Detroit, una ciudad conocida por haber sido la cúspide del avance en el pasado, una ciudad próspera y con un futuro prometedor, hoy en día reducida a menos que una sombra de lo que fue alguna vez, un lugar peligroso, donde la pobreza abunda, los crímenes se cuentan por decenas todos los días, y aquellos lo suficientemente inteligentes o con suficiente dinero, se van para probar suerte en cualquier otro lugar, un escenario que difícilmente viene a la mente, cuando se trata de imaginar a una familia feliz, y sin embargo esta ciudad era el hogar de la familia Loud, una peculiar familia de 7 miembros, formada por Lynn y Rita Loud, los padres de cinco chicos, Lori que actualmente estaba fuera de la ciudad cursando la universidad, Lynn Jr una joven y talentosa deportista de 14 años, que planeaba irse de la ciudad igual que Lori cuando llegase el momento de ir al colegio usando una beca deportiva, Lincoln el único niño en una familia predominante femenina, un chico tranquilo e inteligente de 12 años, bueno en la escuela, físicamente débil y con un afición por los cómics, las series animadas y los juegos de video, el combo perfecto para ser blanco de burlas y abusos en la escuela, siendo Lynn la unica razón por la que no solían meterse con él, y finalmente las gemelas Lola y Lana, una siendo refinada y recatada, con un gusto y aprecio por las cosas lindas y femeninas, mientras la otra tenía una actitud mucho más tosca, siendo amante de los autos y sin temor a ensuciarse, disfrutando más de la compañía masculina que la femenina, pese a ambas ser polos totalmente opuestos, ambas gemelas se querían mucho, sin dudas una familia peculiar, dónde cada miembro destacaba por su propia cualidad única y personalidad particular, sin embargo lo que no se esperaban era que pronto un miembro de la familia conocería a alguien, que le cambiaría la vida por completo.

En una mañana como cualquier otra, la familia Loud se preparaba para comenzar con su día, los padres Loud se alistaban para el trabajo y sus hijos para la escuela, a la hora de despedirse los chicos vieron a su madre entusiasmados de saber, que cada vez faltaba menos para conocer a su nueva hermana, aún emocionados Lincoln y Lynn subieron al autobús escolar y mientras caminaban a sus asientos, uno de los chicos que ya estaba sentado estiró su pie justo cuando Lincoln pasaba, haciéndolo tropezar y caer de cara al piso, ante aquella escena los jóvenes del autobús dejaron de hacer lo que sea que estuvieran haciendo, y voltearon para reírse en unisono de lo que había pasado, algo que no duró mucho cuando vieron que Lynn quien iba por delante de Lincoln, volteo para darles a todos una mirada que helaba la sangre, todos ahí conocían bien a Lynn, sabían de lo que era capaz y también que era mejor no meterse con ella, al ver el enojo en la cara de la deportista todos regresaron a mirar sus celulares, hablar entre ellos o hacer cualquier otra cosa solo para no enojar más a la deportista, quien ayudó a su hermano menor a levantarse para finalmente tomar asiento --gracias Lynn-- --ni lo menciones apestoso, sabes que no dejaría que se metan con mi hermanito-- --claro, aún así gracias-- para Lincoln, que su hermana lo cuidara tanto significaba mucho, pero al mismo tiempo lo tenía preocupado, ya que Lynn estaba en el último grado de la secundaria y él apenas en primero, y estaba bastante conciente que una vez que ella se fuera a la preparatoria no abría nadie quien diera la cara por el, en otras palabras lo que acababa de pasar era solo una pequeña probada de lo que le esperaba, una vez que estuviera solo y sin nadie a quien recurrir.

Ya en la escuela, las cosas iban tan normales como siempre, las clases eran monótonas, en el recreo Linc comía con su hermana y sus amigas al no tener amigos propios en la escuela, viendo como todos los demás pasaban el rato hablando y divirtiéndose, todos con su propio círculo personal de amigos y conocidos, mientras que él estaba solo, con solo su hermana mayor para poder pasar el rato y tener con quién conversar, ya que ni siquiera las amigas y compañeras de Lynn le prestaban verdadera atención, teniendo que pasar tiempo con él más por compromiso o lealtad a Lynn, que porque verdaderamente les importase él en lo más mínimo, esto no era algo nuevo para el chico albino, ya que hasta ahora nunca había tenido a alguien a quien pudiera llamar un amigo, siendo alguien introvertido, débil y con un aspecto peculiar, nadie nunca se interesaba en conocerlo o ser su amigo, aunque no era algo que le molestara demasiado, ya que al tener una gran familia nunca se sentía realmente solo.

Más tarde ese día cuando las clases habían terminado Lincoln estaba en los baños haciendo sus necesidades antes de volver a casa, ya solo se estaba lavando las manos para poder irse cuando un grupo de tres chicos entró al lugar, eran Chandler y sus amigos Tod y Garry, compañeros de clase de Lincoln y los matones del salón, los cuales normalmente se mantenían a raya ya que sabían a lo que se atenian si se metían con Lincoln, pero por desgracia para el chico albino, esta vez estaba solo, Lynn estaba con sus amigas en una practica de baloncesto, y esta era una oportunidad que el chico pelirrojo y su grupo no desaprovecharian para molestar un poco al chico albino, a quien ya tenían en la mira desde hace un tiempo --vaya, miren que tenemos aquí, el hermano menor de Lynn, dime Larry donde esta la marimacho de tu hermana? A caso te abandono?~-- --está en sus prácticas con el equipo de basketball, y yo ya estaba por irme así que...-- dijo el chico peli blanco mientras caminaba hacia la puerta, justo antes de que su paso fuera bloqueado por los amigos del chico pelirrojo --hey tranquilo no hay prisa, además solo quiero hablar contigo a caso eso es algo malo?~-- pregunto Chandler de forma burlesca mientras rodeaba a Lincoln por el cuello con su brazo, ante esto Lincoln tan solo guardo silencio esperando que aquella situación acabara rápido --escucha Larry, sé que tú y yo no nos conocemos del todo bien, y eso se debe a tu perra guardian, pero si te soy honesto tengo tiempo queriendo acercarme, ya sabes para dejar algunas cosas en claro, conversar, conocernos mejor sabes, digo después de todo ya tenemos tiempo siendo compañeros de clase, y hasta ahora no hemos tenido la oportunidad de establecer un par de cosas, por ejemplo, supongo que sabes que de momento yo soy el que manda en esta escuela, o al menos soy el que manda entre los chicos de segundo y primer año, con Lynn aún en la escuela no hay nadie ademas de ella que este por encima de mi, y eso es bueno, porque sin ningún bravucón en tercer año eso significa que puedo hacer lo que quiera, cuando quiera siempre y cuando no busque problemas con tu hermana o sus amigas, y eso te incluye a ti. Apuesto a que debes de sentirte bastante afortunado de ser el hermanito bebé, de la capitana de todos los equipos de deporte de la escuela, pero quiero que entiendas una cosa cabeza de algodón, en el momento en el que Lynn se gradué y salga de esta escuela estarás solo y como eres alguien listo, no creo que tenga que explicarte lo que eso significara para ti-- Lincoln seguía manteniéndose callado, esperaba que si no decía nada el pelirrojo terminaría aburriendose y dejandolo solo, algo que por desgracia para él no parecía ser el caso, lo que empezaba a ponerlo cada vez más nervioso, al punto que comenzaba a sudar algo que fue notado de inmediato por el grupo de bravucones --que pasa Larry, a caso no vas a decir nada? O es que te comió la lengua el gato?~-- Lincoln se mantenía en silencio mientras a la vez intentaba evitar el contacto visual a toda costa --bueno, supongo que si no vas a decir ni hacer nada, entonces no te importará si tomo tu mochila-- el chico pelirrojo intento tomar la mochila de Lincoln de su espalda, solo para que este impulsado por sus reflejos se volteara y empujara a Chandler, tomándolo desprevenido y mandándolo al suelo del baño, para luego intentar atravesar al duo de matones que custodiaban la puerta corriendo, algo que obviamente no funcionó ya que estos últimos tomaron al albino cada uno de un brazo, impidiendo que pudiera huir, a lo cual bastante asustado Lincoln comenzó a gritar por ayuda, pero nadie vino, así que sin más esperanzas no le quedó más que resignarse, mientras venía como Chandler se ponía de pie y se acercaba, sin que él pudiera hacer nada solo para ser golpeado en el abdomen dejándolo sin aire --no debiste hacer eso Larry, no me gusta cuando los pequeños enclenques cobardes como tú, intentan pasarse de listos-- dijo el pelirrojo antes de golpear un par de veces más al chico en el cuerpo --o que, acaso de verdad pensaste que podías hacer algo contra nosotros? Date cuenta imbécil, tu no eres como tu hermana, no eres fuerte, no eres valiente, solo eres un pequeño pedazo de mierda con la suerte de estar emparentado con Lynn, eres débil, eres débil y también un maldito cobarde-- exclamó Chandler una vez más, antes de continuar con el castigo del pobre albino, teniendo cuidado de no tocarle la cara, ya que sabía que si Lynn veía a Lincoln con un moretón o un ojo morado, entonces él y su grupo estarían perdidos, así continúo hasta que el chico pelirrojo se aburrió de golpear al albino, ordenando que lo soltaran y le quitarán la mochila, dejando caer al chico albino al piso, que solo rodeaba el pecho y el abdomen con los brazos por el dolor que sentía, nunca antes había recibido una golpiza así que el dolor que sentía era paralizante, en ese momento Lincoln solo pudo ver cómo vaciaban su mochila, tirando y regando todas sus cosas en el piso sin poder hacer nada, una vez que su mochila estuvo vacía la arrojaron también en el piso, mientras Chandler tenía entre sus manos uno de los comics de Lincoln, que habia llevado para leer en la escuela ese día --bueno Larry, fue divertido jugar contigo, pero ya tenemos que irnos si no queremos perder el autobús, gracias por el cómic, oh y por cierto, más te vale no ir llorando tu hermana la machorra, o si no una vez que ella ya no esté aquí, nos encargaremos personalmente, de hacer de tu vida un maldito infierno, quedó claro? En fin, nos vamos mañana Larry~-- justo después de haber dicho eso, Chandler y sus amigos se fueron del lugar, dejando a Lincoln solo y cerrando la puerta tras de sí. Paso un buen rato antes de que Lincoln pudiera incorporarse nuevamente, cuando al fin pudo ponerse de pie seco sus lágrimas y guardo todas sus cosas de nuevo en su mochila, para poder salir del baño solo para llevarse la sorpresa de que la puerta estaba atascada y no podía abrirla, en ese momento entro en pánico y comenzó a patear y golpear la puerta, mientras gritaba para que alguien lo sacará de ahí, pero en vano no había nadie cerca que pudiera escucharlo o ayudarlo.

Habían pasado horas desde que Lincoln había quedado encerrado en el baño, el chico estaba sentado contra la puerta abrazando sus rodillas, se había quedado dormido luego de intentar por más de una hora pedir ayuda quedando completamente agotado, y como si eso fuese poco también se había quedado sin batería en su teléfono, pero por fortuna para él, finalmente el conserje había llegado, el hombre intento abrir la puerta con sus llaves, pero la vieja y oxidada cerradura estaba dando pelea, finalmente luego de un par de golpes y malas palabras, la puerta se abrió, despertando al peli blanco que veía confundido al hombre de edad avanzada --que diablos haces aquí niño, la escuela cerro hace horas, vamos largo de aquí!-- Lincoln salió corriendo alegrado de que al fin era libre para regresar a casa, pero cuando salió de la escuela vio que ya era bastante tarde y que ya estaba anocheciendo, pese a que el chico albino no quería, sabía bien que la unica opción que le quedaba, era caminar hasta su casa, algo que lo ponía bastante nervioso, si bien sabía el camino de regreso, ir solo y de noche por la calle, en una ciudad como Detroit no era la cosa más segura, aún así el chico albino se armó de valor y emprendió el camino de regreso. Mientras recorría las calles ahora solo iluminadas por las luces de los faroles, Lincoln no podía evitar sentirse algo asustado del hecho de estar completamente solo, ya que mientras caminaba podía ver a algunos indigentes que dormían en las calles completamente expuestos, y muy seguramente completamente ebrios o drogados con alguna sustancia, así como una que otra persona de aspecto amenazante, tatuados hasta la cara y con pinta de ser poco amigables, era como si fuera un cordero atravesando un bosque lleno de lobos hambrientos. Cuando ya estaba a medio camino de llegar a su casa Lincoln escucho como una voz comenzaba a llamarlo --psst oyes malvavisco, a dónde vas?-- dijo una voz que provenía de uno de los callejones de la ciudad, ante aquella situación Lincoln quedó paralizado presa del pánico, mientras que volteaba para ver quién lo había llamado, cuando giro su cabeza se sorprendió al ver lo que parecía ser un grupo de jóvenes, todos vestidos con prendas de tonos oscuros y apagados, con botas de cuero negras, algunos portando brazaletes o collares con púas y usando maquillaje oscuro, sin dudas parecían un grupo bastante lúgubre y de cierto modo intimidante, aquellos chicos parecían tener más de 18 años pero muchos de ellos estaban fumando y había algunas botellas de cerveza tiradas en el suelo --hey amiguito, que haces fuera de tu casa tan tarde eh? Qué, a caso tienes problemas en tu hogar?-- pregunto nuevamente aquella voz, proveniente de un muchacho alto y pálido, con las uñas pintadas de negro, un cabello algo largo que cubría parte de su rostro y hedor penetrante a cigarros y alcohol --dime niño, te gustaría acompañarnos? Tenemos suficiente bebida y cigarrillos para compartir-- pregunto aquel sujeto mientras se inclinaba un poco para poder rodear a Lincoln con su brazo, poniendo su mano sobre el hombro del chico y acariciándolo leve pero juguetonamente, era evidente que el sujeto estaba ebrio y eso a Lincoln lo incomodaba, una vez más el chico estaba comenzando a sudar mientras batallaba para poder hablar, sentía que su voz se ahogaba en su garganta por el miedo y apenas podía pronunciar algunas cosas, de forma torpe y con una voz temblorosa --yo... y-yo no... yo...-- --ya dejalo en paz Dante, que no vez que asustas al bebito?-- replicó una voz femenina, con un tono bastante agradable al oído pero al mismo tiempo, con una energía autoritaria que hizo que aquel tipo dejara tranquilo a Lincoln al instante --vamos Maggie, solo estaba jugando con el chico, nada más-- al ver a la chica que había dado la cara por él, Lincoln no pudo evitar notar lo atractiva que de hecho era, era un muchacha con piel pálida como la del resto, con una cabellera larga color azabache que le llegaba casi hasta la cintura, con una figura esbelta y un par de atributos frontales llamativamente grandes, casi tanto como los de su madre y con un aspecto intimidante igual que el del resto de sujetos que estaban en aquel lugar --creo que ya tomaste suficiente por hoy Dante, por qué vas a sentarte con los otros?-- sorprendentemente para Lincoln, aquel tipo hizo caso a las indicaciones de la chica casi como si fuese un perro --oye enano, que no sabes que es peligroso andar solo de noche? Y tus padres, donde están? O a caso te perdiste?-- Lincoln no podía responder, estaba completamente atónito contemplando a la chica que ahora tenía en frente --hey niño, despierta mi cara está aquí arriba-- reclamo algo irritada la chica mientras chasqueaba sus dedos frente a la cara del albino, que salió de su transe para responder torpemente --huh? O-oh uh... l-lo siento yo... no... no quería faltarte al respeto yo... m-me, me llamo Lincoln-- --ok Lincoln, escucha no eres el primer niño tonto que se me queda viendo y babeando como un bobo, así que más vale que no te hagas ninguna idea rara bien? Ahora dime, que haces aquí?-- --lo siento yo... bueno... es que... tu-tuve problemas en la escuela con un... un tonto que me dio una paliza y me dejó encerrado en el baño, y por su culpa perdí el autobús de regreso a casa, y me quedé sin batería en mi teléfono, y mi hermana estaba en sus prácticas de baloncesto, y mis padres debes de estar preocupados ahora mismo, y mis hermanas también deben de estarse preguntando dónde estoy, y...-- Lincoln comenzó a contar lo que le habia pasado, pero una vez más los nervios le jugaron en contra, está vez haciéndolo hablar de más y demasiado rápido --ok ok ya entendí tranquilo, no hace falta que me cuentes toda tu vida, escucha, Lincoln, es bastante peligroso para un niño estar solo en esta ciudad de noche, y parece que ya has tenido demasiados problemas por hoy, así que, qué dices si te doy un aventón hasta tu casa?-- --y... co-cómo se que puedo confiar en ti?-- --pues es eso o puedes seguir caminando solo por la calle, o mejor aún, puedo dejar que Dante sea el que te lleve y dejar que haga contigo lo que quiera cuando estén demasiado lejos como para poder pararlo-- un escalofrío recorrió la espalda del peli blanco con aquella última sugerencia, sabía que era demasiado peligroso seguir solo por la calle y definitivamente no quería quedarse a solas con ese tipo espeluznante, también sabía que no podía confiar plenamente en la chica gótica ya que también era una completa desconocida, pero tampoco le quedaban muchas más opciones, además ella parecía ser al menos algo sensata, o por lo menos lo suficiente como para tenerle un mínimo de confianza, así que sin otra opción acepto la oferta de la chica --bien, escuchen chicos voy a llevar al enano con su mami, volveré pronto-- dijo la chica gótica para luego caminar junto a Lincoln hasta el vehículo de la chica, el cual era una motoneta algo vieja y de color azul claro --de acuerdo Lincoln súbete, ponte mi casco y agarrate fuerte, y cuidado con donde pones las manos o si no te tirare y te dejare a tu suerte, entendido?-- dijo de forma amenazante la chica gótica, a lo que Lincoln nervioso y algo asustado simplemente respondió asintiendo con la cabeza, para luego finalmente ponerse en marcha.

Ya eran casi las ocho de la noche cuando finalmente Lincoln había llegado a su casa --bueno ya estamos aquí, anda bajate y devuélveme el casco-- el chico albino hizo caso y bajo del vehículo de la chica, miro la entrada de la casa antes de si quiera moverse con algo de nerviosismo y preocupación, después de todo era la primera vez que regresaba a su casa tan tarde y estaba nervioso por como es que su familia reaccionaria, a la vez que intentaba pensar en una buena excusa para no tener que contar la verdad por miedo a que Chandler cumpliera su palabra --que a caso no vas a entrar?-- pregunto aquella chica, sacando al albino de sus pensamientos --no no, digo sí yo... solo, quería agradecerte por... haberme ayudado...-- --ni lo menciones cabeza de algodón, tan solo estaba haciendo mi buena acción del día-- dijo aquella última parte con un tono sarcástico y burlón --y... como te llamas?-- --eso importa? No creo que nos vayamos a ver de nuevo luego de esta noche de todas formas-- --lo sé pero, aún así yo... solo quería saber tu nombre para, poder... agradecerte-- era evidente el nervio y la incomodidad que sentía el chico albino al hablar con quién había sido su heroína de ese día, algo que divertía de cierta forma a la chica que sin conocerlo de nada, podía ver solo con su actitud y forma de hablar que claramente era alguien bastante solitario e inocente --oye dime algo Lincoln, siempre eres así de malo hablando con las chicas o estas así solo porque se trata de mi?-- luego de aquel comentario el chico albino comenzó a ruborizarse y a balbucear, intentando articular palabras solo para que estas salieran torpemente de su boca, formando palabras entrecortadas e incoherentes entre sí, algo que llevo a la chica al punto de la risa --Dios, eres tan patético~ no me sorprende que te molesten en la escuela-- al escuchar eso la actitud de Lincoln volvió a cambiar una vez más, esta vez mostrándose avergonzado, desanimado y algo molesto por el comentario de la chica --hey no te enojes, puede que seas patético, pero al menos eres algo lindo, así que yo diría que aún te queda algo de esperanza para no terminar como el rarito sin amigos de tu escuela-- "lindo" esa era una palabra que nunca nadie ademas de su madre y Lori habían usado para referirse a Lincoln antes, de cierta forma se sentía bien que una chica lo llamara lindo, eso hizo que una vez más Lincoln no supiera que hacer o como reaccionar luego de aquel cumplido --l-lin... t-tu... crees que soy... lindo?...-- --sí bueno, pareces un conejillo, así que sí, creo que eres un poco adorable-- un extraño sentimiento de felicidad inundó al chico albino luego de escuchar aquellas palabras de parte de la chica gótica, formando una calida sonrisa en su cara que a los ojos de la chica, lo hacían verse aún más bobo y tierno que antes --bueno, será mejor que me vaya antrs que alguien te vea conmigo-- --e-espera! Aún no sé tu nombre-- --en serio no vas a dejar de insistir o sí? Me llamo Maggie-- --Maggie... muchas gracias por todo, te prometo que te lo pagaré-- --tranquilo no me debes nada, además ya te lo dije, no espero que volvamos a vernos. Una cosa más antes de que me vaya, la próxima vez que alguien se quiera meter contigo, arañale la cara y apunta a los ojos, si lo dejas ciego es mejor, así sabrán que no deben meterse contigo-- y con esas palabras, la chica finalmente se fue, dejando a Lincoln solo en el patio de su casa, nervioso por entrar como si se estuviese anticipando a recibir un regaño.

Lincoln lentamente abrió la puerta de la casa, solo para ver a toda su familia reunida en la sala, en cuanto sus hermanas lo vieron, se lanzaron directo contra él derribandolo al suelo y sofocandolo con un abrazo grupal --en donde demonios te habías metido apestoso!? Mamá y papá llamaron a la escuela y ellos dijeron que no estabas ahí, y cuando no llegabas llamaron a la policía!!-- --perdon chicas, tuve un... accidente en la escuela y hasta ahora pude regresar-- --y que tipo de accidente exactamente?-- pregunto molesto el señor Lynn mientras veía a Lincoln con algo de enojo --yo... me quedé atrapado en los baños de la escuela-- --ah sí? Y entonces quien era la chica con la que estabas hablando en la patio?-- --us-ustedes nos vieron?-- --todos te vimos a través de la ventana apestoso-- en ese momento Lincoln sintió el verdadero terror, sabía que su familia había malinterpretado toda la situación e incluso él mismo entendía perfectamente lo que parecía que había pasado --Linc, por qué hueles tan raro?-- pregunto Lana mientras que se apartaba de su hermano mayor notando lo tenso de la situación y el enojo de sus padres, mientras que Lincoln finalmente se percataba de que en efecto, tenía un olor raro en su ropa, un aroma que sabía perfectamente bien lo que era, "mierda" fue lo que penso Lincoln cuando noto al fin ese singular aroma, olía como el humo de los cigarros que Maggie y sus amigos fumaban cuando se los topo en el callejón, como si las cosas no estuvieran ya lo suficientemente mal, ahora apestaba a cigarrillos, ahora sí Lincoln verdaderamente estaba sintiendo el terror absoluto, en especial ocupando su padre se acercó más y se inclino para poder oler mejor el aroma que su hija pequeña había detectado --estuviste fumando?!?!--

Hola todos, como están yo espero que bien, como ya habrán visto en el título, esta no es la versión completa de este One Shot (OS) si no que es solo un pequeño avance, de lo que llevo escrito hasta ahora, de igual modo espero que lo disfruten y me den su opinión sobre que les parece lo que llevo hasta ahora de esta historia.

También me gustaría aclarar que está historia es una colaboración especial con mi buen amigo y autor Dasher1275 el cual es el que organizó la dinámica de hacer diferentes OS, basados en diferentes shipeos de TLH, por favor vayan y apoyenlo ya que es un gran autor de la comunidad de TLH.

También les recuerdo que si quieren apoyarme para que siga haciendo más historias, no duden en votar, comentar y seguirme, para así saber que les gusta lo que escribo, recuerden una vez más que está obra es para participar en la dinámica de Dasher1275, ahora sí sin nada más que decir me despido, yo soy MexJerk y nos vemos hasta la próxima mi querida legión de los malditos, chao!