Otro día deprimente en la escuela, estoy harta ¿Porque simplemente no pueden dejar de meterse conmigo?

¿Qué les he hecho yo? Simplemente soy yo misma… Bueno al menos tengo amigas que me ayudan… y otras que no me ayudan tanto. Que pesadez, estoy tan harta.

AL DIA SIGUIENTE

-Hola Yui.

-¿Qué? Ah hola Cintia.-Conteste.

-¿Has visto las demás?- Dijo Cintia animada

-No. Ya vendrán.

-Tan fría como siempre.- Dijo en broma.

-…-Deje de prestar atención.

De repente apareció Acer, la única persona por la que valía la pena ir al instituto, era un chico bastante normal ojos claros, pelo algo oscuro y delgado. Respecto a mí no soy lo que se llama una “belleza”. Pelo largo y claro, ojos verdes, soy bastante atlética.

-Yui, Yui… Contesta ya han abierto la clase tenemos que entrar.

-Si ya voy. ¿Han llegado las otras?

-Sí, ¿No te has dado cuenta?

De repente apareció Marta. Ella es esa amiga que no me ayuda tanto.

-¿Qué Yui? Mirando a Acer ¿Verdad?-Dijo

-Deja me en paz.

-Te gusta es evidente.-Siguió Marta

-Vamos déjala ya Marta

-Gracias Cintia.

-¡Chicas entrad ya!-Grito Iris desde el aula

Entramos en clase y como siempre se metieron conmigo solo porque visto más oscura que las demás chicas. Solo porque soy diferente, que asco. Marta me dejo en ridículo delante de Acer, es injusto antes podía hablar bien con él y solo por esto ya se empezaron a meter conmigo. Suerte que Cintia e Iris me ayudan. Normalmente no me quejo simplemente acumulo el dolor.

-Oye Acer, le gustas a Yui.-Grito Marta.- Hacéis buena pareja.

-¡MARTA CALLATE YA!-Grite sonrojada desde mi sitio. Al parecer Acer me hoyo y al verme se giró fríamente, cada vez que pasa eso tengo ganas de llorar.

-Acer eso no es cierto Marta se lo inventa.-Dijo Cintia.

El no contesto. Pasaron las primeras horas de clase y por fin salimos al recreo. Ahí es cuando las cosas se torcieron. Marta se empezó a meterse conmigo.

-Mira Yui tu novio ¡He Acer!-Cintia e Iris le pusieron la mano en la boca, ella enseguida se liberó.- ¡Que hacéis! Solo era una broma.

-Ya pero esas bromas cansan.

-Vale lo siento.-Por mucho que Marta dijese eso siempre volvía a meterse conmigo.

En ese momento llegaron unas de las chicas “populares” de otra clase, todas se metían conmigo pero la que más lo hacía era Úrsula.

-¡He tú! Tan rara como siempre.

-Dejadme en paz.-Les dije cabreada.

-Quiero preguntarte algo.

-¡¿Que c**** quieres?!- Dijo Cintia

-¡No hablo contigo!-Le contesto.

-Dime

-He oído antes que te gusta Acer ¿Verdad?-Me dijo

-Eso no es verdad.-Le dije con una mirada baja.

-¡Exacto, así que dejadnos en paz!-Les grito Iris

-Ya, seguro. Chicas nos vamos, ya volveremos cuando no tengas a tus guardaespaldas.-Dijo Úrsula burlándose

En ese momento sentí muchas ganas de llorar pero me aguante, como siempre.

AL DIA SIGUIENTE.

La mañana fue muy parecida Marta se siguió metiendo conmigo y disculpándose cada vez que lo hacía, Acer seguía ignorándome y yo cada vez estaba más triste. En el recreo fue donde todo empezó.

-¿Cómo estas friki?-Me dijo Úrsula riéndose de mí.

-Déjame.-Dije tranquila.

-Sabes Acer es muy guapo.

-¡Ni si te ocurra tocarle un solo pelo!

-Anda si te has puesto celosa ¡Mirad todos a Yui le gusta Acer!-Grito por todo el patio. Todos se giraron y se rieron de mí pero lo peor de todo fue que vi como Acer entraba dentro del instituto corriendo.

Normalmente en una situación así me pondría a llorar, no fue así me empecé a cabrear, pero por suerte llegaron Cintia y compañía. Ella no sabe que me gusta Acer la única que lo sabe es Iris.

-¡DEJADLA! ¡¿A VOSOTROS OS GUSTARIA QUE OS HICIERAN ESO?!-Grito Cintia.-Vamos dentro.

Corrimos hacia clase. Al sonar el timbre nadie me dirigía ni una palabra. Entramos en el aula y antes de que llegara el profesor vino el grupo de Úrsula a nuestra clase.  

 -¿Qué te pasa? ¿No ha venido tu novio?-Dijo Úrsula en tono burlón.

No conteste solo miraba el pupitre deseándose que se fueran. Justo en ese momento apareció Acer.

-Mira quien ha llegado ¡He Acer! Ven.-Grito ella

Él se acercó normalmente como si nada hubiera pasado. En ese momento Úrsula lo agarro de la camisa y lo beso. Todos se quedaron mirándome para ver que haría en ese momento. Empecé a pensar en todo lo que me había hecho durante todo el curso y que ahora besara a Acer, fue demasiado. Me levante tirando la mesa al suelo, todos se apartaron de nosotras menos Cintia.

-Y-Yui… Qué te pasa, estas blanca.-En ese momento levante el mirada.- T-Tus ojo… Se han vuelto grises. ¡¿Qué te pasa?! ¡REACCIONA!

No podía controlarme, cogí a Úrsula del pelo, agarre unas tijeras de encima de la mesa y le corte el pelo. Ella se defendió, me pegó un puñetazo en la cara, la tire contra la pared y le clave las tijeras en el brazo.

-¡YUI! ¡Despierta!- Al oír eso desperté de pronto, era Ares.

Lo mire, a él y a todos los demás, vi cómo me miraban asustados, las amigas de Úrsula llorando, a ella manchada de sangre y mis manos también manchadas. Empecé a llorar, Cintia se me acerco.

-Yui… Estas bien.-Dijo ella.

-¡NO ME TOQUES! ¡QUE NADIE ME TOQUE!- Me fui corriendo, salí del instituto corrí tanto como pude, vi como todos los profesores corrían hacia mí y yendo más rápido que ellos estaba Acer. Empecé a correr más rápido hasta perderlos de vista.

Llevo más de un año huyendo, solo pienso en una cosa vengarme, vengarme de todos los que me han convertido en lo que soy ahora. Algún día lo conseguiré y entonces podré descansar. Acer… Donde estará.      

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Hola :3 espero que les guste la historia, esta no es de tanto terror como las otras pero espero que os guste igualmente.