NAMJOON
 
Estaba caminando por las calles oscuras, ya era muy tarde cuando por fin terminó mi turno en la tienda de flores y debía regresar a casa. Tenía miedo obviamente, puesto que en las noticias se escuchan que hay gente desaparecida, sea chica o chico, o sin importar la edad.
 
—  Oye lindo no quieres venir a jugar- dijo un chico que estaba en el callejón por donde yo estaba pasando, claramente con dobles intenciones.
 
—  N- no déjame en paz- dije con miedo al ver que se aproximaba a mi.
 
—  Vamos niño, solo un rato.
 
—  Dije que no—   quería correr, y lo hice, pero vi que me estaba siguiendo de igual manera.
 
Entré en pánico, ¡un loco me perseguía!
 
— ¡Ven acá estúpido mocoso!!!- gritó.
 
— ¡Ayuda!!!, auxilio!!! —grité yo.
 
JIN
 
Iba camino a casa después de estar un buen rato con Rosé, escuché que alguien iba corriendo y gritando por ayuda. Vi que era el chico flor, siendo perseguido por un chico desconocido.
 
El chico flor se estampó contra mí y yo lo abracé protectoramente, a pesar de que fuera más bajo que él.
 
—  A- ayuda quiere hacerme daño- dijo señalando al tipo.
 
—  Hey chico, a este bonito yo lo vi primero- dijo el vagabundo mirándome.
 
Fruncí el ceño, mientras apretaba más a mi dongsaeng contra mí y me disponía a poner a este idiota en su lugar.
 
—  No lo creo, porque él es mi novio- dije, ya que fue lo único que se me ocurrió ante la situación.
 
Namjoon abrió los ojos en grande, sabía que me iba a reprochar lo que dije.
 
—  N- no soy tu...- le tape la boca para que no diga nada, si queríamos deshacernos del tipo había que mantenernos callados.
 
—  Lo siento amigo tendrás que buscar a alguien más- hice un gesto para que se fuera, como si estuviera hablándole a un animal extraño.
 
—  Maldición, te salvaste bonito— fue lo último que dijo antes de irse.
 
Una vez estuvimos seguros de que ya no vendría a molestar, solté a Namjoon que me miraba sonrojado y aliviado. Yo solamente metí las manos a mis bolsillos, admirando lo lindo que se veía.
 
—  G- gracias, pero no soy tu novio—mencionó.
 
—Era la única forma en que te dejaran en paz, deberías agradecerme antes de quejarte. —murmuré algo dolido por saber que no éramos nada, pero lo disimulé rápidamente. —¿Quieres que te acompañe a casa? No quiero que otro tipo verde venga y te moleste.
 
—Está bien, gracias. —me sonrió antes de posicionarse a mi lado para caminar juntos.
 

ROSE
 
Me he sentido mal estos últimos días, mi cabeza parece que reventaría del dolor que sentía, mi cuerpo estaba débil y tuve que ir a una clínica hacerme algunos estudios que el médico revisaría para saber que me estaba sucediendo. Esperaba que no sea nada grave, me sentiría mal, por mí, por mi familia y por Jin, no sabría en cómo decírselo.
 
Los resultados me tenían impaciente, pero debía soportar unos cuántos días hasta que estuvieran seguros de que pasaba. Si era algo malo, buscaría a Seokjin primero, se que él me cuidará de lo que sea que tenga.
 
Porque lo amo demasiado, así como él me ama a mí.