[Aclaraciones sobre el diálogo]

•Susurros: Está horrible

•Gritos: Ella no te ama perro

•-Acciones-: -Camine sin mirar atrás-

•(Pensamientos): (Jamás olvidaré esto)
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[Pov en tercera persona].

Un día monótono y repetitivo como se esperaba, mismas calles y personas de poca importancia que caminaban por la misma aburrida acera gris habitual, casi podías ver todo a escales frías, sin color ni sonido como esas películas de cine primerizas de los años 1895-1926, así era el mundo para gran parte de la población, sin embargo navegando en las profundidades, entre los callejones eh encrucijadas de la selva de metal y concreto. Podrías ver un almacén con más polvo que metal adheridos en sus paredes grises, parecía que caería con un pequeño empujón del viento o una pequeña corriente de lluvia, diablos el mismo sol parecía estar desollando las láminas del techo.

Pero eso no era para nada importante, ya que mirando en el interior, podrías ver algo tan asombroso como horrible situado justo en medio del almacén ya vaciado de cualquier cargamento. Ahí estaba un enorme cuadrilátero que se expandía por el almacén como campo de batalla. El suelo era un capa de casi 60cm de arena teñida de rojo con una gran cantidad de dientes, uñas y otros objetos que perdieron las personas en su lucha por la victoria y rodeando los límites del cuadrilátero se alzaba una valla de madera y concreto imposibles de saltar sin usar equipo de escalada.

Y actualmente aquel cuadrilátero esta en su etapa final, mientras docenas de espectadores gritaban y apostaban sus bienes por su peleador favorito, todos ellos disfrutando del sadico combate y frustrando su humor al ver gran parte de sus ingresos escurrir de sus palmas en la inconsciencia de su peleador. Ya que a diferencia de un pelea oficial en un ring profesional aquí no hay reglas ni piedad alguna solo estás tú y el tipo que desea arrancarte el rostro.

[Locutor]: ¡Están listos! -Grito entre risas mientras escuchaba el "Si" de los espectadores- ¡Eso quería escuchar!, ahora damas y caballeros aquí está el mastodonte prehistórico.....aquel que te hace revivir el terror que tus instintos mas antiguos olvidaron.

[Locutor]: Con doce victorias y tres derrotas ¡Night Hunter!.

Tras su presentacion un coloso de casi 1.90cm salió de la esquina del ring sus rasgos eran toscos como una bestia, su cabello parecía una melena de león en un color negro azabache, mientras los reflectores alumbraban su vestimenta que consistían en pantalones negros y botas reforzadas del mismo color o así se creía, ya que las manchas de sangre aún fresca las hacían brillar en rojo.

El público aplaudió y victorio con una sonrisa su nombre, todo esto mientras que el coloso levantaba los brazos con un grito ronco más parecido al rugido de un animal. Cualquiera que lo viera caería en desesperación o gritaría por
su infortunio, sin embargo aquí había algo que nadie tomaba en cuenta y ese pequeño detalle pronto se mostraría a continuación.

[Locutor]: ¡Y aquí su víctima! -Grito llamado la atención del público que se fijó en la esquina contraria del ring ya iluminado- El señor del engaño y las mentiras.......cuiden sus carteras, el oro y sus joyas por que el se llevará hasta el corazón de tu enamorada.

[Locutor]: Con quince victorias y ni una derrota con ustedes ¡Mimic!.

Con ellos el público vieron entrar aun joven de diecinueve años, con cabello negro azabache algo disparejo, siendo el lado izquierdo mucho más corto en comparación con el derecho y de una forma irónica su ojo izquierdo estaba siendo cubierto por su pelo. Poseía un tono de piel pálido enfermizo un poco más y alguien llamaría al 911. Incluso así el ligero sonido de metal chocando con cada paso que daba ponía alerta a toda persona. Su estatura no superaba los 170cm mucho menor al coloso que lo veía, pero incluso así con solo ver el par de ojos grises vacíos como si fuera una persona ciega daban escalofríos.

Sus vestimentas "inadecuadas" dentro del ring consistían en un abrigo negro azabache de piel, un chaleco verde de tres botones ligeramente abultado sin notarse mucho, una camisa blanca de manga larga junto ah esta una corbata de color negro. Poseía lo que parecía a simple vista como el hijo bastardo del pantalón de gala y el reforzado de una fuerza armada, sus zapatos negros sin duda parecía lo más peligroso, porque fácil. Estos poseían filosas cuchillas en la suela y tacón del zapato, finalmente las últimas dos piezas del conjunto en si mismo, un sombrero de color negro parecido a uno de copa ancha con una tela verde por en medio y guantes con refuerzo dorado en los nudillos con el mismo color negro del resto del traje.

El constrate entre ambos parecía algo cómico, pero ninguno se burlo ya que era bien sabido que las apariencias en este lugar eran engañosas. Muchas de las veces la persona más inocente que puedas encontrar aquí en realidad era un demonio con cara de ángel solo los más novatos buscaban peleas aquí. De cualquier forma el 90% de la veces las personas así jamás volvieron aquí. Ya sea por ofender aún capo del crimen o el mundo subterráneo no era como se pintaban en las películas.

[Narrador].

El público miraba expectante al duo a punto de pelear, la mirada furiosa sin vacilación a matar de Night Hunter se contra restaba con los ojos casi vacíos de Mimic. Calma contra salvajismo un combate mortal entre dos oponentes y era tan exitante verlo que parecía una maravillosa obra de arte, el público se impacientaba con la espera asi que en un rápido movimiento aquel locutor a simple vista normal llegó al centro del cuadrilátero atrayendo la atención sin dificultad debido a su velocidad.

[Locutor]: ¡Peleadores listos! -Grito alertando al público que sonreía ante el espectáculo y sin esperar- ¡PELEN!.

El combate comenzó mientras Hunter Night se lanzaba como un toro furioso contra Mimic, el cual sonrió alertando al público con escalofríos recorriendo sus espaldas y antes de poder advertir a Hunter este ya estaba recibiendo los mortales cortes de Mimic obligando al
coloso a esquivar mientras agujas con pequeños toques de óxido pasaban de largo cortando su mejilla. Hunter solo se limito a correr por el cuadrilátero a pesar de su enorme estatura de forma inexplicable era demasiado rápido. El lanzamiento preciso y veloz de Mimic con sus agujas y pequeñas navajas del tamaño de pulgares le daban caza con pequeños cortes aquí y haya, pero sin daños reales o algo mas que pequeños cortes superficiales.

El juego del gato y el ratón prosiguió a medida que ambos recorrían el ring y el público aplaudía, sin embargo todo termina en un punto y este juego ya le tocaba finalizar. Hunter con rapidez y precisión no acorde a su físico dio una patada al suelo lanzado uñas y dientes a Mimic obligándolo a cubrirse con su abrigo evitando con exito las balas sin muchos daños y al destaparse lo único que lo vió era el puño de Night Hunter dirigiéndose a su cabeza.

Asustado por la velocidad anormal de su contrincante Mimic apenas si logro hacerse aún lado salvándose del golpe directo a su cráneo, pero una patada a las costillas por parte de Hunter fue lo suficientemente fuerte para elevarlo a lo menos cinco centímetros, aún así el ardor de una herida en su pierna hizo al coloso tropezar por un instante algo lo suficientemente bueno para que un pequeño corte fuera lanzado al ojo del coloso el cual esquivo con un salto.

Así ambos contrincantes se separaron para revaluar a su oponente y a su vez verificar sus heridas.

[Mimic]: Bien jugado amigo -Dijo con un toque de dolor mientras su sonrisa se mantenía en su rostro- jejejeje pero veo que no resultó como esperabas.

Sus palabras no el fueron respondidas de inmediato generando silencio en el cuadrilátero, mientras los susurros en las gradas comenzaban a escucharse y esparcirse entre los espectadores, con la incertidumbre de saber como logro Mimic herir de tal forma a Hunter sin caer inconsciente por la patada y peor aún poder contra-atacar. Al menos asi fue hasta que un hombre notó algo en el traje de Mimic y de inmediato grito sorprendido "Cuchillas" atrayendo las miradas de los más cercanos mientras señalaba el chaleco verde. Curiosos el público miró detenidamente como un pequeño destello salió del chaleco y se sorprendieron al notar docenas talvez incluso cientos de pequeñas cuchillas adheridas al chaleco dispuestas de tal forma que aseguraba cortar ah todo el que lo golpeara.

[Hunter]: Que molesto -Susurro entre dientes mientras la sangre escurría de su pierna y un gran ardor asaltaba sus sentidos- bien juguemos Mimic.

Aprovechando que su contrincante se encontraba alejado ambos hicieron su siguiente movimiento. Hunter recogió
un puñado de arena apretando con un poco de fuerza el puño antes de lanzar la arena junto al resto de su contenido como munición, al mismo tiempo una tormenta de cuchillas eh agujas choco con la arena, Mimic había metido una de sus manos a su bolsillo y de este se manifestó una larga hilera de hojas de afeitar atadas a una cuerda de piano y con rápido movimiento azoto aquella cuerda en dirección a Hunter lanzado otra tormenta de cuchillas.

Ambos contrincantes disparaban casi sin descanso, bailando entre múltiples proyectiles que cortaban su piel o casi perforaban su carne, sin embargo esto no resultó en nada y ambos pararon a meditar. Mimic no tenia munición eso lo obligó a recoger y reutilizar hasta la más pequeño aguja que encontrará en la arena, mientras que Hunter tenía el cuadrilátero entero como munición si no fuera por la perdida de sangre algo alarmante tendría la ventaja sabiendo eso tenía que terminar la lucha lo más rápido posible antes de desmayarse.

Un enemigo sin armas y otro que está con el tiempo contando, ya había una gran ventaja entre ambos o así se veía en el exterior. Ya que Mimic respiraba con un poco de dificulta, esa patada le había causado pequeñas fisuras en las costillas y respirar le dolía. Viviría sin embargo el dolor, el cansancio junto a la dificultad al respirar poco a poco lo estaban gastando, aún más cuando los proyectiles de Hunter se disparaban a mayor cantidad obligando a Mimic ah moverse y forzar su cuerpo.

Con eso en mente ambos se miraron y sin decir más, Hunter se inclinó hacía adelante, casi tocando el suelo con sus manos antes de impulsarse con fuerza y salir disparado hacia Mimic, como si el mundo se detuviera todos vieron en la expresión de Mimic una sonrisa tan grande que casi destrozaba su rostro y aun así en una demostración irreal los brazos del ladrón se abrieron hasta su límite, mostrando una armadura llena de cuchillas que esperaban cortar a su víctima. Todo volvió ah la normalidad antes de que Hunter impactará contra Mimic y en ese preciso instante con la destreza de un gimnasta olímpico con una sobredosis de adrenalina.

Mimic salto hacia un lado esquivando la embestida de Hunter aprovechando el estado desprotegido de su oponente para lanzarse en un abraso mortal. La espada de Hunter fue asaltada con un dolor demencial mientras las hojas de las cuchillas cortaron y desgarraron a profundidad, sin embargo negándose en admitir la derrota Hunter grito con todas sus fuerzas antes de lanzarse sin pensarlo a la valla de concreto.

[Hunter]: ¡Juguemos Mimic! -Grito a todo pulmón mientras sujetaba con su mano derecha los brazos de Mimic sin darle oportunidad de huir gracias a su agarre de hierro- ¡HAAAAAAA!.

Un grito de furia salió de Hunter antes de estrellarse contra la valla usando al ladrón como escudo humano. El dolor llegó casi de inmediato para ambos en el primer signo de conciencia pero eso no detuvo a Hunter que siguió con sus embestidas, sin oportunidad Mimic se mantuvo firme en su lucha sabiendo a gran medida que si dejaba ir a Hunter no podría defenderse y menos cuando su oponente se volvio un berserker.

[Mimic]: ¡Doncella de hierro! -Grito aumentando su agarre en el cuello de Hunter para asfixiarlo y desgarra aún más su espalda-

Se negaron a perder y todo continuo a tal punto que la adrenalina y emoción se manifestó en el público que gritaba a todo pulmón sacudiendo el almacén hasta sus cimientos. Retumbando con cada golpe el duo continuo matándose entre ellos, cada herida y grito parecía volverlos cada vez más locos, el honor se perdió hace mucho y la razón no se manifestó en ningún momento.

Fueron cinco minutos de locura hasta el inevitable final......

-BAM-

El primero en caer fue Hunter quien a pesar de perder el conocimiento no se fue sin más, miró al cielo y sonrió con suficiencia antes de dejarse caer sobre Mimic el cual apenas quedó cociente a medias logrando arrastrase hasta salir de la montaña de músculos que era su oponente.

[Locutor]: ¡Ganador Mimic!

El público aplaudió, grito y celebro sin importarle las posibles perdidas o una ganancia monumental, su emoción en este pelea sobrepasó su euforia inicial por mucho. Y con ello todo comenzó a oscurecerse para Mimic, al menos por un largo tiempo, lo último que vió fue el equipo médico de su patrocinador y una sonrisa brillante de su socio.

[Pov de Mimic].

Todos somos el protagonista que sigue su propio destino, fueron las palabras que alguien dijo mientras vivía en ese orfanato desgastado. Desde que tengo uso de razón todos me han visto como un bicho raro, mi complexión física al ser tan "anormal" me hace parecer un enfermo apunto de morir, combinado a ello mi personalidad siempre fue un tanto inestable lo cual no ayudó en mi vida diaria. Asi fue durante gran parte de mi niñez hasta los doce años donde mi cuerpo mejoro un poco así como la estabilidad de mis pensamientos, pase de un lunático enfermizo aún tipo con piel pálida y multi-personalidad, no es el mejor de los cambio pero me alegra no ser llevado al hospital cada vez que una persona me ve pasar por la calle.

Todavía recuerdo mi primera visita al hospital al menos la que recuerdo con mis pensamientos estables. Dieron un código rojo apenas me vieron con casi todo el personal disponible apunto de enviarme al quirófano, si no fuera por los cuidadores del orfanato que veían mi condición diariamente me habrían diseccionado, lo siguiente que paso en realidad no fue normal prácticamente fui estudiado de tal forma que tuve un ataque de pánico que terminó con dos salas médicas destruidas, los guardias de seguridad heridos por cortes y una herida de quemadura, un almacén de medicamentos saqueado y gran parte del personal médico apaleado.

Eso sucedió cuando tenía siete años y medio, desde ese día fui sedado por el personal del orfanato cada vez que mi persona iba aun hospital al menos así fue hasta que me volvió más estable o eso dijeron. En cuánto al incidente del hospital antes mencionado se dijo que fue causado por un grupo terrorista a pequeño escala, nadie iba a decir algo como: un niño enfermizo incapacito a todo un grupo de guardias, destrozó el equipo médico y causó un robo a gran escala en su almacen, sin que nadie en el lugar pudiera hacer algo al respecto para detenerlo, no sería bueno para la reputación del hospital, la ley y varios de los inversionistas que operan.

Después de eso tuvieron que buscar la forma de mantenerme ocupado sin un uso de violencia física o psicológica en el orfanato, mas que nada por temor a volverme más inestba de lo que ya era desde un inicio. Básicamente me volví el mayordomo del lugar y obviamente fui vigilado las 24/7 no querían que en un ataque sicótico envenenara todo el suministro de agua o el desayuno, por supuesto nada quedó así de simple los médicos y psicólogos querían saber de mi condición. Un cuerpo funcional sin complicaciones pero con la apariencia de uno apunto de morir junto a esto el comportamiento tan inestable aún así bien coordinado no se ve muy seguido si somos sinceros.

Fui educado para hacer tareas diarias así como diferentes oficios y clases de defensa personal para canalizar parte de mi inestabilidad en sacos de arena y no en idiotas molestos. Sip me volví una especie de mayordomo que siguió con sus tareas, mientras era vigilado a todas horas por médicos, psicólogos y pequeños medios de comunicación de la ciudad que buscaban fama fácil. Así fue hasta que todos se cansaron de mi y fui botado a la edad de quince años.

Supongo que el termor de una bomba de tiempo tan extraña como yo no era muy reconfortante...........

Jack~

No fue tan malo pero nadie quiere un grupo de locos viéndote 24/7......

Jack~

Me preguntó quién eran mis.......

¡Jack con un demonio!

Con ese último grito desperté exaltado mirando a mi alrededor como un niño atrapado haciendo travesuras. Lo que encontré fue una sala blanca con unas manchas de sangre aquí y allá, junto a estas varios gabinetes de madera bien cerrados con medicamentos varios en su interior, aún así lo que llamo parte mi atención fue ver mi traje colgado a un lado de la puerta y a su lado estaba lo que podías llamar gánster, mirando fijamente las cuchillas adheridas en el chaleco con una gran fascinación.

Al verme note que estaba acostado en una cama vieja, solo vestido con unos boxer negros y vendado en gran parte de mi cuerpo a mi lado encontre todos los componentes médicos necesarios y sucios para una operación. Eso no era una buena señal en absoluto y fue aún peor al notar pequeñas manchas rojas sobre las sabanas de la cama.

[???]: ¡Jack mi muchacho! -Grito con una sonrisa mostrando dientes de oro y varios aditamentos en su vestimenta extravagante- Es bueno verte bien ese último enfrentamiento enserio te dejo hecho mierda jajaja ¡Bien Mimic!.

Tras sus palabras una sonrisa amarga aprecio en mi rostro, este tipo enserio me va a matar un día de estos con sus combates suicidas, pero el dinero fácil nunca existe así que estaba jodido con esto al menos hasta que me muera. No fue tan malo como esperaría pero mis huesos no opinan lo mismo talvez este retirado por algunos meses.

[Jack]: Si también me alegra verte tan feliz Ducks -Hable con sarcasmo antes de mirar fijamente mi traje dañado en su totalidad- bien que noticias traes.

Con eso la sonrisa de Ducks pareció de alguna forma iluminarse antes de reír a carcajadas y mostrar varios sobres o cartas de color rojo intenso.