Capítulo 38
Narra Julia
Al ver a Abi irse en la oscuridad de la noche con lágrimas en sus ojos, me generó una preocupación en el pecho interminable y un presentimiento de que algo iba mal.
— ¿Que le habrá pasado? — preguntó Dará a mi lado aun viendo donde se fue Abi — ¿porque estaba aquí?
— Mo lo sé — dijo Larry suavemente — ¿crees que le tengamos que decir a Olivia? digo, es su mejor amiga.
— Si, yo creo que hay que decirle, se veía mal — abrí mi bolso y busqué mi celular un poco histérica con el Jesús en la boca, al encontrarlo llame inmediatamente a Olivia.
— Hey Julia ¿Pasa algo? — escuché a Olivia risueña con un fondo de risas, los chicos.
— Hey Liv, tengo que decirte algo — dije seriamente.
— Mmmm ¿Que paso? — escuche cómo se ponía seria y se escuchaba menos las voces de fondo.
— Es sobre Abi.
— ¿Que pasó con ella? — su voz se tornó preocupada.
— Ella estaba acá, fuera del departamento de Josh, nos acercamos y vimos que estaba llorando, se marchó hace unos 5 minutos, quede preocupada ¿Sabes lo que sucede?
— ¿Que Abi que? Imposible, ella esta Oceanside ¿Estas segura de lo que viste?
— Muy segura, la vi y no solo yo, también Dará y Larry, se veía un poco angustiada, lloraba a mares.
— ¿Estaba llorando y se fue? ¿No te dijo nada?
— No dijo ni una sola palabra, nos dio sólo una sonrisa muy fingida y se marchó.
— Pero es de noche podría pasarle algo.
— Por eso te llame, para avisarte.
— Oh, gracias, la llamare ahora, gracias.
— Oye ¿Olivia? — saque el teléfono de mi oreja y vi cómo Olivia me había cortado.
— ¡HEY MAN! —
Narra Olivia
— Vamos Abi, contesta, contesta — rogué al teléfono y al destino, pero nada, mi linda mejor amiga no contestaba.
Había lado 10 veces seguidas Abi, sin tener respuesta en ninguna, estaba preocupada, sentía cómo mi pierna temblaba sin parar. Si le pasaba algo me sentiría completamente culpable, por mi estar junto a ella.
¿Porque estaba llorando?
Me moría de lo nervios, mientras llamaba mil veces al teléfono de mi mejor amiga, mi corazón no paraba de latir de la angustia, mis intentos de comunicarme con Abi fueron interrumpidos por unos pasos a mis escapadas, me giro y veo a Sofía quien me miraba con su ceño fruncido, no pude contenerme y solté lágrimas de frustración, frustración por no ser una buena amiga y saber de ella. Sofia se acercó rápidamente a mi y me abrazo fuerte contra su cuello, me encamino lentamente hacia el salón del departamento encontrándonos con Josh y Matt quien nos miraban con una cara seria.
— ¿Que pasó? — preguntó Sofía mientras me sentaba en el sofá, no podía hablar de los hipos que me daban.
— Hey, Liv, tranquila ¿Te pasó algo? — se acercó Josh y se arrodilló frente a mi, tomando mis manos.
— Abi, ella... — llore con más intensidad, sin poder terminar lo que diría, Josh frunció su ceño y se levantó preocupado.
— ¿Que pasa con ella? ¿Le pasó algo? — preguntó alterado hablándome fuertemente casi llegando a los gritos — ¡Habla Olivia! — gritó haciéndome saltar en mi lugar asustada provocando que llorara con más intensidad.
— Amigo, cálmate — intento calmar Matt a Joshua.
— Ella se fue llorando, estaba abajo en su auto, pero se fue... — dije entre cortado en susurros y sorbiendo mi nariz de vez en cuando.
— ¿Se fue a oscuras? ¿Porque no pasó aquí? — alterado saco su teléfono y camino unos pasos de nosotros llamando a alguien, supuse que a Abi.
— Julia me dijo que estaba llorando en su auto, afuera, no dijo nada y se fue. Estoy preocupada — hablé ya calmada mirando a Josh caminar de un lado a otro con el teléfono en la oreja.
— No me contesta.
— Yo la llame muchas veces, no tiene casi, debe tenerlo apagado ¿Y si le pasó algo malo?
— No pienses así ¿Okey? — se acercó a mi y me abrazo. Entonces volví a llorar silenciosamente contra su cuello.
— ¿Porque tanta preocupación? Solo no contesta — habló Sofía, observándonos.
— Es mi mejor amiga, Sofía ¿Eso te parece poco? — pregunté enojada con lágrimas en mis ojos. Sofía arrepentida se alejó con una cara triste — yo, yo lo siento, estoy enojada.
— No, esta bien.
Me quede en silencio, Josh se separó de mi y se alejó de nosotros, desapareciendo de mi vista, limpio mis mejillas y respiro hondo. No hay que precipitarse, quizás solo fue a casa y se le apago el celular, si, es eso.
Ella está bien ¿No?
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