CAPITULO 26
Una bella pelinegra se encontraba sentada en la fuente del jardín de la casa de Vegeta Ouji, se encontraba preocupada por primera vez la luna se había atrasado, le inquietaba bastante, con cada minuto que pasaba su miedo y angustia crecían, miraba el cielo una y otra vez, cuando ya pasó más de 30 minutos las esperanzas de verla y saber algo de Goku se perdían, estaba con su mirada en el piso mientras estaba sentada en el borde de la fuente, su mente estaba centrada en las posibilidades por las cuales Bulma no regresaba, se estaba atormentando y se sentía culpable.
De repente se escuchó un sonido de pisadas, alguien se acercaba, temía que fuera alguien de la casa y se escondió detrás de uno de los arbustos esperando ver a la persona que se acercaba, pasaron dos minutos y se distinguió una sombra, la bella pelinegra se llenó de miedo, esperó calmando su respiración y no hacer ruido, al volverse a asomar observó a Bulma, entonces sonrió, pero al prestar atención más detalladamente en su rostro vio que estaba llorando y que tenía una expresión de enfado "¿Qué habrá encontrado?" se preguntaba Milk, las dudas llenaron su corazón, ¿Qué razones harían llorar a la luna? Le decía su conciencia eso le preocupaba, debería ser algo muy malo para poder romper el espíritu de alguien tan positiva y alegre como la luna.
Lentamente la pelinegra salió de su escondite, con pisadas cuidadosas se acercaba con lentitud hacia Bulma, mientras la peli azul se sentó en el borde de la fuente con una mirada muy triste.
-¿Bulma?-pronunció la pelinegra llamando la atención de la mencionada-¿estás bien?-
-Milk-se sobresaltó la luna levantándose rápidamente, le dio la espalda para poder limpiar sus lágrimas- ¿me estuviste esperando mucho?-trató de hablar con normalidad pero en sus palabras se podía notar la decepción.
-¿Qué pasó?-dijo abrazándola-dime ¿Qué encontraste?-
-yo... yo...-decía mientras trataba de alejar esos recuerdos de sus promesas y lo que encontró de Son Goku-no puedo decírtelo-dijo tratando de alejarse de la pelinegra, pero ella le tomó de la mano.
-dime por favor, ¿Cómo está Goku? Acaso ¿lo encontraste enfermo? Le paso algo y ¿por eso no pudo regresar hasta ahora? Le dijiste algo sobre mí, más o menos ¿Cuánto tardará en volver? para decírselo a Vegeta-las palabras de la pelinegra eran como agujas que se le clavaban en el corazón de la luna, ¿Cómo decirle la verdad?, hasta que escuchó unas palabras que la hizo enfadarse- él ¿cumplirá sus promesas verdad?-
-¡No!-pronunció al fin la peli azul, no quería que sufra pero debía decirle la verdad
-¿Qué dices?-dijo sobresaltada la pelinegra, jamás Bulma le había hablado de esa forma, esa respuesta la hizo retroceder, la mirada de Bulma era de enojo y frustración.
-él no volverá-le dijo mirándola con tristeza, odiaba romper las esperanzas de la gente-no lo hará-
-eso es mentira-dijo la pelinegra con energía, para ella Goku lo era todo sin él estaba perdida
-no lo es-dijo dándole la espalda- sí lo encontré-pero respiró profundo- no fue como esperaba-
-¿Cómo esperabas? ¿Qué viste?-dijo buscando la mirada de la peli azul-dime ¡¿Qué encontraste?!-gritó Milk
-lo encontré con otra-le dijo con la misma fuerza, algo que hizo que la pelinegra cayera al suelo sentada con la mirada perdida
-mientes-dijo apoyando sus brazos en el suelo y derramando lágrimas-estas mintiendo Goku jamás haría algo así-
-pues lo encontré, lo vi con otra persona, acéptalo no vendrá por ti-dijo finalmente la luna, derramando varias lágrimas
-no, él volverá-dijo levantándose sin energías y con hipidos-él cumplirá sus promesas-dijo firmemente, Bulma vio su expresión pero debía hacerle enfrentar la realidad.
-no, Milk acéptalo, él no volverá, lo estas esperando en vano-dijo firmemente
-no, Bulma, él regresará y cumplirá todas las promesas que hicimos-
-¿Qué promesas?-dijo con ironía cansada de la actitud de la pelinegra al no aceptar la verdad- ¿la de casarse y vivir juntos? –
-¿Cómo sabes eso?-dijo sorprendida la pelinegra
-yo estaba presente-dijo mirándola con tristeza-cada noche que ustedes se reunían en el jardín del orfanato, siempre abrazados mirando las estrellas, yo los veía con una sonrisa, ahí él te prometió muchas cosas: protegerte, cuidarte, serte fiel pero no cumplió nada, no creo que lo haga-
-eso no es verdad, tal vez que confundiste, tal vez no era él-dijo tratando de no perder las esperanzas
-al ver su rostro los recordé, como cada noche a la luz de la luna se prometían salir juntos y ser felices, pero no será realidad, tienes que aceptarlo-dijo finalmente y con una expresión seria se elevó en el cielo-solo te pido, no olvides tu promesa- dijo al desaparecer en el cielo, mientras la pelinegra no sabía cómo reponerse, su corazón se volvió a romper.
Al día siguiente la bella pelinegra no se levantó temprano como todos los días, casi no pudo dormir y no tenía energías para nada, su ausencia en el desayuno preocupó a todas las personas de la casa, en especial Vegeta.
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Mientras en Paoz, despertaba un pelinegro después de la celebración del nuevo contrato el cual le daría más oportunidades de crecimiento de su empresa, se sentía cansado y con un fuerte dolor de cabeza, se regañaba mentalmente por tomar demasiado en la celebración, al levantarse notó que alguien dormía a su lado, al girar su rostro se levantó de golpe, un miedo profundo se apoderó de él, había dormido junto a una mujer, pero no recordaba nada, rodeó la cama para ver de quien se trataba, y vio a Suno Snow; intentaba recordar algo de la noche anterior pero no había nada, solo él y sus socios celebrando el nuevo contrato, también la presencia de varios de sus amigos, luego recordó a su primo Turles, en ningún momento vio a Suno en la fiesta, ¿Cómo estaba con ella?, muchos problemas los esperaban.
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Pasaron dos días y no había forma de levantarle los ánimos a la bella pelinegra, Vegeta se sentía culpable, ya que él pensaba que era por el tiempo que le quedaba para que Goku pueda recuperarla, pero Milk ya estaba resignada, ya no había forma que ella rechazara la oferta de Vegeta pero tampoco le importaba, había perdido las ganas de vivir, su actitud había preocupado mucho a Mei y Lucil, no habían podido descubrir por qué Milk se comportaba de esa manera, trataban de animarla como podían perno nada funcionaba.
El día que se cumplían las dos semanas de plazo, Vegeta les ordenó a Mei y Lucil que lograran que Milk baje a desayunar, a duras penas ambas mujeres lograron que Milk se vistiera y baje lentamente hacia el comedor, su rostro mostraba signos de no dormir y haber llorado mucho. Al verla sentada en la mesa con la mirada baja Vegeta habló.
-Milk-dijo llamando la atención de la pelinegra
-si me vas a imponer el trato, no te preocupes, ya me resigné-dijo con enojo
-no iba a decirte sobre eso-tomó un respiro-mi intención era demostrarte cuán importante eras para Son Goku y nada más-la pelinegra se sorprendió
-entonces ¿no me obligarás a casarme contigo?-dijo más tranquila mientras el peli flama negaba con la cabeza
-te daré dinero para que vayas a la Capital, para que te encuentres con la señora Uranai en el nuevo orfanato, tú verás que quieres hacer después-
-¿en serio?-dijo feliz, pero vio la expresión de tristeza en el rostro de Vegeta, en su corazón se formaba algo de culpa-cuando pueda te devolveré el dinero-
-no es necesario-dijo terminando de comer-eso es un regalo especial para ti, después de todo te aprecio mucho-
-podemos quedar como amigos-dijo Milk para que Vegeta no se sintiera triste, una sonrisa de lado se formó en el rostro del peli flama
-claro, pero también-dijo parándose y acercándose hacia ella-no olvides que tienes un lugar para volver en Vegita, siempre tendrás un espacio allá en mi casa-
La pelinegra por una parte se sentía feliz, volvería con la señora Uranai pero pudo notar cómo a Vegeta realmente le importaba.
CONTINUARÁ...
mis bellas lectoras, muchas gracias por su apoyo, ya superamos los 500 votos y me siento muy feliz, sé que las hago sufrir con el trama de la historia pero es necesario.
me alegra mucho que les guste, realmente me hace sentir realizada, muchisimas gracias a las personas que votaron y comentaron el anterior capitulo, un fuerte abrazo a:
les agradezco un monto. les mando un gran saludo hasta la siguiente semana
CELESTIACARITO
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