Entré a mi casa cuya puerta dejamos abierta y pude ver por la ventana como los verdes obligaban a los jóvenes a subir a una camioneta.

Lo bueno de todo esto era que ya estaban mostrándose tal y como eran y todos podíamos notar algo que quizá ellos no querían que notemos , que ellos eran los enemigos .

Había decidido quedarme para averiguar más, no podía aceptar el irme sin hacer algo al respecto.

Claro estaba que no era una espía o algo así, pero sabía que podía encontrar a jóvenes escondidos como yo y juntos poder averiguar más sobre lo que estaba pasando.

Salí de casa, y seguí a la camioneta que se iba directo al laboratorio .Varios camiones se encontraban estacionados y yo escondida traté de guardar en mi memoria cada cosa que alcanzaba ver.

Regresé a casa  y cuando entré un sonido de la cocina llamó mi atención, cogí mi celular dispuesta a tirárselo en la cabeza a quien estaba dentro,

Caminé despacio pero con pasos decididos hasta la cocina y estaba un hombre hurgando en el refrigerador.

Él se giró inmediatamente con un arma entre sus manos mientras tenía una manzana en la boca.

Bajó el arma y cogió la manzana con su mano libre, luego sonrió.

— ¿Qué haces aquí?—pregunté mientras él cerraba la puerta del refrigerador.

— ¿Creías que te iba a dejar sola?—preguntó alzando una ceja.

—estabas en el helicóptero, como fue que....

—Salté —dijo sentándose en una de las sillas de la cocina— ¿Por qué no subiste? sigues sin confiar en mí.

— ¿crees que hubiera dejado a mi familia ahí si no confiaría en ti? —Me senté en la silla frente a él—dices que ¿saltaste? Oh, Dios...tu pierna.

—Tranquila niña, tomo medicina para el dolor —sonrió  — y si yo hubiera sido un loco suelto ¿pensabas defenderte con tu celular?

 — sí, ¿mejor era el florero no?— sonreí recordando el día que lo conocí.

Escuchamos voces en la calle y nos levantamos del asiento, nos miramos y le hice un ademan con la cabeza para que me siguiera.

Nos fuimos a mi habitación y cerré la puerta.

— ¿Por qué me has traído aquí?—preguntó frunciendo el ceño mientras me miraba.

—Para estar seguros ¿Qué crees?—pregunté mientras me cruzaba de brazos.

— Tu habitación no es segura —sonrió.

— ¿Por qué lo dices?

—Porque los armados de una patada pueden abrir esa puerta—dijo señalando la puerta detrás de mí.

—claro pero eso no pasará, deberías tranquilizarte Henndert —me senté en la cama — ¿ahora quien parece la niñita?—sonreí burlona.

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Hola a todas :D , creo que está corto este capítulo peeero mañana subiré el siguiente :)

@wendy_palacios tenías razón , Henndert saltó , no podía dejarla sola :,) 

agradezco a cada persona que se toma el tiempo de leer la historia , votar y/o comentar, creo que  lo he escrito varias veces pero es que enserio GRACIAS .

besos :*

y hasta mañana 