Una ves se quedo asegurando los planos de la ciudad, una y otra ves los reviso hasta estar seguro que no tenian fallas, era uno de sus cualidades y tambien defectos, era un genio, mucho mas que su abuelo que solo era bueno con las armas y tambien la creacion de explosivos, el podria hacer eso y mucho mas, ademas de crear nueva tecnologia para transportarse, nuevas armas mas simples y menos complicadas ademas de mas efectivas que las que su abuelo tenia por ganas de hacer, como tambien habilidad diplomatica, habilidad para negociar, ademas de arquitectura y talento en las maneras de la guerra para haber masacrado a cientos de enemigos en varios dias consecutivos, despues de todo el control de Reiborn habia crecido por todo el aerea, y seguia aumentando, ahora mismo tendria en su poder hasta 80,000 tropas y controlaban muchisimas ciudades en area, si eran buenos y eficientes en unos años o meses podria verse el nacimiento de un reino, uno grande grande y poderoso, que podria convertirse en unos años mas en una superpotencia capaz de tal ves catalogarse como el legitimo sucesor de la historica Cimeria.

Se miro al espejo, por un momento observo su asqueroso y horrendo rostro, ese motivo le impedia el tener hijos y fundar una gran dinastia, era tan fea que a la primera chica que le mostro su cara esta mostro miedo y asco y eso dolia,y era un dolor que seguia llevando.