✡ three; party time ✡
Los tres, espectábamos discretamente la conversación.
-Jamás la había visto en mi vida- comenté cuchicheando sobre la dichosa "Erica".
-Quizás si no te juntaras con nosotros, lo hubieras hecho- obvió Ethan.
Siendo sincera, nunca había tenido una amiga mujer, supongo que me relacionaba mejor con el sexo opuesto. Mi círculo de amistades, consistía únicamente en los tres nerds y un gato negro que vivía cerca de la escuela.
De todos modos, me sentía más que a gusto prefiriendo calidad sobre cantidad.
-¿Crees que te arrope hoy?- Rory se dirigió a Ethan risueño.
-¡Ya no hables!- lo calló éste gritando en murmullos, ocultándose de la mirada de las chicas con el antebrazo.
Reí por lo bajo para evitar el enojo de mi amigo y capté a Benny regresar con noticias jugosas en la punta de su lengua. Ethan, deseoso de saber qué dijeron las muchachas, exigió respuestas.
Benny se limitó a chocar los cinco con Rory y dijo-Creo que le gusto, le gusto- se corrigió.
-¿Qué?- pregunté sorprendida. La fama de Benny Weir en el ámbito amoroso justificaba mi reacción.
-Lo que oíste, preciosa- me contestó, robando desvergonzado una patata de mi plato.
-Quién lo hubiera imaginado- repliqué algo mordaz. No me empeñé en aparentar entusiasmo, aún así pasé la prueba.
A excepción de Ethan, mis amigos actuaban como unas adolescentes emocionadas al oír en la radio una canción de su estrella pop favorita.
¿Tan grave era su abstinencia de cariño femenino? ¿Y yo qué? Ese primitivo comportamiento sólo evidenciaba que no me consideraban del todo una chica. Que yo supiera, ningún artículo científico respaldaba que al ser amiga de nerds, las féminas mutaran a un nuevo espécimen. No olvidaría haber leído algo así.
-Te va a cuidar una fan.... ¡de Ocaso!- afirmó el rubio en tono burlesco.-Los fans de esos libros son patéticos.
-¿Sí, quién lo dice? aún duermes con tu pijama de naves.- se mofó Ethan.
-Ocaso, se basa en cuentos de hadas. Star trek, se basa en hechos de física real- se excusó el chico de camisa cuadrille-¿Verdad, Jo-Jo?- solicitó mi apoyo.
-Ni yo lo hubiera dicho mejor, querido Rockstar.
Benny se aclaró la garganta antes de hablar -Sí, pero si un cuento de hadas me dará a mi futura esposa, entonces, érase una vez... ¡conmigo!
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Benny's POV;
-¡Cuidado, tontos!- un chico moreno del club de teatro nos gritó, luego de estar a nada de atropellarnos con su lujoso auto gris.
Advertía algo anormal en esos supuestos jóvenes intérpretes. E iba más allá de su peculiar apariencia o su odioso comportamiento. No sabía qué era, pero pronto lo descubriría.
Mi próxima conquista, Erica, se nos quedó mirando taciturna para irse a los pocos segundos sin decir nada. Se veía tan linda.
-Cretinos...- solté con real impotencia.
-Olvidado, no vale la pena darles más importancia de la que se merecen- Ethan me tranquilizó.
-Oigan chicos ¿quisieran ir conmigo a....?
Antes de que Rory formulara su pregunta, Ethan y yo lo cortamos al unísono con un seco y contundente-¡No!
Lo último que quería en ese momento era oír alguna propuesta absurda proveniente del fan de Star trek.
-Ustedes se lo pierden, nos vemos.- expresó anodino, para acto seguido, mezclarse con la multitud de personas que abandonaban la escuela.
-¿Nos vamos?- interrogó Ethan.
-Lo siento, hermano. Ya se lo prometí a Jordan.- me disculpé.
-Ohhh, ya entiendo. Entonces no tengo nada que hacer aquí. Te veo ésta noche.
<<¿Qué entendió?>>
Como sea, ambos nos saludamos con un ademán de manos y me adentré nuevamente en el instituto, buscando a la chica de las bonitas pecas. La encontré sacando libros de su taquilla, mientras tanto, ajeno a ella, un tipo de más o menos un metro noventa la analizaba de pies a cabeza sin disimularlo en absoluto.
<<Que asco>>
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Jordan's POV;
Abrí mi casillero para llevarme a casa los libros que necesitaría a la hora de hacer los deberes. Que fuera el primer día, no les impidió a los profesores dejarnos montañas y montañas de tarea. Tras acabar de guardar todo en su sitio, me llevé la mochila al hombro mientras tarareaba por lo bajo una melodía pegajosa.
-Dime que vendrás a casa de Ethan hoy, ¡será genial!- Benny apareció repentinamente, dándome un susto de muerte.
-¡Benny! maldita sea, me asustaste.- Cerré mi taquilla fingiendo fastidio, emprendiendo camino hacia la salida, seguida por el nerd.
-Aún no has respondido- insistió Benny, derrochando entusiasmo por cada uno de sus poros.
Me quedé pensando en una excusa convincente para no ir. Presenciar en primera fila como a Benny se le hacía agua la boca mirando a Erica, no me hacía demasiada ilusión.
Ahí fue cuando mi cerebro hizo click- Lo siento mucho, Benny, pero ya le dije a Roar que iría con él a una fiesta- aceleré el paso.
Se quedó mirándome confundido, intentando seguirme el ritmo-¿Qué clase de fiesta?- cuestionó arrugando la nariz.
-No lo sé, pero le prometí acompañarlo, así que...
Benny interrumpió algo molesto -Esto no es justo. Ayer tampoco fuiste a la reunión. ¿Cuándo podremos pasar tiempo juntos? ¿Y desde cuándo "Roar" y tú son tan amigos?- enfatizó en uno de los tantos apodos que yo utilizaba para el rubio.
¿Estaba celoso? no reconocer la felicidad que aquello me generó hubiera sido mentirme a mí misma.
-Benny Weir, no me digas que estás celoso- inquirí sonriendo con maldad, frenando en seco frente a él- Si es por los apodos, puedo elegir uno especialmente para tí.
-Da lo mismo- bufó formando tiernamente un puchero con sus labios.
-Ah ah, demasiado tarde- negué sonriente, cruzándome de brazos.
Logré hacerlo esbozar una pequeña mueca torcida y se revolvió el cabello, exhalando- Tú ganas, pero más te vale que volvamos juntos a casa. ¿No vas a dejarme plantado o sí?
-Jamás lo haría, Baby Benny- improvisé un apodo ridículo con la única finalidad de molestarlo.
-¿En serio?- resopló riendo.
-Sólo bromeo, aunque no suena tan mal-mentí con sorna- Una carrera hasta mi casa, en sus marcas, listos, ¡ya!- sujeté mi bolsa negra y salí corriendo sin preliminares a toda velocidad.
-¡Jordan, eso no es justo, espérame!- gritó el castaño varios metros atrás.
Ambos dimos inicio a una pequeña competencia que no duró más de cuatro calles, la falta de estado físico fue claramente la culpable de la poca resistencia de nuestros cuerpos.
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Benny's POV;
Viendo a Jordan correr, inevitablemente vinieron a mi memoria imágenes de nuestra infancia. Ella se veía igual de adorable que cuando era una niña, quizás aún más de ser eso posible. Me hallaba incrédulo al asimilar cuánto crecimos en los últimos años.
Con cada parpadeo, me transportaba a cuando tenía diez años, justamente a esa edad conocí a Jordan. Era tan callada y reservada, nuestros compañeros de clase la apodaban "mustia" debido a la insuficiencia de sus palabras. Eso fue hasta que Ethan y yo decidimos hablarle. Sí, resultó difícil en un principio, no obstante, gracias a mi perseverancia inquebrantable, conseguimos volvernos íntimos.
-M-me rindo.... no puedo más- se detuvo en una esquina, apoyando las manos sobre sus rodillas totalmente agotada. Una leve capa de sudor adornaba su frente.
-Yo... estoy bien- simulé respirar sin dificultad aparente, muriendo por dentro.
-No me vendría mal algo de ejercicio- admitió jadeando, colocándose un mechón de cabello tras la oreja.-Mis muslos me lo agradecerían- tocó la zona en cuestión.
-¿Pero qué dices? tus muslos están perfectos- se me escapó. Eso sin dudas sonaba menos incómodo en mi cabeza. ¿Por qué demonios dije eso?
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Jordan's POV;
-Y no te descontroles en la "fiesta"- Benny formó unas comillas con sus dedos, jocoso.
<<Es cierto, Rory. Casi se me olvida, debo avisarle que iré con él>>
-Lo intentaré.- Saqué las llaves de mis jeans y me detuve por un momento después de abrir la puerta.-Espero que todo salga bien con Erica, nos vemos- Al pronunciar aquellas palabras, mi voz se tornó fría de repente sin que pudiera evitarlo.
-Adiós- pronunció neutral antes de irse, sin siquiera inmutarse de mi cambio anímico.
Apenas ingresé a casa, cerré la puerta y de manera apresurada me dirigí rumbo a mi habitación, dispuesta a enchufar el teléfono en algún cargador. Pasé la mayor parte de mi mañana intentando superar el lvl 21 de un juego de robots, consumiendo vorazmente la batería en el proceso. Era Increíble cómo los celulares adquirían rápidamente nuevas aplicaciones y funciones, pero la bendita batería parecía durar cada vez menos.
Tras esperar pacientemente, y luego de varios viajes a la cocina en busca de brownies, por fin se completó la barrita al %100. Desenchufé el aparato y le envié un mensaje a Roar para que me indicara la dirección del lugar, suplicando no obtener respuesta. De verdad no quería ir.
Mis plegarias no fueron escuchadas, ya que a los pocos segundos un mensaje llegó derrumbando mis esperanzas de disfrutar una noche tranquila.
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Sé que son pocos los que leen esto, pero de verdad siento que son un montón, gracias por leer. No sean fantasmas y comenten su opinión ☠🐍
𝘩𝘢𝘤𝘩𝘦.
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