Personaje: Asistente de la Guardería (Sun/Moon) (FNAF Security Breach)

Parte: 1/2

Advertencia: maltrato infantil

Tiempo: actual

Protagonista: Darla, 7 años, ojos azul y café, cabello rojizo ondulo hasta la mitad de la espalda

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La hora de la siesta estaba por llegar, todos los niños disfrutaban de los juegos y juguetes de la guardería, Darla estaba dibujando sola, ya que no le gustaba mucho estar cerca de los demás niños, ya sea por como la miraban o porque se alejaban sin dejarla hablar. Sun notó a la niña solitaria, por lo que se sentó junto a ella y tratar de entender porque estaba tan alejada.

-¡Hola, Luz de estrellas!

-Hola...- contesta un poco nerviosa.

-Soy Sun ¿Ya me conocías?

-Un poco... Un gusto... Soy Darla...

-¿Porqué estás solita, Darla?

-Ya me acostumbre...

-¿No quieres tomar Fizzie Fazt y jugar a las escondidas con los demás?

-No le agrado a los demás niños.

-¿No? ¿Porqué dices eso?

-Siempre tengo sueños feos, creen que si se acercan a mi, les podría pasar algo malo. Soy muy rara también, así que no los culpo por no querer estar conmigo.

-Oh, vamos pequeña. Tal vez solo debas darles la oportunidad de conocerte mejor.

-No, ellos no quieren. Esta bien, ya me acostumbre a estar solita, incluso cuando no esta mami.

-Oh, pequeña...- suena una campana -¡Niños, es hora de la siesta!

Los niños suspiraron con tristeza, Darla no mostraba mucho interés, solo viendo como Sun y un empleado del Pizza Plex repartían bolsas de dormir; los niños se pusieron en grupo junto al animatronico, menos la niña que se metió en uno de los juegos, quedando dormidos rápidamente antes de que se apagarán las luces. Momento en que el asistente de la guardería cambió a su modo nocturno, fue cuando se alejo de los niños, asegurándose que todos estuvieran dormidos, entonces escuchó un quejido.

-Mami...- era casi un susurro.

-Es hora de dormir- sus cuerdas lo sacaron de entre los niños hasta una de las entradas de los juegos.

-No, mami... Ellos son malos...- escucha la voz de la niña.

-Niña traviesa...- se mete al juego, encontrando a la pequeña Darla, quien estaba cubierta por la bolsa de dormir, pero no dejaba de moverse.

-No quiero... Ellos me odian...- la niña se movía mucho -Déjenme...

-Hm... Sigue dormida- Moon la reviso y la escaneo, notando que aún estaba dormida, pero era raro que hablara y que estuviera tan agitada.

-Mami... No me dejes con ellos...

-Niña...

-¿Mami?- la niña despierta de golpe, viendo al animatronico con susto, para luego calmarse, confundiendo al robot -¿Te desperté?... Perdón... No creí que haría tanto ruido esta vez...

-No, no hiciste mucho ruido, es que yo tengo un oído agudo.

-Oh... Bueno... Eso tiene sentido...

-Deberías estar dormida... Ya es pasado la hora de dormir.

-Perdón, no quería despertar todavía... Pero... No soy buena para dormir.

-... Toma... Ayuda a dormir- le entrega un caramelo moondrop.

-¿También con los sueños feos?

-¿Sueños feos?

-Los tengo muy seguido...

-Tal vez no los tendrías si durmierás con los otros niños.

-Ellos no me quieren cerca... No importa, ya estoy acostumbrada... Perdón por despertarte...- estaba por comerse el dulce.

-Espera...- sostiene su pequeña mano con cuidado de no lastimarla -¿Quieres que te acompañe para que duermas tranquila?

-No, estoy bien, solo tengo que... No pensar en nada, es más fácil dormir si no pienso nada...

-... Ven conmigo.

-Pero... No quiero despertar a los otros.

-No lo harás, te llevaré a un lugar más cómodo ¿Te parece bien?- ella asiente -Vamos entonces.

Moon toma a la niña en sus brazos, saliendo de la estructura de juegos, es elevado por el cable que está conectado a su espalda, hasta la plataforma por donde Sun siempre entra a la guardería. Darla estaba confundida, siendo acostada dentro del cuarto, junto a algunos peluches y almohadas, viendo al robot acostarse a su lado.

-¿Duermes con peluche?

-No, sólo con mi almohada en la cama de mami.

-Elige uno entonces, el que quieras...

-¿En serio?

-Sí, el que tú quieras- ella mira los peluches, tomando uno de Moon.

-Gracias...

-¿Cómo te llamas, estrellita?

-Darla...

-Mucho gusto, Darla, yo soy Moon. Yo cuido a los niños en la noche.

-¿Eres como un angelito?

-Podría decirse que sí.

-Mami dijo que mi angelito se fue porque siempre estaba triste cuando dormía, y que por eso tengo sueños feos.

-Oh no... Eso está mal, los angelitos deben cuidar bien a sus niños...

-Tal vez mi angelito también le tenía miedo a mis sueños, como yo y los otros niños.

-Bueno... ¿Qué tal si yo me vuelvo tu nuevo angelito para cuidarte de tus sueños feos?

-¿De verdad?- dice la niña feliz.

-Sí, así cada vez que te sientas asustada, te acordaras que estoy contigo, tanto en la guardería, como en el peluche.

-¿En serio? ¿Me lo puedo quedar?- dice con una sonrisa grande y los ojos llorosos.

-Sí, y podrás abrazarlo cuando te sientas solita, para que recuerdes que yo estoy contigo.

-Entonces... ¿También somos amigos?

-Sí, Darla, soy tu angelito y tu amigo- ella lo abraza.

-Gracias.

-No hay problema, pequeña- se separan, él la ayuda a acomodarse, abrazándola mientras ella abraza al peluche y se come el dulce moondrop -Buenas noches, estrellita.

-Buenas noches, angelito.

Pasaron pocas horas y la luz volvió en la guardería, Sun había despertado, aunque la pequeña Darla seguía con el efecto del dulce, fue entonces que el animatronico notó algo raro bajo su abrigo, se lo abrió con cuidado de no despertarla. La pequeña tenía un suéter gastado y con agujeros, marcas de moretones en sus brazos y cerca del cuello, los pensamientos del asistente de la guardería se interrumpieron cuando escucho que la niña despertaba.

-Hola, Luz de estrellas.

-... ¿Moon se fue?- dice abrazando el peluche.

-¿Él te trajo aquí?

-Sí, es que lo desperté y me dio un peluche y un dulce para que pudiera dormir bien.

-Bueno, ya que es hora de despertar ¿Qué tal si bajamos antes de que los demás despierten?

-Está bien...- se levanta, iba a salir por la puerta pero Sun la detiene.

-Alto, pequeña, no puedes estar así, tu ropa está gastada.

-Solo debo ponerme mi abriguito, mami dice que funciona.

-No, no, no. Vamos a ponerte algo bonito ¿Sí?