Ya vienen los Reyes magos
Hay que decir que el único de los cuatro evangelistas que menciona a los Reyes Magos es Mateo...el más sospechoso de tergiversación. Parece que Lucas consideró que se había pasado con toda la historia de los Magos, la matanza de los inocentes y la huida a Egipto.
Lucas no dice nada de que se apartaran del país de Israel y se fuesen a Egipto. Todo lo contrario:
Luc 2
21 Cuando se cumplieron los ocho días para circuncidarle, se le puso el nombre de Jesús, el que le dio el ángel antes de ser concebido en el seno.
22 Cuando se cumplieron los días en que debían purificarse, según la Ley de Moisés, llevaron a Jesús a Jerusalén para presentarle al Señor,
23 como está escrito en la Ley del Señor: Todo varón primogénito será consagrado al Señor,
24 y para ofrecer en sacrificio un par de tórtolas o dos pichones, conforme a lo que se dice en la Ley del Señor.
Los días de purificación de una parturienta eran 33. Y después:
39 Así que cumplieron todo lo ordenado por la Ley del Señor, volvieron a Galilea, a su pueblo de Nazaret.
Y además:
41 Sus padres iban todos los años a Jerusalén a la fiesta de la Pascua.
Veamos ahora lo que dice Mateo:
Mt 2
1 Jesús nació en Belén de Judea, en tiempo del rey Herodes. Unos magos que venían del Oriente se presentaron en Jerusalén,
2 diciendo: «¿Dónde está el rey de los judíos que ha nacido? Es que vimos su estrella en el Oriente y hemos venido a adorarlo.»
9 La estrella que habían visto en el Oriente iba delante de ellos, hasta que llegó y se detuvo encima del lugar donde estaba el niño.
Primero destaquemos que en ningún momento se dice que fueran reyes, solo magos.
En segundo lugar parece exagerado eso de que una estrella les acompañara en el viaje. Si la estrella tenía un sistema solar y planetas con alguna civilización, ¿no se preguntarían esos alienígenas que adónde iba esa estrella loca? Sigue Mateo diciendo:
11 Al entrar en la casa, vieron al niño con María, su madre. Entonces se postraron y lo adoraron; abrieron luego sus cofres y le ofrecieron dones de oro, incienso y mirra.
De esas ofrendas no se desprende que fueran tres. Eso no se aclara. Y lo que es más importante: se dice que entraron en la casa, no en el portal o pesebre. Lo cual es lógico porque, caso de haber existido estos magos, su viaje hubiera sido largo desde Oriente (casi dos años) y no iban a estarles esperando en la cueva.
¿Porqué sabemos que el viaje habría sido de casi dos años? Porque al llegar a Jerusalén fueron a ver al rey Herodes
2 diciendo: «¿Dónde está el rey de los judíos que ha nacido? Es que vimos su estrella en el Oriente y hemos venido a adorarlo.»
3 El rey Herodes, al oírlo, se sobresaltó, y con él toda Jerusalén.
7 Entonces Herodes llamó aparte a los magos y, gracias a sus datos, pudo precisar el tiempo de la aparición de la estrella.
8 Después los envió a Belén con este encargo: «Id e indagad cuidadosamente sobre ese niño; y cuando lo encontréis, comunicádmelo, para ir también yo a adorarlo.»
12 Pero, avisados en sueños que no volvieran a Herodes, regresaron a su país por otro camino.
Mateo dice que Jesús y su familia se fueron a Egipto, cosa que hemos visto que es incompatible con lo escrito por Lucas:
Mateo 2
13 Cuando ellos se fueron, el ángel del Señor se apareció en sueños a José y le dijo: «Prepárate, toma contigo al niño y a su madre y huye a Egipto; y estate allí hasta que yo te diga. Porque Herodes va a buscar al niño para matarlo.»
14 Él se preparó, tomó de noche al niño y a su madre, y se retiró a Egipto. 15 Y estuvo allí hasta la muerte de Herodes, para que se cumpliera lo dicho por el Señor por medio del profeta: "De Egipto llamé a mi hijo".
Topamos de nuevo con la manía de Mateo de forzar los hechos para hacerlos corresponder con las profecías. Y ahora viene el horror y por lo que sabemos que a los magos les costó dos años llegar (si hubiesen existido):
16 Entonces Herodes, al ver que había sido burlado por los magos*, se enfureció terriblemente y mandó matar todos los niños de Belén y de toda su comarca, menores de dos años, según el tiempo que había precisado por los magos.
17 Entonces se cumplió lo dicho por el profeta Jeremías:
18 Un clamor se ha oído en Ramá,
mucho llanto y lamento:
es Raquel que llora a sus hijos,
y no quiere consolarse,
porque ya no existen.
Parece muy injusto que todos esos niños muriesen cruelmente, en lo que se ha dado en llamar La Matanza de los Inocentes, cuando Jesús seguramente ya estaba muy lejos de allí, en Egipto o en Nazaret. Pero podemos consolarnos pensando que esa matanza no se dio nunca, porque no aparece en ninguna crónica o escrito histórico (y están registradas todas las maldades de Herodes). Tampoco aparece en ningún relato israelita así como tampoco aparecen esa huida fantasma a Egipto ni las figuras de los magos, excepto en los evangelios apócrifos que se escribieron bastante después y que toman como referencia el de Mateo.
Posdata
La fantasía posterior ha hecho variar su número desde 2 hasta 12. A partir del siglo VIII, los Reyes Magos recibieron nombres, con algunas variaciones. Los primeros fueron Bithisarea, Melchior y Gathaspa. Ya en la Edad Media fueron incluso venerados como santos.
Los nombres de Melchor, Gaspar y Baltasar aparecieron por primera vez en el Evangelio Armenio de la Infancia del siglo IV; pero no serán aceptados definitivamente hasta mediados del siglo IX. Como última curiosidad relacionada con los Reyes Magos, cabe destacar que a Baltasar no se le representó como un rey de tez negra hasta el siglo XV.
Según algunos, predicaron el cristianismo y fueron martirizados enterrándolos a los tres, tras la tortura, en el mismo sarcófago. Se cuenta que el Emperador Federico Barbarroja llevó sus huesos hasta Colonia, en Alemania.
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