se sorprende al ver la herida en la cabeza -

- Eso no está bien... Te llevaré a la enfermería... - dijo ella mientras se lo llevaba, en cambio Leo estaba sollozando de dolor; los demás alumnos se quedaron preocupados por el.

Durante la enfermería, el doctor atendió a Leo limpiando la herida de su cabeza, en eso se sintió extrañado al ver la cabeza de menor que le había crecido un pequeño cuerno.

- ¿Que sucede doctor? - dijo en un tono de preocupación -

- Joven Astorelli, no sé cómo decírtelo pero .... - el doctor le da a un espejo de mano a Leo -

- .... - Se sintió extrañado al verse a si mismo que en su cabeza le había crecido un pequeño cuerno - P..pero.... ¿cómo pasó eso? - se toco a si mismo el cuernito sintiendo un nerviosismo -

- Tranquilo joven Astorelli... Si quiere aviso a tu padre para que te recoja? - le pregunto el doctor a lo que el menor afirma con la cabeza mientras tapa su cabeza con una sola mano -.

Ya había pasado un rato, el padre Mancini llegó a la escuela por parte de Alessandro ya que este se encontraba ocupado y el doctor le explicaba lo que pasó a Leo, mientras que el niño tomaba una siesta en la camilla, vuelve a soñar pero esta vez es un lugar distinto, ya se encontraba caminando sobre unos escalones, a su alrededor se puede apreciar nubes blancas; se sintió extrañado al subir hasta llegar a un portón dorado. Asombrado al verlo pero al acercarse una flecha cayó sobre Leo, por suerte no sé lastimo y al alzar la mirada vio a un ángel quien fue que lanzo la flecha.

- ¡ Largo Maldito híbrido! Tu no eres bienvenido de estar aquí... - dijo aquel ángel mientras apuntaba otra flecha hacia Leo.

- ¡¡ U..un momento!! ¿Que quiere decir con eso? - le pregunto pero este soltó la flecha para lanzarlo hasta que el sueño fue interrumpido gracias al padre Leandro.

- ¿¡Está bien!? ¿Tuviste otra pesadilla? - Le preguntaba muy preocupado al verlo pálido -

- .... - el muchacho solo se limita a abrazarlo, ya que sentía que hoy no fue un gran día sobretodo que hoy es su cumpleaños.

-- ... - el observo cada parte de su cuerpo luego recordaba algo

-- Vamos a casa Leo - dijo el padre Mancini mientras decide cargarlo por la espalda, el niño se sintió muy mal por ese día que decidió cerrar sus ojos para descansar.

Ya habia pasado menos de media hora el padre Mancini pudo llegar a la casa con Leo a su espalda, en ese entonces el menor despertó al escuchar el sonido de un violín tocando la melodía de cumpleaños...

El pequeño jovencito abrió sus ojos al ver que su padre tocaba el violín.

-- Buon compleanno Leo - dijo el Padre Leandro mientras baja con cuidado al menor - tuve que enseñarle a tu padre como tocar el violín para esa melodía...

-- Gracias Leandro~ - dijo Alessandro mientras miro a su hijo precaptando unas vendas alrededor de su cabeza - Pero que te... - no termino la frase ya que Leandro puso su mano en su hombro y captó la mirada de el con una expresión de negación - bueno... - puso al frente mientras le entrega el violín a Leo -

-- Eso... Es para mi? - dijo al ver que su padre le entregaba el violín -

-- Así es hijo, ese mi regalo de cumpleaños para ti, Leo... - le dedicó una sonrisa al ver que su hijo lo aceptaba y recibe un abrazo -

-- Grazie papà~ ese el mejor regalo que eh recibido...

Ambos sacerdotes sonriendo al ver la felicidad del menor a pesar de los malos momentos que tuvo el día de hoy.

Al día siguiente, Leo se preparaba para ir a la escuela, está vez se puso un parche en el ojo afectado y un gorro de color cafe para ocultar su pequeño cuerno.

-- " Nada mal " - dijo al verse a sí mismo en el espejo mientras tomo una bocanada de aire - Espero que todo salga bien...

Termina de arreglarse, se dirige al comedor donde estaba su padre junto con otro sacerdote mayor que el.

-- Buongiorno, Leo~ como amaneciste hoy? - dijo Alessandro mientras se sirve la sopa para el desayuno -

-- Bien padre, pero ayer fue un gran día... - dijo el menor emocionado luego vio el otro padre - ahh Boungiorno...

-- Boungiorno, es la primera vez que nos vemos... - dijo el sacerdote - no me has dicho que tuviste un hijo, Alessandro..

-- ahh permitame que te lo presente... - aclara su voz - Padre superior Giovanni, te presento a mi hijo Leonardo...

-- Hola Leonardo, piacere di conoscerti / mucho gusto en conocerte. - dijo extendiendo su mano frente a él -

-- Ahh Igualmente - dijo el menor de forma nerviosa mientras estrecha su mano con la de el -

-- ¿Pero que le paso en su ojo? - le preguntó al padre superior al verlo pero en ese momento llega Leandro -.

-- ¡Tuvo un accidente! - dijo Leandro con frialdad hacia el padre superior -

-- Boungiorno Leandro, vas a venir a desayunar con nosotros? - dijo Alessandro tratando de cambiar el tema mientras les sirve el plato con comida a Leo -

-- Grazie, pero descuida acabo de desayunar... Me imagino que vas a estar ocupado con.... - miro con desprecio aquel sacerdote -

-- Sigue siendo el mismo, Leandro... - dijo Giovanni, luego vio de reojo a Leo haciéndolo incomodar al menor -

-- Leandro ¿podemos hablar afuera ?

Ambos sacerdotes se fueron a platicar dejando solo a Giovanni y Leo...

-- Sabes que es mala educación comer con el sombrero puesto? - dijo Giovanni mientras con su mano acerco al gorro para quitárselo pero este se alejó un poco -

-- Esto... Estoy bien señor; Grazie - dijo tratando de comer con calma -

-- No sabía que Alessandro tuviera un hijo... Dime quien es tu madre?

-- Ahh no lo sé... Mi padre no me dijo nada sobre ella... - dijo mientras jugaba con su comida, ya que ese tema lo deprime -... Con permisos... - se levanta de su asiento pero en eso Giovanni tomó del brazo del menor - S-sueltame señor!? - dijo tratando de zafar el agarre en eso llega Leandro y Alessandro -

-- ¿Que esta pasando aquí ? - dijo Leandro luego vio que el menor pudo zafar del agarre y lo abrazo para calmarlo - que hiciste maldito... - dijo con rabia en eso Alessandro lo detuvo -

-- Leandro por favor, llevate a Leo a la escuela... - dijo mientras veia de reojo al padre Giovanni -

-- Molto Benne/ Muy bien - dijo calmando su rabia y tomó al menor de la mano y salieron de la casa para dirigirse a la escuela -

Durante el camino a la escuela; el padre Mancinii tuvo una pequeña conversación con Leo, ya que este le había preguntado el porque le tenía desconfianza al padre Giovanni? Pues resulta que el padre le había hecho algo malo cuando era un niño, por eso; siguió conversando hasta llegar a su destino y antes de despedirse el padre Leandro vio una marca en su mano izquierda.

--¿ Y esa marca? - dijo el menor muy confundido al mostrar el torso de su mano a Leandro -.



-- Mmh déjame examinarlo un poco - se agacha para estar a su altura y vio la extraña marca - Dame un lápiz y una hoja... Tengo que investigarlo...

Leo hizo caso al padre Mancini, saco en su mochila un cuaderno y lápiz para entregarselo...

-- Grazie~ - recibió esos objetos y comenzó a copiar la marca que tenia en su mano...

-- Muy bien - terminó de copiar la marca arrancando la hoja para entregar el cuaderno y el lápiz - aquí tienes Leo...

-- Grazie Padre Mancini - recibe esos objetos mientras los guarda en su mochila, luego escucho a lo lejos la campana anunciando que ya comienza la clases - Ya me tengo que ir Leandro....

--- Molto Benne... nos vemos mas tarde...

Ya terminaron de conversar, el pequeño Leo se dirigia su salon; mientras iba a tomar su asiento tratando de evitar el contacto visual con sus compañeros de clases, ya que a ellos se murmuran a sus espalda lo que paso ayer. Antes de que llegue su profesor unos compañeros se acercaron para molestar a Leo, ya que uno de ellos le tenia envidia de el por ser un niño ejemplar

-- Vaya, Vaya; pero si es el hijo del padre Astorelli... -dijo uno de ellos de forma sarcástica - ¿y ahora que te paso en el ojo? - con su mano trataba de quitarle el parche pero Leo se aparto de forma rápida -

- ¡Esto no te incumbe! -dijo de forma firme mientras sacaba sus cosas para las clases; pero al bajar la guardia, uno de los abusadores tomo el gorro de Leo - ¡Oye!

- Lindo gorro, Astorelli~ - dijo de forma sarcástico; cuando se lo iba a poner, vio que el peli-castaño se tapaba una parte de su cabeza con su mano -¿ Que? ¿Te da vergüenza mostrar tu chichón?

- ¡ Devuélveme mi gorro, Per favore! - dijo tratando de arrebatar el objeto con una mano ya que el otro aún cubría su cabeza afectada -.

- ¿Si lo quieres? ¡Ve por el! - lanzo el gorro por la ventana aterrizando por el suelo lleno de barro -

Todos los niños de ese salón comenzaron a burlarse de Leo pero en cambio este sintió coraje que no dudo en balancearse hacia el líder abusador para golpearlo en el suelo; olvidando que está exponiendo su pequeño cuerno a la vista de todos. Los niños comenzaron a gritar pero no de ánimos si no de miedo al ver a Leo de esa forma salvaje; en ese entonces llega la profesora viendo lo que estaba pasando que decidió separar a los dos.

- ¿Se puede saber que te ocurre joven Astorelli? -. Dijo de forma sería al ver lo que Leo hizo, luego su mirada cambio al percatar el cuerno y las manos ensangrentadas; pero en cambio el miraba horrorizado sus nudillos manchadas de un color carmesí.

- Pro-profesora yo... - se acercaba un poco para explicarte.

- ¡Alejate demonio! -. Dijo aquel niño con miedo, luego de que otros niños comenzaron a lanzarle bolas de papel y gritándole "demonio" a Leo.

No tuvo más remedio en huir de la escuela, corriendo lo más rápido posible evitando chocar con otras personas a su alrededor. Ya había dejado de correr hasta llegar a un cementerio ya que se tuvo una sensación muy familiar al estar en ese lugar. Se sentaba en un banco donde hay un árbol dandole la sombra; más tarde mientras está sumergido por sus pensamientos alguien se acercaba para hablar con el...

- ¿ Que te sucedió, Leo? - el mencionado alzó su mirada al reconocer su voz que se trataba de su padre, Alessandro; que no dudo mucho en abrazarlo -.

- Papá... Ya no quiero... ¡Ya no quiero ir al colegio! -. Dijo entre llantos mientras alzaba su mirada notando su expresión de asombro -¿ P-papá? ¿Que ocurre?...

- Ahora entiendo porque... -. Murmuraba mientras miraba a su alrededor que si no hay personas merodeando por ahí cerca, así que se quitó su sombrero para dárselo a chico -. Será mejor llevarte con Leandro, el sabrá que hacer...

Terminando de conversar, Alessandro llevo a Leo lejos de la vista de los demás pueblerinos para no armar escándalo. Luego llegaron a la casa de Leandro con el niño cargando a sus espaldas ya que se sentía cansado.

- ¿Alessandro que sucedió? -. confundido al verlo junto con Leo.

- Tenemos que hablar a solas Leandro; eres el único que me puedas ayudar -. La expresión del padre Astorelli parecía preocupado y serio, luego de unos segundos entraron a la casa no si antes observar a su alrededor que no hay nadie por ahí cerca.

Ya tiempo después, el pequeño Leo ya se había despertado sintiendo el calor de una pequeña chimenea; observaba a su alrededor reconociendo la casa del padre Mancinii, luego de unos segundos entraron el padre Astorelli y Leandro.

- ¿Papá? ¿Que me sucede? -. Dijo al verlo cansado, en cambio el sacerdote soltaba un suspiro y se sentaba al lado de su hijo.

- Hijo mío, creo que te contaré la verdad...

Alessandro le contaba todo a su hijo que en realidad es adoptado, revelaba que lo había encontrado con una mujer en el cementerio quien resultaba ser su madre biológica; ya que aún recuerda esas misma palabras que ella dijo antes de "desaparecer"...

"Por favor... Cuida a mi hijo... Quiero que el viva como un... niño feliz..."

- Entonces... ¿Ella era mí mamá?
- Así es Leo, esa mujer me había pedido que te cuidará. Pero no entendía lo que dijo que era su castigo por dar la luz...

- No solo eso... - intervino Leandro con un libro abierto entre sus manos - estaba investigando la marca que traía en su mano, y pude encontrar que esa marca es el mismo del un demonio llamado Azazel...



- ¿Azazel? - confundido al escuchar ese nombre luego que Leandro de entregaba el libro a Alessandro para examinar la marca y la imagen del mismo demonio-.

- ¡Eso no puede ser! - dijo Alessandro levantándose de su asiento -¡ mi hijo no debe ser un demonio!

- ¡Tranquilízate por favor, Alessandro! ¡Es tu hijo! ¡Tu lo criaste! - intentaba tranquilizar a su amigo -

- No sé que clases de mujer se acostaría con....? - Leandro le tapo la boca para callarlo, viendo de reojo a Leo con los ojos llorosos.

- Mejor hablemos en privado de acuerdo... - lo llevo a otra habitación dejando al niño llorando solo.

Leo no podía creer lo que escuchaba de su origen, miraba sus manos que uno de ellos fue teñido de un color negro; lloraba amargamente, ya que no puede salir con esa apariencia, porque todos en la escuela lo señalaba como un demonio malvado. Ahora vivirá escondido en esa casa con las cortinas cerradas para que nadie lo viera o descubra sus defectos...

Ahora se preguntaba a si mismo... "¿Que pasaría si alguien se diera cuenta de su existencia? Y que también... ¿ Quien será su verdadera madre? ¿Que quiso decir con el castigo que ella recibió ?

Continuará

Finalizado:
22 de marzo 2022
12:47 a.m.

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Holihola, cuánto tiempo estuve ausente en esa cuenta jeje... No sé si se considera como un Hiatus (?) o algo asi; ya que la última vez siento que nadie les interesa mis historias o mis personajes :'(... Por eso decidí publicar una parte de ese origen del pequeño híbrido. Espero que sea de su agrado 😊. Si les interesa dale un like y comentarios.

Nos vemos pronto
XOXO
Masky Townshend