Jennie estaba ansiosa, Yoongi le dijo que habia una sorpresa para mas tarde y de verdad que estaba aguantando las ganas de preguntar que era... por quinta vez.

- Oppa...

- Jennie, creí que te lo habia dejado en claro la sexta vez. Es una sorpresa, no te lo dire. -dijo con la vista al frente.

Resopló molesta y su novio rió por la impaciencia de su novia. Decidió jugar un ella unos minutos mas.
Estaciono el auto en la avenida, cerca del río donde habia bancos de madera especiales para una pareja fugitiva como ellos.

- ¿Aquí es?

- No, solo quiero pasar tiempo contigo antes de mostrartela.

- ¿Estas jugando conmigo, verdad?

- No eres solo una cara bonita. -la castaña se mostro molesta. -Yah, solo quiero pasar un momento con mi novia como una pareja normal...

Jennie fruncio el ceño por dos motivos. Uno porqué sabia que su novio estaba molestandola por... ser tan molesta y el otro porqué no pudo evitar sentir ternura por aquella confesión. Queria mostrarse seria pero no podia si queria lanzarse a los brazos de Yoongi y comerselo a besos.

Su novio de verdad se estaba esforzando. Cuando comenzaron a salir ella se dio cuenta que no era una persona de palabras cursis y halagos. En realidad era todo lo contrario pero eso no significa que no le demostrara que la quería. Ella lo sabia.

Cuando abría la puerta por ella y la dejaba pasar primero, cuando usaba su abrigo o su propio cuerpo para tapar su falda mientras ella subia escaleras, cuando se sacaba su chaqueta y se la daba para cubrirla del frio, cuando iba a buscarla luego de cada programa de radio a los que debia asistir, cuando se ofecia a llevar a sus perritos al veterinario -aunque no tuviera que llevar a Holly-, cuando la llamaba para saber si habia llegado a casa y le preguntaba como estuvo su dia, aunque estuviera agotado; siempre se mantenia despierto para ella...

Habia miles de situaciones en las que el le demostraba que la amaba y la ciudaba como a nadie. Era invaluable y cuando por fin correspondio sus sentimientos aquella tarde en Japon, Jennie supo que su corazon le pertenecia a una persona y solo a una: Min Yoongi.

Ambos bajaron, la chica con mejor cara que antes al pensar en todo lo que Suga significaba para ella y este agradecio eso.

Se sentaron en una de las bancas y aunque tuvieran la mitad de sus rostros y sus cuerpos completamente cubiertos, sentian la adrenalina de una primera cita secreta.

- Cuando era trainee venia aqui a jugar basketball...

- Me gustaria verte jugar algun dia.

- ¿Serias mi porrista personal?

- Tal vez... tengo un buen curriculum.

- ¿Fuiste porrista? -preguntó sorprendido.

- Asi es, en Nueva Zelanda... cuando entré a secundaria.

- Vaya, Jennie Kim. ¿Eras como esas chicas que salen en las peliculas yankees?

Jennie rió. -No, no era mala.

- Entonces... lo que decian sobre ti haciendo bullying...

- Es mentira. -frunció el ceño recordando. -Solo queria una excusa para publicar las fotos del anuario. Nunca le haría eso a nadie...

- Te creo, Jen. -tomó su mano y la acarició con el pulgar.

- Extraño Nueva Zelanda...

Yoongi sintió una leve punzada en su pecho. - ¿Volverias?

- Solo para ver un partido de los All Blacks con mi padre...

- ¿Lo extrañas mucho, cierto?

- Si... ya casi se cumplira un año.

Yoongi le abrazó y decidio que ya era momento de mostrarle la sorpresa, no queria ver una triste mueca en su precioso rostro.

- Es hora de irnos.

- ¿Me enseñaras por fin...?

- Vamos.

Ambos volvieron a subir al auto en silencio pero con expresion tranquila en sus rostros.

De nuevo no se dieron cuenta que su auto era seguido por otro a una distancia prudente. Mucho menos del sonido de las cámaras debido al sonido del río y los flashes -obviamente- apagados, gracias a la luz de la luna que reflejaba el río.

🏙

El auto se metio dentro del estacionamiento subterraneo de aquel edificio que Jennie habia logrado ver un par de segundos debido a la rapidez de Yoongi al volante.

- ¿Donde estamos?

Yoongi no contesto, tomó su mano y la guió hasta el ascensor. Una vez denteo oprimio el boton que lo llevaría al piso 15 y se divirtió viendo como su novia perdía la paciencia de nuevo.

Cuando llegaron al piso, Jennie seguia confundida. Habian recorrido algunos minutos en auto y no sabia donde estaban. El edificio estaba en el lado opuesto de sus dormitorios.

Suga saco un manojo de llaves y la coloco en la cerradura. La miró a los ojos, tranquilizando su confusión.

- Bienvenida a casa, Jen.

Abrió la puerta y dejó que pasara primero. La castaña se adentro encontrándose con un muy moderno y minimalista apartamento con tonos en blanco, negro, gris y chocolate. Un par de muebles a juego y una cocina mediana, un living gigante y un ventanal precioso del cual podías ver la ciudad de Seúl sin problemas.

- Yoonie... ¿de quien es este lugar?

- Nuestro, si quieres.

Jennie se dio vuelta a la velocidad de la luz sin comprender.

- Lo compré hace poco... sentí que necesitaba tener mas intimidad y privacidad contigo y pues, no puedo tenerla en el dormitorio.

La mandubila de la chica cayó.

- Pero... nuestros dormitorios, tus amigos... las chicas...

- No voy a mudarme del dormitorio, Jen. Y tu tampoco. -se acercó y la abrazo por la cintura. -Sera nuestro lugar secreto ¿que dices?

Jennie quiso llorar. No podia creer que Yoongi haya comprado un departamento solo para poder estar a solas con ella. Le parecia tan irreal y romantico, siempre la consentia y la compraba cosas pero esto... era impagable.

Se refugio en su cuello y cuando salio se colgo de el para besar todo su rostro emocionada. Suga largo una risa silenciosa y se enorgullecio internamente por haber hecho tan feliz a su chica.
No entendía muchas cosas sobre el amor y como llevar relaciones pero al parecer lo estaba haciendo bien.

- ¡Gracias, gracias, gracias! ¿Podremos quedarnos los días que no trabajemos? ¿Tus amigos ya lo saben? ¿Puedo contarle a las chicas? ¿Tienes ropa y comida aquí? ¿Donde estamos? ¿Cual es la dirección? ¿Como te gustan tus huevos en la mañana?

Yoongi tapó la boca de su novia con la mano y ella se calló enseguida. Hizo muchas preguntas de golpe y se avergonzó. La llevo al enorme sofá y ambos se sentaron mientras ella veía toda la decoracion.

- Luego podrás verlo a fondo, te dare el juego de llaves.

- ¿Estas... seguro?

- También es tuyo, Jen.

- De acuerdo. -dijo aun no muy convencida pero emocionada.

- Contestando tus preguntas: Si, los muchachos saben. Si, puedes contarle a tus amigas. Si, ya traje un par de cosas de mi dormitorio y tu podrias hacer lo mismo, también hice la compra. Te dejaré la direccion en el GPS y me gustan mis huevos revueltos con tocino y café.

Ambos se sonrieron emocionados y se acercaron sin dudar para unir sus labios y besarse apasionadamente. Yoongi cortó el beso para levantarse y tenderle la mano. Ella acepto y el la tomo de los muslos. Jennie dio un saltito entendiendo lo que queria y enrollo sus piernas en la cintura de su novio. Éste se encamino hacia el cuarto principal.

- ¿Por qué no estrenamos la cama, bebe?

Ella beso su cuello con hambre y se dejo hacer por su novio la noche entera.

Tal vez mañana habría reclamos para los nuevos vecinos.

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vuelvo a aclarar: es ficcion. no se si a jennie le gustan los all blacks, ni hace cuanto no ve a su padre ni si es verdad el escandalo del bullying. es solo mi imaginacion.
also: gracias por las 4K visitas y votos! sigan comentando, hacen mi dia mas feliz ♡