Luna 04

Narrador:

Después de la cena que el grupo y los padres de Sona tuvieron, se quedaron charlando un poco después de que la mesa fuera recogida por los sirvientes de la familia. Koneko estaba pidiendo un poco más de postre, Kiba se encargó de que la pequeña peli blanca no comiera demasiado y pudiera tener malestar estomacal.

Yerak y Leila vieron con una sonrisa como su hija menor disfrutaba el pasar tiempo con sus amigos. Siendo sinceros ellos pensaban que Sona era un poco Asocial y que no llegaría el día en que trajera nuevos amigos a casa, aparte de los chicos que son reencarnados para su nobleza. Sintieron un alegría el pensar que el cambio que está viviendo la pequeña Sona es algo para bien, cosa que en esta cena pudieron reflexionar un poco... Sera buena idea escuchar la petición del joven Hyodo e Ingvild.

Por otra parte, Issei e Ingvild estaban hablando un poco sobre lo que harían después de que tuvieran la reunión. Estaban aclarando unos pocos detalles sobre la visita de los parques acuáticos que son propiedad de la familia Sitri, así como un recorrido por el centro de la ciudad principal dentro del territorio.

—¿Estás segura qué podemos hacerlo? —preguntaba Issei un tanto apenado.

—Claro, no le veo el problema —respondió la chica con simpleza.

—No quiero ser una molestia, ya has hecho mucho por mi... cariño —Issei se sonrojo un poco.

—Te digo que no te preocupes, yo lo hago por ti —Ingvild alzo la mano.

—¿Sucede algo, Ingvild-chan? —preguntaba Leila, viendo a su sobrina.

—Issei pregunta que si puede tener más postre.

—Solo un poco —el castaño susurro apenado.

Leila y Yerak rieron un poco ante la situación. Para ellos dos era obvio que los chicos tenían algo más que una amistad, claro que no iban a decir nada porque después de mucho tiempo las sonrisas dadas por Ingvild no son sonrisas vacías.

—Claro, no hay problema —Leila Sitri sonrió.

Una de las criadas se acercó con un carrito y de ahí saco un pequeño plato con un delicioso pastel de biscocho de vainilla, relleno de crema pastelera y fresas frescas.

Después de un rato, y antes de retirarse de la Yerak tomó la palabra y dijo:

—Es un placer tenerlos como invitados, cualquier amigo de mis pequeñas son bienvenidos a esta casa —dijo el hombre con seriedad y alegría—. En cuanto a su petición, joven Hyodo.

—¿Sí, señor Sitri? —Issei preguntaba con cuidado.

—Tienes tu reunión, mañana en punto de las 8:30 pm —dijo Yerak, volviendo a su semblante serio—. Espero que sea algo que valga la pena, muchacho. Mi tiempo es muy valioso.

—¡Papá! —Sona parecía avergonzada.

—Vamos... So-chan, solo bromeo —dijo Yerak, un poco ofendido.

—No hagas ese tipo de bromas, cariño —dijo Leila, palmeando la espalda de su esposo—. Sera mejor para todos que vayamos a dormir, mañana nos espera un largo día.

Todos se despidieron de manera formal, de poco a poco iban dejando el gran comedor y se dirigieron a sus habitaciones para descansar y prepararse para el siguiente día. Día en el cual muchas cosas interesantes podrían pasar.

...

Al día siguiente, después de que todos tomaran el desayuno. Kiba e Issei jugaron un momento con sus consolas DS mientras escuchaban por encima una charla sostenida por las chicas, cosa que realmente no le importaba demasiado a comparación de mejorar su nivel competitivo en Pokémon.

—Después podemos ir al café que se encuentra cerca del parque principal —dijo Ingvild, mostrando un pequeño pizarrón.

En el estaba listado de las cosas que iban hacer durante el día. Era justo y necesario hacerlo debido a que ella e Issei estuvieron parte de la mañana hablando con los señores Sitri, acerca de la petición para que Sona viva con ellos.

—Oye Issei —Kiba habló con un tono bajo.

—¿Qué pasa? —preguntaba Issei, concentrado.

—¿Cómo les fue en la reunión con Lord y Lady Sitri?

—Dijeron que tenían que pensarlo, y que para mañana nos darían la noticia —dijo Issei, sonriendo a su pantalla.

—¿Enserio? —Kiba frunció el entrecejo a su DS—. Eres malvado, Issei.

—Pensé que se iban a negar, pero Ingvild se hizo cargo de la mayoría —Issei volteo para ver a Kiba—. No hables feo, me pongo triste.

Ambos chicos se echaron a reír, cosa que molesto un poco a las chicas por ser interrumpidas en su momento de organización. Los chicos solo hicieron como si no hubieran hecho nada y continuaron jugando, durante cinco minutos más.

Ingvild y Sona se acercaron para confiscar las consolas, pero, Issei hizo una pregunta antes de que las chicas pudieran hacer algo.

—Entonces al final subimos a la rueda de la fortuna? —preguntaba mirando a Ingvild a los ojos.

La chica no pudo evitar e imagino lo que podrían hacer estando en una cabina de la rueda de la fortuna estando ellos dos solos. Se imagino tomados de la mano y observando fuegos artificiales mientras estaban en lo más alto... También se sonrojo un poco ante el pensamiento que le siguió después, pero su semblante volvió a normalidad cuando se imaginó a ambos saliendo del parque acuático con recuerdos y todos sus amigos alrededor, con una sonrisa en el rostro.

—Sí. Pero no te adelantes —dijo Ingvild fingiendo seriedad—. Eso será hasta dentro de dos días. Primero quiero enseñarte los alrededores de la mansión, hay lugares que son muy bonitos y quiero que lo veamos juntos.

—Entonces... ¿es?

—¿Es qué?

—¿una cita?

Issei e Ingvild se sonrojaron un poco. Sería la primera vez que salen en ese sentido, dejando de lado el momento en que iban de compras y se quejaban del precio del pan.

—Issei-Senpai e Ingvild-Senpai van a tener una cita —Koneko dijo al verlos—. Ya era hora.

—Si le tocas un solo cabello a Ingvild-sama, te las vera con nosotras —dijo Momo, viendo a Issei de manera amenazante.

—Esperemos que no pase nada indecoroso, Issei-san —Reya dijo mientras sonreía de manera extraña.

—Concuerdo con Koneko, ya era hora —Kiba dijo con una sonrisa en su rostro, le ganó a Issei en su partida.

Casi todos en la habitación comenzaron a molestar a la pareja, las únicas que no hicieron escandalo fueron Sona y Tsubaki, que estaban charlando sobre otro tema. En realidad, Sona y Tsubaki estaban igual de emocionadas, pero tuvieron que guardar la calma y actuar de manera normal.

...

Mientras seguían hablando, se pudo escuchar un sonido venir desde la puerta, algo que se hizo raro a todos

—¿So-Tan? —Se escucho del otro lado.

Al escuchar ese apodo, el rostro de Sona perdió su color, mientras el resto del grupo, salvo Ingvild y Tsubaki, Miraban con curiosidad la puerta, la cual empezaba a congelarse.

—Respeto tu privacidad tocando la puerta —Tras decir eso, la puerta se congelo completamente y se destruyó—. Pero reafirmo mi autoridad como Onee-San entrando de todos modos.

Al destruirse la puerta, se pudo ver a una joven de baja estatura, pero gran pecho, peinada con dos coletas y con unos hermosos ojos azules, vestía un vestido al estilo militar color verde y en su cabello dos listones de color morado.

—Bienvenida, Leviatán-Sama —Hablo Tsubaki.

—¡Prima Sera! —Grito Ingvild, sonriendo.

La chica solo saludo con una mano y después puso una mirada seria.

— ¿Quién es Hyodo Issei? —Pregunto fuertemente.

Las chicas se miraron en silencio y después miraron al castaño, el cual parecía absorto en su DS.

La pelinegra se percató y se acercó al castaño, pero antes de hablar, miro la pantalla de la DS y se emocionó un poco.

— ¡Oye, estas en desventaja, no creo que puedas ganar! —Comento la chica.

—No siempre se trata de la ventaja de tipos, también es necesaria una buena estrategia —Comento el castaño, seleccionando unos ataques.

—Un Darkrai y un Blaziken frente a un Swampert y un Emboar, eso no se ve bien para ti.

Pero las palabras de la Maou fueron calladas al ver como Darkrai lograba dormir a los 2 Pokémon y Blaziken debilitaba de un "Brave bird" critico a Emboar.

—Lo vez, también hay que tener suerte en el juego —Menciono el castaño, atacando a swampert para después se mostrara el letrero de victoria.

—Woaa, tienes razón —La joven tenía estrellas en los ojos—. Espera un momento, yo no estaba aquí para eso.

Tras decir eso, Serafall tomo la consola y la aventó, cosa que preocupo a Issei, para su suerte, tanto Reya como Momo se lanzaron a atraparla, chocando sus cabezas en el proceso, pero logrando la acción

Al hacerlo, ambas se veian felices y la abrazaron, empezando a mencionar algo sobre "Su talismán del dinero"

— ¿Porque hiciste eso? —Issei recrimino visiblemente molesto.

— ¿Tu eres Hyodo Issei? —Pregunto la chica.

—Si, ¿Y qué? —respondió agresivamente debido al enojo por lo de su consola.

Al ver de quien se trataba, Kiba se puso nervioso y se preocupó por como respondió issei, para el resto de las chicas era igual, sobre todo Sona, quien al hacerse una idea de porque estaba su hermana ahí, le preocupaba que matara a Issei por su tono de voz

—Deberías mirar más el tono con el que hablas, niño —La maou se veía molesta.

— ¿Porque habría de hacerlo? —El castaño se puso de pie, mostrando que era ligeramente más alta que la pelinegra.

—Grosero y pervertido... —Susurro más enojada—. ¿En serio es esta clase de persona con la que quieres irte a vivir, Sona?

La sala se quedó en silencio, para los que la conocían, la Maou nunca se había dirigido por su nombre a su hermana pequeña, siempre agregaba sufijos cariñosos y acortaba el nombre.

—Onee-San, Yo... —Sona bajo la cabeza, si había alguien a quien nunca podría enfrentar cuando se pone seria, ese alguien es su hermana.

El ambiente se puso pesado, ningún demonio podría hablar pensando en lo que podría pasar

Exacto, ningún demonio...

— ¿Grosero?, No eres quien para decirlo —La voz del castaño se escuchó en la habitación.

Los demonios lo miraron claramente asustados, más al ver como la maou lo mataba con la mirada.

Para la Maou, ella sentía impotencia al tener que restringir sus poderes, a sabiendas de que el más mínimo desborde de su aura podría causar graves daños al chico.

—Soy grosero con quien fue grosero —Menciono el castaño—, y hora que se quién eres, puedo entender que vengas a interrogarme sobre tu hermana, lo que no me cabe en la cabeza es que casi destruyas mi preciada consola solo por un berrinche.

La maou se quedó sorprendida, ¿La estaban regañando?, Ni siquiera su madre lo había hecho en los últimos 200 años.

—Entiendo que eres la hermana de Sona-San y que te preocupes por ella, pero no tienes por qué venir a atacarme sin siquiera conocerme —Recalco Issei—, además, es un tema que hemos hablado con sus padres, ellos son quienes tienen la última decisión, no tu —Alzo la voz el joven, dejando a todos mudos.

Ingvild veía como el castaño se enojaba y quería ir a detener esa pelea sin sentido, cosa que no pudo ya que Sona la detuvo.

La pelinegra se esperaba esa reacción de su hermana, incluso ella esperaba tener que hablarlo con ella o sobornarla con algo para que le diera el permiso, más nunca espero que aquel castaño pervertido se enfrentara a la Mao.

—Es mi hermana menor, obviamente yo tengo que cuidar de ella y alejarla de la gente que pueda hacerle algo —Serafall menciono de manera rápida.

—He vivido 6 meses con ingvild, ¿Has visto que le he hecho algo que ella no quiera? —Issei se sonrojo—. Apenas Soy capaz de tomarla de la mano sin sonrojarme, ¿Crees que sería capaz de hacerle algo a alguien más?

Ante lo dicho por el castaño, Ingvild se sonrojo, si bien era cierto lo que dijo, realmente ya habían cruzado la línea en un par de ocasiones.

Mientras, Reya y Momo desviaron la mirada, el castaño solía mirar sus pechos de vez en cuando y muchas veces de manera descarada, pero nunca se atrevió a intentar hacerles algo y cuando llegaba a tocarles aun fuese la mano, este se alejaba y se disculpaba como loco.

Serafall miro las reacciones y veía el semblante serio/Sonrojado del castaño

— ¿Ingvild? —La pelinegra la miro con seriedad.

—Es verdad, incluso todos los avances que van más lejos que tomarse la mano han sido iniciados por mi —Comento la chica, sonrojada.

Mirando a Sona y el rostro de preocupación que ella tenía hacia el castaño, la Mao se calmó y se dio media vuelta de manera algo infantil.

—En dos días, espérame a las afueras de la mansión —Menciono Serafall.

— ¿Que? —El castaño la miro con dudas—. ¿Por qué?

—No puedo confiar solo en las palabras, sin importar de quien sean —comentó— así que saldremos juntos y tendrás que demostrarme que puedo confiar en ti para cuidar de Sona y de Ingvild.

Tras decir eso, la pelinegra camino hacia fuera de la sala

Para ella, había algo extraño alrededor de ese castaño, no solo su aura la cual parece ser de un tipo extraño, atrayente para los animales, si no que la postura que tomo para defender a "Su So-Tan" fue algo inesperado.

Ella esperaba intimidarlo con su sola presencia, así que fue sorprendente que este no solo la tomara normalmente, sino que también se enfrentará a ella sin ninguna pizca de miedo, definitivamente para ella era un chico raro, tonto y tal vez, sea un caso especial, o al menos esa corazonada tuvo.

...

En la sala tras la partida de Serafall todo se quedó en silencio, un silencio que fue interrumpido cuando escucharon algo golpear el piso

—E~Espera un segundo —Susurro Issei—. S~Si esa era la hermana de Sona, eso significa que... podía matarme de un soplido —Issei abrazo sus rodillas.

Los demonios lo miraron con incredulidad y algo de alivio. Hasta hace un momento parecía totalmente seguro y sin miedo, pero al verlo así ahora, probablemente se debe a la adrenalina del momento.

Si bien no era algo nuevo, aún era algo extraño para ellos el cambio de actitud que Issei tenía al defender lo que le importa, un lobo en piel de cordero solía decirle.

...

Pasó un poco de tiempo para que Issei se recuperara de su crisis nerviosa, Ingvild y Kiba se quedaron para ayudarlo a recobrarse. Momo y Reya de la misma manera tomaron turnos en su cuidado, tomando el primer turno, cosa que Ingvild había agradecido.

—Pensé que no ibas a recuperarte —dijo Ingvild, acariciando una mejilla de Issei.

El castaño tomó la mano libre de la peli morada, como si fuera su bien más preciado. La miro a los ojos, y se quedaron viendo unos momentos.

—¿Pude morir?

—Obviamente —respondió Ingvild—, pero no iba dejar que te hicieran daño.

—Muchas gracias, enserio —Issei dejo escapar un suspiro.

—Sabes... te viste muy varonil en ese momento —Ingvild se sonrojo un poco—. Sabía que eres valiente, pero no esperaba tal nivel.

Issei se sonrojo demasiado por el cumplido de Ingvild. Por el momento estaban solos, ingvild había enviado a Kiba para traer agua y algo para que el castaño pudiera comer.

—¿Aún podemos salir? —preguntó Issei, volviendo a recostarse en el lugar.

Ingvild lo imitó, y se recostó a un lado del chico. Siguen tomados de la mano.

—Sí, puede que no hagamos mucho de lo que tenía planeado originalmente pero aun tenemos tiempo para hacer tres de las actividades —Ingvild se volvió para ver a Issei, sonriendo.

El castaño la imito y ahora estaban viendo el rostro el uno al otro. Sonrieron y rieron un poco.

—¿Podemos llevar a Kiba con nosotros? —preguntaba Issei de manera inocente.

—¿Quieres que nos acompañe?

—Sí... Kiba es mi primer amigo que no es un pervertido como lo eran Matsuda y Motohama... Además...

—¿Además?

—Quiero que por fin invite a Tsubaki-senpai a una cita —dijo el castaño, sonriendo un poco.

—Veo lo que planeas —Ingvild puso una expresión seria pero divertida al mismo tiempo.

—¿entonces puedo?

—Sí, podemos hacerlo.

Kiba entro a la habitación acompañado de una sirvienta y un mayordomo, traían unos carritos llenos de comida, postres y bebida.

—¿Qué ban hacer? —preguntaba Kiba, que alcanzo a escuchar un poco.

—Iras con nosotros a dar una caminata, cenar y divertirnos —dijo Issei con una sonrisa, sentándose para poder ver al rubio.

—¿puedo negarme? —pregunto Kiba, viendo la extraña sonrisa en el rostro de Issei.

—Ño —Respondió Ingvild, sonriendo de manera inocente.

Ambos se levantaron y atraparon a Kiba para que no pudiera escapar... Ingvild hizo la mayor parte del trabajo debido a que Issei al ser un humano no puede contener a un demonio por muy relajado que este se encuentre.

Ambos lo arrastraron dentro del armario, Kiba hacía movimientos erráticos para poder liberarse.

No me arrepiento de lo que he vivido —pensaba Kiba con lágrimas en los ojos.

No tuvo éxito en su lucha desesperada y ahora estaba a merced de la pareja.

...

Pasado una hora. Issei, Ingvild y un obligado Kiba estaban en caminando por la ciudad. En el camino que guiaba Ingvild, ambos demonios le contaban a Issei de que, en el inframundo, hace mucho tiempo el cielo era originalmente de color purpura durante día y noche, pero que por beneficio de los demonios reencarnados se hizo una replica de la luna usando poderes demoniacos.

—Vaya, ¿Qué más hicieron? —preguntaba el castaño con curiosidad.

—El flujo del tiempo se emparejo casi con el mundo humano —Kiba respondió como si fuera un examen.

Siguieron caminado y charlando, aun teniendo tiempo para ir al restaurante que Ingvild eligió. Decidieron sentarse en una banca, cuando lo hicieron se quedaron en silencio unos cuantos minutos.

—Es una noche muy tranquila —comento Issei de manera relajada.

—Sí, tienes razón —Ingvild sonrió y tomo la mano del castaño.

De los tres, Kiba parecía estar serio. Eso llamo la atención de Issei, quien le hizo una seña que lo devolvió a la realidad.

—Me alegro mucho de que me hayan invitado —dijo Kiba, con una pequeña sonrisa.

—No es nada —dijo Ingvild siendo sincera—. Eres nuestro amigo ¿no?

—Sí... Somos amigos.

—Mejores amigos —Issei corrigió al rubio.

Vieron el reloj y se levantaron para continuar su ruta de camino al restaurante, llegaron justo a tiempo. Issei y Kiba estaban asombrados de ver un restaurante familiar... Ingvild tenia una sonrisa de orgullo en el rostro al ver a los chicos impresionados.

—¿Un lugar familiar? —pregunto Issei.

—¿Este lugar no es famoso? Creo haberlo visto en DeviTube —dijo Kiba, recordando un poco.

—Este restaurante fue al que me trajeron mis tíos cuando llegue a vivir con ellos —dijo Ingvild mientras recordaba el momento—. Es especial para mí, así que decidí traerlos para que conocieran este lugar. Tienen los pancakes más deliciosos del inframundo.

—¿Pancakes? —Issei pregunto imaginando el sabor, en casa nunca habían intentado prepararlos.

—Suena delicioso —Kiba respondió con una ligera sonrisa.

—¡Lo están, es lo mejor del mundo! —dijo Ingvild emocionada—. Por ellos nació mi gusto por cocinar desde edad temprana.

Entraron al lugar y de manera inmediata les dieron una mesa, poco después les llevaron el menú.

—Volveré cuando estén listos para ordenar —dijo la empleada de manera amable.

Issei puso una cara seria mientras veía el menú, al igual que Kiba. Ambos analizaban de manera exhaustiva cada opción, era un universo desconocido para ambos chicos el ver una selección tan amplia y variada de postres, bebidas, platos fuertes, entradas y guarniciones. Incluso estaba dividido por países.

—Me duele el cerebro —dijo Issei mientras se sostenía la cabeza de manera cómica.

—Son pocas las veces que logrado ver tanta variedad en un menú —dijo Kiba, un poco serio.

—Pediré los Pancakes —dijo Ingvild sonriendo.

—Deja a un lado los Pancakes, todo se ve delicioso —dijo Issei, algo emocionado.

—Yo voy a pedir este Crepe —Kiba parecía más relajado.

—¡Mira este Mont Blanc, tiene un buen aspecto! —Issei de nuevo cambio su opción.

—¿No íbamos a pedir Pancakes? —Ingvild estaba confundida.

Issei ignoro un poco a Ingvild mientras seguía considerando opciones, solo faltaba él. Ingvild estaba un poco deprimida porque nadie más pidió los pancakes... Kiba le dio una patada por debajo de la mesa al castaño, cosa que molesto al chico. El rubio le señalo a Ingvild, que estaba un poco decaída.

—¿Por qué no compartimos? —pregunto Issei, de manera inmediata —, así podemos probar un poco de lo que pidió el otro.

—¡Es una buena idea, Kiba-kun! —Issei secundo la idea de manera inmediata—. Muero por probar los pancakes de Ingvild.

—Y yo quiero probar ese Parfait que elegiste —dijo el rubio.

Una enorme sonrisa apareció en el rostro de Ingvild.

—¡Okey! ¡Entonces ordenemos todo eso! —Ingvild dijo con emoción.

Muy poco tiempo después una camarera les llevo sus postres. Kiba sintió una sensación en el pecho que no tenía desde hace mucho tiempo, algo cálido surgía.

—Esto es divertido —dijo Issei mientras se estiraba un poco.

—Voy a compartir dulces con mis amigos —dijo Issei con una sonrisa—. Eh... Nunca pensé que llegaría el día en que pudiera hacer esto.

—¿Puedo decirles algo? —Kiba les pregunto algo nervioso—. Si no es mucha molestia.

—Claro, ¿por qué nos molestaría? —pregunto de manera inocente la chica.

—Es que... —Kiba suspiro un poco—... Desde que Issei y yo hablamos, mucha gente se ha acercado a mí, incluso hace poco una chica me hablo normalmente.

—Es por qué has cambiado —dijo Issei mirando a Kiba con orgullo—. Recuerdo mucho cuando estábamos en primer año, la mayoría del tiempo la pasabas solo o encerrado en el viejo edificio.

—Me alegro mucho de haber presenciado tu cambió, Yuuto-kun —dijo Ingvild, tomando las manos de Kiba—. Eres una persona totalmente diferente a la de antes, tal vez no lo has notado, pero ahora tus ojos no reflejan ese atisbo de dolor.

—Tus sonrisas son sinceras.

—Eres más atento a los demás.

Issei e Ingvild comenzaron a dar una pequeñas lista de los cambios que habían notado en Kiba. Todos era cambios positivos, hablaban cosas buenas del muchacho. El sentimiento que tenia en el pecho fue creciendo, haciendo que sintiera una enorme felicidad en su ser.

—... —Kiba se quedó callado unos segundos —. Así que así se sentía tener amigos que te quieren —Pensaba el chico, una lagrimaba bajaba por su mejilla—. En verdad chicos, los apreció mucho.

—Nosotros a ti también, kiba —dijeron al mismo tiempo Issei e Ingvild.

Kiba limpio esa lagrima traicionera. Continuaron comiendo antes de que sus postres se enfriaran o calentaran, y tal cual lo habían dicho, compartieron postres para probar algo diferente. Ingvild alimento a Issei un par de ocasiones.

Kiba estaba contento de que lo arrastraran.

—Por cierto, Kiba, mañana saldremos al parque de diversiones ¿Por qué no Invitas a Tsubaki-senpai?

Issei dijo como si fuera lo más casual del mundo. Ingvild secundo la moción, e incluyo una condición. Si Kiba no lo hacía, sus Nintendo DS iban a ser confiscados, de ambos chicos.

...


















Hola muchachos, hace mucho que no les escribo. ¿Como andan? Yo he estado bien.

Espero que les haya gustado el capitulo de hoy. Dejen sus comentarios de lo que les pareció y lo que piensan que puede pasar en el siguiente capítulo. Lilith_EMov chinga tu madre.

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