Anteriormente:

Issei pasó parte del día con sus amadas hijas, y también hubo un encuentro repentino con Enniel, con la cual tuvo una agradable plática.

Para más adentrada la noche, estaba en el apartamento de Reya, quién había cocinado una comida especial para Issei. En el lugar, la castaña de trenzas le confiesa a nuestro protagonista que tiene sentimientos muy fuertes hacía el.

Actualmente:

Era muy temprano en la mañana, domingo y el clima cálido. En el apartamento de Reya, se encontraban dormidos en una cama matrimonial la bella Kuzaka Reya, abrazándose de una manera muy cariñosa, a un dormido Hyodo Issei.

Estaban sumidos en un profundo sueño, abrazados el uno al otro, nada parecía perturbar la paz con la que los jovenes dormían.

—Darling... te quiero— Reya hablaba entré sueños.

Por otro lado, Issei, estaba sumergido en lo que el consideraba una pesadilla. Se encontraba de nuevo en ese castillo destruido, repleto de oscuridad y llamás de tonos oscuros daban una tonalidad fúnebre al entorno.

—!En el momento que sepa que eres, voy a darte la paliza de tu vida, que desearas quedarte en hibernación¡— Enojado.

No podia moverse de la posición en la que se encontraba, rodeado de intensas flamas oscuras que lo quemaban en cada intento de movimiento.

—Estupido e idiota fuego, todo es tu culpa— murmura.

El ambiente comenzó a ponerse borroso para Issei, de poco en poco fue perdiendo solides el castillo en el que estaba y se derrumbo.

...

Issei estaba despertando, durmió un largo tiempo, pero, no descansó en todas esas horas dormido. Sentia un dolor increible de cabeza, solo queria levantarse, pero no lograba nada.

—¿por que no puedo levantarme?— estaba intentando moverse.

Había logrado dar una vuelta, su rostro se fue tornando en un tono rojo muy llamativo. Su compañera, su primer besó y también rival en la cocina, Kuzaka Reya dormía abrazada a Issei, la chica vestía una pijama muy ligera, y por instinto, pego a Issei a su pecho.

—Reya, despierta, necesito irme— Issei movia a la chica.

—¿eh?— Reya parecía despertar —Fufufu Darling, buenos días—

—Buenos días Reya, ¿me dejas ir?— un poco sonrojado.

—Ara ¿no te gusta estar conmigo, Darling?— un poco triste.

—Ehh, veras Reya... te agradezco mucho todo, y aprecio tus sentimientos hacia mi, pero, viste como me descontroló cuando mis emociones se alteran— trataba de explicar.

—Darling Darling darling, no necesitas explicar nada, se como te sientes y por que sucede, aun así quiero que tengas en mente, que solo te quiero a ti y no importa si eres pareja de la sensei Tohka— Besando a Issei.

El castaño una ves más no supo que hacer, se sentía mal por hacer esto, Reya y Tohka... su amiga y su pareja.

—Siempre estaré para ti, Darling—

Fue lo último que Reya le susurró a Issei en el oído, antes de ayudar a Issei a vestir.

...

El castaño se encontraba en su hogar, había dado avisó a su madre de donde estaría. Ahora, se encontraba en su habitación, buscando ropa para poder darse una ducha, hoy se encontraría con Tohka.

La sensei había dicho que ella llamaría informarle sobre el lugar de encuentro, así que lo unico que podia hacer era elegir un conjunto de ropa para verse bien.

Antes de poder entrar a la ducha, estaba quitandose la ropa que tenía puesta, dejando sus pertenencias donde no pudieran entrar en contacto con el agua. Antes de poder abrir las llaves para dar paso al agua, el teléfono de Issei sonó, desconcertado atendió el teléfono sin ver quien llamaba.

—Habla Issei, buen día— amable.

—Hola Ise, soy Tohka ¿no te interrumpo?— hablaba la pareja del castaño.

—Hola Tohka, para nada, solo estoy preparado mi baño— buscando el Shampoo.

—Bueno, recuerda que hoy pasaríamos el día juntos ¿nos encontramos en el parque, el que esta cerca de la estación?— estaba emocionada.

—Perfecto, ¿a qué hora?— preguntaba el castaño.

—Nos vemos ahí a las tres en punto, esperó de todo corazón poder verte hoy— sonaba muy feliz.

—De acuerdo, Tohka, nos vemos ahí— se contagió un poco de la emoción de la maestra.

—Genial, te estaré esperando, te quiero— colgó rápido.

El corazón de Issei latía rápido, ahora tenía tiempo para bañarse y comprar un pequeño regalo para Tohka, y así poder pasar un excelente día con su pareja.

Tomando un bañó, aseguró de lavarse todo el cuerpo de manera correcta, deseaba verse impecable para su cita con Tohka, así que puso mucho empeño en asearse. Luego, tiró todo a su pasó para encontrar el conjunto perfecto para la ocasión, era la primera cita que tenían en forma.

La primera en meses desde que iniciarán su relación, por lo tanto todo tenía que ir viento en popa.

Así que vestido con sus mejor atuendo, bañado y perfumado, Issei bajaba las escaleras de su casa para ir directo a la puerta, pero, en eso su madre lo ve y se asombra por lo reluciente que se veía su hijo.

—Ara Ara Issei-chan ¿a donde tan guapo, hijo?— Miki estaba sorprendida.

—Hola mamá, hoy tengo una cita con mi novia— sonriendo.

—¿novia?...— se quedo en blanco unos minutos —!Mi hijo tiene novia¡— abrazando a Issei.

—¿te sorprende mucho, mamá?— ahora Issei tenía curiosidad.

—!Claro que me sorprende¡— apreto las mejillas de su único hijo —Estoy tan feliz por ti, quiero que la traigas a cenar el próximo fin de semana— contenta.

—Jajajaja está bien mamá, intentaré hacerla aceptar— feliz —Te avisó si no puedo llegar a tiempo, te quiero mamá—

—Cuídate hijo, esperó tu llamada— feliz también.

Así terminó la charla de madre e hijo sobre la apariencia de Issei, el cual al salir de casa, y fue directo a encontrarse con Tohka.

Tohka se encontraba alistando los últimos detalles para su cita con Issei, estaba tan emocionada que parecía una colegiala la flor de su juventud.

—¿me veo bien?— viendose al espejo —!Sera un día perfecto¡— esta viendo una lista de cosas por hacer.

Tomando su bolso de mano, y su teléfono celular para salir de su apartamento.

—No puedo esperar más— estaba saliendo en dirección al parque.

...

Issei llegó antes de la hora pactada con Tohka, sentado en el parqué disfrutando de la agradable y la sombra de un árbol que estaba cerca.

—Es un hermoso día— dijo al aire mientras veía su reloj —(Dios esperó que escuches mis plegarias y que todo salga bien)— rezando en su mente.

El castaño vio un pequeño puesto de anillos forjados en acero, no eran muy lujosos, pero, eran lindos.

—Disculpe, estoy buscando un regalo para mi novia— observando la mercancía.

—en buena hora joven, recién tengo un modeló exclusivo para parejas— respondió la mujer que atendía.

Durante unos minutos, Issei estuvo viendo y pensando sobre comprar el conjunto de anillos, pero, al final los compró y la encargada los envolvió en papel para regaló.

Minutos después, Tohka llegó con una hermosa y radiante sonrisa, había visto a Issei a lo lejos, y como pudo fue corriendo a ver a su amado.

—!Issei¡— Tohka se abrazó a Issei.

—Tohka...— Issei se quedo mudó al ver a su pareja.

—¿pasa algo malo?— preguntaba la pelirosada.

—No, es solo que... estás radiante— sonrojado.

—Ehh— Tohka también sonrojo un poco —También luces genial— murmuró un poco.

—Ya que estamos aquí ¿te parece ir a ver una película?— Sugería Issei.

—Me encantaría, hay una película que deseó ver— comentaba Tohka animada.

—Entonces vamos— feliz.

Comenzaron a caminar al cine de la ciudad, en el caminó, Issei tomó la mano de Tohka, la cual se sonrojo un poco al sentir la calidez del castaño.

Al final cuando llegaron, Issei pagó por las entradas, por sugerencia de Tohka, no compraron palomitas de maíz. Y la función comenzó, una película romántica llamada "Diario de una pasión". Tohka estaba al borde de las lagrimas por las escenas de la película, Issei por otro lado, trataba de no dejar que sus emociones se salieran de control.

Eso duro hasta el final de la película, en la que al final, los protagonistas a una edad avanzada murieron juntos. Eso afecto al castaño, estaba llorando mientras era consolado por Tohka.

—Todo lo que hizo— limpiando su nariz —Y ese final, la muerte no logró separarlos—

—Ya, ya pasó Issei— abrazó al castaño —¿que pensaste cuando viste el final?—

—Siendo sincero... fue muy triste— desanimado.

—Ya se, para hacer que recuperes tu estado de ánimo ¿por que no eliges el lugar para comer?— sugería Tohka.

—¿estás segura?— un poco inseguro.

—al cien por ciento— alzando un pulgar.

...

Issei y Tohka estaban en un Maid café, la cara de Tohka se volvió un poco complicada al ver que Issei sonreía siempre.

—Jajaja me habían comentado de éste Maid Café, uno de los chicos del club lo recomendó mucho, me sorprendió porque se como son de exigentes con los alimentos— explicaba Issei.

—Ya veo...— Intentó ocultar sus celos.

—¿algo anda mal?— preguntaba inocente el castaño.

—No, todo se encuentra bien— respondía Tohka.

—Ehhh, bueno ¿estás lista para ordenar?— tomando el menú.

—Ordena tú, no tengo apetito— se comportaba extraña.

—Estas un poco extraña ¿te sientes mal?— viendo a Tohka.

—No Issei, no me siento mal, estoy jodidamente bien— respondió un poco... alterada.

—Tohka... ¿que sucede, porque estás enojada?— preocupado.

—No te hagas el inocente, Issei, y no estoy enojada— irritada.

—Lo siento Tohka, pero, no lo entiendo— estaba un poco alarmado.

—¿Ahora no lo entiendes?— un poco más enojada.

—ehhh, no— cavando su tumba.

—Mira a tu alrededor, y dime ¿que es lo que vez?— molesta.

—¿las chicas vestidas de maid?— un poco temeroso.

—!Si¡ ¿por que diantres me traerías a un maid café?— explotó.

—Pero si tu me dejaste elegir el lugar— se defendió.

—!Pero no para que vinieramos a que veas a otras chicas¡— alzo su voz un poco —!Yo soy tu novia, o acaso estoy dibujada¡—

—Eso lo se, pero ¿por que te molesta tanto?— buscaba una explicación.

—Dime ¿te gustaría que yo viera a otros hombres?— volteaba la situación.

—Claro que no, pero ¿que tiene que ver?— confundido.

—¡tiene todo que ver, Issei!— viendo al castaño.

—Tohka, baja la voz por favor, nos van a echar del lugar— intentando calmar a Tohka.

—!No lo haré¡— estaba furiosa —No... a menos que hagas todo lo que yo quiera—

—Haré lo que pidas, pero, por favor baja la voz— suplicaba Issei.

—Muy bien, toma todas tus cosas, nos vamos— Ordenó la pelirrosa.

Todos los clientes del establecimiento estaban apenados por la escena que vieron, se sintieron mal por pobre desconocido.

...

Ahora se encontraban en el apartamento de Tohka, la profesora ordenó al castaño cambiarse de ropa, ahí le entregó un conjunto cubierto por una bolsa para ocultarlo y que fuera una sorpresa.

—¿estas listo, Issei?— preguntaba la mujer.

—Si... ¿es necesario que vista así?— apenado.

—Si, apresura el pasó y sal de ahí— Tohka estaba impaciente.

—Ya voy, dame dos minutos— estaba poniéndose los zapatos.

—(todo va saliendo bien)— sonreía la primer novia de Issei.

Tohka tenía una sonrisa de oreja a oreja, su imaginación le llevo imagenes de Issei vestido de mayordomo, mientras la atendía y hacía todo lo que ella deseaba.

—Estoy listo... voy a salir— Issei estaba nervioso.

—No quiero esperar más— Tohka se desesperó un poco.

Tohka abrió la puerta de su habitación, lugar donde Issei estaba cambiándose, para ver el asombro resultado. Issei vestía un atuendo de mayordomo que le ajustaba a la perfección, no había nada erróneo en las medidas del vestuario del castaño.

—Ahora me llamaras por Tohka-sama, harás lo que yo quería, y solo responderas cuándo te pregunté ¿entendido?—

—Si, Tohka-sama— respondió el castaño —(Nunca entenderé a las mujeres)—

—Ahora Issei, ¿podrias preparar la cena?— preguntaba Tohka, un poco más calmada.

—Por supuesto, Tohka-sama— respondió.

Issei fue a la cocina, la nevera de Tohka estaba repleta de muchos alimentos, así que tomó los que eran más apropiados para hacer una cena ligera, pero deliciosa.

—Issei ¿puedes buscar una botella de vino?— preguntaba con emoción.

—En un momento Tohka-sama— terminando de preparar los vegetales.

Nuestro mayordomo se dispuso a buscar la botella que le encargó su ama, cosa que logro en poco tiempo, tomando la botella para abrirla, buscó una copa y le sirvió a su pareja.

—Aquí tiene, Tohka-sama— entregando la copa con vino.

—Espera, bebé una copa conmigo—sonriendo.

—No puedo hacerlo, Tohka-sama— se negaba Issei.

—Issei, no te pregunté, bebé conmigo— Un poco enojada.

—...— Issei solo sirvió una segunda copa, sin beberla.

—¿por que no la bebes?— curiosa.

—No deseo hacerlo— reacio.

—Anda Issei, ¿por mi?— Tohka estaba haciendo unos ojitos lindos.

—... Bien— no resistió la técnica usada.

El castaño tomó la copa y bebió el vino dentro de ella, le agradaba el sabor y no era la primera vez que lo hacía. Issei había terminado la cena, por instrucciones de Tohka, preparo dos porciones.

—Siéntate Issei, vamos a cenar— un poco apenada —Ya puedes dejar de actuar así, lo lamentó—

—¿por que te disculpas?— sentándose delante de Tohka.

—Es debido a lo que pasó en el café, no debí ponerme así— estaba jugando con sus dedos.

—No debes preocuparte, Tohka, ese fue un error mío— rascándose la cabeza.

—No... mis celos fueron al límite, al ver que estabas muy feliz ahí— estaba avergonzada.

—No era por el lugar, estaba feliz por pasar el dia contigo— le dio un sorbo a su copa.

—Creo... que se como arreglar las cosas—

...

Tohka había ido a su habitación, y tardó varios minutos en poder salir.

—voy a entrar, Tohka— Avisaba Issei.

El castaño no espero la respuesta de la sensei, y lo que vio lo dejo sonrojado.

—¿p-por qué entraste?— sonrojada.

—t-tu ¿p-por que estás v-vestida así?— Sonrojado.

—n-no preguntes, s-solo vamos al sofá— levantándose.

Ambos ahora estaban vestidos de cosplay, mayordomo y maid. Sentados, ambos en el sofá de la estancia, avergonzados mientras charlaban muy alegres.

—Jajajaja, Issei abramos otra botella— Tohka estaba un poco animada.

—!Si, hagámoslo¡— Issei estaba un poco más ebrio.

La pareja siguió bebiendo, estaba entrando la medianoche y las cosas parecían ir enfriandose.

—Jejeje Issei, eres muy guapo ¿en verdad soy tu primera novia?— Tohka estaba abrazando a Issei.

—Es verdad, ya sabes la razón del porqué— estaba luchando por quedarse despierto.

—Jejeje es increíble que mi pareja sea mi estudiante, pero, eres un buen muchacho y eso me gusta de ti— acariciando a Issei.

—a mi tambien me gustas, todo de ti— iba perdiendo la conciencia.

—Issei, vamos a hacerlo— se sentó en las piernas del castaño.

—N-no podemos, no h-hay...— cerro sus ojos.

Issei estaba a punto de perder la batalla contra el sueño, Tohka estaba deseando avanzar en su relación con Issei y hacer "esa" cosa de parejas.

—No te preocupes, es un día seguro— acariciado las mejillas y el torso de Issei.

Tohka comenzó a darle pequeños besos en la cara, hasta que escuchó un pequeño ronquido de parte de Issei.

—¿Issei?...— picando al castaño —Parece que se quedo dormido—

Tohka estaba en gran medida, menos ebria que Issei, por lo que se detuvo a pensar sobre sus acciones. En realidad queria hacer "esas" cosas de pareja con Issei, pero, no era la manera ni el tiempo de hacerlo.