El resplandor plateado que emitía el castaño sorprendía a los demás, ya no portaba la característica armadura roja que lo distinguía como el Sekiryuutei, en su lugar traía una que su peculiaridad eran dos alas de ángel, Irina sintió que su alma se le salía del cuerpo, su amado esposo, parecía un ángel.

-Así que, ¿Tu eres el famoso Hyoudo Issei?, Pensé que habías muerto.

-Digamos que si lo hice.

El castaño aumentaba el rango de su energía, haciendo retroceder a los cadáveres vivientes, sorprendiendo a los demás, ya que solo bastaba su presencia para detener el ataque a Kyoto.

-Issei, ¿Qué es eso que traes puesto?

-Es una armadura divina Rías, representa el poder de Pegaso, constelación que protegía al caballero Seiya, el santo de Pegaso.

Las chicas quedaron impresionadas por las palabras de su esposo, el equipo de mujeres más fuertes de la alianza no se le comparaba en poder, lo sabían, el solo hecho de elevar su aura, lo daba a notar, su poder había incrementado mucho.

-Abel, prepárate, está será tu tumba, compartirás el destino de tu padre.

-No lo creo, soy demasiado poderoso para ti Sekiryuutei, además debes de saber algo, pelear con una armadura del Olimpo es una desventaja para ti, ya que soy inmune a ellas, ¡ahora!

De pronto tres siluetas más salieron de las sombras y rodearon a Issei en forma de triángulo, cerrando sus salidas de escape, Issei no se inmutó, preparaba su siguiente movimiento, pero los demás tenían terribles planes.

-Cadena de Andrómeda.

-Dragón naciente

-Puño del Fénix

Una cadena extraña sujeto a Issei, vio como un dragon lo golpeó en el pecho, sacando sangre de manera instantánea, y al final como un ave fénix, atravesó por completo su cuerpo, haciendo que este aumentará de golpe la temperatura de su cuerpo, causando algunas quemaduras.

-¡Maldición!

Los presentes observaron con horror como su compañero y amigo, había sido derribado de tres simples ataques, pero lo que no sabían es que contra un caballero del zodiaco, eran ataques mortales, que podrían causar su muerte.

-Jajajajaja, este es el famoso Sekiryuutei que venció a la bestia del apocalipsis, para mí que solo es un fanfarrón.

Abel, el extraño ser que llegó atacó Kyoto y a los demás había perdido por completo la compostura, dejando de lado toda su elegancia y formalidad de las palabras.

-Señor Abel, debemos matar al caballero de Pegaso, su antepasado se caracterizo por nunca rendirse y prevalecer hasta el final, hay que dar el golpe de gracia.

-Felicia, tranquila, con tus cadenas, estoy seguro que no se moverá, se confió demasiado.

-De acuerdo señor Abel.

Felicia, la primer silueta dejó ver a una mujer rubia con una extraña armadura, pero también con una máscara, está no dejaba ver su rostro, pero, esta misma mantenía un agarre formidable sobre Issei, que al parecer no se movía.

-Eso fue todo, al parecer el sucesor de Seiya no fue tan poderoso, bien lo decía mi maestro ikki, el era el más idiota de todos.

-Tranquila Rebecca, no debes juzgar antes de aprender, he aquí el ejemplo, subestime a estos demonios estúpidos, y sólo lograron derrotar al ejército que había preparado para este ataque, sin la necesidad de un líder de facción, eso habla mucho de ellos.

Los demás inmovilizados no podía hacer más que lamentarse por su compañero caído, ya que el hechizo que los mantenía inmóviles seguía activo.

-Maldito, en cuanto me suelte, te juro que voy a asesinarte, tu cabeza rodará, sus armaduras no están en un estado divino como la mía.

Un Saji descontrolado emitía un aura negra que le daba un poco de movilidad, pero no asustaba al enemigo en cuestión, pero sí que lo hacía con sus compañeros, más con Sona Sitrí, que era la más cercana.

-Saji, controlate, sabes que ese poder te lo ha prohibido mi hermana, pierdes la razón, no lo hagas.

-Perdóname amor, pero sé que Issei podrá detenerme, es momento de sacar, a un rey dragón.

[Vitra Queen promotion]

Saji invoco su armadura, está inmediatamente le devolvió la movilidad, pero este comenzó a mutar en un dragón negro, le crecieron dos cabezas más, y dio un rugido impresionante, incluso alertó a Abel.

-Cristal, encárgate de el.

-Si maestro Abel.

La última persona, con una armadura azul, salió al ataque, procediendo a luchar con el dragón negro de tres cabezas en el cielo, causando varios relámpagos, fuego violeta lanzaba el dragón para atacar, mientras que la armadura con su extraña energía golpeaba al dragón, a la vista de todos, parecía una pelea a muerte.

-Vaya, ese dragón es impresionante, está peleando al nivel de Cristal, pero no ganará.

-Yo que tú no me confiaba Abel.

Issei aumento el poder de su auta, asombrando a todos sin excepción, incluso Abel hizo una mueca de molestia, por algún motivo se veía con intención de asesinar al castaño.

-¿Cómo es posible que liberes poder?, La cadena debería retener todos tus movimientos.

Issei aún con su pecho y brazos cubiertos por la cadena empezó a caminar en dirección de Abel, el cual no se inmutó, pero si veía con más molestia al castaño.

-El poder es absoluto, cuando tienes un poder divino, tienes una cierta protección, por lo que la cadena de Andrómeda me afecta muy poco, además ellas llevan armadura de bronce básica, la mía está bañanda en sangre de un dios, siendo portada por un dios, además, mi armadura esta en un estado más allá de tus chicas.

Nuevamente Issei elevó su energía, causando que la cadena dejará de sujetarlo, y las dos chicas salieran volando, miró a Abel seriamente, dando a entender que sus palabras no eran un juego, iba enserio con el asesinato de la persona que tenía enfrente, mientras que Abel, sonrió, pero con una clara molestia.

-Pegaso, siempre fuiste una molestia, desde la gran era mitológica hasta estos momentos, está será mi victoria, pero antes.

De un golpe atravesó el cuerpo de Issei, pero no había sangre mi nada por el estilo, sorprendiendo a más de uno, incluso el mismo Issei no se esperaba ese ataque, y aunque no hizo ninguna mueca de dolor, lo que pasó, sorprendió a todos.

[¿Que demonios estás haciendo?, ¡maldito!]

-Me quedaré con tu Sacred gear, El Sekiryuutei ahora será mío.

-¡No digas estupideces!

Abel con su mano dentro del cuerpo de Issei comenzó a moverla bruscamente, dando a entender que no fue un ataque físico el que hizo, si no más bien atacaba a su alma, buscando sacar la Sacred gear del dragón emperador rojo, el Sekiryuutei.

-Ddraig, Ddraig, ¡debes de salir!, o ¡vamos a morir los dos!.

[Lo sé idiota, ¡Esto duele mucho!, ahora verás Abel]

Del cuerpo de Issei surgió una energía carmesí, está hizo volar al atacante, mientras que Issei mostró unos ojos verdes brillantes, y de su cuerpo se desprendio la energía, dando lugar a un gigantesco dragón rojo.

[Ahora sí maldito, ¿Qué me querías hacer?]

Decir que todos estaban sorprendidos sería poco, ya que Ddraig, el que se supone estaba sellado en un artefacto sagrado, ahora estaba libre, tomando una posición detrás de Issei, rugiendo contra el peliblanco que sonreía por lo ocurrido, una gran anomalía.

-Así que pudo liberarte, no solo eres una ilusión, realmente es tu cuerpo, o debo de decir, ¿El de él?

[No te equivocas Abel, compartimos cuerpo, y si sabes de qué sangre y carne es, no deberías de seguir peleando]

Abel no perdió la compostura, seguía firme en su lugar, sabiendo realmente que iba en verdad la amenaza, ahora no tenía alguna oportunidad, ya que ninguno mostraba algo de su poder, pero la presencia de Ddraig era suficiente para hacer sudar a todos.
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En la batalla de Saji, Todo no parecia complicado, a pesar de que varias armaduras volaban a su alrededor este no se inmutaba, podía con todas, pero desafortunadamente su poder estaba descontrolado, por lo que las mismas personas dentro de las armaduras decidieron hacer una ataque en conjunto que acabaría con todo.

-Bien hay que hacerlo, ¡Dragon naciente!

-Toma esto dragón, ¡Puño del ave fénix!.

-No te moverás, !¡Cadena de Andrómeda!.

Los dos primeros ataques salieron disparados de forma violenta, pero el dragón tenía la intención de moverse, pero con la cadena quedó sujeto en el lugar, claro que lanzó de sus tentáculos para tratar de contrarrestar el ataque, y aunque recibió el ataque de lleno causando su inconsciencia, también provocó que las otras personas cayeran junto con el, pero mucho más lastimadas, Saji solo se veía agotado.
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Mientras tanto, en otro lugar algo alejado de esa zona de combate, un peliblanco estaba sentado, hasta que sintió una presencia poderosa.

-¿Qué es esto?

[Maldito, así que ya regresaron  y no solo eso al parecer también recupero su cuerpo, maldición, me ha humillado, Vali, vamos inmediatamente a buscarlos]

Sin rechistar nada inmediatamente Vali se levantó de su asiento y alzó vuelo con las alas de su sacred gear.

-Es tan importante Albion, ¿Quién ya recupero su cuerpo?

[Es Ddraig maldita sea, Hyoudo Issei ha regresado, y mi rival, logró el objetivo, salir de la Sacred gear]

Vali de inmediato se impactó, su mayor rival y amigo de toda la vida había regresado, sonrió orgulloso, lo había logrado, ahora debía saber que tanto poder tenía.

-Ya quiero probar tu avance Hyoudo, será muy interesante ver qué tan fuerte te volviste.
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De regreso en Kyoto, la líder Youkai se encontraba luchando contra algunas siluetas, que si bien no eran tan poderosos, el hecho de ser varios le complicaba todo.

-Rayos, debo acabar rápido con esto pronto, porque si no.

Estando transformada en su forma kyubi, trataba de contener al enemigo, ya que estaba protegiendo a su gente, la cual se encontraba en un refugio debajo de ella.

-¡Ejecución de Aurora!

Un torbellino helado cubrió sus patas, está casi no le afectaba, pero quedaba congelada por unos breves instantes, lo que hacía que los demás atacantes tuvieran oportunidad.

-Maldición, si esto sigue así voy a caer, rayos.

Las demás siluetas ya iban a atacar, la líder kyubi no tenía movimiento posible, solo esperar a que el ataque.

[Longinus smasher]

Un torrente verde esmeralda pasó junto a la kyubi, atacando sin piedad a los demás, que solo pudieron esquivar el ataque, pero al ver de manera clara, estaba Abel, con la ropa destrozada, pero con una sonrisa de satisfacción.

-Así que este es el poder del Sekiryuutei original, debiste ser muy fuerte en tus años dorados.

[Estos son mis años dorados, jamás tuve tanto potencial como ahora, y eso es gracias a Issei, recupere mi cuerpo y sólo me sirve para una cosa, defender a mi amigo]

La kyubi sintió escalofrío de el poder del dragón rojo, tuvo la oportunidad de luchar contra el, sabía que las palabras que decía eran las correctas, ahora era más fuerte.

-Es una lástima que no pueda seguir peleando, debo irme, buscar más aliados, los pecados y mis caballeros serán los vencedores, vámonos.

Y tal como lo dijo el villano, todos los enemigos se transportaron en un círculo mágico, dejando a las dos bestias solas, Yasaka se libero del hielo que cubría sus patas, Ddraig, solo observó a su espalda, cómo las chicas sostenían al castaño.

-Su regreso es complicado, ¿Verdad Ddraig?

[Así es Yasaka-san, el mejor Sekiryuutei de todos los tiempos ha regresado, pero ahora ya no peleará solo]

-¿Desde cuándo recuperaste tu cuerpo?

[No tiene mucho, apenas me estoy acostumbrando a el, no tengo mucho control, por eso precisamente no salía, aún no estoy listo, ya que si salgo solo será en emergencias, cómo ahora]

Procediendo a caminar, Yasaka fue tomando un brillo dorado hasta tomar su forma humana, con un brazo gravemente lastimado, Ddraig solo observó, sabía que no podía hacer nada.

-Chicas, ¿Se encuentra bien Issei?

-¡Yasaka-sama!

Las chicas se alteraron por la repentina aparición de la líder, aunque Issei estaba fuera de combate, poco a poco desperto.

-Demonios olvide por completo que es luchar contra varios oponentes después de haber sido masacrado por uno solo, si que las caballeros eran fuertes y aparecieron más muertos aún.

-¡Issei!

Nuevamente todas gritaron, pero esta vez no lo abrazaron, solo dejaron que se levantará, aún tenía puesta la armadura de Pegaso, observo a su alrededor y vio a su amigo dragon fuera de sí.

-Supongo que fue muy necesario que salieras, ¿Verdad viejo amigo?

[Ni que lo digas, se que estaré afuera un par de días hasta que ambos nos estabilicemos, pero, nos falta mucho para dominar nuestros poderes]

-Tienes razón amigo, tienes razón.

[Cura a Yasaka antes, con ese poder puedes sanar a los demás, debes hacerlo tú, la chica rubia, tú esposa no puede, está cansada]

-Tienes razón, Yasaka-sama, venga porfavor.

Y con un brillo plateado curo a la mencionada, que solo admiro su brazo y pudo ver qué todo estaba en orden, agradeciendo a Issei la acción que realizó.

-Ya cambiamos amigo, está armadura me está quitando mucha energía.

[Claro, mantener esta forma es difícil, si bien aún falta tiempo para volver a unirnos debo de mantener la energía que me queda]

Un brillo verde y plateado rodeo a ambos, haciendo que los demás no pudieran observar, ya cesado el brillo Issei estaba con ropa normal y Ddraig era solo un dragón de tamaño mediano, casi a la altura de Fenrir, ya que su tamaño no le permitiría transitar fácilmente.

-Chicas, lamento haber desobedecido, sé que son fuertes, pero no podía dejarlas solas, soy su esposo, las amo, me preocupare de ustedes aún si me falta poder para alcanzarlas.

Las chicas se sonrojaron, a pesar de estar casados y ya ser adultos, parecían colegialas, aunque a Issei no le molestaba eso.

-Issei, quiero agradecerte el que hayas protegido a lo ciudad con sus habitantes, también a ti Ddraig, sin ustedes no se que sería de nosotros.

[Calma Yasaka, es algo que debíamos hacer, pero si me disculpan, debo irme, hay alguien que viene a verme, Issei, no tardes]

Ddraig alzó vuelo, ya que aún tenía un tamaño de 10 metros, causó que el viento se agita a su alrededor, mientras las chicas se aseguraban de los daños y los civiles, Yasaka e Issei, quedaron solos.

-Gracias Issei, indirectamente me salvaste.

-Yasaka-sama, es un honor ser alargado por usted, pero yo solo fui un apoyo más, usted y las demás son las de crédito, hicieron la mayor parte.

-Solo Yasaka, ¿De acuerdo?

Issei quedó estupefacto, ella era una líder de faccion, ¿Por qué tanta confianza con el?, Además, lo llamo solo por su nombre.

-Este, no lo sé, es una líder y yo, este, cómo le explicó, yo, este.

-Issei, te dijeron que solo tus esposas podían llamarte por tu nombre, pero me toca a mí decirte, también aquellas que quiere serlo lo harán, ellas también te llamarán por tu nombre, y quiero decir, yo quiero ser tu esposa, estos años que no has estado, solo recordaba el cómo salvaste a mi pueblo, contra los héroes, como protegiste a mi hija, vi un sentimiento paternal grande, como si fuera tu hija, aún si ella quiere ser tu pareja, no quiero quedarme atrás, Issei, yo, yo, Te amo.

La sorpresa de Issei era evidente, por cada palabra que mencionaba la kyubi, este solo aumentaba su rubor, sentía nervios, realmente había pasado porque el se confesara a las chicas, pero tenía mucho que no se confesaban a el, además el valor de Yasaka para confesarse era admirable y de respeto.

-Yo..

Issei trato de hablar, pronunciar alguna palabra, pero de su boca no salía nada, algo que ponía triste a Yasaka, suponiendo que realmente no pasaría nada por su posición de líder.

-Issei, perdóname, tienes razón, cómo podría funcionar lo nuestro, fui una idiota, de verdad, me tengo que ir.

Yasaka con pequeñas lágrimas en los ojos se giró dispuesta a irse, no soportaba el hecho de ser rechazada, era algo que no aguantaría, sabía que ser alguien mucho mayor que Issei le traería problemas, por lo que ya esperaba algo así.

-No espera, no pienses así.

Issei retuvo a Yasaka, la giró y con sus manos acarició sus mejillas secando las lágrimas que tenía, causando un increíble sonrojo en la kyubi que no espero ese contacto.

-Issei.

-Yasaka-sama, no, Yasaka, mira, no me mal entiendas, no estoy rechazandote, solo que no esperaba está repentina confesión de sentimientos, admito que desde la preparatoria me gustas, la vez que salve a kunou, eres muy atractiva, y cuando me hablas de manera seductora, es una gran sensación de sentimientos indescriptibles.

Yasaka estaba estupefacta por las palabras de Issei, no estaba aceptando aún sus sentimientos, pero estaba confesando que desde antes tenía sentimientos por ella, lo cual causó que tuviera un rubor increíble, tanto como el cabello de Rías.

-Yasaka, en el sello con trihexa, pensé en toda mi vida, y hay algo que no hice de lo cual me arrepiento, que haré ahora, antes de que pueda pasar algo más.

Y aunque no lo parezca, Issei beso a Yasaka, la cual no espero esa repentina acción, lloro de la felicidad, pasó sus brazos por el cuello de Issei e intensificó el beso aún más, provocando que se desarrollara con más pasión el beso, mientras que Issei pasó sus manos directo a su cintura, pegando la más a su cuerpo.

-Issei, entonces, ¿Qué significo para ti?

-Yasaka, yo solo quiero hacerte una pregunta.

Cuando el beso se terminó el Issei terminara de decir esas palabras, se coloco de rodillas, el pueblo de Kyoto, o más bien los kyubis se acercaron, así como las demás esposas del castaño, expectantes de las palabras que diría.

-¿Quieres casarte conmigo?

-Sí Quiero.