Problemas del Pasado

Junio 1917

La Guerra estaba siendo un caos total entre la Hermandad Templaria y el Cuerpo de Exterminio de demonios, estaban avanzando sobre los cuerpos caídos de decenas de enemigos, los campos de batalla en los que estaban luchando se encontraban bañadas en la sangre de combatientes de ambos bandos, incapaces de avanzar un metro sin pagar con la vida de soldados.

Todos los Pilares fueron heridos en combate, algunos todavía tenían la fuerza para pelear, mientras que otros estaban tan heridos que era sorprendente que pudieran seguir vivos, al frente de cada Batalla contra los Sarkistas se encontraba Wilford, disparando a diestra y siniestra con sus armas para matar a tantos Monstruos cómo podía.

Las batallas estaban volviéndose muy caras, esa última misión en las montañas de Afganistán resultó en un desastre total para la Hermandad Templaria, los equipos fueron borrados, sin refuerzos en al menos tres horas, Wilford era el último soldado de la hermandad, mientras que los cazadores de demonios estaban perdiendo vida tras vida.

Se enfrentaban a un ser especialmente peligroso, se trataba de un intento de los Sarkistas de liberar a Yaldabaoth, era una criatura de carne con el corazón del dios de carne, acompañado de decenas de demonios que estaban haciendo hasta lo imposible para terminar con Wilford y Obanai.

La criatura crecía todo el tiempo, con tentáculos y brazos extra saliendo de su cuerpo, las heridas no dejaban de sangrar, además de infectar a la gente con una variante de la Carne que Odia, además de lanzar decenas de dardos perforantes.

En medio del enjambre de criaturas estaban Obanai y Wilford, matando todo lo que se acercaba a su posición, el semi dios estaba lanzando decenas de ráfagas de energía para alejar a las criaturas del enjambre, mientras que el espadachín estaba usando cada técnica y posición que requería para eliminar a los enemigos.

Sin importar el número de enemigos parecía no ser suficiente para detener el avancé de los dos guerreros, la criatura estaba luchando contra Wilford, quien respondía con rapidez, los relámpagos caían del cielo igual que un martillo aterriza sobre un yunque, la fuerza de cada golpe era devastadora y sus disparos desintegraron la carne que impactan.

El espadachín estaba utilizando una espada hecha de metal de Mekhane, un corte bien colocado y estaban destinados a morir si eran una criatura creada por los Sarkistas, estaba comenzando a cansarse, pero nunca se rendiría o mostraría debilidad, y n nos con Wilford cerca para presenciarlo.

Al final el monstruo de carne fue eliminado, habían logrado sobrevivir un día más y ahora solamente tenía que esperar la llegada de su transporte que los llevaría de regreso, Obanai se sento en una roca y miro a la distancia, todavía era de noche, pero al menos estaba en un lugar tranquilo y sin demonios a la vista.

Estaba pensando que la siguiente misión cuando escucho un peculiar sonido que venía de Wilford, volteo a verlo y se dió cuenta que tenía una especie de papiro, pero lo sorprendente no era de donde lo obtuvo, lo que llamo su atención era que se trataba de un retrato de Kanroji, era tan real y vivido que parecía una ventana.

Obanai: ¡Que clase de magia es esa! ¡Más te vale no haberle hecho nada a Kanroji o te dejaré peor que a esa cosa! —Sus gritos fueron escuchados desde muy lejos y parecía que al vaquero le daba igual—

Wilford: se llama fotografía, normalmente son blanco y negro pero mi tecnología supera a todos, incluso podría crear hologramas —Se volteo de dónde estaba y observó a Obanai, los dos no tenían una relación especialmente amistosa, pero tenían cosas en común— ¿La quieres? Seguramente Mitsuri no tendrá problemas

Obanai: ¿Por qué quieres a Kanroji? —Dijo mientras observaba a Wilford de manera intensa, a lo que el texano guardo silencio y se levantó—

Era un momento incómodo para ambos por uno u otro motivo, los dos querían a la misma chica, quizás con una diferencia de personalidad, pero sin ventajas el uno sobre el otro, y Mitsuri no sabia o reconocía el gusto de ellos por ella.

Wilford: no lo se, más allá de que es muy hermosa, ti algo que hace que mi corazón lata como en la época cuando todavía era humano, desde que perdí a mi familia no lograba sentir nada... Aunque creo que te preocupan los rumores sobre mi

Obanai: ni me importa quien seas, si le hicieras algo que lastime a Kanroji, no me importa como pero cortaré tu cabeza —Llevo su mano a la empuñadura de la espada, pero Wilford permaneció despreocupado —

Wilford: tranquilo chico, ella es una muy buena amiga, por ahora me gustaría seguir de esta manera —El Pilar de la Serpiente parecía más tranquilo, pero su posición hostil continuaba firmé, por lo que el vaquero trato de calmarlo para no hacer más incómodo el momento— te doy mi palabra de siempre protejer a Kanroji, sin importar a quien escoja o si siquiera escoje a alguno, vamos a proteger su sonrisa

Extendió su mano para sellar entraron, Obanai observó la mano y después estrecho su mano, los dos entonces pudieron estar en silencio, Wilford estaba por decir algo cuando su ojo fue atravesado por una flecha encantada por Yaldabaoth, la sangre plateada enano de su rostro y contesto disparando su revolver.

Logro ver a un hombre en la distancia, no logro analizarlo por completo pero sabía que era Yaldabaoth, el maldito ni siquiera se acercó para recibir sus balas o al menos un puñetazo, en su lugar creo más demonios de la nada, cada uno con la fuerza de una Luna Superior o Inferior, la batalla se reanudó y los dos exterminadores.

Horas más tarde llegaron más pilares, ya había amanecido, los Pilares del Insecto, Roca, Viento y Sonido llegaron al sitio, pero cuando lograron localizar a sus compañeros vieron una escena que les hizo hervir la sangré.

Vieron el momento en que Obanai recibía un disparo en el pecho y caía sin vida al suelo, de inmediato las espadas se dirigieron a Wilford, quien resistió cada ataque sin esquivar ni defenderse, sus ojos parecían muertos, como si acabará de ver algo que lo perturbo demasiado.

Desde ese día casi todos los Pilares sobrevivientes se distanciaron de Wilford y escogieron arriesgarse a misiones sin el mejor agente cazador de Carne, la Hermandad archivo toda la información del caso y guardo silencio más que con el líder del cuerpo de Exterminio de Demonios, quien también guardo silencio y dijo que sería mejor saber que Obanai había muerto como un héroe.

Pero los pilares no querían creerlo, todos sabían de la rivalidad entre Wilford y Obanai por el afecto de Kanroji, por lo que muchos cazadores de demonios pronto pensaron que Wilford elimino al Pilar de la Serpiente para quitar la competencia.

Pese a los esfuerzos del Patrón por eliminar esa idea, los unicos que irónicamente le creían a Wilford acerca de que no tuvo opción fueron el Pilar de la Llama y la misma Mitsuri, también miembros prominentes cómo Tanjiro e Inosuke apoyaban al vaquero, quien no hacía nada por repeler los ataques contra su persona y dejaba a todos ignorarlo o directamente insultarlo en su rostro, pero aún con ese evento la guerra seguía, y estaban lejos de terminar.

Actualidad

Wilford despertó una vez más de su sueño, todavía tenía pesadillas con aquél día, siempre se culpaba por la muerte de Obanai, siempre estaba alerta y nada lo sorprendía, fue su culpa todo lo que sucedió, podía asesinar y picar carne sin problemas, pero él fue su amigo y aunque fue por poco tiempo siempre lamentó haber tenido que tirar del gatillo y no poder hacer nada.

En la lejanía podía ver el Centro Comercial dónde dijeron que se reunirían, Mitsuri había caído rendida ante el cansancio de haber luchado por dos días casi sin descansos, se estaba moviendo en un automóvil que había encontrado y modificado, atravesó las paredes de varios edificios y ahora mismo estaba en curso de colisión con la puerta de entrada del Centro Comercial.

Cuando estaba cerca aumento la velocidad y atravesó una cortina de hierro sin problemas, también atravesó una pared de hormigón y después siguió avanzando hasta que el automóvil se detuvo dentro de una fuente, Wilford pateó la puerta para salir y mirar a su alrededor, justo a tiempo para ver a un muchacho Rubió sosteniendo a un hombre por una cornisa y amenazando con lanzarlo al vacío ¡Amaba ese mundo!.

Perspectiva de la Hermandad Templaria

El planeta estaba cambiando lentamente, las Anomalias escapaban de la contención o eran destruidas en medio del fuego cruzado de sus captores y quiene las liberaban, las organizaciones principales estaban luchando por los restos del mundo, dominando parte de la tierra, conquistando territorios y eliminando a grupos disidentes.

Los cuarteles de la Hermandad Templaria estaban teniendo una movilización constante, en una isla la gente estaba revisando el tejido de la realidad y trataban de mandar equipos para mantener cerradas las fisuras en la realidad, notando diferentes aberturas que estaban generando una tensión en el regidor del espacio tiempo que amenazaba con crear todavía un caos peor al existente.

Purple había trabajado durante días para mantener la fisura del tiempo a raya, habían recibido notificaciones de avistamiento de diferentes anomalías y soldados particulares, la zona de restricción se expandió por la ciudad donde estaba Black Flag y siguieron con su día.

Lo que estaba amenazando la vida de todos se trataba de Zero y los horrores que soltó sobre el mundo por diversión, Purple se sentía bastante cómodo ahora mismo, sus hijos por ahora no tenían peligro de morir de manera inminente, la mayor preocupación era que la humanidad estaba desapareciendo.

De los seis mil millones de personas que había antes de la plaga, ahora mismo quedaban cerca de mil millones o quizás menos, Purple no planeaba deciles cuáles eran las sifras aterradoras de que tan desesperadas eran las situaciones del planeta, los humanos infectados están en movimiento y no parecía que se detendrían, Zero se había lucido con esta plaga.

En medio de todo el caos había una esperanza de supervivencia, había regiones protegidas dónde la humanidad parecía mantenerse viva, incluso había comunidades que parecían mantenerse a flote, el planeta llevaba 15 días infectado, resultaba que lograron mantener a todos alisados e ignorantes, pero el horror fue inevitable.

Los satélites ahora mismo estaban siguiendo los movimientos de Gabriel, quien era el único de Black Flag que parecía mantenerse lejos todavía del punto de encuentro e incapacitado para comunicarse, Purple estaba usando espías en todas partes y estaba tranquilo, hasta que vio a dos espadachines avanzando con Gabriel entre los muertos.

Purple: que curioso, parece que los fantasmas del pasado llegan más tarde que temprano —Una pequeña sonrisa apareció en su rostro, se sirvió té en una taza para disfrutar de la vista, en el mapa señalo la ubicación de su hijo, pero también la de otros viejos aliados, le parecía entretenido ese nuevo hecho—

Centro comercial, minutos antes

Proxy se había rendido ante el cansancio y se desplomó, el grupo se quedó desorganizado, con todos los adultos responsable ocupados o descansando de sus ocupaciones, por lo que el grupo se separó para buscar recursos por el área.

Llevaban algunos días estando en aquel Centro Comercial, las heridas de todos eran mucho más graves de lo que pensaban, Ghost apenas podía mantenerse en pie y su cabello seguía blanco, Brock no podía pelear al 100 por ciento, Proxy estaba cansado y ni hablar de Alexa, quien estaba recuperándose lentamente y con ayuda de nano tecnología.

Los sobrevivientes que habitaban el edificio se acercaron lentamente al grupo fragmentado, separandolo o manteniendo la distancia, pero el separarse en territorio desconocido siempre era un gran problema y la enfermera Shizuka lo entendió por las malas.

Justo ahora uno de los sujetos del grupo de sobrevivientes tenía a la enfermera sujeta por el torso y presionaba un cuchillo contra su garganta, la tensión estaba en su punto máximo mientras todos observaban y apuntaban sus armas al hombre demente.

Takashi: baja esa arma, estás rodeado ¿Que esperas? ¿Crees que con un cuchillo puedes salir de esta vivo? Creo que sí sueltas a Shizuka sensei entonces podríamos simplemente...

???: ¡Cierra la puta boca! ¿Tienes idea de cuántas oportunidades tendría de encontrar a una mujer como está en el maldito Apocalipsis? ¡Ni una! Te propongo un trato chico, cuando termine con ella te la dejo a ti

Hirano guardaba silencio y buscaba algún punto ciego para poder emboscar al sujeto y neutralizar la amenaza, los dos estaban acompañados por Saya, Rei y Saeko, quienes tenían sus armas listas para luchar.

Tanto alboroto llamo la atención de la gente, incluyendo a dos hermano norteamericanos que estaban de particular mal humor, los dos caminaron lentamente en busca del alborotó, Brock estaba buscando sus nudillos de latón cuando se dieron cuenta de la situación de rehenes.

Proxy: bastardo, estoy de muy mal humor, si te rindes ahora prometo que solamente será una paliza menor, pero si sigues con esta estupidez prometo que te voy a golpear y dar una paliza hasta que te arrastres por el piso como un Damned Dog

???: ¡Maldita sea! Más público ¿Que no tienen algo mejor que hacer? No sé, invadir países por su petróleo, planear conspiraciones o esas cosas

Brock: y decían que los que hacen chistes racistas somos nosotros —El hombre más alto en la habitación camino en dirección al agresor, quien parecía mercioso ya que Brock tenía la mano en el revolver de su cinturón— ¿Haremos esto por las buenas o por las malas?

El hombre trato de amenazarlo con el cuchillo, pero el artefacto salio volando de su mano cuando Proxy le apuntaba con su brazo izquierdo, la energía se había manifestado otra vez y está vez se trataba de un poderoso imán que desarmo al agresor, Brock entonces tuvo tiempo de acercarse y derribar al sujeto de un golpe.

Shizuka se alejó lo más rápido que pudo y abrazo a Rei, Takashi quería atacar, pero entonces vio como se acercaba Proxy y con la mirada de muerte que tenía era evidente que sería mejor no meterse en su camino, el vaquero tomo su látigo y lanzo el primer golpe a la espalda del hombre.

Se escuchó el característico sonido de a punta rompiendo la barrera del sonido, seguido de varios chasquidos a medida que golpeaba la espalda del hombre, la sangre salía de las heridas y el hombre ya estaba en posición fetal pidiendo clemencia, pero Proxy siguió golpeando hasta que Brock le sujeto la mano ante la amenaza de que matara al sujeto a golpes.

El hermano mayor guardo su látigo y tomo al hombre por el cuello, todos miraron lo que hacía, la gente del grupo que estaba antes observó desde lejos como Proxy sacaba al siento por el borde del pasillo del tercer piso y lo sostenía en el vacío.

Proxy: ¡Escuchen bien, bastardos y buenos ciudadanos! No estamos aquí más que de paso, no causaremos problemas, pero si alguien más vuelve a causar problemas, a atacarnos o siquiera mirarnos, les juro que no tendrán tanta suerte

Estaba teniendo un debate interno acerca de si debería soltar al sujeto o lanzarlo a un lado, pero entonces escucho un gran alborotó, busco la fuente, pero la fuente lo encontró a él, cuando un automóvil entro por los almacenes y se estrellaba en una fuente.

Del automóvil bajo un hombre muy alto, vestido como un vaquero del viejo oeste, sus miradas chocaron y Proxy tuvo una breve crisis de pensamiento a medida que reinicia al hombre de sombrero negro.

Wilford: ¡Alguien me puede decir dónde y cuando estamos? Llevamos varios días tratando de saber a dónde ir y les agradecería algunas indicaciones

Proxy: creo que me golpe la cabeza muy fuerte —Se tocó un lado de la cabeza y libero su mano lanzando al agresor a un lado, Wilford miro con indiferencia al muchacho y se pregunto si no hablaba en inglés— soy Proxy Western ¿Quien eres?

Wilford: que malos mis modales, permítame presentarme, soy el grande, único y original Wilford Western —Se presento con una gran teatralidad, mostrándose orgulloso de su nombre y de la leyenda que formó a su alrededor — pero algo más importante ¿Quien te crees para usar el apellido Western?

Brock: deberíamos preguntar lo mismo, ningún loco salido de la coladera debería apropiarse del nombre del abuelo —Se miraron y los dos hombres parecían prepararse para lanzarse el uno contra el otro y golpearse la cabeza —

El silencio se apoderó de todo, incluso los día hermano ya tenían sus pistolas y rifles apuntando al hombre de negro, quien tomo sus propias armas y apunto contra ellos, dispuesto a abrir fuego a la mejor provocacion, la tensión parecía prepararse para un final sangriento, hasta que aparecieron las voces de la razón.

Saya: ¡Suficiente! No importa quien sea quien, si eres un abuelo o el nieto y tío ¡Bajen esas armas antes de que le saquen un ojo a alguien o les prometo que se van a arrepentir!

Ver a Saya gritando en medio de los tres texanos fue una escena tanto divertida como peligrosa, los tres tenían la sangre caliente como la arena del desierto y no era fácil calmarlos, pero los tres comenzaron a reír al verla en medio de los tres.

Wilford: ¡Jajajaja! Es como ver a un Chihuahua ladra si contra un par de malditos doberman —Se doblegó para sujetarse el estómago entre risas que molestaron a Saya, pero que al menos sirvieron para que guarden sus armas— creo que podríamos intentar presentarnos de nuevo, yo...

A veces el mundo era irónico, a veces entrar y te arriesgas a atropellar a todos dentro, pero todo sale bien y nadie es herido, en el caso de Wilford, lo que ocurrió después parecía una especie de mal chiste, un segundo automóvil entro por las puertas principales y lo atropello, un segundo auto apareció desde la ventana de un local y se quedó atorado a medio camino.

Black Flag habia llegado, todos estaban cubiertos de heridas y parecía que manejaron con los ojos cerrados, pero al menos estaban vivos, Pablo bajo del automóvil y camino sobre las piernas xe Wilford, quien quedó debajo del automóvil, dejando fuera solamente sus botas, lo único que faltaba era que intentará quitarle el calzado, pero el pie del vaquero era demasiado grande.

Marcos: maldita sea, es la última vez que te hago caso en tus indicaciones, te dije, no veo nada, utiliza el GPS para guiarme ¡Y por tu culpa nos estrellamos!

Pablo: ¡Pudrete! Te dije claramente que era a la derecha en Alburquerque y te fuiste por la izquierda —Se quitó los cristales de la ropa y se tambaleó por culpa de la contusión que sufrió durante el viaje—

El segundo automóvil estaba repleto de agujeros por culpa de disparos de armas cortas, la puerta fue plateada y salió Gabriel, todavía cubierto con su manto negro y parte de la armadura activa, se veía muy golpeado pero al menos viví, los demás salieron del automóvil y mutaron a su alrededor.

Gabriel: ¡Porque me disparan par de idiotas! ¡No nos vemos en días y lo primero que recibí fue un par de balas de ustedes dos! —Los tres hermanos estaban peleando, seguido de Proxy y Brock que llegaron a pelear también —

La pelea subió de nuevo y lo siguiente que todos sabían era que los cinco ya se estaban apuntando con pistolas unos a otros, reglando cosas tan recientes como atraer infectados, hasta cosas tan banales como haberse terminado la leche del empaque y devolver la caja vacía al refrigerador.

Pelearon por quince minutos hasta que el automóvil en que viajaban Marcos y Pablo fue lanzado a un lado, Wilford se estaba limpiando la ropa y parecía que bebió parte del aceite, esgaba por reclamar y golpear a quien lo atropello, cuando se dió cuenta de Kyojuro estaba también presente.

Al verlo se le acercó rápido para saludarlo, su estado de salud era todavía peor que antes, pero al menos estaba vivo, Shinobu lo saludo de manera formal, algo común en ella, el lugar parecía estar calmandose, su reencuentro fue bastante peculiar, pero al menos los grupos se estaban complementando otra vez.

Fue entonces que Mitsuri despertó al fin, tenía un sueño muy profundo y ni el auto atravesando muros la despertó, cuando estuvo conciente nuevamente y vio a sus compañeros, corrió directamente a Kyojuro, abrazándolo tan fuerte que casi le parte la espalda en dos.

Todos parecían estar de nuevo en paz, sin saber que la oscuridad estaba solamente reagrupando sus fuerzas para atacar, todavía no regresaban a casa y había mucho trabajo por hacer, y quién manipular los hilos esgans a punto de lanzar los dados, lo único que se podía esperar era un poco de suerte para volver a casa.






Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top