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Fuera de la casa se escuchaba la bocina de un vehículo que pertenecía a los padres de Elvira, pues habrían ido a visitarlos.

-¡Abuela, abuelo!-Llamaban ambos chicos al salir de la casa corriendo para recibir a ambos adultos

-¡Mis niños, cómo han crecido!-Diría la mujer conocida como la abuela Rose, saludando a ambos besando sus mejillas con cariño

-Déjenme verlos bien, niños. Ya son todos unos hombres-Saludaba el abuelo Gustav a ambos con un abrazo
-Ya están tan grandes-

Cuando el señor Kombast salía a sacar la basura, Gustav se acercaba a saludarlo, pues todos solían conocerse por ahí.

-Hola Dirk-

-Ah, hola señor Vagency-

-¿Cómo sigue tu madre?-

-Ah.. Temo que sin cambios-Diría este algo decaído al pensar en eso, mientras terminaba de tirar la basura

-Lamento escucharlo... En fin, espero que mejore-

-Gracias-Saludaba este antes de tomar el bote de basura y llevarlo

-Trágico, trágico-Diría el hombre al volver con su familia, señalando hacia el vecino que se iba
-Él es Drik Fom Kombast, su mamá era la más hermosa en Billboard, pero un día la encontraron sentada en su camisón en el altar de laa vieja iglesia Billboard totalmente confundida, desaalineada y con una horrible mirada vacía...-

-¿...Y luego?-Preguntaba Dake queriendo saber cómo terminaba la historia

-Y luego dijo que los vampiros las persiguieron y se la llevaron volando y la abandonaron en las torre de la iglesia-Diría el anciano antes de reír al no creer una palabra de esa historia

-¿En serio, vampiros? ¿Aquí en Billboard?-Exclamaba Dake con un tono emocionado y una sonrisa de pensar en las posibilidad de otros como ellos

-Sí, exacto, vampiros-Reía divertido Gustav mientras solo su hija reía nerviosa
-Vampiros en Billboard..-

-No es posible-Diría igual su mujer intentando cubrir a la familia de su hija

-Solo una mujer puede inventar algo así-Ante ese comentario, Rose pisaba el pie de su marido
-¡Ou!-

-Dile-

-No le diré ahora-Susurraban Mihai y Elvira ya que no era el momento para revelar el secreto al hombre

-En fin, se la llevaron directo al manicomio y nunca salió-Terminaba de relatar la historia a sus nietos

-Ya Gustav, suficiente historias de terror-Regañaba la mujer antes de abrazar a sus nietos
-Estoy tan feliz de tenerlos aquí con nosotros. Vamos adentro, ya tengo mucha curiosidad-

Diría la abuela Rose, antes de entrar los seis a la casa luego de saludarse entre ellos.

(...)

Al caer la noche, en el cuarto de los chicos que estaba en el segundo piso, iban a compartir habitación.

-Ya casi termino de desempacar, ¿y tú?-Preuntaba Silveny, girando a ver a su hermano que estaba recostado en su lado del cuarto desanimado

-No quiero...-

El chico sin preguntarle mucho, pasaba a ver unas revista que tenía en mano, deteniéndose ante una imagen de una persona en un caballo en medio del campo.

-Oh, wow...-Murmuraba con una idea, apoyando la imagen en laa pared de su lado del cuarto
-¿Qué te parece?-

Cuando Dake se levantaba de su cama que era un ataúd negro con rojo en su interior, de repente usaba su habilidad de vampiro para quedar colgado cabeza abajo como murciélago en una de las cadenas puestas como soga entre ambas paredes.

-Vergonzoso-Al oír esa respuesta, su hermano se giraba para verlo y apresurarse a acercarse a él

-¿Estás loco? Baja de ahí ahora-Pedía el chico nervioso mientras el peli negro solo sonreía despreocupado
-¿Y si alguien te ve?-

-¿Ah? ¿Qué mísero humano verá esto? Tendrían que poder volar y esos tontos no pueden hacerlo-Recordaba de brazos cruzados al estar en el segundo piso de la casa, transportandose hasta la cama de asu hermano
-Y además, puedo volar tanto como quiera aquí. Solo no deben verme...-

Al notar que su hermano lo miraba cruzado de brazos, notaba que se había sentado otra vez sobre su sombrero.

-Ah..-Murmuraba apenado antes de devolvérselo y este lo acomodara

-Ten cuidado, aún lo necesito-Le recordaba Silveny, viendo a su hermano dirigirse a su mascota sanguijuela

-Hola Karlheinz-Saludaba el peli negro a la mascota, tomando aquella sanguijuela para acariciarlo
-Tú me entiendes, tengo que entrenar y entrenar más para mi vuelo transeuropeo... Porque una vez que logre llegar a los dosmil kilómetros, regresaré volando a Vitonya... No me quedaré aquí más de lo nescesario-

-No seas tan negativo, Dake. Es hermoso aquí en Alemania-Intentaba mostrarle el lado positivo su hermano con una sonrisa
-Solo velo así, somos mitad vampiros, mitad humanos, mitad vampiros. Ahora podemos vivir nuestro lado humano-

-Pero no quiero ser humano... Los humanos son retrasados-

-Yo creo que eso fantástico, finalmente podemos ser chicos de verdad. Podremos salir, hacer amigos humanos.. Y tal vez hasta conocer a alguna chica, es increíble-

-¿Chicas humanas? En verdad no estoy interesado. Y los únicos amigos que me interesan son los vampiros que dejamos en Vitonya-Recordaba este mientras iba a sentarse a su cama con Karlheinz en sus piernas

-Tú lo dijiste, están en Vitonya, y no hay posibilidad de encontrar a algún otro vampiro por aquí-Diría Silveny hacia su hermano
-Vamos, guarda tus cosas, de otro modo nunca podremos invitar a nuestros amigos-

-Yo no quiero nuevos amigos-Al mirar a Karlheinz, este como respuesta lanzaba un gas
-Tienes razón-

Mientras Dake reía por eso, Silveny daba una mueca de asco y volvía a guardar sus cosas.

[...]

En los días que estaban arreglando la casa, Dake estaba llevando un objeto mientras volaba hasta la mesa de la cocina, cosa que era visto por su madre.

-Regla número uno para poder vivir en Alemania, no volar cuando sea de día-

-Está bien...-Suspiraba desganado el peli negro apoyado en la mesa

Cuando notaba una hormiga caminando en la mesa, Dake daba una sdonrisa para colocar su dedo y ver que subía a este.

-Regla número dos-Hablaba su madre, quien lo vería comer la hormiga
-No comidas vivas... Ni refrigerios-

(...)

-Mihai-La mujer le extendía un martillo a su esposo, aunque este usaba su fuerza para poner el clavo en la pared
-Regla número tres, no usar poderes sobrenaturales. No hipnosis, no saltar y no super poderes-

Dicho eso, Elvira le extendía otra vez el martillo, por lo que el honre tomaba dicha herramienta y haría una pose al estilo militar.

(...)

-Reglas cuatro, cinco y seis. No luz del sol directa, no cruces...-

Mientras hablaba la mujer a Silveny, sacando a ambos mesas y sillas para el patio, notaban de reojo al vecino tomar sol, mientras en su cuello portaba una cruz.

-Y no ajo-Susurraba Elvira a su hijo quien notaba también en la casa del vecino un decorado con ajos

-Desde luego...-Murmuraba el chico con una mueca de desagrado

(...)

Al caer la noche de ese día, Silveny estaba pasando una lima a sus colmillos en el baño luego de cepillar sus dientes, observando su medio reflejo en el espejo al verse un tanto transparente pero no invisible como un vampiro puro.
Cuando Dake terminaba de lavar igualmente sus dientes, estaba por irse hasta que su hermano lo detenía.

-Regla número siete, denticura regular-Recordaba su hermano para señalar sus dientes
-Tus colmillos siguen afilados-

-¿Y?-Mencionaba obvio el peli negro, dando una sonrisa mientras pasaba su lengua en sus colmillos

-Vamos niños, Fugynoap. Vuelo nocturno-Indicaba Mihai al asomarse

-¿En verdad es necesario?...-Murmuraba con un suspiro el rubio hacia su padre quien le asentía

-Desde luego-Aseguraba su hermano con una sonrisa antes de salir del baño, siendo el único emocionado de los dos a la idea de volar

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Sé que se imaginaron a un Deke pasando su lengua en sus colmillos, malditas impuras.

Tú lo sabes, yo lo sé, todas lo sabemos.

En fin, bye♡