-Aura, si tu mamá te trajo fue porque esta realmente preocupada por ti, no es por otra cosa- hablaba Ben, creo que en realidad era el único coherente en este momento.

Guarde silencio, mi espacio, felizmente que ella no había llamado a papá, sino me imagino sentada ahora mismo en un avión yendo a Montreal con un pasaje de ida, pero no de vuelta.
Esta semana había sido muy caótica en todos los sentidos para mi, las redes sociales son demasiado crueles cuando tratan sobre relaciones, llegan a tal punto del morbo que no sabes si ser coherente o ser parte del bullying.

-tu mamá dijo que no querías hablar, no se porqué, no se cuando, pero debes hacerlo, yo nunca te he fallado nenita-

Asentía, todos estos años con mamá y Ben al lado han sido puro confort y tranquilidad para todos, figura paterna no ha faltado, momentos íntimos y de calidad menos, pero si me fui de ahí no fue porque no los quería o porque estaba en fase rebelde.
Quería crecer, quería ver el mundo fuera de la burbuja de casa, fuera de las comodidades que mamá y Ben me ofrecían, porque era parte de mi madurar.
Pero no contaba en ir de vacaciones y pagarme la vida de enamorada, por la que tanto huía del circulo de la universidad o de las reuniones de amigos.

-me engañaron, me mintieron, muy descaradamente-
-¿fue el sujeto del que tu mamá habló anoche?-
Volví a aceptar su respuesta, él entendiendo el dolor atorado en mi garganta, corrió su brazo izquierdo y me atrajo hacia su pecho, llenando mi Alma de ese abrazo paterno que tanto esperaba, pero que no recibí de mamá porque solo se dedicó a decir que era lo que merecía o esperaba porque "que quería un tipo mayor con una niña y sobre todo casado".

-yo, yo me enteré de la manera más cruel, más dolorosa, en el televisor de la cafetería, no se, fue como un portazo a la realidad, él estaba en una especie de fiesta de gala o premiación, la verdad es que no se exactamente que ha sucedido, pero estaba ella ahí-
-su esposa- dijo, acepté callada.
-no salió el reportaje ni nada, no hay vídeos, solo fotos y se sobre entiende que estaban juntos y no solo por el "protocolo"- hice el gesto de comillas con mis manos -¿y sabes que fue lo peor de todo?-
El negó con la cabeza, dejando espacio para mi respuesta -que ella es estúpidamente hermosa y hacen una Bonita pareja-
-que bueno que no la desmerezcas, eso dice mucho de ti-
-claro- bufé -Ben, jamás podré competir o desear competir con ella, ella tiene el 70% del partido ganado, es mamá de sus criaturas, ella lo tiene a él las 24/7-
-son amigos de toda la vida, no te sorprenda-
-eso me pasa por esperar mierdas de la gente-
-¿qué?-
-si, como lo oyes, la vida es mejor a veces si no esperas nada de nadie-
-Aura, por favor, eres muy pequeña para decir esas sandeces-
-es que es verdad, este tipo solo me ha traído Dolores de cabeza, todo el tiempo con miedo, todo el tiempo escondidos, Ben tengo menos de 30, quiero salir con un tipo que no tenga temor a que lo hallen follando en la calle- la mirada asesina de Ben me detuvo -es una broma- y le sonrei -a lo que quiero llegar es que...-
-es que quieres cosas que él no te puede dar-
-si-
-¿pero te las ha negado?-
-no, pero me ha dicho que por ahora, no puede darme eso-
-¿porque?-
-porque según él, teme por mi seguridad, dijo que la prensa en su país es muy carroñera, muy mala con las parejas en este tipo de casos y teme que me agobies y me hagan cometer cosas que moralmente no están bien-
-¿pero han salido fotos de ustedes?-

Saqué el teléfono del bolsillo de mi pantalón, lo desbloquee y entre al buscador, puse su nombre y me arrojaba miles de opciones "Antonio Sepulveda y su esposa", "Antonio Sepulveda casado", "Antonio Sepulveda series" "Antonio Sepulveda datos", etc. Hubo una a la que accedí que decía "Antonio Sepulveda en la playa".
Miles de fotos de ambo inundaron de nuevo mis ojos y con ello, los recuerdos de la crónica de un corazón roto.
Le pasé el teléfono a Ben, el cual, después de saciar su sed de curiosidad, donde solo atinaba a levantar las cejas o torcer la boca mientras bajaba por la pantalla del teléfono, optó por apagar la pantalla y dejar mi teléfono sobre la mesa del costado.
Cogio la cajetilla de cigarrillos, sacó uno del blíster y lo encendió, inundando con ese aroma tan tóxico el momento, claro, si en algo conocía a Ben, era que cuando tocaban momentos incómodos como este, o comía su chicle antinicotina o simplemente fumaba.

-no quiero buscar más, porque la imagen que se formó de ti en el internet es demasiado errónea y no va con la niña que yo crié y a quién deje partir de la casa para hacerse adulta, pero en ciencia cierta mi estimada, solo vi a una mujer y su pareja, tomando el sol en una playa, como las parejas normales, dándose amor y eso-
-ojalá todos pensaran como tu, Ben-
-ojalá, pero no todos tienen la dicha de conocerte-
-¿soy muy niña para él?-
-le preguntas eso a la persona incorrecta, yo era quién cambiaba tus pañales-
Ambos nos reímos a carcajadas, era verdad, pero el prosiguió, colocando su mano en mi pierna, dejando ver el enorme anillo de matrimonio, el cual mamá también tenía y que los había unido hace más de 20 años -¿leíste lolita ?-
Asentí, a decir verdad Navokov fue un maldito perverso pero esa obra es una cosa digna de admiración y lectura.  -¿sabías de las ninfulas?-
-algo así, ya no lo recuerdo con claridad-
-creo que ellos te ven como su ninfula, es por eso que te atacan, más no a él, sin olvidar que el mundo es machista, la prensa sensacionalista y el resto unos mojigatos de porquería que no se actualizan- palamadeo mi pierna dos veces -siempre atacan al más débil de la manada - y se me vino a la mente, una gacela pequeña siendo devorada no por leones o tigres, sino por las hienas y su risa fastidia, con el filtro de los documentales que ves los domingos por la tarde cuando no hay cable y hace un calor endemoniado, la voz de Ben era la voz en off que narraba cada parte de esta matanza -no lo harían con él porque él nunca les dio cabida a pesar de estar tantos años en ese mundo, por lo que se del tipo que causo que tu madre tuviera espasmos e intranquilidad por una semana, es que es muy muy profesional, muy correcto y un buen hombre de familia...-
-¿crees en su divorcio?-
-creo que no le dieron la oportunidad de enamorarse, fallar y regenerarse, Aura, eres su verano, eres su ninfula y con eso Nínfula no es la chica agrandada que se pone tacos, se ajusta la cintura y se levanta las tetas para que los hombres la tengan por hembrita colchonable. La nínfula no es presa erótica, sensu stricto, y ni remotamente se parece a la chicoca resuelta y vulgar y muy afanada en demostrar al varón que la solicita que ella también puede abrirse de piernas como cualquier mujer hecha y derecha. La auténtica niña-mujer es, a contrario sensu, encantadora, grácil y delicada, exquisitamente seductora; un ser por de contado fetichizable.
Eres tu, toda tu, es tu evolución a su lado y tu madurez que cubre la suya-
-pero salió con ella-
-salió, saldrá y seguirá haciéndolo porque es madre de sus hijos y mi estimada, ese vínculo tu no lo podrás romper-
-no quiero hacerlo-
-lo que quieres es ser prioridad, más no opción-
-¿me estas leyendo la mente, Ben?-
-Aura, eres el reflejo de lo que tu madre y yo te hemos enseñado, te hemos empujado y ayudado, pero en el amor no sirve nada de lo que te estoy diciendo, puedes perder la cabeza o la razón, pero el amor seguirá estando ahí como esa pieza faltante en el rompe cabezas de tu vida y...-

El timbre de la casa rompe con la ilación del momento -seguro llegaron tus tíos para la cena-
-gracias Ben- dije mirando el enorme patio verde que nos albergaba del resto de la realidad, sin duda, la casa de papás siempre será nuestro refugio.
-vamos, tu mamá me sacará los ojos con el trinche si es que no la ayudo a cocinar o al menos atender a sus invitados-
Él, adelantó los pasos y aproveche para ir al baño con el teléfono, encerrarme ahí y responder con ciertos ánimos los mensajes de mis conocidos de la facultad y los de Lore, que enviaba fotos desde Portugal y sus noches alocadas.
Todos le ponían "que bacán", "excelente" y yo solo dejaba en visto.
Cogi un pedacito de valor y le escribí a Lorena
"Disfruta".

No podía hacer más que eso, ya que bombardearon con preguntas de a donde fui a pasar mis vacaciones y porque parece que muero cada vez que desaparezco.
Pero es bueno desaparecer.
Es saludable.

Hice el ademán de tirar la cadena y emitir el ruido exagerado de los antiguos baños, abrí la llave del agua, enjuague mís manos y rostro, cerré la puerta y fui en dirección a la cocina, de donde provenían rosas y carcajadas, sonidos de copas chocando y más de seis personas dialogando entre sí.
Seguro mis tíos dirían que crecí demasiado, otros que estaba muy flaca y en el peor de los casos: que el amor me ha consumado.
Apoyándome en el Marco de la puerta de la cocina, les dirigí una sonrisa amigable a cada uno de ellos hasta que...

Oh madre santa.

Antonio estaba de espaldas, aun no hacíamos contacto ni visual, ni fisico. Todo fue instantáneo , con una polera roja, manga larga, doblada hasta los codos, unos pantalones negros y sus típicas botas negras de cuero.
Ese cabello que tantas veces había jalado en el sexo y esa espalda que me cubría del frío de la noche.
Seria mentir que quise huir de ahí, ¿él había viajado doce horas para llegar? ¿Como supo de la casa de campo de mis papás?, hasta que comprendí el hecho de Ben sentado a su lado, el tiempo que se tomó para escuchar mi sermón de puta adolorida.
Malditos sean.
Pero me alegraba, mi Alma se contagiaba de la efusividad del momento.
Él giró al ver que las otras personas gritaban mi nombre y coreaban que me sentara a comer, ¡hasta mamá!, mordió sus labios en una rápido acción y se puso de pie, avanzando hacia donde yo estaba, su perfume, esa loción de Paco Rabanne que tanto conocía inundó mis fosas nasales, acto seguido, me regaló una sonrisa gigantesca.

¡me va a volver loca su actuar!.