Surgen dudas

-Siempre pensé que ustedes tendrías una gran hija -susurró Hiroko.

-No puedo pedir nada mejor -susurró Viktor. 

Su pequeña se encontraba dormida, había sido un día agotador, así que no había esperado a que le contaran la historia de la noche. 

-Viktor, Alena me preguntó hoy acerca de tus padres, me preguntó si yo los había conocido cuando ustedes se hicieron pareja -la voz de la mujer se encontraba angustiada. 

-Yuuri le ha contado un poco de nuestra historia con ellos, supongo que le hará muchas preguntas a mis padres cuando lleguen para su cumpleaños -Viktor se acercó a donde su hija y besó su frente. 

-Le he dicho la verdad, no podía mentirle -ambos salieron de la habitación. 

-No quiero que ella piense mal de mis padres, ya de por si la situación es tensa cuando están aquí, ellos la quieren a pesar de que aún no están contentos con mi familia -caminaron hacia la cocina, donde se encontraban los demás.

-Lo sé, pero ella tiene derecho a que sus preguntas sean contestadas, le he dicho que nosotros los hemos conocido cuando ella nació y que no tenemos mucha comunicación, solo cuando todos estamos aquí -la mujer se sirvió un poco de té y tomó asiento al lado de su esposo. 

-No debí contarle sobre lo sucedido -Yuuri suspiró y Viktor lo abrazó.

-Tu madre tiene razón, tiene derecho a saber -besó la mejilla de su esposo para tranquilizarlo. 

-Además, ella aún es un niña, mejor contarle ahora, si esperamos a que sea mayor ella entenderá mejor las cosas y puede que sea peor -habló el señor Toshiya. 

-Será mejor ir a dormir, mañana tendremos que salir a comprar las cosas que faltan para la fiesta de Alena -los señores Katsuki se despidieron, para luego marcharse a su habitación correspondiente. 

-Yurio habló conmigo, ha dicho que los padres de JJ están en la ciudad y que esperaban poder asistir al cumpleaños de Alena -Yuuri abrazó aún más a su esposo. 

-Eso sería estupendo, aún recuerdo todas las veces que esa mujer ocupó el lugar de mi madre, la quiero mucho -Viktor besó en los labios a Yuuri. 

-Será mejor ir a descansar -dicho esto ordenaron la cocina, para luego irse a la habitación. 

La pequeña Alena había escuchado toda la conversación y más dudas acerca de sus abuelos surgían en ella. 

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-Nathalie, es bueno verte de nuevo - Viktor se acercó a la mujer y le di un abrazo.

-También a mi me da gusto verte -aceptó el abrazo -Espero que esté cuidando bien a tu familia-.

Se acercó a Yuuri para darle un abrazo y posteriormente se acercó a Alena. 

-Es bueno volver a verte pequeña -la pequeña le dio un beso en la mejilla. 

-Hemos venido para ver si podemos ayudar en algo -Yurio saludó a todos con un gesto de manos. 

-Nathalie, Toshiya y yo estábamos por ir al super, podrías acompañarnos, tenemos mucho de que hablar -la madre de JJ siguió a la mujer y Toshiya fue tras ellas. 

-Vendré en un rato, si te das cuenta de que necesitas más cosas, me llamas -besó a Yuuri.

-JJ ha dicho algo sobre que él hará el pastel de Alena, así que se han quedado junto a su padre para hacerlo -habló el rubio. 

-Amazing! Muchas gracias, hablaré con JJ -dicho se dio la vuelta dispuesto a salir de la casa. 

-¿Puedo ir contigo? -habló Alena. 

-Por supuesto -dicho esto tomó a su hija en brazos y salieron del hogar. 

-Bueno a trabajar se ha dicho -dicho eso, ambos chicos se dirigieron a la cocina, tenían mucho por hacer. 

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-¿Puedo preguntar algo? -habló la niña a la madre de JJ. 

-Por supuesto cariño -ambas habían ido a buscar una parte de la lista dada por Hiroko. 

-He escucha a mi padre decir que tú eras como su madre, ¿por qué? -preguntó inocentemente. 

-No creo que sea yo quien pueda contestar eso -la mujer ofreció una sonrisa amable. 

-Mi abuela Hiroko ha dicho que ella no conoció a mi otra abuela hasta que yo nací, mi mami dice que hasta la fecha no tiene una buena relación con sus suegros y mi papá dice que no quiere darme una mala imagen de ellos, no es justo -la niña hizo un berrinche y cruzó los brazos molesta. 

-Jean y Viktor han sido amigos desde muy pequeños, hacían todo juntos, la mayorías de las veces Viktor se quedaba en nuestra casa, siempre traté de ayudarles en la que hacían y les daba consejos, ambos eran muy inquietos -la mujer rió ante los recuerdos -Yo también quiero a Viktor como a un hijo-. 

-¿Mi abuela no cuidaba a mi papá? -preguntó confundida. 

-Tu abuela es una buena mujer, tenía muchos compromisos debido al trabajo de tu abuelo, a veces las cosas se dan de ese modo, supongo que Viktor me ve como una madre porque estuve con él en muchas ocasiones en las que su madre no puedo -la mujer se agachó a la altura de la niña -Pero no por ello quiere decir que no lo quiere, tu abuela ama a Viktor, solo que en los últimos años ese amor se a visto opacado por los ideales de su esposo-. 

-¿Entonces tú también eres mi abuela? -la niña sonrió. 

-Me encantaría ser tu abuela -ambas se abrazaron fuertemente. 

Alena pensó que no importaba lo que sus abuelos hubieron hecho, porque sus padres tuvieron a mucha más gente que los quiso y siguen queriendo por lo que son. 

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-Abuela Hiroko, ¿te gusta este vestido? -la niña iba bajando las escaleras. 

-Por supuesto que si -la mujer le dio un gran abrazo -Feliz cumpleaños, preciosa-. 

-Mi princesa es la niña más hermosa del universo -Viktor tomó en brazos a su hija y besó varias beses su mejilla, entonces vio a Yuuri bajar del segundo piso -Como no ser hermosa si su madre es tan bella -.

Los tres se dieron un abrazo y los padres felicitaron a su hija. 

-Yurio avisó que están en camino junto a JJ, su hijo y sus suegros - habló Yuuri mientras iba a la cocina. 

-Phitchi y Seung también han dicho que están cerca, Chris dice que su vuelo se retrasó y llegará más tarde - Viktor siguió sus pasos para ayudarle, no sin antes bajar a la pequeña. 

-Mis amigos tampoco tardarán en venir, ya casi es hora -Alena sonreía ampliamente, estaba emocionada. 

Entonces tocaron el timbre. 

-Yo voy a ver quien es -dicho esto, Toshiya se dirigió a la puerta. 

Segundos después dos personas se hicieron presentes en la sala. 

-Alena, cariño estás ahí -habló la mujer. 

-Mamá, papá, es bueno tenerlos aquí -saludó Viktor, saliendo de la cocina. 

-Viktor, Yuuri, buenas tardes -habló ahora el señor. 

-Alena, mi pequeña feliz cumpleaños -la mujer se acercó a donde la niña estaba, pero esta retrocedió. 

-Buenas tardes señor y señora Nikiforov, los invitados están por llegar, así que les pido tomen asiento -dicho esto se retiró de ahí.

Viktor suspiró, era esto lo que quería evitar. 



Wow! Lamento mucho las demoras, pero ser adulta es un asco, muchos compromisos de aquí y allá. Tiempo libre solo para descansar, un nuevo día y ahh~ No se como es que viven. Además de que me quedé sin computadora, así que fue peor. 

Espero que les haya gustado, siempre he pensado en Alena como una niña muy inteligente y madura para su edad, llena de dudas a las que quiere que alguien le de respuestas y piensa obtenerlas. Para ella es normal ver a sus padres, no entiende por qué sus abuelos fueron tan duros con ellos, sobre todo porque sabe que su papá Viktor se siente triste debido a sus abuelos. 

Así que espero me acompañen con lo que sigue, será difícil para los señores Nikiforov entender la molestia de su nieta, pero tendrán que trabajar duro para ganarse su cariño nuevamente y sobre todo para recuperar el amor y obtener el perdón de su hijo. 

Espero sus comentarios al respecto de este capítulo y lo que esperan del siguiente, agradezco a los que me acompañan en esta historia, así como sus votos. 

Sin más que decir, los quiero. ByeBye.  💖

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