Nota:
Esta página se lee con la canción del encabezado para más disfrute.
Sin nada más que decir.
Espero que les guste.

-soy como la jodida canción de la mierda donde actuas- hable sin vacilar, con la mirada en el suelo y aun intentando comprender el vacio avazallador en mi pecho, di unos pasos hacia  la alacena, saque una taza, examine sus detalles, cogi el recipiente de agua caliente, lo destape y verti en aquel utencilio su contenido, luego  lo acompañe con un poco de leche, sin azucar, sin nada, como ahora.
-¿que?- dijo, desde su lejanía y ese sobrio pantalón de jean, que acompañaban sus pasos, solo eso
Su desnudez ya no tocaba mi ser, ahora no.
Se deshizo de esa capa suya, esa capa que estaba a medio vestir.
-si, no me importa ya nada, estoy perdida, perdi mi tiempo y mi  amor por esto y ahora no me importa nada... soy el jodido soundtrack de tu trabajo-
Se me salio una risa hasta enferma ¿como pude relacionarme con eso? El personaje de Antonio era timido, aprensivo, por demas sumiso y hasta un pequeño ratoncito de biblioteca que era el esposo cliche que vivia para su familia y al final terminaba en un circulo vicioso que no podia escapar y no por una mujer... sino por miedo, miedo al claustro que vivia a diario, en cambio, Antonio, se comia al mundo, su persona, su ser, la forma en como erguía su cuerpo a mi lado, haciéndome sentir pequeña.
Respirar me estaba costando demasiado, esta era le segunda vez en mi vida donde el ridículo pitido de mi consciencia entorpecida todo.
Habia viajado desde mi pais hasta España, para que ahora este de pie, a su lado, con su mirada distante, fria, lapidaria y casi funebre.
Mis labios temblaban, querer gritar, no poder articular mas que esa oracion, no hay mas

-¡MIRAME MARICON!- le grite -¿me hiciste traer para esto? ¡para tenerme en tu caja de cristal! ¡dormia sola en una cama gigante! Mientras tu te largabas con tu mujer, tu esposa...-
Me atragante con la saliva, fue mi culpa, enamorarme de sus ojos, de su forma de hablar, de su super poder para hacerme sentir unica
¡que rabia! ¡que impotencia!
Arroje la taza floreada, en esa que nos acompañaba a ambos a ver estos atardeceres frios de Madrid.
-lo siento demasiado- solo eso dijo, solo su voz rasposa, solo miraba al suelo y acariciaba su cabello con insistencia -siento, siento haberte traído, pero, ya no podia estar lejos...-
-que puto mentiroso- susurre

Estaban riendo, ambos, no estaban tomados de la mano, pero ella posaba su cabeza en el brazo de el, ya que el, era extremadamente alto.
Elegían unos interiores de cama, blancos como la pluma de un cisne, parecía mullida y por demás costosa, pero lo valía, parecía compartirlo.
Lo compartía con ella.

El solo alzaba las cejas mientras ella, con su horrible acento, parecía ver la marca e indicarle cuanto costaría en otra tienda por departamento.
Su mueca de aceptación, seguido por el sonido de mis pisadas se hizo evidente, ella no comprendía nada y es más, me sonreía amablemente, seguro debía haber sido la costumbre  del trabajo tan requerido de su "esposito".

-anda Anto, firma, la muchacha se ve muy sorprendida-

-con Alejandra ya no existia nada mas que una cordial amistad por los niños...-
-¿niños?- lo mire -son dos gemelos de 3 años ¿crees que ignoraria eso tambien?-
-nunca te pedi que lo hicieras-
-¿entonces que? ¿Todos jugariamos a la casita feliz? De seguro que por las tardes tomaria te con tu mujer y en la noche cuando los niños se acostaran hariamos que ¿trio?-
-yo no falle Dolores, yo le dije  quien eras, que hacias en mi vida y porque me estaba divorciando antes de todo, antes de ti, no encuentro  logica a tu queja-
-¿sabes que quiero?-
-¿que?-
-quiero sentirme un ratito parte de tu vida, sin tapujos, sin ataduras, sin paredes blancas que nos limiten, eso quiero-
-eso te di-
-claro, me diste eso y como buen ladrón, de noche huyes a estrenar tus mullidas sabanas blancas-
-MALDITA SEA DOLORES- golpeo la mesa y el retumbar, me hizo dar un ligero salto y encoger los hombros, no lo miraba -solo me acuesto contigo, en esa cama, en nuestra cama-
-¿esperas que pase luz ultra violeta a esa habitación para sacarnos de dudas?- 
Ese silencio caracteristico de Antonio lastimaba mi ser, se quedo callado, ni siquiera eso podia responder, responder mis dudas, limpiar mis heridas, lamerlas, curarlas y sanarlas, no, no seria asi, ¡porque no era yo!, yo solo fui el medio comun para cumplir su puto objetivo de fantasear con una veinteañera que de seguro le facilitaria las cosas, le regalaria veranos furtivos y eso avivaria mas su hombria otoñal y tardia, claro ¡quien no quisiera una perra joven latinoamericana caliente y cero prejuicios!
Estigmas dañinos creados por hombres tan cobardes como el.

-dime la verdad- lo observaba, el cogio una escoba y un trapo para recoger los restos de la loza que yacia en el suelo, asi, agachado, tal cual, alzo su mirada hacia mi, intentando tocarme, pero me aleje
-no, no he cogido con ella despues del divorcio, si eso te incita a actuar asi-
-¿los condones?-
-tengo que protegerme ¡por dios Dolores!, no quiero hijos y peor en estas alturas-

Estas ultimas semanas habian sido eternas torturas para mi, no se si para el, o para ambos, o para ella.
Mi foto en cada kiosko, restaurante, libreria, programas del corazon, paginas de internet y demas fuentes de comunicacion, una foto sacada de mis redes sociales, otra foto, eramos ambos, vacacionando en Canarias, como una pareja sola, un tanto dispareja por sus años venidos y mi cuerpo relativamente joven, ambos en pleno sol, tostados por la brisa y la arena, yo encima suyo, solo con unas gafas negras, que aproposito eran suyas, el, con un sombrerito de viejo, un traje de baño azul marino y su mano, dentro de mi bikini negro, justo tocandome una nalga, la siguiente foto, ambos dandonos un beso en la misma posicion.
Aun recuerdo el sabor de ese beso, mi peotector labial, su sabor a cerveza y...

-¡Antonio!- hablaba entre risas, el solo jugaba con mi tanga -alguien nos vera, vendran a llamarnos la atencion, te reconocerán y los curiosos caeran como buitres...-
-¿sabes que? - esos ojos oscuros que me traian loca, esa mirada de comerse al mundo pero de paz completa, su barba bien producida, pero a la vez varonil, cubria aquella boca que dijo -me importa un carajo, eres mia, soy tuyo, ya no hay nada mas despues de eso-
-¿y tu trabajo?-
-el trabajo me llevo hacia ti, mas respeto que ese no le debo-
-estas idiota, completamente, a tal punto de delirar, debes cuidarte-
-no- me dio una nalgada, que sono de tal manera, que los bañistas cercanos, giraron un segundo y luego volvieron a lo suyo
-eres un pervertido-
-es mio- araño ambas nalgas, hice una mueca de dolor tan comica al parecer, que el solto una risa gigantesca, intente taparle la boca, pero me apreto los dedos con sus labios, agacho un poco la vista, quedando su mirada frente a la mia, como la primera vez, que podia lograr erizar mi piel y perder mi sensacion de ubicacion
-ya perdi mucho por supuestos Do, ya no puedo seguir perdiendo, no es un modo de vida-
Y sin pensarlo ocho veces, se abalanzó sobre mi, comiendome con esos labios con marcas de viejos amores, apretando mi cuerpo contra el suyo, su alma contra la mia y sus ganas de ser el.
Quizas yo era su salvo conducto para liberarse.

Y ahora, mientras hacia remembranza, pequeños puntos rojizos marcaban mi pie derecho, la ceramica habia salpicado en todo este espacio.
El recuento de los daños tangibles ya se vizibilazaba con los minutos de silencio.

-no se si me creeras o no, voy a trabajar ahora Dolores, pero, no pude dejar de querer, te quiero completa, te quiero entera, lo de Alejandra  termino hace años, los niños no necesitan saber que sus padres tienen malos momentos o malos ratos, solo seran niños una vez y no soy quien para reventarles el globo aquel, lo unico de lo que estoy totalmente seguro es que lo que tu y medio pais vieron de portada no es mas que la verdad, ¡se cuerda y date cuenta que no te escondo!, por favor...-

Mis lagrimas solo fluían, igual que sus palabras, todas las muchachas de la universidad decian eso, que meterse con actores era hasta un suicidio ya que no sabían si actuaban o decian la verdad.
Vaya a saber si este Antonio, al que desenmascaró comprando con su mujer ropa interior de cama, me esta diciendo la verdad o es el Antonio que trabaja como condenado para una serie que lo lanzo al estrellato.
Y yo solo quiero en este momento al Antonio que le di mi primer cariño, mi primera noche, mi primer desvelo y mi primera salida del pais.

-si, seguro- dijo el, guiado por mi mirada, no, ella no merecía esta noticia o lo que fuera, no ahora.
No mientras elegía la sabana que ambos de seguro compartirían en la noche.

-para la eterna fan, póngale, por favor- dije mirándolo directamente
Sus ojos, igual que su voz se quebraron, luego, la examine a ella -vine desde Latinoamérica a cumplir mi sueño de conocerlo ¡vea como es la vida!-
-si niña, sueños locos de muchachita-

La noche anterior, el y yo habíamos tenido el sexo que deja de ser sexo para llamarse hacer el amor, tomaba mi mano y la presionaba contra la suya, mientras que nuestros besos sabían a nuestras partes intimas, ¿curioso no?

-yo, yo tengo que irme- dije sin titubeos
-¿a donde?- me incrimina
-necesito pensar, PARA MEDIO ESPAÑA SOY LA JOVEN AMANTE, no soy más que eso-
-nunca me deje llevar por los medios-
-pues no es que  yo este acostumbrada a aparecer en Interviú, en todas estas babosadas, no se tu, pero no suelo salir en portadas mientras  me revuelco con mi novio en la playa, ¡porque eso hacen los novios!, se besan, se tocan, se aman-

Tome el bolso regado en la silla, unos cuantos billetes que me asegurarían unos tragos, mi teléfono descargado y mi alma ahí, en medio de esta sala

-no me busques, solo regresaré cuando sienta que necesito hablar, ve al trabajo, tu puntualidad y tu profesionalismo no tiene nada que ver con actos indecorosos-

Me pase la noche entera en casa de Malena, una conocida aqui en España, que gustosa me dio abrigo y un lugar donde dormir, seguro que el estaria loco por volver a casa.
Pero no me veria ahi.

-¿puedo ducharme?- dije
-el arrendador del departamento quedo en conectar la calefaccion y otros servicios a esta hora pero el agua sigue helada...- Malena estaba preocupada por el mal estado de su departamento y cuan caro seria alquilar otro piso como este, su sueldo de secretaria no se daba abasto, pero le permitía sentirse algo cómoda
La interrumpi -tranquila, me gusta el agua asi-
-oye, se que no es lo que Antonio acostumbra a darte pero trata de no incomodarte-
-tranquila, hace mucho que necesito este tipo de compañia-
-eres bienvenida-
Asenti, ya no quise mirarla, porque me estaba costando mucho hablar sin llorar como una niña, ademas ella era una de sus mejores amigas de la infancia, tanto que hasta ella se daba cuenta de como estaban las cosas

1: 00 a.m. mi telefono tenia 18 llamadas perdidas suyas, miles de mensajes aparecian en mis redes, en mi buzon de voz, correo y mensajeria instantanea.

-"Estoy con Malena"-

-"Dolores, por favor, voy por ti"-

-no, ambos necesitamos espacio, por favor, yo creo que mañana regreso"-

-"no, no logro convencerte, al menos, mira este link"-

-"¿te das el tiempo de enviarme un link? no puedo Antonio, hoy no"-

Era de hace unas horas, supongo que en la locacion que le toco, que raro, el no suele dar declaraciones y dicen disgustarle ya que su vida profesional es muy al margen de su vida privada.