Alexander observaba tras el cristal junto a Naomi a Adriano que estaba intuvado y la máquina daba sus constantes con lentitud.

• Naomi - vas a seguir con sus negocios?

• Alexander - por ahora sí

• Naomi - si vuelven a por él, también te meterán a ti esta vez

• Alexander - lo sé - cogió aire - pero tengo que arriesgarme

• Naomi - no puedes decirle que no quieres seguir?

• Alexander - no serviría de nada

Se acercó Carina y los vió callarse de golpe - queréis qué me marche?

• Alexander - no

• Carina - como habéis dejado de hablar al acto

• Alexander - no es nada

Carina hizo mueca pero no dijo nada más, se limitó a observar a Adriano como ellos . Suspiró cansada - iros a casa, os llamaré si hay noticias nuevas

• Alexander - si, yo voy a dormir un rato, pero tú también tienes que descansar

• Carina - ha diferencia de vosotros, yo aquí tengo camas para los residentes. Si necesito dormir, lo haré . Iros y descansar

• Alexander - está bien. Vamos Naomi

• Naomi - no, yo me quedo

Carina y Alexander se miraron de reojo y suspiraron

• Carina - yo cuidaré de ella, vete a casa - le susurraba al oído acercándose un poco

• Alexander - vale, pero descansa tú también

• Carina - lo haré

Se dieron un beso fugaz y Alexander se marchó dejándolas a solas. Fue hacia la sala de espera en donde seguían todos allí. Se fijó que Andrea estaba con Mauricio hablando , pero Orlando no estaba

• Alexander - y Orlando?

• Andrea - ha decidido por fin ir a ver a la chica . Te sientas?

• Alexander - no, me iré a dormir un rato

• Andrea - bien, descansa

Ambos se sonreían con algo de desafío, Alexander acabó asintiendo y se dio la vuelta para irse a la casa y poder descansar un poco. Necesitaba coger la cama si o si. Su cuerpo ya no aguantaba más, estaba exhausto.
Mauricio evidentemente, le siguió y se lo llevó al coche. Ambos se mantenían en silencio mientras que ahora Andrea, sonreía algo más satisfecho.

Orlando estaba en frente de la puerta de la habitación de Natasha, totalmente paralizado sin poder entrar. El corazón le latía con demasiada rapidez, le costaba respirar y tenía un nudo en la garganta que apenas le dejaba tragar. En ese momento, se abrió la puerta dejando paso a la psicóloga. Ambos se miraron y ella cerró la puerta tras de sí

- vienes a verla?

Apretó la mandíbula - s_si

- bien, hoy está más tranquila, lo está llevando bien

- se recuperará?

- físicamente, obviamente. - hizo leve pausa - el problema, es la mente. Eso tarda más

- cuánto más?

- cada persona es diferente, pero es una mujer fuerte. Entiende lo ocurrido, sabe que es algo que ni ella ni sus compañeros podrían haber evitado en esas circunstancias.

- si se hubiera salido antes de que se la llevaran a ella si

La psicóloga ladeó la cabeza - eras uno de sus compañeros secuestrados - afirmaba más para ella misma, suspiró - ella tiene muy claro que nadie tuvo la culpa, no vayas por otra vía, o será peor

- y entonces, qué hago?

- sencillo, apoyarla - colocaba una mano en su hombro para darle ánimos - solo eso. El apoyo, el que sepa que estás aquí con ella, que no la dejarás sola, que seguirás estando aquí, con eso, es más que suficiente

- y si quiere hablar del tema?

- pues deja que hable del tema. Dejemos que se recupere primero y luego ya veremos. Todo tiene que ir paso a paso, y ella lo está asimilando correctamente

- vale

Sonrió - respira hondo y cuando estés preparado, pasa

Asintió y la vio marcharse por el pasillo a paso ligero. Cogió aire y miró de nuevo a la puerta.
Respiró profundamente unas cinco veces intentando calmarse, cuando medio lo logró, decidió que ya era hora de entrar. Cogió otra bocanada de aire y abrió la puerta lentamente mientras que picaba al mismo tiempo dándole golpecitos pequeños mientras se asomaba.

Natasha miró hacia la puerta y ambos se miraron. Orlando cerró tras de sí y dio un par de pasos hacia ella. Natasha volvió a apoyar su cabeza a la almohada y le medio sonrió - hola

- hola - se acercó más a la cama y se sentó en la butaca que estaba al lado de la cama y daba la espalda a la ventana

- cómo sigue tu hermano?

- las constantes siguen igual

- pero estables?

- si, algo así . Dicen que las tiene muy bajas o algo así

- significa que siente como si estuviera mareado. Como si tuviera la tensión baja

- ah - apretó la mandíbula , no conseguía acabar de observarla, tragó saliva - quieres hablar de algo?

Natasha ladeó la cabeza - cómo qué?

- no sé - acercó más su cuerpo y apoyó sus codos en sus rodillas mientras entrelazaba sus dedos y los colocaba cerca de su boca sin ahora dejar de mirarla. Se fijó en cada detalle. Ambos ojos morados, uno inyectado en sangre por una vena rota, la nariz la tenía partida, el labio estaba algo menos hinchado, pero seguía con ese corte al cual le habían puesto puntos. Su ceja estaba del mismo estado. Se fijó con una ojeada rápida en sus muñecas. Tenía las marcas de las cuerdas en donde la habían dejado atada, no solo las marcas de las cadenas, eran de haberla dejado totalmente estirada encima de esa mesa. Seguramente tendría también en los tobillos.
Se había percatado de que las marcas eran heridas graves, le habían puesto puntos también.
Ahora le miró el cuello, le habían atado también de allí con una cuerda. Tenía una gran marca roja que rodeaba la zona dejándole heridas que por suerte no eran abiertas, pero habían provocado morados en la zona.
- del tiempo? - acabó diciendo

Natasha elevó su ceja partida y sonrió levemente - del tiempo?

- si, no?

- cómo ves hoy el tiempo?

- gris

- hace sol

- está nublado igualmente

- creés que lloverá?

- puede que por la noche

- hace falta que llueva

- si - volvió el silencio y volvió a inspeccionarla. Se fijó en su pelo, no sé había dado cuenta antes, pero juraría que lo tenía más largo, estaba mal cortado?

Natasha suspiró - por lo visto les divertía la idea de cortarlo y arrancarlo - le dijo sin más

Orlando se dio cuenta que lo había pillado observándola más de la cuenta - lo siento - sacudió la cabeza de lado a lado

- porqué?

- por mirarte

- te disculpas por mirarme? Ahora? Antes me mirabas, incluso con grosería

Elevó su mirada hacia los ojos de ella, se quedaron unos segundos así hasta que él decidió acercar un poco más la butaca hasta que sus rodillas tocaron la parte baja de la cama - por observar cada detalle de ahora

- antes también lo hacías

- lo sé , pero no de la misma forma que ahora

- te estás disculpando entonces por la forma de mirarme ahora?

- si

Natasha sonrió levemente - es algo que no se puede evitar. Es por naturaleza observar cada detalle en alguien después de un accidente, o lo que sea

- si, parece que trabajan más las mentes para entonces

- si, es algo que no podemos evitar - sonrió de nuevo - quieres hablar de ello?

Frunció el ceño - no entiendo

- parece que te ha afectado más a ti que a mí

Tragó saliva - yo ...

- lo sé, todos podríamos haber salido antes si se hubiese ocurrido esa idea antes. Es algo que se tiene en la cabeza en momentos como este. No es la primera vez que ocurre eso . - hizo pausa leve - cuando estuve en Afganistán, fue una época rara, sabes? - lo hizo prestar atención sin interrumpirla - recuerdo que nos cogieron y nos metieron en unos calabozos parecidos a los que estábamos en Irak, con la pequeña diferencia de que éramos toda la unidad y en esos momentos, nuestras mentes eran diferentes. No llegaron hacerme nada. Eran las típicas torturas , sabes? Cabeza dentro del cubo con agua, puñetazos, lo típico de poner un poco al límite nuestra capacidad mental y física. - cogió aire - estuvimos allí unas treinta y tres horas , hasta que Alexander consiguió poder soltarse de uno de ellos. Ese minuto fue muy extraño. Todo pasó muy rápido, pero lo recuerdo a cámara lenta. Fue soltarse de su agarre y poder coger la metralleta del otro, y ya teníamos el plan en mente para escapar, era un plan de improvisar, ya sabes - tragó saliva - no sé si fue suerte, destino... Pero se soltó . Igual que Naomi pensó en esa horquilla - se miraron de nuevo a los ojos - no fue culpa de nadie. Ninguna de las veces. Solo fue el momento

Orlando se había mantenido en silencio para prestarle atención. Parpadeaba lentamente y con calma sin dejar de observarla detenidamente - estuve en Irán y también en Afganistán

- si, algo me dijeron - intentó incorporarse un poco, consiguiendo cambiar algo su posición - fue con el ejército italiano, no?

- si

- también os atraparon?

- si, en ambas misiones

- y cómo salisteis de allí?

Apretaba de nuevo su mandíbula, tenía que hacerle caso a la psicóloga, hablar de cualquier cosa que quisiera ella - en Afganistán, nos sacaron otra unidad

- cuánto tiempo estuvisteis ?

- dos días

Asintió - y en Irán?

Se mordió el labio y la miró de nuevo a los ojos - un mes

Natasha agrandó sus ojos - Adriano y tú, estabais en la misma unidad?

- si. En realidad, siempre le han dado más a él, supongo que porque no sé calla nunca - intentó reírse sin éxito - le cortaron un dedo del pie

- os sacaron también otra unidad?

- no, salimos gracias al agujero que íbamos haciendo día a día en el suelo. Era todo de barro, pero el barro mezclado con algo de cemento se pone incluso algo más duro, era complicado picar sin hacer ruido y sin apenas tener nada para hacerlo - hizo pausa - lo hacíamos con piedras

- debisteis pasarlo muy mal

- supongo - suspiró - quieres seguir hablando del tiempo?

Ladeó la cabeza - no quieres hablar de esos días en el ejército?

- fue hace mucho tiempo

- es tu pasado. Cómo acabasteis siendo un soldato de Andrea?

- cuando volvimos a Italia, ni siquiera nos nombraron en el día de entrega de medallas. Para el ejército, no éramos unos héroes como los que siguieron en batalla

- ni siquiera por el valor de haber aguantado todo eso?

Negó con la cabeza - uno de los invitados fue Andrea, se llevaba bien con un comandante. Solían hacer negocios, ya sabes, algo de marihuana para los nuevos reclutas. - hizo leve pausa - Adriano se acercó a Andrea cuando se fijó que en la comida, estaba dándole algo al comandante en mano. Estaban en un rincón de la fiesta en donde nadie les prestaba atención. Pero Adriano lo hizo. Me hizo mirar también y esperamos que terminara la fiesta - se pasó una mano por la barba - fuimos hasta Andrea y le preguntamos cuánto costaba. Nos preguntó para qué y decidimos explicarle por encima.  Nos dijo que nos la daba gratis si conseguíamos sacar más que el comandante fuera de Italia . - se miraron - si, el comandante le ayudaba en la duana para el contrabando, pero no solía sacar mucho y apenas vendía.
Nosotros en la primera semana, se lo vendimos todo. Una cosa llevó a la otra, y aquí estamos

Natasha lo observaba curiosa - creía que veníais de la familia Rizzo

- sabíamos del negocio de nuestro tío, al entrar en la familia Milano

- no lo sabíais?

- no. Éramos pocos en la familia, y la mitad eran policías o militares. Pero mi tío fue la oveja negra, solo que no sabíamos hasta que punto. Pensábamos que los hombres que iban siempre con él, eran amigos. Quién nos iba a decir que eran sus hombres?

- porqué no entrasteis entonces en el clan Rizzo?

- mi tío era un buen hombre, pero no sabía llevar los negocios. Apenas tenía propiedades y casi no podía pagar a sus hombres, así que - alzó sus hombros y volvió a dejarlos caer perezosamente - se lo cargaron. Andrea nos propuso entrar en la familia si conseguíamos los negocios de mi tío . Y lo hicimos - la miró de nuevo

- así que, técnicamente, os dio igual que se lo cargaran?

- no éramos tan íntimos. Solía ser bastante prepotente con el resto de mi familia. Siempre alardeaba de tener más dinero, pero la realidad era que le debía mucho dinero a mucha gente, sino hubiera sido por Andrea, mi familia estaría muerta y mi hermano y yo también

- por eso no lo dejas, a Andrea? Porque le debes eso?

- Andrea a sido más padre que mi propio padre biológico - hizo pausa con mueca - mi padre nos obligó a entrar en el ejército, dando total consentimiento a llevar nuestro entrenamiento al límite. Andrea en cambio, nos dio tiempo de adaptación y nos dejó escoger. Entiendes ?

- escoger?

- si queríamos entrar o no en la familia

- y si hubiera sido la respuesta un no?

- nos hubiera dejado en paz. Lo bueno de Andrea es que no obliga a nadie, pero tiene también una estrategia increíble para hacerte cambiar de idea en cualquier momento . Mira a Alex. Ha conseguido que le lleve todo mientras está aquí en el hospital

- así que... Siempre acaba saliendose igualmente con la suya

Rió por lo bajo - si, suele ganar siempre. Muy pocas veces a perdido la verdad

- y eso a ti te parece bien?

- no obliga a nadie, solo te da opciones de las cuales es difícil no rechazar. Además, nunca amenaza, sobretodo si le caes bien. Creés que Alex seguiría vivo después de meternos en la cárcel a todos?

- no lo sé

- lo ve como el hijo que le hubiera gustado tener. Para Andrea, Niccolo era demasiado caprichoso, ambicioso, no miraba por la familia, siempre era para si mismo y si le añadimos que era un sádico irrecuperable... - hizo pausa - de Leonardo, estaba más tranquilo, pero no solía cogerle el punto. Evidentemente era la mejor apuesta para que tenerlo como sucesor, pero después de que viniera Alex, la cosa cambió. Alex era impredecible, sabía estar en el lugar, sabía y conseguía hacer las cosas al detalle y sin que nadie se enterara. Cuando pasó todo del juicio y todos nos calmamos, Andrea y todos nosotros sabíamos que lo habíamos perdonado. Había hecho todo eso por órdenes. Sabíamos que éramos su familia, pero que era demasiado meticuloso con el tema de las órdenes principales. Y evidentemente sus principios

- y ahora?

- sabemos que acabará por aceptar que es uno de nosotros - volvió a mirarla - la pregunta es ... - se acercó un poco más a la cama - estás dispuesta tú a formar parte de la familia?

- yo? - preguntó sorprendida

- si, tú

- qué tiene que ver conmigo?

Apretó su mandíbula un poco y agachó la cabeza momentáneamente - tú qué crees?

Natasha tragó saliva y soltó aire que había estado comprimido - qué quieres exactamente de mi? - lo vió intentar decir algo, pero lo cortó - no ves como estoy?

Ladeó la cabeza algo confuso - y cómo estás?

Notaba que se emocionaba de nuevo, tenía ese nudo en la garganta otra vez - no estoy ahora mismo para ...- se silenció a si misma

- tienes prisa?

Frunció el ceño - prisa?

- si. Ha caso tienes ganas de correr? Yo no tengo prisa. Lo que si tengo es mucha paciencia

- y eso qué significa?

Se levantó de la butaca y se sentó al borde de la cama - que aunque el tiempo dure poco, estaré esperándote, hasta que estés lista

Sus ojos se empañaron en lágrimas - pero eso podría durar mucho tiempo

- como ya te he dicho... No tengo prisa

Natasha se lo quedó mirando unos segundos de más mientras que una lágrima caía por el rabillo de su ojo. Orlando se lo secó con el dedo y le sonrió dándole tranquilidad. Asintió - vale - respondió en un hilo de voz

- vale - sonrió un poco más - va, déjame un hueco, llevo días sin tumbarme - se quitó la americana

- y Adriano?

- tiene una buena enfermera - decía dándole entender sobre Naomi

Natasha se movió un poco hacia un lado con cuidado y lo dejó tumbarse. Orlando le pasó su brazo por debajo del cuello y la atrajo hacia él para que apoyara su cabeza en su pecho. Ambos suspiraron

- sabes que no va a acabar bien la cosa, verdad? - elevó un poco su cabeza para mirarlo

Orlando sonrió de nuevo mientras elevaba una ceja - no hay prisa - respondía haciéndola sonreír

En el fondo, Natasha entendía a qué se refería exactamente. Le costaría muchísimo volver a tener sexo, por lo menos hasta que no pasara el tiempo suficiente. Era algo que no podría evitar. Ahora mismo en su cabeza, no cabía la posibilidad de tener relaciones sexuales, era algo que no solo la tenía mal, estaba muerta de miedo. Era lógico. No sólo por los abusos y la tortura, sino también por el trauma en sí. Estaba en shock postraumático, sería duro recuperarse. Por lo menos, no estaría sola en su recuperación. Cerró los ojos y se dejó abrazar. Sentía seguridad al estar con él. Se sentía protegida en sus brazos. Suspiró profundamente y poco a poco, ambos, quedaron dormidos.

Para aquel entonces, el doctor Philips, dejó que Naomi entrara en la UCC para estar al lado de Adriano.
Al verlo intuvado mucho más de cerca, era peor. Mucho peor.
Se fijó más en las heridas que tenía, parecía haber salido de una película lo que estaba viendo. Colocó su mano encima de la de él y empezó a soltar aire despacio para calmarse.
Decidió rezar por lo bajo - señor, por favor. Haz que despierte, no te lo lleves, te lo suplico mi señor - decía en castellano. Se llevó la mano de él a los labios y los besó - no puedes dejarme ahora que he escogido estar contigo. No puedes hacerme esto. Ya no me queda nada, excepto tú. - tragó saliva - he renunciado a mi trabajo por ti, tienes que despertar. - una lágrima cayó por su mejilla y viajó hasta la mano de él - no me dejes - sollozó - te amo - dijo lo último de nuevo en castellano. Empezó a llorar mientras colocaba su cabeza entre sus propios brazos.

Desde el ventanal, Andrea los contemplaba con algo más de ternura. Sentía orgullo de Adriano y al mismo tiempo de que hubiera encontrado a alguien a quien amar y fuera correspondido. Sería una relación difícil. Muy complicada, pero si ella había renunciado a su trabajo, entonces, podría aceptarla al cien por cien. Estaba claro que no volvería al FBI.
Dio media vuelta para dejarlos a solas y se volvió a la sala de estar.

Por la noche, Alexander estaba en la casa Milano junto a Carina, que por suerte, había convencido para que lo acompañara y descansara.
Evidentemente antes de dormir, no pudieron evitar estar ese momento juntos. Acababan de hacer el amor y estaban tumbados en la cama. Alexander mirando al techo pensativo, mientras que Carina, jugueteaba con el vello de su pecho , que aunque no era mucho, podía ser algo visible si te acercabas lo suficiente.

- en qué piensas ?

Alexander cogió aire y pasó su brazo libre por debajo de su propia cabeza, doblando el codo - un poco en todo

- vas a ir por Grayson y Brendan?

Elevó ambas cejas y rió un poco - si te soy sincero, ni me acordaba de ellos

- sabes algo de Murray?

- no, porqué?

Se miraron ahora

- solo preguntaba - suspiró cansada - creés que él también está detrás de todo?

- no lo sé - suspiró también con cansancio - sabes alguna tú?

Negó con la cabeza un poco - no, pero me gustaría saberlo

- para qué?

- vas a matarlos?

Frunció el ceño - ha qué viene eso?

Se miraron de nuevo, él sin entender nada y ella con algo de temor por la respuesta - se lo de los Palmero

Apretó su mandíbula - quién te lo ha dicho?

- nadie. Se lo he escuchado hace un rato a Roberto mientras hablaba con otros. Además, que conozco algunos de los hombres de Palmero, y aquí hay como diez

Miró de nuevo al techo - eso es otro tema

- los has matado a sangre fría

- es mi trabajo

- es obligación por parte de mi padre y no estás obligado

- si hago esto, puedo quitármelo de encima. Y tú y yo poder irnos

Tragó saliva e hizo mueca - pero a qué precio?

- me ves mal? No es la primera vez que mato

- no, pero siempre por una orden directa. No por ti mismo

- podemos cambiar de tema?

- vale - no quiso decir más, no quería discutir, solo quería estar entre sus brazos

En ese momento, sonó el móvil de él - y ahora qué?

- no lo cojas

Alexander lo miró y arrugó la frente, descolgó - Carter - dijo su apellido ya por costumbre

- Alex

Alexander se sentó en la cama - porqué me llamas?

- tengo un problema

- no es el mío

- escúchame

- no me interesa

- Alex! Por favor - suplicó

Alexander cerró los ojos momentáneamente - qué quieres?

- se han llevado a mi mujer

Alexander abrió sus ojos de par en par - quiénes?

- los rusos

- están en prisión

- no! No, no lo están. Esta mañana, los han soltado

- quién ?

- Brendan y Grayson

Apretó su mandíbula mientras que Carina se sentaba también a su lado - dónde estás?

- en donde siempre quedábamos

- no te muevas de allí, iré en un rato - colgó

- qué pasa? - preguntaba ella

- no querías saber sobre él? Pues ahora vamos a saber de él - se levantó de la cama

- no te entiendo. De quién?

Se subió los pantalones tejanos y se subió la cremallera - de Murray

...

Amores ! 😵😱Madre mía! De todo! Pasa de todo! La pregunta es ... La cía soltó a Murray por algo en especial? O hay algo más detrás? Decidme en comentarios 🤗