¤Capítulo 1¤
Pov's __________.
Oh,hola.Me llamo _________ y tengo ocho casi nueve años.Soy castaña y,curiosamente,nací con una...Este...Eh...Ah...¿Discapacidad,enfermedad,problema? Lo que sea,en los ojos.Normalmente,la heterocromía consiste en que la persona tiene un ojo de diferente color al otro pero mi caso,a pesar de que es algo parecido,también es complicado y especial.Mis ojos parecen cambiar de color;y digo parecen porque no puedo afirmarlo realmente.A veces son de un color,en otro momento de otro diferente y así.Suelen tener un color violeta,turquesa,rojo,rosa fuerte,azul,celeste,verde,amarillo o dorado,gris,ámbar,negro y marrón.Es extraño.Mamá dice que eso me hace especial.
¡Oh! Olvidaba mencionarlo.Soy huérfana.Vivo en el orfanato Grace Field House.A Isabella le decimos mamá.Somos 38 hermanos,no de sangre pero así nos sentimos.Somos felices.
Existen varias reglas en este lugar:
-A los 12 años te vas con una familia de acogida sin falta.Esa es la edad máxima.
-Nunca acercarse a la reja o a la cerca que da al bosque.Mamá dice que es peligroso.
En fin,esas son las básicas creo.
No suelo socializar mucho con los otros niños pero eso no implica que nos llevemos mal.Nos amamos entre todos y nos cuidamos.
Me gusta mucho leer,suelo hacerlo todo el tiempo ya sea en la biblioteca o en el bosque.No suelo jugar a "las traes" pero cuando lo hago es divertido,además de que suelo ganar.
La rutina suele ser la misma.Nos levantamos,nos vestimos,desayunamos,tenemos exámenes que igualan a la escuela común y luego tenemos tiempo libre hasta la cena.De ahí nos bañamos y nos vamos a dormir.
Pero...
Siempre me sentí diferente.No solo por lo que me pasa en los ojos.A veces parece que puedo leer la mente o los sentimientos de las personas con mirarla fijamente a los ojos o tocarla.Incluso tengo lo que yo digo "corazonadas";siempre suelen ser acertadas.O presentimientos también podría decirse.
Como aquella vez que rompí las reglas y fui a la reja...
Flashback...
Tenía entre 4 y 6 años.Era pequeña y curiosa...Bueno,sigo siéndolo.
Estaba tranquila leyendo...Bastante cerca de la reja,a decir verdad.Era solo una excusa para estar cerca de ese lugar que mamá considera peligroso.
Estaba apoyada en un árbol mientras leía.Iba por la mitad y solo lo había empezado hacía dos días.Aunque he leído más rápido.
Como sea.
Luego de un tiempo,escuché pasos acercarse,lo que hizo que mi atención se centrara en eso.
Luego de varios segundos,oí las voces de,como yo los llamo,Los Tres Mosqueteros:Norman,Ray y Emma.
Emma es una niña de ojos verdes como esmeralda y un hermoso pelo naranja.A veces le digo Antenita por el mechón de pelo que tiene sobresaliendo de su cabeza.Es alegre,muy hiperactiva,amable,divertida,muy atlética y adora con todo a su familia,lo que incluye a mamá y La Casa.
Sus puntuaciones en los exámenes son altas.
Norman es un niño albino de ojos celestes como el mismo cielo.Es realmente atractivo.Es gentil,comprensivo,inteligente y una persona increíble.Es un excelente estratega;suele sacar unas calificaciones muy altas en los exámenes.
Y,finalmente...Ray.¿Qué decir de él? Su pelo es negro,tan oscuro como el cielo en la noche.Sus ojos...Cielos,sus ojos.Parecen ser verdes grisáceos;son bellísimos,me encantan.A diferencia de Emma o Norman,él es más serio y callado.Es muy inteligente,alcanza el nivel de Norman;prácticamente,pareciera que le hace competencia.Parece un emo,en especial por su mechón de pelo cubriendo su ojo.También es buen estratega aunque él no lo admita y sus notas en los exámenes también son los más altos.
En fin,volviendo al tema.
Parece que ellos también se habían acercado a curiosear.
—¿Qué es esto?—preguntó Emma.
—Es una reja—respondió Ray—.Conecta el interior con el exterior.
—El exterior,¿eh?—Me asomé a verlos con el libro bajo el brazo.Emma sostenía las rejas entre sus manos;Ray y Norman solo miraban—.Nunca hemos estado afuera.
—Eso es porque hemos estado aquí desde que nacimos—remarcó Norman.
Es cierto.Ni siquiera conocemos a nuestros padres biológicos.
—Mamá siempre nos lo dice,¿no es así?—habló la Antenita—."Nunca se acerquen a la reja o a la cerca que da al bosque porque es peligroso".
Sí,eso es lo que nos dice.Sin embargo,aquí estamos.
—Obviamente eso es mentira—dijo Ray.
—¿En serio?—cuestionó Norman.Ha estado muy callado.
—¡Oye,Ray!—llamó Emma con esa energía que la caracteriza—.¿Qué quieres hacer si sales?
—No lo sé—respondió el pequeño pero tierno emo—.¿Y tú?
—¡Quiero pasear en una jirafa!—exclamó emocionada.
Yo sonreí tiernamente.Aunque no hable mucho con ellos,siempre les he tenido un cariño especial;como si los tuviera en un pedestal alto del que no puedo sacarlos.
—Buena suerte—deseó Ray apoyándose de espaldas a la reja.
Lo vi fruncir el ceño y mirar hacia todos lados.Hasta que se detuvo en mí.
Abrí los ojos como platos y entreabrí los labios sorprendida mientras sentía mis mejillas arder.Me oculté detrás del árbol mientras escuchaba lo último que decían.
—Me pregunto de qué nos protege esta reja.—Era Norman el que hablaba.Reconocería su suave y dulce voz en cualquier lado.
Me volví a asomar ligeramente para verlos.Cuando lo hice,los vi a Emma y a Norman alejarse lentamente.No divisé a Ray así que me asomé un poco más;sin embargo,al hacerlo,el libro se me cayó.
—Oh,rayos—murmuré mientras me agachaba a recogerlo.
Cuando lo tomé,otra mano se posó sobre la mía.Sorprendida,me alejé unos pasos hasta chocar con el árbol.Levanté la mirada y pude ver a Ray levantarse del suelo con el libro en mano.
Nos miramos unos segundos que parecieron eternos mientras sentía mis mejillas enrojecer...otra vez.
A paso suave,lento y despreocupado se acercó a mí mientras yo me pegaba más al árbol.Era muy tímida y me daba miedo que me vieran a los ojos;sin embargo,no podía apartar mi mirada de los suyos.Los de él sí eran fascinantes...incluso ahora lo son.
—Aquí tienes...Se te cayó—dijo extendiéndomelo con su expresión neutral de siempre.
Finalmente,pude apartar la mirada avergonzada mientras lo tomaba.
—Sí,g-gracias...—murmuré mirando a otro lado.
Me quedé mirando la reja,evitando la mirada del pelinegro.Sin embargo,sentía la suya sobre mí.
—Rompiste la regla—dijo de repente.Lo miré confundida.
—¿Eh?
—No deberías venir a la reja.
—Sí,bueno...Tampoco tú—contraataqué a su comentario.
—Mh...—murmuró desviando la mirada,cosa que también hice.
Tal vez le incomodaron mis ojos...pero no es mi culpa haber nacido así.
Suspiré ante mi pensamiento.
Pude ver a Ray,que me miró de reojo.
—Yo...
—Si te vas a quedar que no sea mucho tiempo—dijo interrumpiendo lo que sea que haya querido decir;estaba tan nerviosa que no tenía idea de qué hacer para calmar tan incómoda situación—.El descanso terminará pronto y será mejor que mamá no te vea aquí.
—Oh...Sí...—murmuré—.Gracias.
Ray no hizo más que asentir y alejarse con las manos en los bolsillos.
Me acerqué a la reja y miré hacia lo que sea que haya adentro.La sujete con una mano y un escalofrío me recorrió entera.Abrí mis ojos como platos y me alejé lo más rápido posible.La miré a unos metros de distancia con la respiración agitada,cosa que me pareció rara.Sentía miedo,horror hacia esa reja y lo que haya del otro lado.Algo que no era nada bueno,algo malo había allí...y no quería averiguarlo.
Suspiré y,luego de haber escuchado la campana de mamá avisando que había acabado el descanso,me alejé corriendo de allí aún con el terror recorriendo mis venas.
Fin del Flashback.
De cualquier forma,muchas personas suelen tener ese tipo de presentimientos.Parece un sexto sentido humano,aunque no todos lo tengan.
Como sea.No sé qué haré cuando salga de aquí.Nunca lo pensé.
Y respecto a mis ojos...Bueno,a pesar de que todos parecen aceptarme,hay momentos en los que pienso,siento o parece que no es así.
Me han llegado a llamar fenómeno.Sí,los tiernos e inocentes niños de esta Casa me han llamado así.Aunque éramos más pequeños y era obvio que se iban a asustar.Sin embargo,esa palabra sigue resonando en mi cabeza y es por eso que suelo apartarme;me alejo de todos,dejo que mi pelo cubra mi rostro mientras leo y siempre evito mirar a los demás a los ojos.
Veamos...Algo más que deban saber...Creo que eso sería todo.
Oh,y...creo que me gusta Ray.
Narrador omnisciente.
Ray sentía algo parecido por aquella pequeña castaña.
Le causaba curiosidad el hecho de que sus ojos cambien de color constantemente.La heterocromía no suele consistir en eso.Bueno,no consiste en eso.Simplemente,es un ojo de diferente color al otro.No es normal que cambien de color.
Pero no le importaba.
Le inspiraba curiosidad,cosa que Ray no solía tener.
Quería hablarle,conocerla.Pero no le parecía oportuno llegar y decirle "¡Hey,hola! Solo quería hablar contigo porque me causa curiosidad el hecho de que tus ojos parecen ser especiales.Aunque por ello te hayan llamado fenómeno,claro.¿Te molesta?".No,definitivamente no podría llegar y decir eso.
Aunque...no sería la primera vez que hablan.
A decir verdad,ambos eran bastante cercanos,considerando que solían aislarse del resto de sus hermanos.
A veces leían juntos,hablaban ya sea de ello o de cualquier otra cosa.Incluso llegaron a dormir juntos.La castaña solía tener pesadillas sobre unos...monstruos que los comían;y en la noche dormía muy cómodamente con Ray.
Sin embargo,esas cosas no duraban mucho.
Parecía que de a ratos se unían y de a ratos se alejaban,olvidándose de la existencia del otro y de todo lo que habían hablado o pasado juntos.
Su relación era bastante rara o...especial.
Sin embargo,el cariño estaba ahí.
_________ había caído ante Ray.Le gustaba;y mucho.
Y Ray...Bueno,estaba bastante confundido.Pero iba por un camino parecido.
Y dos años antes de la adopción que marcaría un antes y un después,todo cambió.
El día había comenzado normal.Eran esos tiempos en los que Ray y ________ eran muy unidos.
Se despertaron,se vistieron,desayunaron y tuvieron los exámenes diarios.
En el descanso,________ se sentó bajo el árbol en la colina con un nuevo libro mientras el resto de niños iba a jugar.
Luego de un rato,levantó la vista extrañada al ver que Ray no se había sentado junto a ella.
—Hola,_______—saludó el azabache repentinamente mientras tomaba asiento a su lado.
Hablando del Rey de Roma,miren quién se asoma.
—¡Ah! Ray,me asustaste—dijo sonriendo mientras cerraba los ojos y se ponía una mano en su pecho.
—Lo siento.
—¿Dónde estabas?—preguntó curiosa mientras volvía su vista a su lectura,dejando que su pelo cubra su rostro.
—Buscando...—respondió mientras se arrodillaba frente a ella y le corría el cabello de la cara para enseñarle un aparato en ambas manos—esto.
—¿Qué son esas cosas,Ray?—preguntó mientras las tomaba.
El azabache se sentó a su lado y colocó lo que parecían orejeras en sus oídos.
—Esos son auriculares.—Los conectó a ese extraño aparato—.Y esto es un walkman.Es para escuchar música.Y,si quieres grabar a alguien hablando o cantando,como me comentaste,aprieta este botón—explicaba señalando cada cosa bajo la atenta,curiosa y brillante mirada de la niña—y se quedará guardado en esta cinta—dijo mostrando la mencionada.Cuando acabó la miró.
La pequeña no hacía más que tener una mirada sorprendida y los labios entreabiertos mientras su mirada brillaba.
Al verla atentamente,Ray pudo ser testigo,por primera vez,del cambio de color en sus ojos.El ojo derecho pasó de ser azul a ser rojo mientras el izquierdo pasaba de ser rosa fuerte a ser verde.
Ante ese,a sus ojos,maravilloso cambio,sonrió levemente con los labios juntos.Su mirada se iluminó.
La niña,aún en su mundo,sonrió ampliamente.
—Ray,¿cómo conseguiste esto?—El mencionado abrió la boca para responder pero la niña lo interrumpió—.¿Sabes qué? No importa,¡gracias!—Se lanzó a abrazarlo.
El niño abrió los ojos como platos y,lentamente,correspondió al abrazo.
—Ya.—La separó con suavidad—.No es nada.—Se rascó la nuca avergonzado con la mirada hacia otro lado mientras sus mejillas se sonrojaban.
Y,otra vez,cuando la miró,logró ver que sus ojos cambiaron de color.Ahora uno era verde y el otro marrón.
Ray seguía sin poder creer lo que veía.
—¿Qué?—preguntó la joven confundida con sus mejillas encendidas por la mirada que Ray le daba.
—Nada,solo...tus ojos...—La chica borró lentamente la pequeña sonrisa que le quedaba ante cada palabra de su amigo—.Cambiaron de color.
Y,finalmente,volvió a bajar la mirada,como acostumbraba a hacer con todos por temor a lo que pensaran o dijeran.
—Sí,yo...—Tragó saliva nerviosa.Ray la miró confundido y preocupado—.T-tengo cosas que hacer.Luego te veo y gracias por esto—dijo luego de pararse y alzando el walkman en su mano.
Comenzó a caminar mientras suspiraba.
Ray gruñó bajo y se pasó las manos por el pelo.
—Maldición...
La niña llegó a la biblioteca y tomó asiento.Miró su nuevo walkman y sonrió levemente.
Realmente no quería perderlo por ser un fenómeno.Le tenía mucho afecto y quería formar una buena amistad con Ray.Sin embargo,sus ojos no se lo permitían...o eso pensaba ella.
Apretó los párpados y se puso las manos en ambos costados de la cabeza.
Se hizo bolita en la silla y lloró lo más bajo que podía.No quería también ser una carga para quien la consolara.
Le pareció oír la puerta abrirse y cerrarse.Sin embargo,no le dio importancia.
Al menos así fue hasta que sintió unos brazos rodearla.Levantó la cabeza sorprendida y con los ojos hechos platos.Miró a su costado y se llevó la más grande sorpresa de ver a Ray a su lado.
—R-Ray...—habló sorprendida mientras se secaba las lágrimas—.¿Q-qué estás...?
—Calla—ordenó avergonzado y sonrojado.
—Ray...
—Lamento si te lastimé con lo que dije.No era mi intención—dijo finalmente mirándola.
—Ray...—Sonrió levemente y negó con la cabeza suspirando y cerrando los ojos—.No es eso.De todas formas,estoy acostumbrada.
—¿De qué hablas?
—Ray,siempre me han considerado un fenómeno por mis ojos.—Sonrió con tristeza.
—¿Q-qué?
—Sí,¿no lo notaste? Me sorprende que no lo hayas hecho.Cuando éramos más pequeños,me decían fenómeno.A veces Nat,a veces Anna,Gilda...Don...—Bajó la mirada.
—¿Qué?—preguntó ahora molesto.
—Entiendo si piensas eso.Ellos dejaron de decirlo pero no creo que hayan dejado de pensarlo.Y si lo hicieron,siento que no es así.¿Sabes? Si quieres alejarte definitivamente de mi,lo entiendo.Esta amistad parece que va y viene,¿no?—Rió amargamente.
—Eso parece,sí...Pero no me alejaré definitivamente.Me quiero acercar a ti definitivamente.—La chica lo miró más que confundida y sorprendida—.Tal vez dejaron de decirlo,de pensarlo,lo que sea.Pero lo piensen o no,tienes que estar segura de que no lo eres.—Los ojos de la niña comenzaron a llenarse de lágrimas—.No eres un fenómeno,________.Tus ojos son...—Se sonrojó mientras desviaba la mirada avergonzado—.Son maravillosos.Son hermosos,________,sin importar si son normales o no.
—Mientes.
—¿Eh?
—No me estás mirando,mientes.
—________,no miento—aseguró tomándola de los hombros y mirándola fijamente a sus ojos—.Eres hermosa...D-digo,sí,bueno...Es decir,tus ojos son hermosos y...—Suspiró—.Ya me entiendes.—Ella sonrió—.Lo que quiero decir—continuó tomándola de las manos—,es que no eres un fenómeno.Tus ojos son bellísimos sin importar su color.Y si eres un fenómeno,pues no hay fenómeno más lindo que tu—dijo sonriéndole levemente con un fuerte sonrojo en sus mejillas.
La chica parecía un tomate a estas alturas.Ray no es de decir esas cosas pero cuando lo hace,lo hace con total honestidad.
—Gracias,Ray—dijo abrazándolo.El azabache suspiró calmando su sonrojo y correspondió el abrazo.
—No hay nada que agradecer,________.
Le dio un suave beso en su cabeza,cosa que sorprendió a la más pequeña entre los dos.
Se separaron y se sonrieron.
—Y dime,_______,¿a quién grabarás cantando?—preguntó Ray mirando el walkman.
Ella rió.
—Algún día verás.
—Vale,¿al menos me dirás para qué?
Ella bajó la mirada sonriendo.
—Bailar.
—¿Mh?
—Aunque no lo creas,me gusta bailar.Hacer coreografías improvisadas.Y la canción que escuché cantar a esa persona me encantó y...quiero intentar hacer una coreografía para ella.
—¿Me la enseñarás?—preguntó Ray apoyándose en la mesa con las manos en los bolsillos.
—¡Ah! Y-yo...N-no lo sé,me da mucha pena y...tengo que tenerla lista si quiero mostrarla y...yo...
Ray rió a carcajadas.
—Está bien,tranquila.Puedo esperar.—Le guiñó el ojo.
Ambos estaban sonrojados y,sin embargo,se sonrieron con la mirada clavada en los ojos del otro.
Y Ray pudo apreciar incontables veces más el cambio de color de sus ojos.Y cada día le fascinaba más.
Meses después...
—¿Ya conseguiste grabar a esa persona cantando?—preguntó Ray caminando por los pasillos de La Casa.
—No,aún no.—Suspiró frustrada—.No suele cantar muy seguido y pareciera que cuando lo hace yo no estoy cerca.
Ray rió bajito.
—Lo conseguirás,ya verás.—Le palmeó la cabeza—.Bueno,tengo que ayudar a Norman con el desayuno.Te veo luego.
Y se alejó tranquilamente.
________ se le quedó mirando con una sonrisa.
En el camino,los niños la saludaban mientras corrían esquivándola.
—¡Buenos días,________!—saludó Benjamín,un niño castaño de cinco años,frente a ella.La niña lo miro y sonrió agachándose a su altura.
—Buenos días,Ben.—Le palmeó suavemente la cabeza—.¿Descansaste bien?
—¡Sip! ¿Y tú?
—Bastante bien,gracias.—Sonrió con los ojos cerrados.
A pesar de ya no avergonzarse tanto de sus ojos,aún trataba de evitar que los vieran.
—________,¿por qué cierras los ojos?
La niña lo miró sorprendida y,justo cuando lo vio a los ojos,los de ella cambiaron de color.A Ben le brillaron sus ojitos.
—Y-yo...
—¡Wow! Nunca le había prestado atención al cambio de color en tus ojos,_______.¡Son hermosos!—Sonrió ampliamente.La joven se sonrojó levemente.
—¿T-tú crees?—Sonrió enternecida y más segura.
—Sip.Sin importar lo que otros piensen o digan,son hermosos.—Sonrió y salió corriendo con los demás pequeños.
La castaña se sintió segura y suspiró sonriendo.
Lo que Ray le había dicho meses atrás,la había cambiado.Y ahora Ben...
Ya no tendrá miedo a lo que piensen los demás de sus ojos.A ella le gustan...A él le gustan...
Sonrió y siguió caminando de camino al comedor.
—¡Buenos días,Ojitos!—saludó Emma animada con un pequeño niño moreno y de ojos celestes en brazos,de nombre Phil.
—¡Buenos días,Antenita! Buenos días,pequeño Phil—saludó a ambos.La pelinaranja se puso a su lado y le pasó al pequeño,el cual rió y apoyó sus manos en las mejillas de ella.
Caminaron entre charlas animadas hasta llegar al comedor.
—¡Buenos días,Ray,Norman!—saludó Emma.
—¡Buenos días,chicos!—saludó _______ acomodando al pequeño en brazos.
—Buenos días,chicas.—Sonrió Norman a ambas.
—Buenos días,Emma._______,contigo hablé hasta hace unos minutos.
Ambas rieron y se fueron a sentar.
En esos últimos meses,Ray logró,aunque sea,que _________ se integrara a ellos tres.Ahora Emma y Norman también eran muy cercanos a ella.
Y todos aquellos que llegaron a llamar fenómeno a ________ fueron disculpándose poco a poco;admitiendo que ya no pensaban eso.
Y más tarde,ese mismo día,en el descanso,_________ se colgó de cabeza en el árbol en el que siempre se sentaba con Ray a leer.
Finalmente,lo había escuchado cantar.Y,sin perder la oportunidad,se colgó sin que él se diera cuenta y lo grabó para después practicar la coreografía que quería hacerle.
Y así,los años pasaron.Benjamín y otros niños fueron adoptados...o eso pensaban ellos.
Hasta que el día que los marcó...inició.
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