10
Se había hecho un ermitaño que nunca saldría de su casa.
Bien podia ser gracias a la tristeza junto que la incertidumbre que llegaban en pequeños momentos inoportunos gracias a la gran cantidad de finales que podía encontrar para si mismo solamente usando su imaginación.
Y aunque bien, esa era una de las razones, no era la principal.
Había generado una especia de "fobia" al contacto físico.
Había llegado a la conclusión de que si no podía tocar a nadie, el no veía los hilos y por ende si no lo ve, no existe.
Como si pudiera meter sus problemas en una caja y decir que estaban vivos y muertos a la vez.
Toda una paradoja.
___
- Debes de salir.
Japón, quien preocupado por su amigo luego de no verlo casi por dos semana, fue a su casa a ver como estaba.
- No quiero.
- Ecuador, no puedes quedarte aquí a esperar que algo te pase.
El sudamericano bajó la mirada, tratando de evitar que pequeñas gotas cristalinas recorrieron sus mejillas.
Japón, al verlo, suspiro con un deje de tristeza abrazando poniéndolo contra su pecho.
- No quiero morir, Jap, de verdad que no quiero.
Con la voz rota, Ecuador se aferró al asiático tratando de ignorar con todas sus fuerzas el hilo que brotó del contacto.
- Ecu, no vas a morir, debes de dejar de ver esto como una derrota y verlo como una oportunidad.
- Que oportunidad! Es como si me apuñalaran y me dijeran "Vas a morir desangrado porque la ambulancia no va a llegar pero ¡hey! Ánimo, velo como una oportunidad."
El de ojos rasgados río un poco, sonando su cabello.
- Ecuador, esto es diferente, este es un don magnífico que solo tu tienes, ¿Por qué desperdiciar el don llorando si puedes ayudar a muchos a encontrar su camino hacia su alma gemela?
- B-bueno...
- Tu capacidad para ayudar a los demás en todos los momentos siempre a sido algo que admiro de ti, tu determinación y tu energía al hacerlo haciéndose notar que te gusta es algo tan contagioso y bello de ver, no quiero que ese espíritu empático que esta en tu interior se vea opacado por un temor que talvez, no llegue a suceder.
- ¿Qué no l-llegue a suceder?
- ¿Recuerdas que te dije que estuve investigando? Creo que estoy apunto de encontrar algo que puede ayudarte.
El tricolor lo miro, no pudiendo aguantar más las lágrimas.
- ... M-muchas gracias, Jap.
- Para eso estoy, para apoyarte.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top