Fue de las primeras en despertar alguna peculiaridad, después de aquel misterioso niño que brillaba nació, todo se volvió caótico. Muchos decían que era el hijo de Dios que había hecho su regreso a la tierra. Lastimosamente para muchos, esto resulto ser falso, se detectó un "súper gen" el cual siempre había estado presente en todos los humanos sin signo de ser despertado.

Poco a poco comenzaron a aparecer casos aislados del mencionado gen despertando, no todos brillaban. De hecho cada persona tenía diferente superpoder, desde poder controlar el fuego hasta la ya conocida superfuerza, sin embargo, su caso fue especial.

No se presentó en su infancia temprana, ni siquiera en la tardía, se presentó unos días después de cumplir 15 años, el día en el que decidió confesarse a su mejor amigo y como se pueden imaginar, fue brutalmente rechazada por una sonrisa y un "Nos vemos el lunes", si bien era su mejor amigo y lo amaba, mentalmente prometió darle un buen golpe cuando volviera a verlo.

No fue algo difícil de aceptar, ella ya sabía que él no tenía sentimientos hacía ella pero aun así no perdía nada por intentarlo. Al llegar a su casa se dio cuenta de que había hecho una estupidez, su corazón latió con fuerza y simplemente deseó aparecer en un lugar donde nadie la conociera, cualquier lugar donde pudiera pensar sin necesidad de rendirle cuentas a nadie.

Para su buena fortuna así fue, de un momento a otro apareció en un gran parque que al indagar un poco, resultó ser el bosque de Chapultepec, al enterarse de eso, sintió como un extraño sudor frio se deslizó por su espalda, sacó su celular de su bolsillo y se dio cuenta que no habían pasado ni 15 minutos desde que había estado en su casa, su corazón se aceleró nuevamente y cerró los ojos, deseando estar nuevamente en su hogar y bueno, así fue, se teletransportó y recorrió más de medio país en tiempo récord.

No quería que nadie se enterara de esto, ni siquiera sabía sus propias limitantes, así que comenzó a retarse a sí misma. No era difícil teniendo en cuenta que pasaba gran parte de sus tardes sola, hija de padres divorciados y con una madre trabajando en el turno vespertino era más fácil de lo que le hubiera gustado. Poco a poco se dio cuenta de que tenía que conocer el lugar o tener una idea visual del lugar donde quería aparecer.

En sus viajes se dio cuenta de que también podía entender y hablar la lengua del lugar donde estuviera, fue curioso experimentar eso porque siempre había sido pésima aprendiendo cualquier idioma.

Al inicio, su propia rectitud le orillaba a dar simples paseos por el lugar donde estuviera, al fin y al cabo un adolescente suele tener poco dinero vaya a donde vaya. Sobre todo si es un país extranjero del cual conoces poco, así que, para intentar hacer algo de dinero fácil, empezó ahorrando lo poco que le daban para la escuela y empezó a comprar artículos varios que solo podía encontrar en su país.

Para su fortuna, fue más fácil de lo que parecía, lo que compraba, lo vendía a un precio mucho más elevado que el precio original, aun con esto en cuenta, resultaba más barato comprarlo con ella que comprarlo en tiendas especializadas por que hablábamos de distintas monedas, empezó incluso a vender cosas de diferentes países entre sí y aquella chica de 15 años, logró ganarse el apodo de vendedora fantasma, ya que en cuanto la compra se realizaba, desaparecía en un parpadeo.