Fue durante un eclipse solar, que los hijos del Reino Soñador vinieron a llegar.
La luna tapó al sol en totalidad y nació el primer gemelo, de piel morena y canela, cuando el sol volvió a aparecer fue que el segundo gemelo pudo nacer, con una piel durazno suave y brillante.
La reina Joku los vio con amor, un beso a cada uno repartió, acurrucandolos contra su pecho a sus hijos nombró, Nightmare; que representaba la pequeña noche que se presentó, y Dream, que irradiaba la luz del sol cuando este volvió a verse.

Pero seamos honestos... el eclipse solar era un evento especial, porque la luna se mostraba un poquito luego de  siempre ser opacada por el sol, y el sol, fuerte y abrasador en calor, es cubierto por unos instantes por un manto refrescante.
El sol puede ser radiante y calido, pero muchas veces arde demasiado, quemando y lastimando.
La noche en cambio, se mantiene fresca o tibia, permitiendo mirar al cielo y ver el espectáculo de luceros brillar con esmero.
Ahora que te damos está versión.. ¿Cambia la percepción no?

Esta es una historia en donde el espectador se  pondrá a prueba, ya veremos en que parte de la historia vemos las caras de la moneda dar  vueltas y vueltas, en donde nuestra percepción juega con nosotros para mostrar nuestro juicio.

Esta no es la historia de un monarca, no es  la historia de un famoso hechicero que recorre los reinos repartiendo su magia.
Esta es  la historia de un simple sirviente, al cual su verdadero legado fue negado, fue desterrado y regreso únicamente para servir.

Bienvenido querido espectador, a  esta historia en particular, la que vamos a denominar "El sirviente de el mal".