Todo sucedió el 31 de Octubre en un lejano pueblo, apartado y desconocido para muchos, su nombre era Escaltia, sus calles eran de piedra y sus casas estaban casi destruidas. Éste era un poblado con pocos habitantes, una de ellos era Kasta, una joven niña que fue obligada a vivir junto a Taner, un borracho y cruel hombre de peleas.

Después de que toda su familia desapareciera, Taner era el ser más vomitivo que ella había conocido pero era su obligación, o mejor dicho, su destino era estar a su lado.

Kasta tenía 15 años de edad cuando Taner se comenzó a comportar de la forma más repulsiva jamás contada. Por las noches iba a su cuarto y, mientras ella dormía, o eso hacía creer, él abusaba de ella sin compasión, día tras día era igual hasta que todo cambió con la llegada de un forastero.

Las calles en tinieblas y vacías de Escaltia se llenaron de un aura oscura, por ellas caminaba un hombre alto de ojos rojos como la sangre y cabello negro como la noche. Cuando llegó a la vivienda de la menor y, tras llamar ésta abrió la puerta con una gran sonrisa, el misterioso hombre dejó caer sus palabras de doble filo.

—Hola, mi nombre es Rey, acabo de llegar a este lugar ¿Podría quedarme unos días en su casa? Le pagaré bien.

Kasta con esa amplia sonrisa le dio permiso y lo condujo hasta su habitación. 

Esa misma noche cuando Taner se enteró le pegó preguntándole por que lo había hecho, a lo que ésta le respondió con una cálida mirada y sonrisa "Por humanidad", eso hizo que el hombre enfureciera y le diera más fuerte, pero no fue su enojo sino su lujuria lo que le llevó a realizar tales actos. Consciente aún, Taner la tiró al suelo y la desnudó, comenzando a abusar de ella, pero en ese momento la voz de ese extraño se instaló en la cabeza de la niña con unas palabras envenenadas, "¿Quieres que me encargue de él? No deberías padecer, solo sella conmigo un trato y te liberaré, todo habrá terminado para ti y podrás ser feliz". Ella no comprendía porque escuchó esa voz pero decidida gritó en voz alta "¡Si!¡Lo deseo! Sello el trato", el hombre preplejo por las repentinas palabras de la niña no paró, pero todo estaba perdido ya, pues la mente maestra se hallaba frente a ella en la ventana acariciado por la luz lunar, ya no desprendía esa gran humanidad, era algo... ¿Infernal? En tan solo segundos Kasta solo pudo ver a Taner en el suelo, desangrándose a lo que extrañamente reaccionó con una carcajada llena de diversión, sí, le gustaba pues estaba pudriéndose por dentro.

Con Taner ya muerto Kasta quedó libre de él para sellar ante la luna el trato con aquel ser. 

Desde esa noche de Halloween, ambos pasaron a ser amo y sirvienta, la acompañante de un joven demonio y cuidador de las almas.

Pasarón los años y ellos seguían en aquel pueblo que transformaron en su hogar, cuando la muchacha cumplió los 24 años, ella y el demonio, ya que ya habian yacido, esperaban el nacimiento de su infante, pero eso no sucedería jamás pues esa noche mientras ambos entrelazaban sus cuerpos en el cálido entorno de las tumbas, unos humanos aparecieron, se miraron y tras asentir sin que la pareja los vieran decidieron quemarlos vivos. Los gritos y el olor a carne quemada comenzó a inundar el hambiente, esos dos hombres que miraban aquella escena reían a carcajadas, pero éstas cesaron cuando el demonio, envuelto en llamas avanzó hacia ellos, que les obligó a morir calcinados, mas cuando intentó salvarla a ella ya fue demasiado tarde. Aquella noche de la tenebrosa fiesta su amada e hijo habian caido, pero pudo salvarla.

Luchó días, semanas, meses incluso años hasta que pudo revivirla mas ya habian perdido a su hijo, jurando venganza y envueltos en furia decidieron buscar a su retoño. Ambos decidieron que cada 31 de Halloween se convertirían en humanos y atraerían a los vivos para poder pagar su furia contra ellos por matar a su hijo o, lo que podría haber sido su lindo bebé.

Ahora, entre criptas y disfraces ellos se encuentran esperándote para pagar su furia.

Si los ves,
huye porque si no lo haces te atraparán y te llevarán a su ciudad.

Kasta se presenta como una joven dama de cabello plateado algo quemado con su rostro pálido, ojos negros llorando sangre y un vestido negro roto y quemado, a su vez, el joven demonio lleva su cabello negro y ojos negros bien pero, una gran cicatriz en el ojo derecho pues se habia quemado más en ese lado, lleva