La humanidad:definida como el conjunto de seres humanos que habitan en el planeta con la capacidad de sentir afecto, solidaridad y comprensión hacia los demás... Esa definición se esfumo totalmente desde el día en que las personas perdieron cada sentido de la palabra "humano"...

Todo comenzó en un día sumamente tranquilo, todos en su vida usual (Trabajo, estudios, hogar). Eran poco mas de las 9:30 a.m cuando salio un informe en el noticiero matutino informando sobre unos cuantos ataques de canibalismo, algo fuera de lo común en una ciudad tan pacifica como la nuestra, sin embargo no presté mucha importancia y me dirigí a llevar a mi hija (de 15 años de edad) a la escuela. 

Cuando estábamos a medio camino nos vimos atrapados en el trafico, la ruta nunca había sido concurrida por tantos vehículos como lo estaba en ese instante, algo debía estar ocurriendo un poco mas adelante, habían unos pocos policías corriendo hacia el origen de la obstrucción de la vía. Pose mi vista hacia los costados y algo capturo mi atención, una mujer, parecía aterrorizada, no entendía el porque hasta que note al hombre que la perseguía, en ese momento mi ignorancia suponía que se trataba de un vagabundo (ropa sucia y algo desgastada), el hombre estaba fuera de si, su cara no mostraba expresión alguna; la mujer finalmente fue alcanzada por aquel hombre, pensé en ir en su ayuda pero aun así la distancia no era una ventaja, lo que sucedió hizo que el pánico se apoderara de mi cuerpo... La boca de aquel hombre alcanzo la garganta de la mujer provocando que una fugaz cantidad de sangre saliera disparada, el hombre seguía allí, dando mordida tras mordida hasta acabar con la vida de la mujer. 

Voltee a ver a mi hija, quien al parecer también había atestiguado tal escena... Permanecimos un momento en un inquietante silencio hasta que algo nos hizo volver a la realidad, incesantes gritos. No nos tomo nada de tiempo el interpretar el origen de aquellos gritos sino que instintivamente salimos del auto y corrimos en dirección contraria, la misma escena que presenciamos antes se estaba repitiendo una y otra vez a medida que corríamos por las calles, parecía ser un filme de terror.

Las personas corrían desesperadamente por sus vidas, otras se encerraban en sus hogares y ponían barricadas en puertas y ventanas; mientras corríamos podía ver el horror reflejado en los ojos de mi hija... Me sentía impotente al verla en ese estado, no podía soportarlo, la ira me cegó, simplemente quería proteger a mi hija a toda costa, me acerque a un hombre armado con pasos firmes, no me costo en absoluto en conseguir el arma... Pero si me costo tomar la decisión que me quito mi humanidad, asesinarlo.  

Y así fue como llegamos a nuestra situación actual, disparo tras disparo y mi ahora bien reconocido mal criterio nos dejo atrapados. Nos habíamos refugiado en un pequeño almacén, teníamos lo que necesitábamos para sobrevivir unas cuantas semanas pero mi ambición e instinto de supervivencia quería mas, más recursos, más tiempo de vida... Insistí en refugiarnos en el centro comercial, donde me pareció tendríamos suficientes recursos para mas de un mes, mi hija suplicaba por permanecer donde estábamos pero yo la force a venir conmigo. Y aquí estoy, mirándola dormir pacíficamente mientras aquellas bestias rompen la puerta a pedazos, no tardaran mucho en entrar por nosotros. 

Con solo una bala restante cerré los ojos y apreté el gatillo... Ahora ella podrá dormir en paz sin interrupciones... Una pequeña lagrima recorrió mi mejilla cuando me entregue completamente a lo que era mi fin...