Más que valiente, su madre sabía muy bien la razón.

Rei: Tu hija es muy valiente.

Adolorida y recargada sobre los brazos de Mitsuki negó.

Nemuri: Te equivocas.

Ante eso miraron a la mujer quien miraba hacia donde se fue su hija con tristeza.

Inko: ¿A qué te refieres?, ella nos salvó la vida.

Nemuri bajo la mirada.

Nemuri: Lo se pero, no importa lo que haga, ella no ganará.

Su soporte la tiró al suelo muy enfadada.

Mitsuki: No puedo creer que te avergüences de ella, es tu hija y es por mucho la niña más fuerte que he visto de su edad.

Nemuri: No digo que sea una inútil, ninguna niña a su edad tiene ni la mitad de su poder pero...

Enojada apretó los puños y miro a todo el grupo.

Nemuri: Mi hija no es una guerrera, ella detesta pelear y la violencia, jamás se atreve a lastimar ni a una simple hormiga porque tiene el corazón más noble que he visto.

Lloraba y eso fue suficiente para hacerle entender al grupo el problema.

Si Momo era un ser dócil, pelear contra unos monstruos así sería su aniquilación.

*En la pelea*

La azabache no tardó de parar para hacerle frente al grupo.

Amond: ¿Aquí?

Momo asintió para así ponerse en pose de combate.

Amond: Aquí voy.

Preparado voló contra Momo la cual una vez tuvo al hombre cerca descendió esquivando el ataque.

Daiz: No seas cobarde.

Asustada se protegió del ataque siendo mandada hasta el suelo por el ataque.

Daiz: Que mierda, yo pensé que iba a ser más emocionante.

Cacao: Debemos exterminarla.

Rápidamente bajo contra la azabache para así enterrar su pie en la niña quien grito de dolor por el golpe.

Cacao: Eres resistente, eso es cierto.

Con su otra pierna el hombre la pateo para así ser recibida por Rakasei quien la pateo hacia en frente.

Rasin: Idiota.

El hombre la pateo hacia arriba con mucha fuerza en la cabeza haciendo que la niña fuera directo hacia arriba.

Rakasei: Esa niña es inferior.

Momo pese a estar siendo lastimada decidió detenerse en medio del aire mientras evitaba no quejarse.

Momo: {¿Qué debo de hacer ahora?}

En eso recibió un golpe de Daiz que la arrojó lejos donde fue detenida siendo agarrada por los hombros por Amond.

Amond: Fuiste muy estúpida al tratar de meterte en nuestro camino.

La rodilla del hombre fue contra la espalda de la niña haciéndole escupir sangre al mismo tiempo que fue arrojada hacia a un lado.

Pero lamentablemente un puño impacto contra el débil estómago de la joven quien escupió sangre mientras ponía sus manos en la mano.

Cacao: Ya debo de matarte.

Así el hombre le golpeó en la cara mandándola contra el medio donde estaba rodeada por el grupo.

Cacao: Ahora tendrás el honor de saber porque somos el Pelotón Triturador.

Apenas esas palabras salieron de la boca del enemigo, los cinco sin excepción se lanzaron contra la infante quien empezó a ser golpeada de un lado a otro por medio de la coordinación del grupo quien no se detenía ante sus ataques ni ante los quejidos de dolor que Momo soltaba pero Cacao la agarró del cuello mientras creaba una esfera de energía.

Cacao: Es tu fin humana.

Antes de matarla, el grito de otro hombre se escuchó a lo que todos vieron al lugar.

Tullece: No la mates.

Cacao: Gran Tullece.

Con un ademán el hombre exigió que le entregaran a la infante la cual fue arroja hasta ser tomada del brazo estando colgando.

Tullece: ¿Acaso son ciegos?

Todos se sorprendieron ante eso pero cuando vieron a la niña, se sorprendieron por la cola de mono.

Rasin: ¿Una saiyajin?

Tullece: No es una cualquiera, es una totalmente pura.

El pelotón hizo una reverencia ante eso.

Momo: Yo soy una humana.

Eso extraño al hombre.

Tullece: ¿Segura?

Momo: Mis padres son Shouta Aizawa y Nemuri Aizawa.

Eso causó que el hombre se riera a carcajadas.

Tullece: No seas estúpida, tú eres saiyajin, tienes la misma sangre que yo corriendo por tus venas.

Enojada creo una esfera de energía que impacto contra el hombre para obligarlo a soltarla y así salir volando lejos.

El pelotón ya estaba listo para ir tras ella de no ser que su líder los detuvo.

Tullece: Esto es mío.

Todos: ¡Si señor!

A máxima velocidad llegó a una montaña por lo que encendió su rastreador, pero viendo el lugar, parecía que el satélite natural del planeta Tierra ya estaba saliendo.

Tullece: Perfecto.

Tranquilamente comenzó a caminar directo hacia Momo la cual no tenía ni idea.

Tullece: Dentro de ti está la sangre más poderosa jamás concebida, no se cómo una saiyajin está en este patético planeta pero no importa, dentro de poco podrás despertar esa sangre destructiva.

Una pequeña pausa sucedió seguido de un quejido de dolor emanado por Momo que fue tomada del cabello para ser alzada.

Tullece: Demuestra de que eres capaz.

El rostro de la cabeza fue tomada con rudeza para así dirigir su mirada al frente.

La hermosa luna ya se estaba elevando en el cielo en todo su esplendor.

Era hermosa pero la infante jamás la había visto, desconocía los motivos y por desgracia, esa luna la invitaba a no dejarla de ver.

Sus ojos se pusieron rojos al mismo tiempo que sus latidos iban más y más rápido , cosas que fueron notadas por el enemigo.

Tullece: Hazlo, deja que esos impulsos primitivos te llenen hasta el último rincón de tu ser.

Sin más la arrojó lejos hacia atrás.

Tullece: Destruyelo todo.

Se elevó en lo alto viendo todo en primera fila.

Momo por desgracia sintió su cuerpo crecer al mismo tiempo que perdía el conocimiento.

Los hombres de Tullece volaron hacia la montaña para ir con su líder sin saber que se dirigían a su muerte.

Cuando estaban muy cerca pudieron ver cómo un ser enorme crecía hasta quedar de pie con un gran tamaño.

Un enorme gorila muy enojado.

Daiz: Esa mocosa se ha transformado.

El gorila se sacudía salvajemente obligando a los animales del bosque a irse de la zona.

Amond: Esto no pinta bien.

Nemuri y su grupo sintieron los temblores por lo que decidieron ir a ayudar.

Para mala suerte, el enorme gorila vio al pelotón.

Rasin: ¿Qué piensa hacer?

Para su mala suerte, la respuesta vino cuando el gorila gruño y corrió contra ellos para así, aplastar con su enorme mano a Cacao.

Los demás antes de poder hacer algo fueron arrojados contra el suelo por la otra mano del ser.

Rakasei: Es demasiado fuerte.

Daiz: Eso no me importa.

Rasin: Corran.

Ante el grito el grupo voló pero por desgracia el pie cayó contra el suelo , por el acto dos de los soldados fueron aplastados siendo los gemelos Rasin y Rakasei.

Daiz: El poder de ese mono es impresionante.

El gorila solo se movía de un lado a otro agitando los brazos contra el aire.

El hombre que causó todo esto estaba de espaldas contra la luna mientras reía.

Tullece: Con esa niña como mi esposa esos inútiles ya no me serán de utilidad.

El gran gorila empezó a llenar su boca con un resplandor morado  y sin protección alguna, dirigió su hocico contra el suelo donde decidió liberar el poder acumulado destruyendo todo lo que tocó y por lo tanto, eliminando de la faz de la Tierra a Daiz y a Amond sin darles la oportunidad de escapar.

Sin embargo, el ataque no se detuvo, pues el enorme gorila comenzó a gritar al mismo tiempo que golpeaba la montaña reduciendola a escombros.

Y no tardó es disparar la energía contra el suelo sin dirección alguna destruyendo todo a su paso.

Una y otra vez, el ataque era muy devastador para la zona.

El grupo que vino con la infante ahora monstruo estaba asustado.

Nemuri: Esto es malo.

Izuku: ¿Qué es esa cosa mamá?

Inko negó mientras abrazaba a su hijo en forma de protegerlo, pues jamás había visto algo similar.

Mitsuki: Va a acabar con todo el bosque.

Nemuri negó mientras comenzaba a correr para así, de una u otra forma llegar con su amada hija.

Rei: ¡Nemuri!

Ignorando su nombre la heroína Midnight corría, jamás dejaría a su hija sola.

Tullece solo se reía ante la destrucción de Momo pero sabía que debía acabar.

No pasaron no diez minutos que Momo camino hasta cierta parte donde Nemuri logro alcanzarla.

Con esfuerzo logro subirse a un árbol para así poder gritar.

Nemuri: ¡Momo!

El gorila apenas escucho eso comenzó a buscar el origen.

Nemuri: ¡Soy yo, mamá!

Una vez fue ubicada el simio le gruño para disponerse a aplastarla.

Sin embargo, una canción fue cantada en silbido, una que le gustaba a Momo por lo que poco a poco, se tranquilizó al punto de quedarse y caer al suelo mientras fijaba su vista en la mujer la cual una vez estuvo cerca de su hocico, puso una mano sobre él.

Nemuri: ¡Esta no eres tú, Momo!

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Continuará...

Espero haya sido de su agrado.

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Nos vemos 😎.

Bye ♥️.